El lenguaje y sus códigos, aunque parezcan
inmodificables, son materiales flexibles que
nos ubican en el límite de lo comunicable. Este
libro recolecta imágenes relacionadas con
puntos de escape visual -rendijas, ventanas,
movimiento-, juega con las palabras, las letras
y sus significados. Con estas exploraciones
reflexiono sobre el contexto desde fragmentos
de narraciones alrededor del silencio, el vacío y
la indefinición. Todas ellas se hibridan con
símbolos musicales, onomatopeyas y la
reinterpretación de la propuesta visual desde
el sonido, siendo la obra solo un punto más
para la creación desde otras posibilidades
sensibles.