La cara de las cosas

la cara de las cosas Y sí los objetos tuvieran vida, ¿Qué dirían?

Por Ana Sofía Fernández Fotografía publicitaria Noviembre 2023

Trabajo personal LA CARA DE LAS COSAS

En búsqueda del fenómeno de la "pareidolia", el cual consiste en reconocer patrones como rostros en información aleatoria; descubrí una vida paralela en las cosas que nos rodean, de forma que se vuelven más sensibles y únicas. Lo fascinante de esto es que podemos encontrar este fenómeno en cualquier parte, tanto en la calle como entre las cosas que muchas veces tenemos al lado y pasamos desapercibido.

Lo único que importa es como tú lo veas.

Iglesia de Lourdes, Bogotá.

Lo que otros ven: Cubiertos

Lo que yo veo:

SOBREVIVIR AL OCEANO DIARIO En el telar de lo cotidiano, los objetos revelan facetas insospechadas, como el cubierto que, desafiando su condición inanimada, se aferra al borde en un gesto que evoca tenacidad y resistencia. Este pequeño utensilio, lejos de ser una herramienta utilitaria, se transforma en un navegante solitario, lidiando con las corrientes tumultuosas del océano de resposabilidades diarias.

Lo que yo veo:

NO LE VEMOS LA CARA AMABLE Explorando más allá, el platero se convierte en un escenario donde los platos, copas y cubiertos conspiran para formar una expresión teñida de melancolía. Esta creación revela emociones en los lugares más inesperados, siendo un reflejo del rostro que hacemos cada vez que nos enfrentamos a la ineludible tarea de lavar la loza.

Lo que otros ven: Lavaplatos

Lo que otros ven: Descorchador

Lo que yo veo:

EL SHOWMAN Mientras tanto, el descorchador se convierte en un protagonista efervescente, anticipando su actuación con brazos extendidos en un gesto teatral. La escena no es simplemente la apertura de una botella, sino un momento de celebración, donde el objeto asume el papel de un artista que se para frente una audiencia que espera su gran hazaña.

Lo que yo veo:

LA ANFITRIONA Se presenta una figura con un largo vestido, extendiendo los brazos en un gesto de bienvenida antes de servir los primeros helados. La composición efímera de este instante resalta cómo incluso las herramientas más simples pueden transformarse en participantes activos que contribuyen a la coreografía compartida en el día a día de la vida.

Lo que otros ven: Cuchara para helado

Lo que otros ven: Joyero

Lo que yo veo:

NO HAY PEOR PENDIENTE Unos aretes, aún no entregados, descansan dentro de la caja como un rostro expectante. La imagen resuena con la anticipación y la espera, transmitiendo la ansiedad y la emoción asociadas con dar y recibir un regalo, más aún cuando es en una cajita pequeña como esta.

Lo que yo veo:

ESE TEMA NO LO VIMOS Desde otro ángulo el tajalápiz muestra una expresión de sorpresa, como si estuviera reaccionando a algo inesperado. Esta representación inusual de un objeto cotidiano destila una sensación de desconcierto y asombroso, recordándonos que la perspectiva puede cambiar la percepción de lo familiar.

Lo que otros ven: Tajalápiz

Lo que otros ven: Bolso

Lo que yo veo:

SER FEMENINO ES PARA CUALQUIERA La elegancia y la gracia pueden encontrarse en cualquier forma y contexto. Por ello, debemos celebra la diversidad de manifestaciones de la feminidad, recordando que la belleza puede florecer en lo más inesperado.

Esta es una invitación a mirar más allá de la superficie y encontrar la magia que se esconde en lo cotidiano.