Estrategia del Gobierno actual, prácticamente la misma de Calderón
Reprueba México en seguridad pública: GEA Richard Ibarra *Las acciones emprendidas por autoridades federales no han sido suficientes para mejorar el sentir ciudadano generado por el crimen organizado y sus efectos Inseguridad sigue siendo la preocupación principal de los mexicanos Michoacán y Tamaulipas, zonas de conflicto aún sin resolver Falta de seguridad, entre los principales factores que menguan la gobernabilidad
La percepción ciudadana sobre la gobernabilidad en México arroja resultados negativos en el factor inseguridad, donde la principal preocupación focaliza los delitos de homicidio, secuestro y extorsión. Seguirán elevados los hechos violentos de alto impacto, aseguró Guillermo Valdés Castellanos, director del Área Política del Grupo de Economistas Asociados (GEA), quien presentó en Durango la Segunda Encuesta Nacional de Opinión Ciudadana 2014. De acuerdo con el estudio trimestral, el índice delictivo queda por encima del desempeño económico, político y otros servicios atendidos por las autoridades representativas del Gobierno federal que encabeza Enrique Peña Nieto. El margen de confiabilidad de dicho análisis corresponde al 95 por ciento, luego de levantar entrevistas en mil hogares mexicanos. La valoración apunta que de diciembre del 2013 a junio 2014 aumentó en 2 por ciento la percepción positiva de seguridad a escala nacional, no obstante, el combate a la corrupción solo avanzó un punto porcentual. A pesar de eso, el 39 por ciento cree que la política respecto del crimen organizado es igual que la de Felipe Calderón; el 32 por ciento dijo que es mejor y el 21 por ciento que es peor. Como ejemplo destaca la intervención en los dos estados en que la violencia se ha traducido en crisis de gobernabilidad (Michoacán y Tamaulipas). Según la opinión ciudadana ha sido eficaz el control de los rasgos más visibles, pero los efectos secundarios pueden ser nocivos en el mediano plazo porque se ha nulificado a los gobiernos estatales. Frente a la situación actual, el 40 por ciento de los encuestados dijo tener esperanza, el 31 por ciento mostró enojo y el 21 por ciento aseguró que existe miedo, cuyo promedio más alto en el último año (31%) se registró en diciembre de 2013.