Revista Institucional La voz del corazón - Colegio Fe y Alegría 33

REVISTA INSTITUCIONAL “La voz del corazón”

Sonríele a la vida con respeto y participa construyendo un mundo mejor.

Mi Perú, Ventanilla – diciembre del 2011.

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

INSTITUCIÓN EDUCATIVA FE Y ALEGRÍA Nro. 33 C. P. Mi Perú, Distrito de Ventanilla, Provincia Constitucional del Callao, República del Perú.

Hna. Mónica Del Águila Ascona Directora Prof. Maritza Ágape Pimentel Sub-Directora – Secundaria

Prof. Ivette Livia Chumpitazi Sub-Directora – Primaria

Gestores e impulsadores de la Revista Institucional “La voz del Corazón”:

Gestores y co-autores de la presente revista, junto con sus compañeros de tercero y cuarto de secundaria.

Prof. Alex Espinal López Coordinador del Área de Comunicación Editor y Revisor Prof. Norma Miranda Docente del Área de Comunicación Co-responsable de motivación de 4°

Prof. María Elena Cutisaca Docente del Área de Comunicación Co-responsable de motivación de 3°

Prof. Néstor Jiménez Docente del Área de Educación Artística Facilitador de Fotografías 2

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

COMISIÓN CENTRAL

 Jamilet Altamirano.  Melissa López.  Cristina Nevado.  Jeferson Sequeiros.  Mileny Hernández.  Vanessa Aponte.  Carolina Pedraza.

Sub comisiones para la presentación de la Revista y otros:  Ambientación de auditorio (recojo de productos y ubicación): (Lizzie Aguilar, Jazmín Muñoz y Lizbet Flores)  Vestuario (Recojo y devolución). (Carolina Pedraza, Wendy Ramos, Ana Lavalle, Francis Romero y Sandro Ramírez)  Conducción: (Anthony Jiménez y Cossette Calatayud)  Luces y sonido: (Auxiliares: Richard Fiestas y Luis Chira)  Manejo de telones: (Rodrigo Huaringa y Jesús Balladares)  Limpieza, antes y después de la presentación. (Toda la promoción 2011)  Recepción y disciplina. (Escolta y Brigadieres)

3

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

A toda la familia de este gran corazón: a los directivos, docentes, personal administrativo, estudiantes, ex-alumnos y padres de familia de nuestro querido colegio.

4

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

PRESENTACIÓN A lo largo de estos 26 años de vida institucional, siempre hemos soñado con muchos proyectos, uno de ellos era contar con una revista, donde nuestros estudiantes puedan expresar diferentes temas, sentimientos, experiencias, vinculadas a la comunidad educativa. Me da mucha alegría poder decir hoy, que hemos logrado hacer realidad este anhelo gracias al equipo de profesores, del área de comunicación, motivados por nuestro profesor y amigo Alex Espinal (joven líder de Enseña Perú) que con su entusiasmo y profesionalismo canalizó el potencial de cada uno de nuestros estudiantes, profesores, personal de mantenimiento y hasta ex-alumnos.

Estoy convencida de que esta Revista Institucional será un nexo muy importante entre los miembros de toda la comunidad educativa, a partir de nuestras ideas en común; donde podemos publicar los eventos más relevantes que se realiza en nuestra Institución, poder proyectar la imagen de la institución ante la comunidad de Mi Perú y así mejorar el sentido de pertenencia con nuestro colegio.

La revista ha sido asumida y elaborada por los estudiantes de los diferentes grados del nivel primaria y secundaria, contiene cuentos, poemas, artículos de opinión y reseñas, escritos por estudiantes, profesores, administrativos y ex - alumnos.

Debo mencionar que la revista se compartirá en forma virtual con todos, mediante e-mail o las redes sociales: como el facebook, medios de comunicación muy utilizados en este siglo XXI, sobre todo por nuestros adolescentes y jóvenes. Asimismo, se dejarán dos versiones impresas, una para nuestra biblioteca y otra en dirección, como parte de nuestro legado institucional.

Debo reconocer y agradecer a los autores, promotores y colaboradores de esta revista, a los números artísticos que acompañan en esta presentación, producto de las distintas actividades de nuestro colegio en este año escolar 2011, a nuestra escolta y los brigadieres que dan realce al evento.

Queda el compromiso del equipo directivo y de todos los miembros de la comunidad educativa, prestar apoyo para la continuidad y sostenibilidad de nuestra Revista Institucional.

Quiero finalizar esta presentación con las palabras del Padre José María Vélaz, fundador de las escuelas de Fe y Alegría: “De qué seríamos capaces si tuviéramos el entusiasmo de Dios”. Muchas gracias.

Maritza Ágape Pimentel.

Sub-Directora del Nivel de Educación Secundaria.

5

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

ÍNDICE

Pág.

Dedicatoria

4

Presentación

5

Índice

6

Poesía

7

Cuentos

27

Artículos de opinión

47

Reseñas

53

6

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

POESÍA

7

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

VERSOS LIBRES Lo gris resalta conmigo y la tristeza aún más, ¿será porque llevo dentro, un sentimiento muerto en verdad?

Mis lágrimas hicieron el océano y mis tristezas la oscuridad, cómo arreglar todo esto si tú ya no estás.

Cuando conocí el amor me pintaste de alegría y color, ahora que terminó, solo conozco la tristeza y el dolor.

Mis dibujos, mostraban mi alegría: tú, el amor de mi vida.

Y ahora, mis versos solo muestran el dolor que vivo día a día.

En la mañana te pienso, en la tarde te recuerdo y por las noches te lloro, como niño sin consuelo.

Cuando estabas lejos te note triste, cuando te acercaste sonreíste y ahora que me abrazas lloras: ¿Por qué no volviste?

Color que pinta lo gris, luz que alumbra la oscuridad, ayúdenme a salir de esta cruel realidad.

Recuerdo que queda grabado, lastimando mi alma, como deseo borrarte, para estar nuevamente en calma.

Autor: Paúl Gutiérrez Marín.

Estudiante del 5° “A” de secundaria.

8

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

NIÑEZ OLVIDADA Aquel verano ardiente con luz que brilla y que nace de la inocente niñez, que vibra y late; es el recuerdo más adorable.

Pero llega otra luz aún más hermosa que opaca las otras cosas; es la primavera soñada; la juventud esperada sin duda, la época más deseada para chicas y chicos enamorados.

El verano olvidado por la primavera soñada.

El sol del verano que se apaga y aquella infancia que se olvida, el más puro sentimiento que pasa y tantas alegrías que no se recuerdan.

Volver a nacer es el sueño de muchos y quizás el crecer es tormento de otros.

Tal vez por dejar los momentos puros o temer volverse hombres más duros, y perder a aquellos a quienes quisimos mucho.

La vida de un niño es un sueño dorado, es lo más hermoso que pudo haber pasado.

Ese sentimiento de estar ilusionado es el mayor deseo que alguien ha soñado.

La primavera soleada y el verano olvidado.

Los recuerdos del jugar, las alegrías de cantar y bailar, las esperanzas del soñar y quizás el sueño de volar y sentir la libertad.

Ser niño es el sueño apreciado, es sentirse amado, es el mayor de los recuerdos para quien lo ha disfrutado.

Autora: Jacqueline Melissa Vásquez Orué.

Estudiante del 3° “A” de secundaria.

9

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

NOSTALGIAS ESCOLARES En las finas arenas que la naturaleza formó, debajo de los cielos que Dios creó; de la tranquilidad que puedo respirar, del cantar de los pájaros que puedo escuchar y de la carcajada de una niña que interrumpe mi inspirar…

Inspiración que mueve cuando dirijo mi mirada al colegio, que desde donde me encuentro lo puedo observar, y al bajar miro los caminos que recorrí para llegar hasta allá, de las gritadas que recibí por arrancar flores para dárselas a mi mamá.

Por esos caminos recorrí y esas aventuras pase para llegar a mi tercer hogar, donde tuve experiencias románticas, amargas, alegres, y tristes, experiencias que recuerdo al mirar aquel colegio que me enseñó a respetar.

Miro sus puertas y me acuerdo, cuando esperaba ansiosa por entrar a formar.

Miro sus ventanas y me acuerdo, cuando veníamos de educación física, cansados y sudados, desesperados por sentir el aire que entra por ahí.

De los uno y mil gritos que recibí entre pizarrones y carpetas por escribir poemas sin prestar atención a lo que la profesora hablaba con tanta emoción.

Es como decir que el colegio es como un jardín lleno de flores y picaflores; chicos y chicas que juegan a ser mayores, preocupados siempre por sus deberes, siempre pendientes de lo que dirá la gente.

Sabes, crecer es darse cuenta de que la vida no es como pensabas todo es más complejo, responsabilidades, luchas, deberes, atender a los profesores a pesar de que a veces no quieres, fingir que haces la tarea cuando perfectamente sabes que te mientes.

10

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

Sentir que estás entre cuatro paredes tratando de descifrar las fórmulas que explican los profesores, y que hace que tu cabeza explote.

Pero no todo es tan malo como nos parece, están las bromas, ocurrencias de los compañeros más conocidos en el colegio.

De las cosas que hice para que los profesores me recuerden, siempre conocida y querida por los compañeros que tuve, siempre presente en los eventos del colegio.

Por los tutores chéveres que nos tocó y de los profesores que nos soportaron y nos quisieron.

Sé que da pena pensar que en algún momento voy a tener que dejar mi tercer hogar, y me da lástima saber que a este poema no se le puede echar atrás las páginas, pero me alegra saber que me queda aún dos años para disfrutar un lindo lugar que me brindó este colegio que, una vez más lo digo, es mi tercer hogar.

Autora: Stefany Zambrano Huapaya.

Estudiante del 3° “C” de secundaria.

11

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

SIGUES EN MÍ

Aunque la negra muerte te llevó, solo quiero sentir tu susurro hacia mí.

Mi corazón tendrá rayos de alegría

Las maletas están en la puerta, pero aun no puedo salir.

Ese mundo desconocido nunca lo veré si sigo así.

Pero tú me quitaste el sombrero, dejaste que me fuera, tengo mucho por descubrir.

Los recuerdos no son sombríos; y aunque jugaba en largos ratos, no culpo a Dios de nada en la vida.

Quizá nos salvó de la extensa melancolía que traía consigo.

Yo, aunque no tenía muñecas, tampoco entendía los silencios, Miradas extrañas…

Solo sé que me quedo, que sigo… porque sigo teniéndote en mí.

Autora: Yovana Isabel Paulino Goycochea.

Estudiante del 5° “C” de secundaria.

12

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

MI VIDA Como el arcoíris que embellece la naturaleza, ustedes lo hacen más con mi vida entera.

Como la rosa que acompaña a la primavera, así están en mi camino, llenándola de sorpresas.

Como el sol que ilumina las aguas cristalinas, ustedes guían el fulgor de mi estrella…

Autora: Melissa López Cornejo.

Estudiante del 5° “B” de secundaria.

QUISIERA Quisiera dormirme en un profundo sueño y no despertar jamás.

Quisiera que toda mi vida se vuelva oscura y nunca ver la luz de ese simple despertar.

Quisiera que nunca me hubieras pensado, para no poder ver la luz y quedarme como un simple… ni siquiera pensamiento.

Quisiera que solo tuvieras un poco de amor en tus palabras y no palabras que dañen mi corazón de sentimientos.

Quisiera que tú quieras algo, más bien casi nada, de lo que yo quiero.

Autora: Mileny Hernández Castillo.

Estudiante del 5° “B” de secundaria.

13

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

DESTELLOS DE VIDA Gratas estrellas de pensamiento creativo, que formaron lo provechoso de la persona coloquial, e indagante a la realidad.

De inspiracion profunda para el navegante…

Mundo de problemas.

De saber enfrentarlos con sabiduría y dignidad que fortalacen al alma, como el saber de roble duro y fuerte ante la adversidad; del mar pesado de problemas y rencores.

La fe y la alegría, las únicas armas frente al vuelo libre de buscar a la persona esencial, en el libre sobresalto del mundo de afuera...

Tan inmenso ante la realidad inesperada, tan atante a la vida, tan atante al alma… a mi alma.

Autora: Mariela Chávez Gallardo.

Estudiante del 3° “C” de secundaria.

VOY PORQUE SOY Porque me dicen que soy una persona alegre a donde voy; gracias a dios por tenerte como amigo hoy.

Y seguiré así como soy por todas partes a donde voy; con mi alegría y mi tumbao, y con un pisoteo, seguiré como soy… por todas partes a donde voy.

Autor: José Armando Gálvez García.

Estudiante del 3° “C” de secundaria.

14

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

PARA MÍ, AMOROSAMENTE

No tengo qué decir, solo sé que lo que voy a escribir saldrá de dentro de mí, pues en el centro de mi ser se encuentra una fuente infinita de amor.

Ahora permito que este amor llene mi corazón, mi mente, mi conciencia y mi ser.

Y por eso me amo y por lo tanto cuido mi cuerpo, amorosamente, me amo y por lo tanto disfruto realizando un trabajo, donde utilizo mis capacidades y dones.

Me amo y por eso me comporto con amor para los demás, porque sé que lo que doy, retornará a mí multiplicado.

Autor: Dennis Mamani Chura.

Estudiante del 3° “C” de secundaria.

15

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

CONFUSIÓN ETERNA

Si las lágrimas llenan el mar, tus sonrisas qué me dirán: alegrías eternas.

No existen jamás tristezas que matan, así no morirás.

Nunca estás solo, supera tus sufrimientos que siempre habrá alguien en todo momento.

No te miento al decir que estoy contigo, porque sé que a tu lado siempre habrá un amigo: lealtad de amigos; solo tú y yo sabemos la amistad que tenemos.

Y con lealtad, juremos estar siempre juntos, sabiendo hablar con sinceridad… La verdad es que pasó algo y muy lamentable.

Jamás pensé en romper el juramento.

Hoy solo sé que en una tarde la llamé y lloré con toda libertad.

Autora: Esperanza palomino Cruces.

Estudiante del 3° “C” de secundaria.

16

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

TRISTEZAS ALEGRES Versos sueltos Hoy, sonrisas falsas demuestras detrás de ti, una lágrima que ocultas; lo que sientes en la realidad.

Hoy, sientes que el sol y la luna te niegan su amistad, que las estrellas no brillan, que las flores no te dan su aroma y el arco iris no te da su color .

Hoy, estás sentado en la melancolía, pensando que no hay salida y que las flores desprecian tu alegría.

Hoy, sientes que estás en el túnel de la tristeza y que nunca acabará.

Pero te digo que hasta hoy lloraste sin cesar, y que hay una mano que te extiende, que quiere tu amistad para sacarte de ese túnel que te envuelve cada vez más .

Hoy, esa mano te dice te quiero y que tu tristeza saldrá porque viene a arrancarte una sonrisa sincera, porque a las tristezas no las quiere ver más.

Haciéndote ver en el espejo de la felicidad que existe una niña linda que debe brillar.

Porque las tristezas no se lloran, se superan.

Se perdonaron errores imperdonables, se sustituyeron personas insustituibles, se olvidaron personas inolvidables, ya se han hecho cosas por impulso, 17

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

ya nos hemos decepcionado de muchas personas, ya amamos y fuimos amados, pero también rechazados, ya fuimos amados y no supimos amar tuvimos miedo de perder a alguien especial y terminamos perdiéndola pero sobrevivimos y vivimos aún, la vida es dura, pero todos pasamos por ella, siempre.

***************************************

En la vida existen muchos poetas.

Yo no hablo mucho en versos, a veces, simplemente quiero que acabe viendo morir un día y viendo nacer el otro.

Le pido a Dios, que apriete mis manos y las caliente para así sentir que sigo viva, porque no siento el tic tac de mi corazón, no veo la luz en esta terrible oscuridad, no oigo el cantar de los pájaros, no siento el dulce mirar de los demás.

Le pido a Dios, que apriete mis manos

***************************************

Si en la vida te encuentras ante miles de obstáculos, no te aflijas; piensa que son pruebas que Dios te ha mandado para demostrarte que tú puedes superarlos, Así alcanzarás tus sueños.

Autora: Hilda Jasmín Minaya Mena.

Estudiante del 3° "C" de secundaria.

18

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

A MI COLEGIO

Fe y Alegría, lugar de esperanza y trabajo para todos.

Siembras cada día una semilla, que con el tiempo florece dejando una sonrisa, para que todos cuando la miren sepan lo linda que es la vida.

Tus salones son un lugar de fantasías, un lugar de diversión, un lugar de aprendizaje.

Con tus profesores, nosotros aprendemos a mirar el futuro, y a ver la que la vida nos tiene escuchando una voz que nos dice: ¡SÍ SE PUEDE!

Tus jardines y árboles son coloridos, como la primavera en el atardecer.

Que poco a poco brotan flores que hacen que el colegio esté lleno de colores.

Alegrías recorridas en este lugar, aventuras de paz y amor fortalecieron mi corazón de fe por el señor: alabado hijo de DIOS.

Autor: Anghelo Puicán Chafloque Estudiante del 3° “C” de secundaria.

19

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

A VÍSPERAS DE NAVIDAD

A pocas semanas para la navidad Quiero yo entonarte una canción, A una dulce señorita Que ha llegado a mi corazón.

Yo sé que no canto muy bien Pero aun así lo intentaré, Y aunque no le agrade mi cantar Yo no la dejaré de amar.

Autor: José Daniel Márquez Rivera.

Estudiante del 5° “C” de secundaria.

LA FURIA DEL SOL

Pobres hormiguitas que están bajo la furia del sol, indefensas todas; les quitan lo que está fuera de su corazón.

¡Pidan, pidan ayuda al gorrión!

No tengan miedo, que él es su única salvación.

Ya todo pasó gracias al gorrión, ya todo lo perdieron por la furia del sol, pero no se llevó lo que está dentro de su corazón.

Autora: Jesica Surichaqui Hidalgo.

Estudiante del 3° “C” de secundaria.

20

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

ERES MI PENSAMIENTO Eres mi pensamiento, eres mi sufrimiento, eres aquel aliento que me devuelve el viento.

Cuando te miro te pienso… porque no podré decirte todo lo que siento ya que es un sentimiento tan profundo… pero no lo intento nunca.

Antes no creía en nada, pero hubo un ángel que me ayudó, este ángel era tan bella que brillaba como una estrella.

Esa luz que resplandecía eran de tus ojos, y tengo que decirte algo: tú eres ese ángel.

Autor: Joel Jefferson Ayala Vílchez.

Estudiante del 3° “C” de secundaria.

PORQUE TE QUIERO Si te escribo es porque te extraño, si te extraño es porque te quiero, si te quiero es porque te amo…

Y si te amo es porque eres la persona más bella del mundo.

Cada día te quiero, Un día te respeto, Otro te admiro, Otro más te sueño, Pero siempre te quiero, Porque amanecer es quererte, Y estar sin ti, mi muerte.

Autor: Joel Berríos Llallico.

Estudiante del 3° “D” de secundaria.

21

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

MI SENTIR

Tengo los sentimientos frustrados, la mente en otro lado; siento que ya no puedo más, pero aquí estoy…

Quisiera poder gritar mis sentimientos y no vivir con resentimientos; se me hace un nudo en la garganta, se me entrecorta la voz y aunque no me gusta llorar, no lo puedo controlar.

Siempre supe que al crecer mis problemas serían más grandes pero nunca pensé que tanto.

Y ahora que los tengo en frente no sé si podré aguantar; quiero gritar tan fuerte para que todos me escuchen y así no quedarme con esta tristeza; tristeza y soledad.

Autora: Liz Roxana Lulo Trucios.

Estudiante del 5° “A” de secundaria.

22

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

LO QUE TU CORAZÓN NO PUEDE VER

Me gusta aquel sufrimiento dulce que es el amor, aquello que quizás nunca podré vivir en este mundo de alegrías que me tienen tan triste.

Es hermoso ver tantos corazones unidos compartiendo un solo sentimiento: es el AMOR.

Es tan grato sentir el aire a jazmín por las mañanas, el polen de esos sentimientos que vuelan y se comparten mutuamente, esos besos que con cada caricia te dicen que nunca se acabará; o la sonrisa impostada que no deja salir palabras que tu corazón quiere decir.

Pero el tan solo pensar que en los cuentos de hadas esto se puede dar es increíble y real que esto se da en la vida normal.

Quizás yo no vuelva amar; porque así como un madero después de ser clavado quedan tan mal el corazón y los sueños también se daña y quedan heridas difíciles de cubrir demostrando quizás al mundo una felicidad irreal.

Pero eso no te quita la potestad de soñar, nuevamente; Soñar con la persona ideal, que espera por ti; solo mira muy bien y no la dejes ir, Ya que solo tú puedes entender lo que tú corazón no puede ver.

Autora: Liliana Milagros Mitma Gaona.

Estudiante del 4° “D” de secundaria.

23

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

MIS ÚLTIMAS HORAS Quédate un ratito más, bella escogida, que mis últimas horas quiero pasarlas contigo.

Deseo ser feliz, dulce mujer.

Quiero caer yerto en tus brazos, quedarme infructuoso al ver tu imagen.

Que mis últimas horas quiero pasarlas contigo.

Daría todo porque tus ojos me canten un yaraví, porque tus manos peinen mi cabello, para que mi vida solo dependa de tocar tus labios.

Pues mis últimas horas quiero pasarlas contigo.

Desearía poder volar a las estrellas y poder traerte una, en un cofre de bolsillo; me encantaría cambiar tu expresión tan contristada, por un risueño semblante.

Me jugaría el cielo porque cada lágrima tuya acabe con el hambre, desearía cambiar mi suerte…

Ya que mis últimas horas quiero pasarlas contigo.

Autora: Sofía Ríos Magallanes.

Estudiante del 4° “A” de secundaria.

24

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

ESTOY AQUÍ

Estoy aquí, mirando la estrella más brillante de la noche recordando la primera vez que te vi… viendo como el reloj se detiene cuando estoy junto a ti.

Mira como tiemblo, es inevitable ocultar este sentimiento…

Y estoy aquí nuevamente, luchando contra mí misma, evitando decir “te quiero”.

Mi rostro reflejado en tus ojos mirándonos fijamente sin decir ninguna palabra, sintiendo como nuestros corazones laten a la par.

Puedo sentir tu calor muy cerca, tu mano rozando la mía… en esta noche tan infinita….

Y estoy aquí nuevamente, luchando contra mí misma, evitando perder el control….

Estás al frente mío sin decir ninguna palabra… ¿Y yo?

Perdiéndome en esa combinación de colores que hace que mi mundo sea completamente distinto.

Convirtiéndote en el héroe de mis más oscuros miedos, en el príncipe de mis sueños.

25

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

Y estoy aquí nuevamente, luchando contra mí misma Para poder evitar besarte.

Dame tu mano, Caminemos juntos a lo largo de la vida, Sin miedo a caer….

Venciendo cada obstáculo, juntos; viendo como el mundo toma sentido, A lo largo de los años.

Y estoy aquí nuevamente, Luchando contra mí misma, evitando decir “te amo”…

Autora: Sara Paola Ñopo Fernández.

Ex-alumna, Promoción 2010 “Juan Julio Witch”.

26

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

CUENTOS

27

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

LA PRIMERA LLUVIA DEL MUNDO

Mientras el silencio y la angustia los embargaba, Cristopher buscaba una posible respuesta para lo que ocurría. Todos lo tenían que saber, todos tenían que dar con la respuesta.

Pasaron horas, pasaron días, pasaron semanas y nadie daba respuestas, algunos opinaban: -

Fue gente desquiciada que nos quiere hacer sufrir!

-

No... fueron los leones que andan rondando por ahí!

De pronto, apareció un chico que no era del lugar, era extranjero, él era alto, gallardo, tenía el aspecto de un chico valiente, él, para las chicas del lugar, era un ángel. Debió ser muy bonito, su nombre era James; sin decir nada, entró, se sentó y escuchó.

James llegó con mucha curiosidad y quería averiguar lo que ocurría. Escuchó la noticia mientras dos señoras preocupadas y desconsoladas se lamentaban de su sufrimiento.

Al haber pasado unos días en aquel sitio recolectando información, y al percatarse de que todo ese pueblo estaba muy preocupado, comenzó a hacerse amigo de Cristopher y decidieron que juntos hallarían la respuesta.

Lo que había pasado era que hacía algunos días, sorprendentemente, de un día para otro, desaparecieron todos los niños de ese lugar.

James y Cristopher, al igual que todos los del pueblo, los buscaban por todos los sitios que conocían pero no los encontraban. Ya casi se habían dado por vencidos, cuando en eso apareció una niña, la más bonita, atenta e inteligente de todos los niños del mundo, estaba más radiante que nunca, con su voz de ángel comenzó a explicarles que todos los niños estaban bien. Hablaba de un Dios. Nuestro Dios, decía, está muy contento con ellos ahí, que de los niños dependía que el agua del mundo y la vida de las personas no se acabaran, y cuando le iban a preguntar cómo era el lugar en donde estaban, comenzó a caer un liquido raro del cielo. Muchos se asustaron y fue porque nunca habían visto agua. Se terminó aquel espectáculo y la niña ya no estaba, y justo en el lugar donde ella estaba parada, se formó un pozo en el que el agua se había juntado y no se acababa, nunca.

FIN

Autora: Maritza Gonzales Dóñez.

Estudiante del 3° “D” de secundaria.

28

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

¿TAN SOLO UNA PESADILLA? Ella estaba ahí, echada en su cama, parecía tan solo dormida, pero la realidad era otra.

Estaba muerta, pero se veía tan linda, es que por fin descansaba. Tan solo era una horrible pesadilla.

María, la madre de Mía, y Josué, su enamorado, abrasaban y besaban el frío cuerpo de Mía, que parecía estar en un profundo sueño. Su rostro reflejaba la dulzura de una niña, era tan bella; pero lo raro era que llevaba una expresión en la cara que parecía ser una sonrisa. ¿Estará ahora feliz?, se preguntaban mientras lloraban desconsoladamente. *** Mía era una de las personas más lindas que podía existir, nunca se le vio causando problemas, ni en peleas absurdas. Ella era muy hábil, a sus 16 años hacía de todo, cantaba, bailaba, actuaba, era creativa, inteligente, solidaria y siempre quería lo mejor para la gente que la rodeaba.

Ella era una de las mejores alumnas del salón, tanto así que por todos los años que se esforzó, se ganó una beca completa para estudiar en la mejor universidad que hay en el Perú. Ella se sentía feliz, pero no sorprendida ya que sabía todo el esfuerzo y dedicación que puso en cada tarea y trabajo al transcurrir de los años.

Poco a poco comenzó a sentir la presión de las personas que la rodeaban, cada vez más y más. “Tú tienes que ingresar y sacar adelante a tu familia” o “cuidado que arruines tu futuro quedando embarazada”, eran unas de las frases que ella tenía que escuchar y casi a diario; pero, ¿no sabían que ella era inteligente? O ¿acaso no confiaban en ella?, eran aquellas preguntas que siempre atormentaban a Mía.

Mía era feliz siendo como era, y era más feliz ahora más que antes, porque ya no se sentía sola. Ella tenía un mejor amigo, Josué, así se llamaba. Josué era un chico lindo, tanto por fuera, como por dentro. A él le gustaba bailar al igual que ella, era divertido, alegre, humilde, servicial y era impresionante ver que se llevaban tan bien. En fin era el chico perfecto para ella. A Mía le gustaba mucho, solo esperaba el momento en el que pudiera tan solo darle un beso.

Josué invitó a Mía a salir, ella muy contenta aceptó ir a la cita. Fue un día muy lindo, el sol brillaba y todas las personas salían a caminar y disfrutar del atardecer, al llegar al lugar indicado por Josué, Mía se llevó una gran sorpresa, él había hecho algo especial para ella; había preparado una deliciosa comida en el campo, habían flores por todos lados, habían muchos peluches hermosos, y globos en forma de corazón; todo era perfecto para ella. Mía no dejaba de sorprenderse, cuando Josué se acercó la tomó de la mano y le pidió ser su enamorada, ¡claro que sí!, dijo con una gran sonrisa en su hermoso rostro, los dos se abrazaron, y pasó lo que debía pasar, lo tan esperado, un beso.

29

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

Mía se la pasaba tan bien con Josué, más que un enamorado, era como su hermano y amigo, que la defendía de todo y todos, la aconsejaba, la ayudaba en todo lo que podía y la hacía reír tanto. Se sentían muy bien juntos, que Josué aún no comprendía lo que había pasado. *** María lloraba, era lo único que ahora podía hacer. Se sentía impotente al ver a su hija ahí, sin vida, y lo peor es que se sentía culpable por la decisión de su hija. ¿Por qué la presioné tanto?, ¿por qué no estuve con ella cuando me necesitó?, hija discúlpame… se decía mientras acariciaba la suave cabellera de Mía.

María era una mujer honesta, trabajadora, humilde y muy alegre. Trabajaba en una empresa, como servicio de limpieza, todo el día, y cuando llegaba solo comía y dormía, ya que llegaba demasiado tarde. Mía nunca le dijo a su madre lo que sentía, nunca le dijo que a veces se sentía sola, pero es que Mía no le quería causar problemas, lo único que quería era que su madre se interesara un poco más en ella y le preguntara cómo es que se sentía.

Se sentía presionada, cada vez más y más, tienes que hacer esto, aquello, y ella se preguntaba qué había con lo que ella quería. Se sentía mal, se sentía inútil, no tenía ganas, ni fuerzas para hacer sus cosas y le dolía mucho su cabeza, sentía tanta presión sobre ella, hasta de personas que solo querían verse en la universidad para decir que el mérito era de ellos. Tenía tantas cosas en su cabecita que para una chica de su edad eran demasiadas.

Mía ya no podía hacer más, se sentía débil, cansada, nadie sabía lo que pasaba, solo la veían llorar y nadie podía consolarla. Sus notas comenzaron a bajar, más y más, todos hablaban con ella, pero en verdad nadie sabía lo que guardaba en su corazón. Parece que entró en una decepción total y no quiso ir al colegio más. Se quedó en cama 2 días sin hacer nada, solo lloraba y apenas y comía, miraba en su ventana a las aves, que iban y venían de un lugar a otro, sin cadenas, tan libres, libres de todo y de todos; así quería ser ella, libre de presiones, y libre de todas esas personas egoístas que nunca pensaban en lo que realmente quería Mía.

Josué venía a verla, le hablaba y le hablaba, pero parecía hablarle a una pared; Mía ya no sentía, no pensaba, solo era un cuerpo sin alma.

Al tercer día, Josué fue a comprarle un regalo a Mía, llegó después del colegio, María le abrió y subieron al cuarto.

Al abrir la puerta, Josué soltó el regalo y se quedó sin aliento, María no creía lo que veían sus ojos; Mía estaba muerta y a su costado un frasco de pastillas para dormir, vacío.

Se acurrucaron a su costado acariciándola y besándola, seguro que Mía ahora si descansaba, es así como sintió por primera vez el descanso eterno, pero había algo más, ella no quería esto para su familia, claro que no, el sufrimiento de los demás es horrible, no aguantaba ver llorar a sus seres más queridos, no…

30

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

¡Despierta, despierta!, ¡Mía despierta!, niña es tarde tienes que ir al colegio, Mía es hora del desayuno, sal hija; Mía despertó bruscamente y se dio cuenta que todo lo pasado solo había sido una pesadilla; dio gracias a Dios que ya todo había pasado y hasta sonrió. Pero aún no comprendía el significado de su sueño… ¿será que muy dentro de ella lo quería?, ¿deseaba que su realidad fuera así?... se quedó parada unos minutos mirando su ventana, recordó que iba tarde para el colegio y se dio prisa.

FIN

Autora: Vanessa Aponte Sotil.

Estudiante del 5° “C” de secundaria.

31

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

UNA CARTA DEL CIELO Hoy me he dado cuenta de lo tonta que fui al pensar que todas mis decisiones eran correctas, pero éstas solo hacen que mi destino se vaya por otro camino; uno que me lleva a la oscuridad, uno que me hace sentir que estoy en lo más profundo de la tierra, olvidada por quienes significan mucho para mí; pero no sé si yo significaré lo mismo para ellos. Tal vez muchas personas me han decepcionado con el paso del tiempo, o tal vez yo, a muchos he defraudado pero solo les puedo decir que me duele mucho el ya no tenerlas a mi lado.

No sé si éstas serán las excusas correctas para la decisión que yo había tomado, pues hace poco tiempo escribí una lista de cómo me gustaría suicidarme. Este era el listado: 1.

2.

3.

4.

5.

6.

Ahogarme…

Tirarme de un puente…

Tomar muchas pastillas para morir por sobredosis…

Cortarme las venas…

Dejar de comer… (es una muerte segura pero lenta) Envenenarme…

Pero cada vez que intentaba acabar con este sufrimiento no lo lograba, estaba realmente segura de hacerlo, realmente lo hice, en dos oportunidades lo intenté, pero creo que siempre había alguien que estaba a mi lado y simplemente esto no daba resultado. Por qué cuando tomé todas las pastillas que tenía mi madre en su botiquín, para su tratamiento de cáncer que la atormentaba desde hace tres años aproximadamente, no me pasó nada; parecía que no había tomado nada, no me dio sobredosis y ni siquiera un suave dolor de estómago; lo mismo pasó cuando tomé un sobre de veneno para ratas, no me pasó nada, mi cuerpo no sentía nada. Pasaron dos días y el veneno no dio resultado; entonces me sentí más estúpida aún porque llegue a pensar, sin duda alguna, que para Dios yo no existía porque ni siquiera me daba el privilegio de morir para que después no sintiera nada; ya no sintiera sufrimiento, dolor, pena, soledad; ya no sintiera más ese vacío que tenía mi corazón, este corazón que estaba roto como un cristal, como cuando se cae al suelo y se hace trizas tan trágicamente.

Luego de todo esto me dediqué a estar sola porque no encontraba una salida a esta depresión, y otra vez, después de tiempo volvió a rondar en mi cabeza la opción del suicidio; y entonces lo pensé bien y llegué a la conclusión de intentarlo; además, no perdía nada con intentarlo otra vez, esta vez la muerte era segura ya que me iba a lanzar de un puente, pues ya no confiaba en las otras formas que fracasaron conmigo, y como nada hasta hoy había dado resultado, yo solo quería una muerte segura. Estuve despierta toda la noche anterior al día de mi gran final, planeando cada detalle de mi muerte.

Al día siguiente me dirigí hacia el puente del que me iba a tirar, antes de hacerlo solo cerré mis ojos, me lancé; ya estando yo en el aire escuchaba una voz que me decía: -

¡Yo nunca me olvidé de ti!; ¡yo siempre estuve para ti!; ¡fui yo quien no te dejaba morir, porque tenía la esperanza de que te dieras cuenta que no es necesario buscar 32

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

la felicidad, porque la felicidad siempre ha estado disponible para ti, porque la felicidad se halla hasta en las cosas más pequeñas! ¡Sino me crees fíjate en lo que te rodea!

Entonces cerré más fuerte mis ojos y vinieron a mi mente muchas imágenes de la naturaleza, de mis amigos, de mi familia. Vi muchos recuerdos hermosos; en ese momento me di cuenta de lo bella que era mi vida y de que nunca estuve sola; de que yo misma me deprimía; en ese momento quería tan solo no caer al suelo, pero ya era muy tarde, ya me había tirado, solo quería volver al pasado, retroceder solo cinco minutos antes de tirarme, solo quería eso…

Entonces sentí un gran dolor y escuché un sonido tan estruendoso; en ese instante yo había caído al suelo ya nadie me pudo levantar, pero no sé cómo es que sentí que mi alma salía de mi cuerpo, sentía un dolor indescriptible, como si algo en mi se desgarrara y yo en ese instante podía ver mi cuerpo, tendido en el piso, lleno de sangre. Veía a la gente amontonada, de pronto vi llegar a mi madre, junto con mi hermana, lloraron hasta que a sus ojos se les acabaran las lágrimas. Yo sentía un gran remordimiento al ver a mi madre y a mi hermana llorando sobre mi cuerpo tendido en el piso, y ya que les causé ese gran dolor a las personas que tanto quería y me querían, me puse a llorar y le decía a mi madre que no se sintiera culpable, pero era en vano, ella no podía escucharme Fue solo así. Deseaba no haberme suicidado, no haber tomado esa decisión. De pronto, cerré los ojos otra vez y vi mi velorio y hasta mi entierro, pero mi alma no estaba en paz y no encontraba su lugar; hasta que un día, cuando yo caminaba por las calles, escuché otra vez la misma voz que me habló aquel día de mi muerte; me decía: - ¡Espero que te hayas dado cuenta que siempre estuve contigo! ¡Hoy para ti no tengo un lugar en el cielo… sí, soy yo, Dios, el que siempre te acompañó! ¡Hey, qué esperas, despierta, te doy otra oportunidad, he hecho que esto solo lo recuerdes como una pesadilla!, pero cuando te despiertes habrá una carta para ti, léela y cumple con lo que te pido.

Desperté de aquella pesadilla y encontré la carta de la que me habló Dios en mis sueños, en esa carta decía que ante todo Él me quería, y que por favor lo ayudara a que las personas que se sienten como yo me sentía antes de esa pesadilla, reflexionen y noten que el mundo en el que vivimos es maravilloso, que siempre hay alguien que los ama y que está siempre a nuestro lado. Es Dios.

Ahora yo estoy bien, cumpliendo con lo que Dios me dijo en aquella carta. Terminando de escribir lo que me pasó, para que ustedes, quienes en este momento están terminando de leer mi historia, nunca piensen en suicidarse, nunca piensen que están solos, porque después de mi muerte, yo soy el ángel enviado por Dios para cuidarlos, y sobre todo, para que se sientan amados, siempre.

FIN Autora: Cristina Gissel, Nevado Samamé.

Estudiante del 5° “A” de secundaria.

33

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

¿QUÉ PASÓ CON KEITY? Todo estaba empezando a salir bien; para ella, las vacaciones habían empezado con el pie derecho; su padre había empezado a trabajar y su madre se había convertido en más que una amiga.

Era la mañana de un día que parecía ser perfecto, pero quién iba a pensar que unos minutos después le iban a dar una desgarradora noticia. El teléfono suena: -

¿Aló?

Hola Keity, soy tu tía Raquel.

Hola tía, cómo está, ¿qué sucede? La escucho un poco nerviosa… …No sé cómo decírtelo… - Keity escucha que su tía llora.

Tía ¿está bien?

Pues… mi madre… tu abuela… acaba de fallecer.

El teléfono cae al piso, Keity no sabe qué hacer, se queda quieta aunque quiere correr, las lágrimas empiezan a bajar, se siente sola, eso es verdad. No hay nadie en casa, entra a su cuarto, recostada en su cama empieza a recordar. Su abuela había sido como una madre para ella, pues la crió desde muy pequeña. Keity, aunque la hizo muy feliz; piensa que no tuvo oportunidad para agradecerle todos los años de vida que le dedicó.

El entierro fue triste, nadie quería decirle adiós a una persona tan buena. Keity, aferrada a su padre supo resignarse ante esa pérdida tan grande.

Los días pasaron, se puede decir que aquella experiencia nunca se le olvidaría.

Las clases vuelven y Keity no es la misma de antes; ya ni sus mejores amigas la reconocen. De aquella chica sensible, humilde y amable con todos, ya no quedaba nada; Keity había pasado a convertirse en la clase de chica que no le importaba los sentimientos de los demás, en la clase de chica que ella tanto odiaba.

Todo parecía indicar que Keity odiaba a todo el mundo, y era tal el desprecio que ella demostraba hacia los demás que era la chica que se encargaba de hacerle la vida imposible a cada estudiante de su escuela, ninguno había quedado sin librase de sus burlas o humillaciones, ni siquiera aquellas que un día habían llegado a ser sus mejores amigas.

Hasta que todos se cansaron… decidieron que no iban a soportar sus humillaciones ni un minuto más, le hicieron la tan famosa “ley del hielo” y cuando no la pasaban desapercibida la maltrataban con cosas inimaginables… hasta que Keity no aguantó más.

Había decidido ponerle fin a tantos problemas.

Cuando sus padres, compañeros y profesores entraron a la escuela ya muy de noche buscándola solo encontraron una nota que decía:

34

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

Desde que mi abuela murió, decidí que nunca más lloraría por nadie, pensé que ya nada valía la pena, que solo las personas más fuertes logran imponer autoridad y respeto sobre sí mismas, sé que me equivoqué y les pido perdón, a cada uno de ustedes.

Adiós.

Los quiere Keity.

Fueron a buscarla por todas partes, su desesperación fue horrible; hasta que la encontraron: abrieron la puerta del sótano y la escena que vieron fue extremadamente impresionante…

FIN

Autora: Juana Iris Luna Hidalgo.

Estudiante del 4° “D” de secundaria.

35

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

MUCHAS GRACIAS Esta historia la escuché de mi abuelita.

En uno de mis viajes por el Perú; llegué a conocer la selva. Recuerdo aquel día en que un “muchas gracias” cambió mi vida.

Era un día normal, igual a todos; yo estaba en el bosque buscando algo qué cazar para llevar a casa. De pronto me pareció escuchar un sonido raro, era un sonido, algo así como un llanto, pero horrible; parecía que alguien se aproximaba; cogí mi rifle y me escondí tras una roca grande y pude ver que un hombre caminaba por el sendero: en la pierna izquierda tenía una mordedura; el hombre me preocupó pues con las justas caminaba. Sus prendas eran de color negro, su cabello estaba alborotado y sucio, además era largo y le cubría el rostro; me pareció un mendigo; me quise parar a preguntarle qué le pasó y escuché un gruñido. Cuando vi qué cosa era eso, me asusté tanto que hasta mi alma tuvo miedo.

Mi corazón se aceleró; era un perro negro y grande, estaba fornido y tenía los ojos de color rojo. Me pareció que era como un guardián del infierno, pues de solo verlo casi me muero; en ese momento comprendí que aquel que yo creía mendigo era un alma en pena y que el perro se lo querría llevar al infierno, a como dé lugar.

Cuando ese hombre notó que el perro estaba detrás de él, comenzó a correr desesperado, yo vi como el perro se iba a lanzar sobre él, cogí mi rifle y sin pensarlo dos veces le disparé en la frente. Este comenzó a dar vueltas y elevarse al cielo, parecía que el perro gritaba; solo vi que se elevó al cielo y explotó. En ese momento el cielo que estaba nublado se pintó de color negro y después de un momento, se aclaró.

Luego de que maté al perro me acordé del hombre, miré a todos lados pero no lo encontré, sentí demasiado sueño y me recosté sobre el pasto.

En mi sueño claramente pude ver al hombre que se me acercó y me dijo, “Muchas gracias por lo que hiciste, has salvado mi alma”, y se fue.

Me desperté y no había nadie a mi lado; pensé que tal vez abría sido sueño, corrí a coger mi rifle y me di cuenta que lo que me pasó, si pasó y me puse feliz al saber que ese día salvé a un alma que estaba agradecido conmigo.

FIN

Autora: Verónica Sánchez Cortés.

Estudiante del 5º “C” de secundaria.

36

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

SUEÑOS RELIZADOS En el pueblito de Maray de la provincia de Huaura, ubicado a 3 800 m.s.n.m., vivía un niñito llamado Celso Santos, junto a sus padres, Nicolás Santos y Fabiana Pacheco; lo acompañaban sus hermanos Mauro, Jesús y Pedro. Esta sencilla familia vivía del pastoreo de ovejas y cabras y la agricultura de sus chacritas, que las dedicaban al cultivo del maíz y la papa.

A Celso le gustaba ir a pastorear su pequeño rebaño y para ello tenía que levantarse muy temprano, antes que saliera el sol, buscando siempre los mejores pastos; cuando lo encontraba se echaba sobre la hierba y dejaba volar su imaginación, soñaba que un día llegaría a la capital y a punta de esfuerzo sería un escritor. Cuando llegaba el medio día, regresaba a la humilde casita de sus padres y luego de almorzar rápidamente, bajaba corriendo por la calle a la única escuelita que tenía el pueblo.

Celso se sorprendía mucho de las situaciones nuevas que le tocaba observar; un día, al llegar al salón, vio a un nuevo compañero, diferente a los demás, él tenía la piel de color negro y un cabello muy parecido a los crespitos de su ovejita “luna”, sin pensarlo dos veces no pudo resistir la tentación de tocar ese cabello; su maestro lo tomó como una falta de respeto y le puso de castigo parado en una esquina del salón.

A este pequeño también le gustaba poner en aprietos al profesor, por eso disfrutaba de hacerle algunas preguntas rebuscadas. Ya al terminar las clases, por la tarde, regresaba a casa con sus hermanos a toda carrera. ¿Quién llega primero? Ya se imaginarán; Celso siempre ganaba.

Los padres de Celso sabían de la inquietud y deseo de su hijo por ir a la capital, por eso le dijeron que si se esforzaba por terminar la primaria, ellos harían el sacrificio por enviarlo a Lima para continuar con sus estudios, como lo hicieron con su hermano Hermeto.

Aunque Celso no conocía a su hermano Hermeto, ir a Lima era su mayor ilusión. Por fin llegó el día en que Celso tuvo que partir dejando a sus padres y hermanos; el viaje fue largo, un camión lo bajó al pueblo de Churín, luego a Sayán, Huacho, y finalmente llegó a Lima.

Estando en el terminal terrestre de Lima, recordó las palabras de su madre, “quédate a esperar a tu hermano Hermeto, ni bien bajes del carro, y no te muevas porque él te encontrará”. Celso estaba asustado, muchos carros y mucha bulla, gente desconocida que caminaba a velocidad; de pronto un señor adulto se le acerca y le dice: “¿Tú eres Celso Santos?”, y Celso le responde tímidamente y con voz baja: “Sí” y “¿Usted es el señor Hermeto?”, A lo que Hermeto le dice con voz fuerte y enérgica: “¿Qué es eso de señor?, yo soy tu hermano… y no me llames señor, ¡dame un abrazo!

Este fue el primer encuentro con su hermano Hermeto. Por un tiempo vivieron muy cerca de la plaza de toros en un cuartito alquilado, muy cerca también de la Escuela 37

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

Nacional de Bellas Artes, lugar donde Hermeto trabajaba como profesor. Posteriormente, tuvieron que buscar un lugar propio en el primer pueblo joven que se creó alrededor del Barrio Obrero, en Piñonate. Allí llegaron sus padres y demás hermanos. Poco a poco fueron construyendo su casita.

Llegó el momento de elegir su nuevo colegio, de eso mayor…

se encargaría su hermano

Ya es el primer día de clase y Celso emocionado va a su nueva escuela, “El Melitón Carbajal”, donde con mucho esfuerzo estudió y trabajó al mismo tiempo; sólo así pudo terminar la secundaria y posteriormente ingresar a la “Universidad Nacional Mayor de San Marcos”, a la Facultad de Educación. Luego consiguió graduarse de profesor en Filosofía.

Siendo estudiante aún, conoció en un Seminario de Teología a una bella jovencita, Lidia Vargas Montani, con quien luego compartiría su vida como esposa y madre de sus hijos. Es en medio de este ambiente familiar que encuentra la motivación para empezar a escribir bellos poemas sobre el amor y la mujer.

Pronto empezaría a trabajar como profesor de filosofía, y estando aún soltero, consiguió comprar un terrenito en una urbanización. Pero es sólo con la ayuda de su esposa, que él edifica en ese terrenito, la casita propia. La familia crece, vienen los hijos, tiene que dejar la docencia y se independiza formando un pequeño negocio de venta de relojes y luego de libros. Un día Celso puede ver realizado uno de sus más grandes sueños: publicar sus poemas.

Sin darse cuenta los años pasaron y este humilde pastorcito ha conseguido realizar muchos sueños. A todos sus hijos les inculcó el amor al trabajo y a su tierra, a sus orígenes, por eso en cada una de las vacaciones escolares los lleva al campo, especialmente a su querido pueblo de Maray. Allí les enseña a subir montañas, a caminar largo, a amar la naturaleza, nuestra música, danzas, historia y costumbres, pero principalmente a esforzarse por conseguir sus sueños.

FIN

Autora: Diana Belén Tapia Saavedra.

Estudiante del 2° “A” de secundaria.

38

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

LA FAMILIA DE ALADAR Inspirada en: Dinosaurio, un film de Walt Disney, y co-creada con asistencia de mi mamá.

Había una vez unos dinosauros que vivían muy felices en un nidal, hermoso y de mucha vegetación.

Eran muchos dinosaurios, de todas las especies, adultos y bebés. También había huevos de los que pronto nacerían más, para seguir llenando el planeta.

De pronto apareció un Carnotauros, el más malo de los carnívoros, y empezó a perseguir a los indefensos dinosaurios herbívoros. Todos los dinosaurios empezaron a correr para salvarse, dejando sus nidos abandonados.

Entonces, vino un Oviraptor y se llevó el huevo de un Iguanodonte. Voló y voló con el huevo en la boca hasta llegar a una isla, donde le esperaban sus bebes iguanodontes. Estos hambrientos empezaron a pelear por la comida y se les cayó.

El huevo cayó en un árbol donde vivían los monos jóvenes. En un primer momento se asustaron, y papá mono dijo: déjalo caer, debe ser algo peligroso.

La mamá mona fue a recogerlo, en ese instante se abrió el cascarón del huevo y salió Aladar, un bebé iguanadonte. Mamá mona dijo: esta hermosa criatura no puede ser peligrosa. Y lo adoptaron al pequeño iguanadonte como un hijo de la familia.

Años después, creció el iguanadonte junto con los monos como uno más de la familia.

Estaban muy felices festejando el casamiento de los monitos, cuando de pronto un meteorito cayó sobre la tierra, exactamente en el océano, y las olas arrasaron con todo a su paso. El iguanadonte ayudó a su familia a salvarse lanzándose al otro lado del océano.

Muchos dinosaurios murieron, los pocos que sobrevivieron buscaban comida en todo el desierto y uno de ellos era Aladar y su familia.

El planeta se volvió un desastre, no había comida, ni agua para los dinosaurios, además Aladar y su familia estaban solos. Caminaron y caminaron por el desierto hasta que encontraron una manada de dinosaurios. Se unieron a la manada para buscar juntos un refugio, comida y agua para sobrevivir.

Pasaron muchos peligros y la falta de agua hacía que los dinosaurios más débiles murieran. Los adultos llevaban a la manada sin preocuparse de aquellos que se quedaban al acecho de los carnívoros que los seguían de cerca.

39

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

A Aladar no le pareció que dejaran abandonado a los indefensos y se enfrentó al jefe de la manada. Éste, muy enfadado, lo atacó, dejándolo muy herido, y le dijo: No te metas en los asuntos que no te competen, es mi manada, yo soy el jefe y no tú.

Así fue que se quedaron solos, Aladar y su familia, acompañada de tres viejitas dinosaurios. Aladar quiso dejarlos, pero su mamá mona le dijo: hijo dónde está el valor de la solidaridad que te hemos enseñado. Él reflexionó y se quedaron rezagados en el camino.

Pronto cayó la tormenta y ya no podían caminar más. Entonces buscaron refugio en una cueva. Estando allí se apareció un dinosaurio que también había sido abandonado por estar herido. Aladar ayudó al compañero herido y la mamá mona curó sus heridas.

Cuando la tormenta ya estaba por cesar, apareció dos carnotauros y los atacó. Ellos se defendieron como pudieron. Aladar atacó, defendió a sus amigos, pero el carnotauros era más fuerte y Aladar estaba siendo vencido. Entonces vino el amigo herido, hizo caer unos bloques de piedra encima del carnotauros y murió uno de ellos, al igual que el amigo herido, salvándole la vida de Aladar y de los demás dinosaurios. Y el otro carnotauros escapó.

Aladar y sus amigos, con mucho esfuerzo salieron de la cueva por un agujero empujando todas las rocas que lo cubrían. ¡Oh! Sorpresa, habían llegado a un nuevo nidal.

Felices los dinosaurios porque allí había agua y vegetación.

Aladar no estaba tranquilo ya que la manada no encontraría la entrada. Así es que fue en busca de ellos para ayudarlos encontrar el camino.

Así llegó Aladar hasta donde la manada y les avisó para seguir el camino que él y los otros dinosaurios encontraron para llegar al nidal. Pero como siempre el jefe de la manada se opone y no permite seguir a Aladar. Aladar insiste, mas el jefe de la manada pelea con él. Pelean golpe tras golpe y cuando estaba siendo ya vencido Aladar, la hermana del jefe lo defiende. Así Aladar y los demás dinosaurios se van en busca del nidal. Pero el peligro no había pasado ya que el carnotauros, estaba cerca. Aladar dice a la manada: si todos permanecemos juntos podemos defendernos, ya verán. Vengan amigos. Así los dinosaurios rugieron juntos, asustando al carnotauros.

Mientras ellos huyen, el carnotauros vio al jefe de la manada solo, fue a su encuentro y lo atacó. Al percatarse, la hermana fue a ayudarlo, Aladar la sigue. Pelean los tres, venciendo al carnotauros. El jefe de la manada también muere. Aladar y Nira se van tristes al nidal.

Finalmente, viven felices y contentos. Años más tarde tienen sus propios aladarcitos y los demás dinosaurios también tienen sus bebés. Los monitos siguen siendo la familia de Aladar y todos muy contentos viven en el nidal.

Autor: Ángel Alberto Díaz Chacca.

Estudiante del 4° “D” de primaria.

40

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

PEDRITO Cuento ganador del premio Akchiy (Luz), Concurso de Cuentos convocado a nivel Nacional por el grupo Distriluz.

Julio del 2008.

Evaristo caminaba muy sereno, envuelto en una calma preocupante para el que lo viera esa noche. Sus ojos llorosos estaban fijos en el cajoncito que llevaba abrazado, apretándolo por ratos contra su pecho. Ronald, su hermano menor, acompañaba esa serenidad con una respiración y un andar acompasados pero muy tristes.

Eran las siete de la noche y la lluvia se hacía cada vez más fuerte; sus gotas eran grandes. No había nadie en el camino.

Ambos marchaban demasiado tristes, con el corazón atrapado en un dolor interminable, uno de esos dolores que a uno le da cuando se siente poco menos que muerto.

Iba a ser su primer hijo. Él lo amaba con todo lo que era; lo había estado esperando desde mucho antes de que se enterara que sería papá, pero no resultó así.

-

Todos debemos morir, Dios dice eso, Él sabe cuándo nos toca a cada uno… intentó consolar, temblando, el hermano menor.

-

Pero él no, él ni siquiera había comenzado su vida - rompió su serenidad, giró todo su cuerpo y desde la falda del cerro, por donde va el camino hacia el cementerio, Evaristo fijó su mirada en la capilla del pueblo -. A veces pienso que Dios es mentira, que no existe.

-

No digas eso, Dios nos está escuchando… Él está en todas partes y también está aquí, ahora.

-

Mentira, Dios no escucha. Yo le estuve rezando con tanta fe por mi mujer y por mi hijo, y Él, ¿qué ha hecho?, ¿ha escuchado acaso? - su voz quebrada se ahogaba en el llanto que luchaba por salir, rabioso. ***

Vicenta era la hija mayor de don Santos Huanasca. Con Evaristo se conocían desde que eran niños. Ya todo el pueblo sabía o suponía que éstos dos terminarían juntos ni bien tuvieran edad.

Así fue. Una noche, en el campo y bajo las estrellas, descubrieron la dulzura del amor natural y primerizo.

Al domingo siguiente, ya toda la familia de Evaristo, con el padre de él a la cabeza, entraba a casa de don Santos para pedir en matrimonio a la hija mayor de éste. Allí, ambos 41

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

recibirían todos los consejos que nacían de las experiencias de los mayores de cada familia.

Allí terminarían de formarse y estarían listos para enfrentar con éxito la vida.

Todavía no habían pasado más de siete meses, y su primer hijo estaba pronto a nacer. Un nuevo ser maravilloso que para ambos completaría sus vidas de toda la dicha posible en este mundo.

Pero tuvo que pasar; Vicenta cayó enferma repentinamente y nadie pudo hacer nada.

Ni médicos ni curanderos, ni los layk‟as (brujos) más famosos de los pueblos cercanos, ni de los más alejados. “Ni siquiera Dios pudo”. *** Los dos hermanos ya estaban de vuelta en el pueblo; traían las manos barrosas, adoloridas. Ronald tomó el desvío y fue a casa de sus padres. Evaristo se quedó en la suya.

Al entrar al cuarto, Vicenta ya había despertado. Al ver a su marido tan triste, tan deshecho y desesperanzado, prefirió guardarse el llanto para no hacer de sus dolores más grandes aún.

Viéndolo y viéndolo se quedó largo rato, él no se atrevía a devolverle la mirada, estaba agachado, con los ojos rojos e hinchados, con las manos llenas del barro que se iba secando de a pocos, con el corazón atravesado por todos los dolores de este mundo.

Vicenta, pensando en qué decirle para reanimarlo y reanimarse ella misma, recordó lo que un día le contó su abuelita Gregoria, cuando ella era niña todavía. *** “Hijita, sabías que tú casi te mueres cuando estabas por nacer. Sí, hijita, hoy no hubieras estado con nosotros si yo no te salvaba mientras nacías. Ya Dios me había dicho que no llegarías, pero yo no quise que fuera así. Yo llegué a ofrecerle mi vida a nuestro Dios, y aun se la di por un momento, todo con tal de que no tocara la tuya. Mientras tú estabas naciendo en el cuarto, yo estaba de rodillas en el patio. Mamá Donata atendía a tu madre en el parto, y también las demás vecinas estaban en el corredor de la casa, esperando en qué ayudar. Ellas me dicen que mientras yo le pedía a nuestro Dios que salvara tu vida, me caí, pero yo sé que no fue así solamente. Yo sentí cómo Él me tomó de los pelos cuando le dije que tomara mi vida en vez de la tuya. „Quién crees que soy‟, me dijo, „soy yo, tu Dios, y te he estado escuchando. Sé que Vicenta es tu primera nieta, pero ya está decidido.‟ No sé por qué, pero cuando dijo Vicenta yo sabía que eras tú, aunque nadie había pensado en tu nombre hasta ese momento, pero nuestro Dios ya lo sabía. Él lo sabe todo. Con su voz de trueno, él me dijo que era necesario que pasara así como ya estaba dispuesto. „Necesito del llanto de niños amados en esta tierra para que el mundo no se muera. Necesito de estos angelitos.‟, me dijo. „Pero Taitito (Padrecito)‟, le contesté, „mejor toma mi vida, que aunque no de mucho, de algo te servirá‟. Y así, tanto yo le rogué y tanto mismito le lloré a nuestro Dios, que al final a él también lo hice llorar, y muy triste me dijo que tu llanto nos hubiera salvado bastante, porque antes de nacer y de conocerte, ya te amábamos tanto que hasta ofrecíamos nuestras vidas por ti. Luego me desperté y casi no recordaba nada. Yo no 42

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

le entendí muy bien hasta hoy cuando me dijo eso de que tu llanto nos hubiera salvado bastante. Pero, sabes hijita, hay muchas cosas que hasta hoy recién entiendo. Mucha gente dice que nuestro mundo se está quedando sin agua y que pronto nos moriremos de sed.

Todos nos moriremos porque ya no habrá más agua. Yo no sé por qué pero sé algo que nadie más sabe, tal vez Dios me lo dijo antes de que me regresara. Lo que sé es que todo el agua de este mundo viene del llanto de los angelitos que se han muerto antes de nacer o mientras nacían, de los seres más puros que existen en esta y en la otra vida. El agua que tomamos nosotros son las lágrimas de los angelitos que son amados y son llorados en cualquier parte del mundo cuando ellos mueren. Pero el agua salada, esa agua que nadie puede tomar, es de esos pobres angelitos a los que sus madres mismas les quitaron la vida.

De esos pobres a los que sus madres, si es que así se les puede llamar, y que Dios me perdone por juzgar, los abortaron; es decir, los mataron y los botaron de sus vientres. Aquí en nuestro pueblo no se mira eso, pero dicen que en Lima hay muchas mujeres que hacen eso. Por eso será que su bastante agua que tienen en el mar, es salada. Ya te darás cuenta, hijita, que no son muchos los niñitos que se mueren cuando se les quiere tanto; mientras que aquellos angelitos que lloran el agua salada, son incontables, miles y miles. Por eso mismo, las aguas que se pueden tomar son muy pocas, y por el descuido de los hombres y porque desperdiciamos bastante en nada, este mundo ya se está secando. Ahora sí que le entiendo a nuestro Dios cuando él me dijo que tú nos habrías salvado bastante, y creo que nos salvarás todavía, porque aunque el Señor no te llevó aquella vez, Él no me prometió nada. No sé por qué pero siempre que recuerdo estas cosas me duele fuerte el pecho, como si mi corazón se angustiara por algo malo que te puede pasar. Pero vamos a rezarle para que el Señor nos ampare y para que te cuide mucho, hijita.” *** Vicenta también entendía por fin todo lo que le estaba pasando. Aunque Dios no se la había llevado en ese entonces, ahora sí se llevaba una parte de ella, una parte muy valiosa. Si aquella vez que escuchó a su abuelita no había entendido algo, ahora ya lo sabía todo. Y para calmar el dolor de su amado Evaristo, se lo contó también. Éste, luego de escuchar atentamente y un poco confundido, con la esperanza y el consuelo llenándole el corazón, salió al patio y poniéndose de rodillas, empezó su rezo pidiendo perdón.

“Diosito lindo y todopoderoso, Papalindo del cielo, perdona a mi corazón torpe. Mi vida tampoco te servía ¿verdad? Amo a mi mujer y a mi hijo y daría mi vida por ellos, y lo sabes tú más que nadie. Cuida mucho a mi wawacha (niñito) que está contigo y dile que se porte bien. Cuéntale cuánto le queremos y que lo vamos a extrañar siempre. De tu bondad, mándanos otros angelitos igual de hermosos que mi Pedrito, tal vez, Diosito, tú puedas escoger de los que sufren mucho y lloran agua salada. Tú sabes que aquí lo vamos a querer mucho. Taitito (Padrecito) lindo, dile al Pedrito que su mamá y yo estaremos pendientes… que estará con nosotros siempre, siempre… Amén...”

Terminando su rezo, Evaristo se puso de pie y con la bocamanga de su chompa enjugó las lágrimas de sus ojos que brillaban con una luz extraña, confusa. A paso rápido regresó a donde estaba Vicenta, la miró, la abrazó y la quiso más que nunca en toda su vida.

43

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

La volvió a mirar y la abrazó muy fuerte contra su pecho, como al cajoncito donde estaba Pedrito. Así se quedaron ambos; abrazados y agradeciendo esa posibilidad de vida que tenían, esa esperanza que a los dos los había reanimado. Sabiendo en silencio que su Pedrito estaba viéndolos. „Gracias Señor‟, dijeron a una voz, y se quedaron profundamente dormidos.

FIN

Autor: Prof. Alex R. Espinal López.

Docente del Área de Comunicación.

44

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

AL AMOR DE MI VIDA Tenía que pasar justo ahora. Pero si hace dos horas estaba feliz, sin pensar ni sentir esto que ahora me ha puesto tan triste.

Hacía mucho que no era consciente de los latidos tan enérgicos de mi corazón, de lo sensibles que son mis ojos ante la tristeza que causa el amor. El amor. Yo le tengo mucho miedo y mucho respeto desde hace ya buen tiempo. Creo que desde aquella noche fría en que se fue de mi vida.

Era un sueño increíble. ¡Dios, qué hermosa es!, pensaba cada vez que me quedaba atrapado en sus ojos luego de darle un beso. Y desde la primera vez que eso pasó, no paré de ingeniármelas para lograr que ella se quedara en mi vida todo el tiempo del mundo, hasta que ya no estemos y aun más; ochenta, cien, mil años… yo no sé.

Haciendo cuentas, cuánto tiempo me tomó para estar perdidamente enamorado de ella. Recuerdo la primera carta que me llegó y lo que decía en ella, me dejó muy interesado por saber de quién se trataba; y una vez que la vi, me tomó apenas un segundo, un solo segundo y ya estaba perdido de amor por ella, muriéndome de amor, tan feliz y tan radiante, con esa dulzura que le causa este sentimiento maravilloso al corazón que lo siente.

Pero ella se fue aquella noche, la noche más triste que haya existido desde que el mundo se creó. Se fue y a cada rato me pregunto qué tiempo va a tomarme olvidarla; los mil años no van a ser suficientes para lograr algo tan imposible como eso.

Recuerdo y vuelvo a sentir sus labios dulces y frescos, eternamente cautivadores; que le daban una luz especial a mi vida, a cada una de mis mañanas. Eran los motivos de mi corazón para hacer cosas grandes, increíbles. Incluso ahora mismo, me dan mucha inspiración para seguir el camino que llevo. Me hacen amar lo que hago.

Aquella noche, repentinamente me llevó a un lado de la calle mientras caminábamos. En todo el camino había estado distinta de otras veces y mi corazón también, algo presentía; pero estando con ella yo siempre soñaba con lo mejor del mundo, no pensé en un presentimiento malo. Y así nomás, llevándome a un lado de la calle me dijo que hoy se acababa todo, que no hiciera preguntas y que ella me agradecía mucho por toda la felicidad que sintió a mi lado. Que por favor no la busque ni la llame, y que me fuera tranquilo a casa. No me dejó decirle nada, me dio un beso mojado en lágrimas, y se fue.

Me quedé largo rato allí, plantado a un lado de la calle; sentí su beso y su lágrima.

Sentí mis lágrimas y el nudo que me dolía muy fuerte en la garganta.

Han pasado casi dos años desde aquella noche. Yo me vine a trabajar aquí, lejos de mi lugar. Aprendí a encontrarle gusto y amor a mi trabajo y soy feliz. Desde hace un mes hasta hoy, fui feliz. Las cosas habían mejorado en algo, habían mejorado mucho.

45

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

Y justo hace dos horas venía de disfrutar mi trabajo, muy motivado, con muchas ganas de escribir un cuento para mis alumnos. Me senté a la máquina y me quedé pensando, buscando inspiración. Y como no se me ocurría nada, dejé la máquina y prendí el televisor, estaban pasando una película, “Paulie”; Misha le confesaba al perico que la chica perfecta para él es la que tiene flores en el pelo y libros en la mesa. “Flores en el pelo y libros en la mesa”. Todo el mundo de recuerdos se me vino encima. Y ahora estoy aquí, triste nuevamente.

Dormir me calma, pero no puedo. Y para colmo, cuando estoy por lograrlo, alguien llama a la puerta. Pero quién puede ser, me pregunto, si aquí casi nadie me conoce. Abro la puerta y ahí está. Ahí está después de dos años. Quién eres, le pregunto, casi llorando.

Perdóname, me dice, perdóname por favor, no sabes lo que he sufrido por ti, cuánto he llorado por ti, perdóname. Está llorando y me abraza. Yo no sé qué sentir. También la abrazo. También yo he llorado y he sufrido mucho, pienso. La abrazo más fuerte. Puedes entrar, le digo. Le ayudo a cargar su maleta pero sin dejar de abrazarla. Entre sollozos me explica que me buscó al día siguiente de haberse ido, que no me encontró, que en mi casa le dijeron que me fui de viaje muy lejos y que cuando preguntó a dónde, solo le repitieron, muy lejos. Me dice que aquella noche estaba muy asustada del amor que sentía su corazón, que nunca lo había sentido así, que le daba mucho miedo que algún día se acabara la historia y que antes de que eso pasara prefería anticipar el momento. Soy una tonta, me dice, por haber pensado así y por haberte dejado. Pero te he buscado tanto desde ese momento hasta que por fin hoy te encuentro. Ya no digas más, sólo abrázame, le digo mientras le beso los ojos. Nos quedamos en silencio. Eres el amor de mi vida, decimos a una voz, atropellando las palabras, como queriéndonos ganar para decirlo primero; nos sonrojamos.

Le acaricio las mejillas y luego de dos años vuelvo a sentir sus labios dulces y frescos, eternamente cautivadores. Me quedo atrapado en sus ojos, ahora más brillantes. ¡Dios!, ¡qué hermosa eres!, le digo.

FIN

Autor: Prof. Alex R. Espinal López.

Docente del Área de Comunicación.

46

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

ARTÍCULOS DE OPINIÓN

47

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

LA LECTURA vs. LOS ESCOLARES

No he podido evitar percibir un gran desánimo en los escolares al tomar un libro, solo lo leen un momento sin poder evitar dibujar en sus rostros señales de aburrimiento, luego lo dejan a un lado y evaden cualquier posible acercamiento con la lectura.

Dedicarle unos momentos a un libro o una obra literaria no es un martirio, es una forma de enriquecer el vocabulario, de aumentar nuestra concentración y volvernos personas con conocimientos suficientes para ser más críticos acerca de lo que pasa en nuestro entorno y si aún no es suficiente, en cada obra hay una historia enormemente interesante que desarrolla nuestra imaginación, transmitiéndonos sentimientos a través de las palabras.

Sin duda un libro es una gran fuente de conocimientos que está siendo dejada de lado por los estudiantes, con seguridad algo tiene que ver el tan mentado e indispensable televisor donde se matan horas y horas viendo un programa u otro, aunque leer un libro no se puede obligar, es recomendable que apaguen su televisor, abran un libro y traten de leerlo poco a poco para que así le tomen un mayor apego a la lectura.

Cuando un escolar se niega a leer un libro se niega al conocimiento y al desarrollo de habilidades que se van dando con la lectura, así que si tienes un libro guardado y olvidado en tu hogar, no tardes en abrirlo y deleitarte con las historias que contiene, también ofrécelo o recomiéndalo a alguien que a tu parecer lo necesite, si tú lo lees y te gusta leer, por favor, haz lo posible por incentivar la lectura ya que esta se va perdiendo en el olvido.

Autor: Félix Moisés Neira Verástegui.

Estudiante del 3° “B” de secundaria.

48

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

CUANDO NOS DAMOS CUENTA

Cuando entré a la escolta lo primero que pensé fue: "será mucho esfuerzo", pero luego me di cuenta que lo más importante para nosotras es cuidar, escoltar la bandera de nuestro país, y además de eso, formar una nueva familia, con los brigadieres y nosotras. Siendo escolta hemos pasado muy buenos momentos, hemos tenido nuestras altas y también nuestras bajas, hemos aprendido que nuestros errores se han inventado para que los enfrentemos y los superemos, que de ellos debemos aprender, porque eso es lo más importante.

Recuerdo que el primer día éramos muchos, luego, en cada ensayo la gente se iba saliendo, como si no lo hubieran sentido desde el primer día, como si todos no hubiéramos comprendido plenamente el mensaje de comprometernos en cuidar y respetar nuestra bandera. Estos días no se olvidan, definitivamente, estarán cada minuto con nosotros.

Autora: Guadalupe Calderón Cooban.

Estudiante del 5° “C” de secundaria.

49

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

HAY MAYOR ALEGRÍA EN DAR QUE EN RECIBIR Considerando que el inglés es un idioma elemental en nuestros días y no todos pueden acceder al aprendizaje del mismo por motivos económicos, sociales o culturales, a finales del año pasado se invitó a tres profesoras del Área de inglés: Marylin Saldaña, Susana Calcina y Diana Saavedra, para hacer posible la realización de un proyecto soñado por años: Enseñar el inglés a niños de 3º y 4º de primaria, con la ayuda de alumnos de 3º, 4º y 5º de secundaria. ¿Podría hacerse realidad en el año 2011?

Nos reunimos y vimos que esto implicaría poner mayor esfuerzo, más tiempo para coordinar, capacitar y enseñar; menos tiempo con nuestras familias, mucho espíritu de entrega y trabajo en equipo para sobrellevar las dificultades que pudieran presentarse en el transcurso del desarrollo del proyecto, entusiasmo a montones para transmitirlo a nuestros alumnos colaboradores y a nosotras mismas, y además de eso, un pequeño detalle: este trabajo no sería remunerado.

Sin pensarlo más, las tres dijimos ¡Sí!

Al empezar este año, invitamos a nuestros alumnos de 3º, 4º y 5º de secundaria a compartir sus conocimientos de inglés, amor y tiempo, con sus compañeros del nivel primario, de 3º y 4º, que no gozan de dicho beneficio.

Buscamos con todo esto, fortalecer la autoestima, lazos de solidaridad, amistad y compañerismo entre nuestros alumnos de secundaria y primaria.

Con mucha alegría e ilusión, treinta y seis alumnos de secundaria iniciaron este proyecto. Durante el desarrollo del mismo, el espíritu que nos movía se fue contagiando, tanto así, que al término de este año, contábamos con el apoyo de cincuenta y cuatro estudiantes de 3°, 4° y 5°, trabajando hasta el final.

Nuestras clases de inglés ya acabaron y la clausura fue este martes 22 de noviembre y lo que sentimos, profesores y alumnos, es 50

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

que más que dar, recibimos un montón de nuestros pequeños; y que esto fue posible gracias a que “siempre hubo mucho que dar porque el corazón está lleno de amor”.

Haber vivido esta experiencia me hace decir convencida, que todos los que participamos de este proyecto (alumnos, monitores y profesores), nos vamos con las ganas de volver al próximo año. Sólo me queda agradecer a Dios por habernos dado la oportunidad de gozar de su inmenso amor a través de este trabajo con los niños.

Bueno chicos, es tiempo de decir ¡Adiós!

It`s time to say good bye!

Autora: Prof. Diana Lidia Saavedra Hidalgo.

Docente del Área de C. T. A. e Inglés.

51

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

SOBRE LO BUENO QUE SE HACE EN NUESTRA REGIÓN

Agradezco a la Región Callao el haber propiciado la inquietud de dedicar parte de nuestra labor de docentes, a promocionar entre nuestros alumnos la cultura de buscar ser mejores, pensando en cómo ayudar a los otros, en especial, a los que más lo necesitan.

Gracias a ello también pudimos darnos cuenta de que entre nuestros chicos que hay un inmenso potencial de riquezas en habilidades y deseos de trabajar en la construcción de una sociedad mejor: …“más limpia y justa” (canción “Iglesia Joven”).

Nuestra Región ha estado mucho tiempo etiquetada por todo lo malo que aquí ocurre y se ha dejado de lado al ciudadano que día a día quiere lo mejor para su familia y para su sociedad; además, está dispuesto a comprometerse en ello. Entre nuestros jóvenes hay muchos que piensan y sienten así; lo que hemos hecho es canalizar esos esfuerzos de manera que se lleven a cabo proyectos que no solamente favorezcan a los que los realizan, sino principalmente a esos pobladores que no cuentan muchas veces ni con el deseo ni las fuerzas para trabajar por su propia mejora.

Me siento muy orgulloso de ser un docente chalaco que trabaja en su Región y que cuenta con la iniciativa y apoyo de sus autoridades.

Autor: Prof. Néstor Jiménez López Docente del Área de Arte y P. F. y RR. HH.

52

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

RESEÑAS

53

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

BREVE RESEÑA HISTÓRICA DE NUESTRA FUNDACIÓN En la historia de Mi Perú, un pilar muy importante que ha contribuido al desarrollo del pueblo, es la presencia del Colegio FE Y ALEGRÍA Nº33, cuyas actividades se inician a los cinco meses de fundado el pueblo, concretamente en el mes de abril de 1986. En la parroquia se inicia la tarea de la matrícula de los alumnos. No existía local escolar, pero sí la firme voluntad de construir escuela; los padres de familia de los alumnos matriculados, con la dirección de Madre Josefina, en el memorable DOMINGO DE RAMOS de ese año, con palos y esteras construyeron en un solo día todo el cercado del centro educativo que hoy conocemos.

En el DOMINGO DE PASCUA, nuevamente padres de familia y educadores con mucho ahínco, dieron forma a los espacios que serían utilizados como Dirección, Aula taller, Casa Guardianía y Servicios higiénicos.

La dinámica empleada por Fe y Alegría desde el inicio de sus actividades en Mi Perú, marcó una especie de compromiso escuela-familia; las tareas dominicales, si bien requerían de mucho esfuerzo de los padres de familia, las jornadas se compartían con alegría y solidaridad. Se cultivaban nuevos vínculos de amistad y se alimentaba la esperanza de tener una escuela bonita.

En 1985, un grupo de pobladores provenientes del Norte, llegaban a un arenal inmenso.

Eran los comienzos de un asentamiento humano. El Arzobispo del Callao, Monseñor Durand, pidió a la congregación de las Hermanas del Niño Jesús la posibilidad de comenzar una escuela; ellas, a su vez, solicitaron a Fe y Alegría, si podían asumir esta demanda del Obispo del Callao y se ofrecieron para llevar la escuela. La escuela comenzó como todas, primero conversaron con los dirigentes y luego reuniones con los pobladores, explicándoles pacientemente cómo era una escuela de Fe y Alegría, y escuchando sus expectativas. En la tercera reunión se firmó el acta de fundación y se nombró la primera directiva.

Las clases comenzaron en abril de 1986, a cargo de tres Hermanas Religiosas, las mismas que procedían de nacionalidades distintas; Madre Patricia que era irlandesa, Madre Leonor que es peruana, y Madre Josefina que es española, y junto con ellas, un valiosísimo equipo de profesores. Las tres Hermanas, muy diferentes y complementarias, llenas de entusiasmo, venían de haber trabajado en el pueblo joven de Collique, del Distrito de Comas.

54

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

Seis meses después de haber empezado el año escolar, Madre Patricia fallece, exactamente el 3 de octubre del año de nuestra fundación, en un lamentable accidente automovilístico, ocurrido en la panamericana Norte.

Fue muy duro para la pequeña comunidad religiosa y para la comunidad educativa. En esta ocasión de dolor estuvo presente el apoyo y generosidad de todos los profesores que mitigaron en parte, las penas de las hermanas religiosas.

Quienes conocimos a Madre Patricia, la recordamos por su dinamismo, entrega y dedicación a los jóvenes; y como un recuerdo permanente de su gestión, existe la Capilla y la Sala de Catequesis en el Centro Educativo, cuya construcción gestionó independientemente de lo que significaba el plan de obras de la oficina central. Su fugaz presencia en Mi Perú y la obra realizada, es como el grano de trigo enterrado en la tierra fértil que ha dado buen fruto: es el Colegio Fe y Alegría Nº33, que con orgullo tiene el pueblo de Mi Perú.

En el Nivel de Educación Primaria, las actividades educativas propiamente dichas se iniciaron con doce secciones, con 352 alumnos, que estuvieron a cargo de las profesoras María Estela Rosas, Diana Saavedra Hidalgo, Bertha Amésquita Cervantes, Maritza Cerrón Izarra, Mariela Livia Chumpitazi, Amelia Velásquez Bustinza, Roxana Mundaca Bonilla, Carmen Ochoa Rúa y María Luisa Quispe.

En el Nivel de Educación Secundaria, se iniciaron las clases con 89 alumnos, en 3 secciones, siendo sus profesores Eulalia Araujo Serrano, Néstor Jiménez López, Jorge Silva Santisteban Chero, Carmen Figueroa Casanova, Leonor Atausinchi Cabrera.

Del mismo modo se inició la línea de formación laboral con dos talleres: Carpintería, dirigido por el vecino: Sr. Julio De La Cruz, y Costura, a cargo de la Madre Leonor Atausinchi.

Recuerdo como si hubiera sido apenas unos días aquel lunes de abril en que se iniciaba nuestro primer día de clases. ¡Qué gran felicidad!

Autor: Pedro Astudillo Costilla Responsable mantenimiento y sonido.

55

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

HISTORIA DEL NACIMIENTO DE UNA ESCOLTA La Escolta es un grupo de chicos que se comprometen a representar a su colegio, es vivir una experiencia distinta e inolvidable.

Recuerdo que todo empezó un día de clases en el que nuestro profesor Alex, nos invitó a formar parte de una importante delegación. Los primeros éramos los alumnos de la promoción. Nos citó para reunirnos un sábado, y ese día nos dijo lo que era y lo trabajoso que sería sacar adelante el ambicioso proyecto de que La Escolta sea un grupo de chicos comprometidos en sacar adelante esta delegación y hacerla permanente a lo largo de los años siguientes. Era el primer día, éramos muchos chicos y chicas que éramos Gabriela, Liz, Lady, Ángela, Cristina, Carolina, Karina, Melisa, Guadalupe, Anthony Cruz, Anthony Jiménez, Jair, Álvaro, Jorge, Sandro y yo.

Todos estuvimos sorprendidos pues creíamos que el pertenecer a una Escolta era solo marchar, por ello y otros motivos muchos alumnos dejaron asistir, con el tiempo nos dimos cuenta que era mucho más que eso, era comprometerse a representar a nuestro colegio con orgullo, cada día y siempre, amar y proteger a nuestra bandera, escoltarla a diferentes actos oficiales.

Nuestra primera abanderada sugerida fue Gabriela, por lo que era y hacía en los primeros ensayos. Pero pasaron un par de semanas y ella dejó de asistir. Entonces, el nuevo abanderado fue Álvaro, pues sabía qué era pertenecer a una escolta, pues ya había estado en una, en otro colegio.

Llegó el día de nuestra primera presentación oficial, teníamos que ir a representar a nuestro colegio por Fiestas Patrias, y Álvaro nunca llegó. Creo que se sintió incómodo porque éramos todas chicas en la escolta y él era el único varón. Ante esto, el profesor Alex nos preguntó quién se creía capaz de llevar la bandera, una a una, o mejor aún dijo, quién cree cada una que debería asumir el mando de abanderada. Karina dijo que ella lo podía hacer, y todas estuvimos de acuerdo. Desde ese día Karina fue elegida nuestra abanderada y formó la Escolta Oficial junto con Guadalupe, Ángela, Cristina, Lizzie, Melisa y Carolina.

56

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

Así pasaron unos meses y entonces el profesor decidió invitar a alumnos de 4º para que se preparen para conformar la escolta del año siguiente.

Por ese entonces, a sugerencia del Profesor Daniel, Liliana Mitma, la alcaldesa de nuestro colegio, nos dijo que si podíamos dirigir la formación los días lunes y viernes.

Aceptamos muy entusiasmados y desde aquel día, tuvimos muchas presentaciones dentro de nuestro colegio, las primeras veces con algunos errores pero corrigiéndolos cada día, conscientes de que cada día se puede ser mejor. Por su parte, los alumnos de 4º, al mando de Lady, nuestra brigadier general, se encargaron de cooperar con la disciplina de todos nuestros compañeros, en cada formación y ceremonia oficial.

Y ahora que estamos casi para finalizar el año, yo soy nueva insignia de la escolta, y Cristina pasó a mi puesto. También se están integrando alumnos de 3º para que así siga cada año la escolta de nuestro colegio, hasta siempre. Ahora solo esperamos la entrega de puestos y mandos, que los de la promoción otorgarán a los alumnos de 4º en nuestro último día como alumnos de este gran colegio, el día de la clausura de este año escolar. A todos, gracias por tan maravillosa experiencia.

Autora: Lizzie Massiel Aguilar Lara Estudiante del 5° “C” de secundaria.

57

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

ESTO SÍ ES INGLÉS PARA TODOS Nadie nació con capacidad para enseñar, pero los niños te dan la fuerza y hacen que te sientas que sabes y te conviertes en una “maestra profesional del inglés”, y esto es algo ¡tan lindo!

En todos éstos meses que trabajé, fue bonito llegar y decir “contigo estaré cada tarde”, y finalmente ser recompensada con un ¡gracias miss!

No sé cómo explicar lo que siento, pero fue muy reconfortante llegar al colegio y ver a todas éstas estrellitas que quieren brillar y ser unas “super stars”. Percibí que recibí más de lo que di.

Aquí aprendí a quererlos, sin darme cuenta, y hoy, los llevo en mi corazón, volviéndose no sólo parte de mí, sino que también nosotros nos volvimos parte de ellos, pues somos, como ellos dicen… sus “teachers”.

Comenzaba con un “hola miss” y una oración en inglés, luego proseguía con la clase, sabiendo que eran traviesos pero hermosos ya que por dentro tenían un alma pura.

Con el transcurso de los días los pequeños fueron alentándome a dar el doble de lo mejor de mí, por lo que estoy muy agradecida.

Chicos, ¡Me cambiaron la vida! ¡Gracias! ¡Gracias a mis profesoras Diana y Marylin!, a miss Susana, a las subdirectoras, de primaria Ivette Livia, y de secundaria Maritza Ágape, y a nuestra Directora, Hna. Mónica del Águila, por habernos dado la oportunidad de compartir lo que somos.

Sugiero a todos que el próximo año se nos convoque nuevamente para continuar con este proyecto.

Thanks¡

Autora: Katherine Valeria Casas Pérez.

Estudiante del 4° “B” de secundaria.

58

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

CONMEMORACIÓN DE LOS 100 AÑOS DEL NACIMIENTO DE ARGUEDAS Perú es un país multicultural en donde los derechos de la minoría, de los grupos étnicos, son reconocidos; aunque la lucha contra los prejuicios permanezca vivo.

Las actividades realizadas en nuestra institución educativa Fe y Alegría Nro. 33, en la que se involucró a toda la comunidad educativa, han sido muy beneficiosas en el proceso de aprendizaje de nuestros estudiantes para que puedan identificarse como verdaderos peruanos y sepan valorar sus costumbres, danzas, cantos, platos típicos de los distintos departamentos de nuestra patria. Y lo más importante, saber reconocer los aportes de muchos peruanos ilustres que dejaron sus obras magníficas en diferentes campos, como Arguedas en la literatura, Hipólito Unanue en medicina, Julio C. Tello en la antropología, etc. Como ellos muchos otros más.

Por los 100años del nacimiento de José María Arguedas, el área de Comunicación integrando a otras áreas de nuestro colegio, organizaron actividades muy resaltantes en las que los alumnos han tenido el protagonismo en la organización y en la ejecución.

Bien sabemos que la literatura de nuestro país ha estado marcada por muchos escritores que reflejaron la realidad, César Vallejo, Ciro Alegría, entre otros; sin embargo, la literatura indigenista y de la serranía, no tomó mucho importancia si no con la llegada José María Arguedas. Junto con Manuel Scorza, Arguedas expuso el mundo indígena desde una visión interna, desde alguien que vivió en carne propia las tradiciones locales, y no como un visitante más.

El Perú es un país donde la gente de culturas diferentes, hemos aprendido a vivir juntos, como un país de todas las sangres, de todas las razas, indias, negras y europeas.

Como lo ha descrito el grandioso escritor peruano José María Arguedas. Gracias por hacernos vivir este año, estos años… esta vida.

Canto quechua: Anilloy, anilloy; relacionado a algunos pasajes de la obra Warma kuyay, interpretada por la prof. Dionicia y sus alumnas de la promoción 2011.

Autora: Prof. Dionicia Landa Quispe.

Docente del Área de C.T.A. 59

Revista Institucional La voz del corazón – diciembre, 2011.

Colegio Fe y Alegría Nro. 33

GRACIAS Es todo un honor poder decir gracias ante una misión cumplida. Provoca una alegría inmensa, nos llena de una fe inquebrantable, dejar de precedente para nuestro querido colegio, la primera Revista Institucional publicada en estos ya veintiséis años de labor formativa.

Educar personas que piensan, aman y trabajan. Esa es nuestra consigna permanente, que nos alienta y nos orienta. Y es por eso mismo que casi en su totalidad, los textos diversos que contiene la presente revista, son de la autoría de nuestros alumnos, a cada uno de ellos, muchísimas gracias.

Ingeniada en un aula de clases luego de haber trabajado el proceso creativo de cuentos y poemas, para darle un alto sentido de trascendencia a lo que escriben nuestros chicos. Y una vez soñada, solo nos hacía falta la decisión de trabajar en hacerla realidad, y eso fue lo que hicimos; Así nació nuestra primera revista.

Hojeando página por página encontraremos poemas creados por alumnos y una destacada ex-alumna, cuentos soñados, recreados, inventados, también por alumnos y profesores, al igual que los artículos de opinión y reseñas que nos hablan de lo que pensamos, sentimos, recordamos de toda nuestra vida como colegio, como personas, como grandes equipos, gracias a los que se atrevieron a compartir.

Cuanto más grande es el obstáculo… mayor es la gloria de haberlo superado. Éste es el mensaje final que les dejamos los responsables de que tengan qué leer, sobre lo que somos y lo que hacemos, cada día.

La comisión.

60