Angol, al Capitán Juan Alvarez de Luna a pedir dichos recursos a la Real Audiencia que gobernaba provisoriamen'ce al P* rú. Al mismo tiempo escribió al monarca de España para darle cuenta del estado de la guerra y para reclamar el envio de una nueva división de refuerzo. "Si me los envían para diciembre que viene, y un navío, al aiío siguiente que lleguen, lo e s p r a (pacificado) ; y cuanto más se dilate esta provisión y más limitadamente se me enviare tanto más se alargará esta guerra.. ." (12). En el verano siguiente y sin aguardar los refuerzos que había pedido a España y al Perú, comenzó a poner en ejecución su plan de campaña. En el lugar llamado Millapoa construyó dos fuertes, uno en cada orilla del Bío-Bío, que den~minó de la Trinidad y del Espíritu Santo y, ademá- un tercero en Purén destinado a interceptar las comunicaciones entre los mapuches y los picunches. Como estos fuertes no cumplieron su objetivo, Sotomayor se resolvió a pasar el invierno en esos lugares. Los españoles se vieron forzados a sostener frecuentes combatrs que le producían duras fatigas y los mismos riesgos de épocas anteriores. Los indios, lejos de someterse, hostilizaban a toda hora a sus defensores y ello no dejaría de producir, tarde o temprano, el aniquilamiento de las fuerzas de estos Últimos. A mediados de 1585, cuando Sotomayor esperaba los auxilios que había reclamado, llegó a Valparaíso el San Juan de Antona, procedente del Perú, con carga surtida para los mercaderes Y pólvora y fierro para el Gobernador. La explosióa easual de una botija de pólvora hizo volar el buque con toda su tripulación y todo su cargamento. "Esta ha sido -escribía D. Alonso al Virrey del Perú- la mayor desgracia que al presente podía venir a este reyno, así por la gran necesidad que en él había de todo lo que en él venía, como por quedar destruidas muchas personas del, y todos los mercaderes que continuaban esta navegación, perdidos" ( 1 3 ) . La condición de la tropa era la más triste y miserable que es dable presumir. Aquellos soldados, que rara vez recibían Carta de Alonso de Sotomayor a Felipe 11. de 9 de enero de 1585. Citado par Diego Barros Arana. Obra citada, Tomo 111, págs. 50-51. (13) Carta de Alonso de Satomayor al Virrey del Peni, de 1Q de febre10 de 1586. Citada por Diego Barros Arana. Obra citada, Tomo 111, pág. 52. (12)