Siza matosinhos, 1933

Estética y composición
Universidad de Las Palmas de Gran Canaria 2024/2025
·
Estética y composición
Universidad de Las Palmas de Gran Canaria 2024/2025
·
1. arquitecto // Alvaro Siza
1.1 Biografía y contexto histórico
1.2 Estilo arquitectónico
1.3 Importancia en la arquitectura contemporánea
2. análisis // Aristóteles, Vitrubio y Siza
2.1 Casa de Chá da Boa Nova
2.2 Piscinas das Marés
2.3 Residencial Schlesisches Tor
2.4 Centro Galego de Arte Contemporáneo
2.5 Iglesia de Santa María de Marco de Canaveses
3. síntesis // conclusión general de todas las obras
4. referencias // bibliografía
5. vídeo
“Independientemente del arquitecto, la atracción de un proyecto está en el paisaje”
-Álvaro Siza
Entrevista exclusiva a El País, El País. 27 de octubre 2015
Álvaro Siza Vieira, nacido el 25 de junio de 1933 en Matosinhos, Portugal, es sin duda uno de los arquitectos más destacados y trascendentales del siglo XX y XXI. Su obra se distingue por una profunda sensibilidad hacia el entorno, la luz natural y la relación con la naturaleza, lo que le permite desarrollar un enfoque innovador y poético en su práctica arquitectónica. A lo largo de su carrera, Siza ha sido reconocido por su capacidad para integrar de manera única los aspectos culturales, históricos y climáticos de cada lugar en sus diseños.
Se graduó en 1955 de la Escuela Superior de Bellas Artes de Oporto, donde comenzó a desarrollar el estilo que lo convertiría en uno de los referentes más importantes de la arquitectura contemporánea.
Su primer gran proyecto, el Pabellón de Portugal en la Expo 58 de Bruselas, marcó un hito en su carrera y lo catapultó a la fama internacional. Desde entonces, ha trabajado en una amplia variedad de proyectos que abarcan diferentes tipologías, desde edificios residenciales y culturales hasta instituciones educativas, centros de salud y espacios públicos. Cada uno de sus diseños refleja un diálogo profundo con el contexto histórico, cultural y social del lugar donde se ubica.
A lo largo de su carrera, Álvaro Siza ha recibido numerosos premios y distinciones, siendo uno de los más
relevantes el Premio Pritzker en 1992. Esta distinción reconoció su capacidad para crear obras que no solo responden a necesidades funcionales, sino que también evocan sensaciones emocionales a través del espacio. Su trabajo ha sido ampliamente admirado por su elegancia, sencillez y su enfoque centrado en la experiencia humana dentro del espacio arquitectónico.
Además de su prolífica práctica arquitectónica, Siza ha sido un influyente académico, compartiendo sunconocimiento y experiencia en diversas universidades de todo el mundo. Su enfoque humanista, su pasión por el detalle y su compromiso con la calidad espacial continúan inspirando a profesionales y estudiantes en todas partes del planeta.
Hoy en día, Álvaro Siza es considerado un verdadero maestro de la arquitectura moderna, cuyo legado trasciende fronteras geográficas y culturales. Su obra sigue siendo relevante en la actualidad, siendo una fuente constante de inspiración en el debate sobre el diseño, la planificación urbana y la creación de espacios que promuevan una vida más plena y armoniosa. El impacto de su trabajo, marcado por la reflexión, la creatividad y la sensibilidad hacia el contexto, es un testimonio de su pasión por la arquitectura y de su capacidad única para transformar espacios y comunidades a través de sus diseños.
Matoshinhos, laciudad que le vió crecer como arquitecto y persona, ha reconocido su legado con varias distinciones y homenajes, celebrando su capacidad para integrar la modernidad con la tradición local.
Gracias a su trabajo, Matosinhos se ha consolidado como un referente de la arquitectura contemporánea en Portugal, y el agradecimiento a Siza por su contribución al embellecimiento y progreso de la ciudad sigue siendo palpable en sus espacios públicos y en el reconocimiento de su figura como uno de los grandes arquitectos del mundo.
Obras destacadas del arquitecto en su ciudad natal son las Piscinas das Marés o la Casa de Chá da Boa Nova, trabajos cruciales en su desarrollo como arquitecto.
El estilo de Álvaro Siza queda enormemente marcado por el movimiento moderno, los estilos de mitad de siglo y evoluciona para alcanzar ser uno de los estilos más reconocibles de la arquitectura contemporánea. Siza aprende del entorno y lo usa para adaptarse a él, incorporando la naturaleza, el paisaje y la cultura local en sus diseños. Cada obra refleja su capacidad para integrarse de manera armónica con su contexto, ya sea urbano o natural. Se une a esto el uso de volúmenes simples y puros, que destacan por su claridad, y un enfoque minimalista que no sacrifica la funcionalidad ni la emoción estética. El blanco es un color predominante en muchos de sus proyectos, lo que potencia la luminosidad y la pureza de las formas, al mismo tiempo que resalta la relación de los edificios con su entorno.
Un elemento clave en la arquitectura de Siza es el uso de zócalos, que dotan de una identidad única a sus proyectos. Estos zócalos sirven no solo como base estructural, sino como un elemento que genera un diálogo entre el edificio y el terreno, creando una sensación de anclaje y solidez. Este recurso también se acompaña de un tratamiento cuidadoso de las fachadas, que suelen ser de líneas limpias y proporciones estudiadas, lo que otorga a sus edificios una apariencia equilibrada y serena.
Siza también juega con las geometrías, utilizando tanto formas rectilíneas como curvas para dotar a los proyectos de dinamismo, lo que evita que sus obras se perciban como rígidas o estáticas. El juego con las geometrías, combinado con la utilización de materiales como el hormigón,
la piedra y el vidrio, le permite crear espacios que no solo son funcionales, sino también poéticos y agradables visualmente.
Sus edificios parecen estar en un constante diálogo con el aire y la luz, integrando la naturaleza dentro de sus muros de manera fluida y natural.
El enfoque de Siza es también humanista, orientado a la creación de espacios que favorezcan la interacción social y la comodidad. Diseña para mejorar la experiencia del usuario y la relación con el exterior. A lo largo de su carrera, Siza ha sabido combinar la modernidad
con un respeto por la tradición arquitectónica, fusionando elementos de la historia con la innovación.
Su obra ha sido siempre un reflejo de su capacidad para traducir la complejidad del entorno en formas arquitectónicas sencillas y elegantes.
Su estilo sigue siendo una fuente de inspiración tanto para el mundo de la arquitectura como para la creación de espacios urbanos que buscan un equilibrio entre el pasado, el presente y el futuro.
“Los arquitectos no inventan nada, tan sólo transforman la realidad.”
Álvaro Siza.
Entrevista para LOFF.it
Siza ha resultado ser uno de los arquitectos más influyentes del siglo XX y XXI y así lo quiso reconocer el comité que le otorgó el premio Pritzker en 1992. Ha construido un legado que fusiona sensibilidad contextual, minimalismo poético y una funcionalidad profundamente humanista.
Desde sus primeros proyectos en Portugal, como las viviendas en Matosinhos y la Piscina das Marés, hasta obras emblemáticas más recientes como el Museo de Arte Contemporáneo en Galicia y la Fundación Iberê Camargo en Brasil, Siza ha demostrado una capacidad única para dialogar con el entorno físico y cultural, equilibrando tradición y modernidad.
Su arquitectura parte de la simplicidad, pero no como un fin en sí misma, sino como el resultado de una reflexión profunda sobre el espacio, la luz y la interacción humana. Ha sabido reinterpretar materiales tradicionales como el hormigón, el ladrillo y la madera, llevándolos a nuevas expresiones técnicas y estéticas, mientras que su enfoque geométrico y su uso magistral de la luz natural transforman sus diseños en experiencias trascendentes.
Más allá de las tendencias pasajeras, Siza ha evolucionado sin perder su esencia, creando espacios que emocionan y respetan tanto el contexto humano como el natural. Su obra demuestra que la verdadera innovación no radica en el exceso, sino en la capacidad de conectar lo local con lo universal, lo funcional con lo poético, consolidándose como un arquitecto cuya influencia y legado trascienden generaciones.
“(...) la arquitectura no tiene un lenguaje preestablecido ni establece un idioma. Es una respuesta a un problema concreto, una situación en transformación en la que participo.”
-Álvaro Siza(1978)
Peter Testa, The Architecture of Alvaro Siza Faculdade de Arquitectura da Universidade do Porto,
Matosinhos, Portugal
1958-1961
Promotor privado
Uso restauración
La Casa de Chá da Boa Nova, diseñada por Álvaro Siza en 1959 y construida en Leça da Palmeira, Matosinhos, Portugal, es una obra icónica que refleja la habilidad del arquitecto para integrar arquitectura y naturaleza de manera magistral. Situada en un terreno rocoso junto al océano Atlántico, este restaurante se funde con el paisaje gracias al uso de materiales locales como la piedra y la madera, que permiten que el edificio se perciba como una extensión natural del entorno. La ubicación fue cuidadosamente seleccionada por Siza en colaboración con su mentor, Fernando Távora, enfatizando la importancia de adaptar la arquitectura al lugar en lugar de imponerse sobre él.
El diseño del restaurante, de líneas sencillas y funcionales, está concebido para realzar la experiencia del visitante. Grandes ventanales estratégicamente orientados enmarcan vistas panorámicas del océano, permitiendo que la luz natural y el movimiento constante de las olas llenen el espacio interior, creando un ambiente dinámico y sereno a la vez. El
juego de volúmenes y techos bajos guía la mirada hacia el horizonte, ofreciendo un recorrido sensorial que invita a la contemplación y al disfrute de la naturaleza. Además de su valor estético, la Casa de Chá da Boa Nova se caracteriza por su funcionalidad. Los espacios están cuidadosamente distribuidos para servir tanto a los comensales como al personal, y el diseño favorece la conexión fluida entre el interior y el exterior. La atención al detalle se extiende al mobiliario, diseñado también por Siza, que complementa la arquitectura sin desviar la atención de las vistas.
La obra no solo es un ejemplo de respeto por el entorno natural, sino también un símbolo de sostenibilidad antes de que este concepto adquiriera notoriedad en la arquitectura. Su construcción, que preservó al máximo el paisaje rocoso circundante, y su integración casi orgánica con el terreno, reflejan el compromiso de Siza con una arquitectura que dialoga con el medioambiente y enriquece la experiencia humana. La Casa de Chá da Boa Nova es más que un
restaurante: es un espacio donde la arquitectura, el paisaje y la emoción convergen, ofreciendo una experiencia que trasciende lo funcional para convertirse en un acto de comunión entre el ser humano y la naturaleza.
La Casa de Chá da Boa Nova marcó un punto de inflexión en la carrera de Álvaro Siza, consolidándose como una de las primeras obras que proyectó su talento a nivel nacional e internacional. Este proyecto, encargado cuando apenas comenzaba a establecerse como arquitecto, evidenció su capacidad para comprender profundamente el lugar y las necesidades humanas, un enfoque que se convertiría en un sello distintivo de su trayectoria. La obra le permitió demostrar cómo la arquitectura podía integrarse al paisaje de manera armónica, respetando su contexto natural y cultural, y lo posicionó como un innovador capaz de reinterpretar los principios del movimiento moderno en clave local.
El reconocimiento que recibió la Casa de Chá da Boa Nova ayudó a cimentar su reputación, atrayendo nuevos encargos que le permitieron expandir su práctica. Fue también un proyecto que estableció su relación con el municipio de Matosinhos, un vínculo que continuaría desarrollándose a lo largo de su carrera con otras obras destacadas en la región. Más allá de su impacto en su trayectoria profesional, esta obra le permitió a Siza posicionarse como un defensor de una arquitectura humanista, profundamente conectada con las personas y los lugares, una visión que lo llevaría a convertirse en uno de los arquitectos más influyentes del siglo XX.
logos, ethos y pathos
La Casa de Chá da Boa Nova, diseñada por Álvaro Siza, destaca por su equilibrio entre lógica, valores y emociones. Desde el punto de vista racional, la obra se integra perfectamente con el entorno natural, con una estructura que parece emerger suavemente entre las rocas y el paisaje costero. Sus líneas y formas están diseñadas meticulosamente, y las ventanas, estratégicamente dispuestas, permiten que la luz natural y las vistas al océano se conviertan en parte esencial de la experiencia arquitectónica.
Cada elemento tiene un propósito, pensado para fusionarse armónicamente con el entorno. En cuanto a los valores, el proyecto transmite una autenticidad que refleja la cultura y el paisaje de la costa portuguesa, evitando alterar la naturaleza.
Siza diseñó el edificio con humildad, priorizando la adaptación al lugar en lugar de imponer su presencia, lo que refuerza su carácter genuino y respetuoso.
Finalmente, en el plano emocional, la Casa de Chá ofrece una experiencia única e inmersiva. La proximidad al mar, el sonido de las olas y los grandes ventanales que enmarcan vistas espectaculares generan una conexión profunda con el entorno. La disposición de los espacios y el juego de luces y sombras, que varía con el sol, evocan paz y reverencia, convirtiendo cada visita en una experiencia inolvidable que conecta al visitante con la naturaleza y la arquitectura de manera única.
utilitas, firmitas y venustas
La Casa de Chá da Boa Nova, destaca por su funcionalidad, solidez y belleza, en perfecta armonía con su entorno. En términos de funcionalidad, el edificio está diseñado para ofrecer una experiencia única, permitiendo que los comensales disfruten de la gastronomía mientras contemplan el océano. Materiales como la madera, que aportan calidez y confort dialogan con el hormigón blanco y el vidrio. Incluso el recorrido hasta el restaurante, a través de senderos que conectan gradualmente a los visitantes con el paisaje costero, forma parte de esta experiencia cuidadosamente planeada.
Desde el punto de vista de la solidez, el edificio demuestra una estructura robusta que enfrenta los desafíos del clima atlántico, como los fuertes vientos y la salinidad.
La piedra local, utilizada como material principal, asegura no solo durabilidad, sino también una integración visual y estructural con las rocas circundantes, dando la impresión de que el restaurante emerge naturalmente del terreno.
Por último, en cuanto a la belleza, su diseño se caracteriza por formas simples, líneas limpias y una paleta de materiales que reflejan la estética distintiva de Siza. El edificio no se impone sobre el paisaje; en cambio, parece una extensión natural de este, interactuando sutilmente con el mar, las rocas y el cielo. Las vistas enmarcadas hacia el océano no solo destacan la arquitectura, sino también el entorno, haciendo que la belleza de la obra resida tanto en su diseño como en su capacidad de resaltar la majestuosidad del paisaje.
concepción inicial y resultado
sostenibilidad y desarrollo
El encargo buscaba un restaurante que aprovechara su ubicación privilegiada junto al Atlántico, pero Siza reinterpretó esta idea para diseñar algo mucho más profundo. No se limitó a resolver un programa funcional, sino que creó un edificio que se fusiona con las rocas y el paisaje, logrando un equilibrio perfecto entre arquitectura y naturaleza.
El restaurante no solo cumple su función práctica, sino que se convierte en un espacio que conecta a las personas con el paisaje, invitándolas a disfrutar y reflexionar sobre su entorno. Siza logró transformar un encargo sencillo en una obra emblemática que establece un diálogo único entre la arquitectura, la naturaleza y quienes la experimentan.
La obra del Restaurante Casa de Chá da Boa Nova se vincula estrechamente con tres Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): ODS 11 (Ciudades y comunidades sostenibles), ODS 12 (Producción y consumo responsable) y ODS 13 (Acción por el clima). En cuanto al ODS 11, este restaurante es un ejemplo paradigmático de cómo un edificio puede integrarse de manera respetuosa en la naturaleza sin alterarla, ya que Álvaro Siza diseñó la construcción para adaptarse perfectamente a las rocas y al paisaje costero circundante. Utilizando materiales locales como la piedra y la madera, el edificio no solo se mimetiza con el entorno, sino que también se convierte en una extensión natural
de la tierra. Además, el espacio está concebido para que los visitantes puedan disfrutar plenamente de la belleza natural del lugar, creando una fuerte conexión entre la arquitectura y el entorno. Respecto al ODS 12, la Casa de Chá da Boa Nova sobresale por su enfoque en la eficiencia de los recursos, ya que se eligieron materiales locales que no solo son más sostenibles, sino que también ayudan a reducir la huella de carbono del proyecto. El diseño del restaurante optimiza el uso de la luz y la ventilación natural, lo que disminuye la necesidad de energía artificial, favoreciendo un consumo más responsable. Finalmente, en relación al ODS 13, el restaurante fue diseñado para resis-
tir las severas condiciones del clima atlántico, tales como los fuertes vientos y la salinidad del aire, lo que plantea un desafío para cualquier estructura en la región. Siza utilizó materiales altamente duraderos y creó un diseño que minimiza la necesidad de mantenimiento, asegurando que el edificio pueda perdurar con el paso del tiempo sin comprometer la sostenibilidad y con un bajo impacto ambiental a largo plazo. De esta forma, la Casa de Chá da Boa Nova no solo destaca por su belleza y funcionalidad, sino también por su alineación con los principios fundamentales de la sostenibilidad.
La Casa de Chá da Boa Nova de Álvaro Siza representa un modelo extraordinario de cómo la arquitectura puede fusionar de forma equilibrada el diseño práctico con el respeto hacia el medio ambiente. Situado en un sitio privilegiado junto al mar, el restaurante no solo satisface su objetivo de ser un lugar de comida, sino que se transforma en una obra de arte que se entrelaza con el paisaje costero. Siza empleó materiales autóctonos y un diseño que respeta la topografía irregular, generando una estructura que, además de ser duradera y práctica, resulta visualmente espectacular.
El edificio no solo desempeña un papel crucial en el ambiente, sino
que también manifiesta principios de sostenibilidad, ajustándose al clima y reduciendo su efecto en el medio ambiente. La Casa de Chá da Boa Nova invita a los usuarios a apreciar el encanto del sitio al mismo tiempo que fomenta una experiencia emocional inigualable. En resumen, este trabajo trasciende lo establecido, demostrando cómo la arquitectura puede convertir un mero encargo en un espacio emblemático que vincula a las personas, el entorno y la naturaleza de forma profunda y relevante.
conclusión
“El trabajo es la corriente que nos transporta, no lo es todo, pero conecta todo.”
Álvaro Siza.
Siza Documentary Gallery Originals
Matosinhos, Portugal 1961-1966
Promotor público: Ayuntamiento de Uso deportivo
Las Piscinas das Marés, diseñadas por Álvaro Siza en 1966, se encuentran en Leça da Palmeira, un pintoresco barrio de Matosinhos, Portugal, a orillas del océano Atlántico. Este proyecto se ha convertido en un ejemplo destacado de cómo la arquitectura puede integrarse armónicamente con la naturaleza, respetando tanto el paisaje como los elementos naturales que lo conforman. Siza, conocido por su capacidad para fusionar lo moderno con lo contextual, aprovechó el terreno rocoso y accidentado del lugar para diseñar una serie de piscinas de agua salada que parecen surgir de manera natural del entorno, casi como una extensión del océano mismo.
Una de las características más destacadas de este proyecto es la forma en que Siza utilizó materiales como el hormigón y la piedra local, lo que no solo responde a una necesidad funcional y estética, sino que también asegura que lo construido se integre visual y físicamente con el paisaje circundante. El uso de estos materiales refleja el compromiso de
Siza con la tradición arquitectónica portuguesa y, a la vez, con un enfoque contemporáneo que se adapta al lugar, sin imponer una estética ajena a su entorno natural. Las piscinas, construidas con la piedra local de la región, se sumergen sutilmente en el paisaje rocoso, de manera que la transición entre el agua, las formaciones rocosas y el mar es fluida, casi imperceptible.
El diseño de las Piscinas das Marés se distingue por sus líneas sencillas y su enfoque funcional, lo que le permite ofrecer una experiencia única para los visitantes. Las formas geométricas y el tratamiento de las superficies crean un diálogo entre la arquitectura y la naturaleza, ofreciendo no solo un espacio para el ocio y el descanso, sino también un lugar donde los visitantes pueden sentir una conexión profunda con el mar y el entorno costero.
Al sumergirse en el agua salada, los usuarios no solo disfrutan de las propiedades recreativas del espacio, sino que también se ven rodeados por la serenidad de un paisaje natural que invita a la contemplación
La disposición de las piscinas, dispuestas de manera que aprovechan las corrientes marinas y las variaciones en el terreno, también refleja la habilidad de Siza para responder a las condiciones locales, creando espacios que interactúan con el entorno en lugar de imponer una estética ajena a él. El diseño no solo resalta las cualidades visuales del lugar, sino que también fomenta una experiencia sensorial completa, donde el sonido del mar, la textura de las piedras y la vista del horizonte se combinan con la arquitectura para crear una atmósfera única.
Además de su valor estético, las Piscinas das Marés han adquirido una importante función cultural y social para la comunidad local y los turistas, convirtiéndose en un punto de referencia en la ciudad de Matosinhos. A lo largo de los años, este proyecto ha sido reconocido no solo por su belleza y la armonía que crea entre lo construido y lo natural, sino también por la forma en que invita a los visitantes a experimentar el espacio de manera inmersiva y reflexiva. Hoy en día, las Piscinas das Marés siguen siendo un testimonio del talento de Álvaro Siza para crear arquitectura que no solo se adapta al entorno, sino que también lo transforma, enriqueciendo la experiencia humana al interactuar con el paisaje y la naturaleza.
logos, ethos y pathos
El diseño de las piscinas de Siza refleja un equilibrio entre la razón, los valores y las emociones. Desde un enfoque lógico, las piscinas aprovechan el entorno rocoso para integrarse de manera natural al paisaje, minimizando el impacto en la naturaleza. La elección de materiales como el hormigón y la piedra de Marés es pragmática y sostenible, al ser resistentes, locales y económicos, lo que garantiza durabilidad y coherencia con el entorno. Éticamente , el diseño evidencia un fuerte compromiso con la preservación del medio ambiente, al priorizar la integración armónica con el paisaje y el uso de materiales que respetan tanto la naturaleza como la comunidad. Este enfoque subraya un profundo respeto por la sostenibilidad y por la relación entre arquitectura y entorno. Finalmente, en el plano emocional, la obra evoca calma y paz mediante la textura de los
materiales, la proximidad al mar y el sonido de las olas, permitiendo una conexión sensorial única con la naturaleza. Su diseño dinámico, con recorridos que revelan constantemente nuevas perspectivas, despierta curiosidad y sorpresa, haciendo que cada visita sea una experiencia enriquecedora y envolvente.
utilitas, firmitas y venustas
El diseño de las piscinas de Siza combina funcionalidad, durabilidad y belleza en un equilibrio ejemplar. En cuanto a su funcionalidad, las piscinas están conectadas naturalmente con el mar, permitiendo que el agua entre y salga con las mareas, lo que asegura una renovación constante sin recurrir a sistemas artificiales. Además, la disposición de los caminos y espacios facilita un recorrido seguro y accesible, permitiendo que todos los visitantes disfruten cómodamente del entorno.
En términos de solidez, la elección de materiales como el hormigón y la Piedra de Marés garantiza resistencia frente a la erosión y las condiciones
marítimas, mientras que la integración de las piscinas con las rocas refuerza la estabilidad estructural y minimiza el impacto ambiental, asegurando la longevidad del proyecto.
Por último, la belleza se manifiesta en la armonía entre la obra y su entorno, con materiales y tonos que se funden discretamente con el paisaje. El diseño moderno, de líneas simples y volúmenes austeros, evita adornos excesivos, ofreciendo una estética limpia que resalta tanto la arquitectura como la naturaleza circundante.
“La
arquitectura no son formas. Toca la forma en la que las personas viven.”
Álvaro Siza.
Entrevista para El País El País
concepción inicial y resultado
sostenibilidad y desarrollo
La idea inicial del cliente para las Piscinas das Marés era simple, crear un espacio público funcional junto al océano para que las personas pudieran disfrutar de actividades recreativas. Sin embargo, Álvaro Siza fue más allá y convirtió este encargo en una obra que integra arquitectura y naturaleza de una forma única. En lugar de diseñar algo que solo cumpliera con la función, adaptó las piscinas al terreno rocoso, utilizando materiales locales para que parecieran una extensión del paisaje. Así, logró no solo un espacio útil, sino también un lugar que invita a la contemplación y la conexión con el entorno.
Este enfoque, aunque pudo implicar más tiempo o ajustes en el presupuesto, llevó el proyecto a un nivel superior. El resultado final no solo cumplió su función recreativa, sino que convirtió las piscinas en un ícono arquitectónico que respeta y realza la belleza del entorno, mostrando cómo la visión de Siza transforma lo práctico en algo lleno de significado y armonía con la naturaleza.
Las Piscinas das Marés se relacionan directamente con los Objetivos de Desarrollo Sostenible 11, 13 y 14, reflejando un compromiso con la sostenibilidad y el respeto al medioambiente. En cuanto al ODS 11 (Ciudades y comunidades sostenibles), las piscinas se integran armoniosamente en el paisaje rocoso, empleando materiales locales como la piedra y creando un espacio público accesible, respetuoso con el patrimonio natural y cultural, que mejora la calidad de vida de la comunidad. En relación con el ODS 13 (Acción por el clima), el proyecto utiliza materiales duraderos que resisten las condiciones extremas de la costa atlántica y minimizan el mantenimiento, además de emplear agua salada directamente del océano, reduciendo el consumo de agua potable y promoviendo un uso eficiente de los recursos. Finalmente, en el contexto del ODS 14 (Vida submarina), su diseño preserva el litoral y los hábitats costeros, evitando sistemas contaminantes y fomentando una conexión
entre las personas y la naturaleza, generando conciencia sobre la importancia de proteger los océanos. Las Piscinas das Marés ejemplifican cómo la arquitectura puede ser un puente entre sostenibilidad, comunidad y medioambiente.
Las Piscinas das Marés de Álvaro Siza son un trabajo que muestra la perfecta combinación entre la arquitectura y el medio ambiente. Mediante un diseño que se ajusta al paisaje costero, Siza genera un espacio práctico, pero a la vez emocionalmente fuerte, que promueve la contemplación y el disfrute del ambiente natural. La obra no solo satisface su objetivo lúdico, sino que trasciende, transformándose en un modelo de sostenibilidad y respeto hacia el entorno natural. Mediante el uso de materiales autóctonos y el respeto por las condiciones del lugar, Siza evidencia cómo la arquitectura puede ser a la vez práctica, dura y hermosa, aportando a la construcción de un espacio público agradable y armónico que muestra un balance entre la intervención humana y el entorno natural. conclusión
Berlín, Alemania
1980-1984
Promotor público
Uso residencial colectivo
El Complejo Residencial Schlesisches Tor, también conocido como “Bonjour Tristesse” fue diseñado por Álvaro Siza en 1980, y expuesto en la Exposición Internacional de Construcción de Berlín de 1987, se erige como una intervención urbana clave en el contexto de Berlín Occidental durante la posguerra, un período marcado por la reconstrucción y la necesidad de revitalizar áreas devastadas por el conflicto.
Este proyecto de vivienda social se caracteriza no solo por su enfoque funcional y económico, sino también por una profunda consideración de su contexto social y urbano. Siza, consciente de las complejidades de una ciudad densamente poblada y fragmentada por las cicatrices de la guerra, diseñó los edificios con una fachada continua que, a través de su adaptabilidad a las alturas y geometrías variables del entorno, establece una relación armónica con el paisaje urbano circundante.
La disposición de los espacios interiores se orienta hacia el confort y el bienestar de los residentes,
asegurando una distribución funcional que favorece la comodidad y la interacción comunitaria, sin sacrificar la privacidad individual.
El diseño de Siza se distingue por su simplicidad y discreción, lo que permite que el complejo se integre de manera fluida en el tejido urbano sin sobresalir o competir con el entorno. La propuesta no solo proporciona viviendas accesibles, sino que también crea un espacio de calidad para sus habitantes, respondiendo de manera eficaz a las necesidades de la comunidad. Este proyecto refleja la filosofía de Siza de combinar la arquitectura funcional con un enfoque humano y sensible hacia el entorno, priorizando siempre el bienestar de las personas dentro de su contexto urbano.
El diseño del complejo residencial Schlesisches Tor de Álvaro Siza responde de manera lógica a la necesidad de ofrecer vivienda social en un entorno urbano complejo. Los bloques están dispuestos de forma que se adaptan a la estructura de las calles existentes, creando un ritmo de fachadas que establece un diálogo con la calle.
La organización de los espacios maximiza la funcionalidad y habitabilidad, diferenciando claramente las áreas privadas de las públicas y aprovechando la luz natural para generar confort interior. Cada unidad tiene acceso a ventilación y vistas al exterior, lo que favorece tanto la privacidad como la conexión con el entorno.
En cuanto a los valores del proyecto, Siza demuestra una ética de inclusión social y respeto por el contexto urbano, manteniendo una intervención mínima que respeta el carácter del barrio sin imponer una estética disruptiva. Su objetivo es ofrecer viviendas accesibles y de calidad, orientadas a la sostenibilidad social y adaptadas al clima de Berlín, promoviendo una arquitectura duradera y comprometida con la comunidad.
Desde el punto de vista emocional, el complejo crea una fuerte sensación de pertenencia y cohesión, integrándose armónicamente en el tejido urbano. logos, ethos y pathos
utilitas, firmitas y venustas
El Complejo destaca por su funcionalidad, al cumplir de manera eficiente con su propósito como espacio residencial. La distribución de los apartamentos y la organización de los espacios comunes permiten una circulación ordenada y un uso optimizado de los recursos, satisfaciendo las necesidades básicas de privacidad, iluminación y ventilación, lo que crea un ambiente práctico y adecuado para la vida urbana.
En cuanto a su solidez, Siza emplea materiales duraderos como el ladrillo y el hormigón, adaptados al clima berlinés, lo que asegura la longevidad de la estructura, facilita el mantenimiento
y reduce los costos de operación a largo plazo. La construcción rigurosa refuerza la estabilidad y seguridad del complejo, garantizando la protección de los residentes.
Desde el punto de vista estético, el proyecto presenta un aspecto sencillo y elegante, con un diseño que respeta la geometría y se integra armónicamente con el contexto urbano. Siza evita imponerse sobre el entorno, adaptándose a la escala y los materiales del barrio. La belleza del complejo radica en su simplicidad y en su coherencia con el entorno, lo que le otorga un atractivo sutil y atemporal.
concepción inicial y resultado
En cuanto a las demandas iniciales del cliente y ajuste al resultado, la solicitud inicial del cliente era crear un complejo de viviendas accesibles y de calidad para los residentes de Berlín Occidental, en una zona de alta demanda y con limitaciones de espacio. Siza no solo logra satisfacer estos requisitos funcionales y económicos, sino que también logra que el complejo se convierta en una extensión del barrio y un icono en la ciudad, integrándose plenamente con el entorno urbano. En cuanto al abordaje, Siza aborda este proyecto manteniendo su estilo sobrio y su enfoque en la funcionalidad y el respeto por el contexto. El resultado es un diseño que respeta la tradición
arquitectónica de la zona, sin renunciar a una visión contemporánea de la vivienda social. La obra refleja la habilidad de Siza para crear arquitectura habitable y contextual, donde el diseño responde a las necesidades del cliente y de los usuarios sin imponer una estética ajena al lugar.
sostenibilidad y desarrollo
El Complejo Schlesisches Tor se vincula de manera significativa con dos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): el ODS 11 (Ciudades y comunidades sostenibles) y el ODS 13 (Acción por el clima).
En relación con el ODS 11, el proyecto contribuye a la sostenibilidad urbana al ofrecer viviendas asequibles en una zona céntrica de Berlín, lo que ayuda a evitar la expansión urbana descontrolada y fomenta una densificación responsable en un área ya urbanizada. Este enfoque no solo optimiza el uso del suelo, sino que también promueve una integración armónica con el entorno existente, respetando la estructura urbana y el carácter del barrio. La elección de materiales duraderos, como ladrillo y hormigón, y su diseño adaptado a las características del lugar subrayan el compromiso de la arquitectura con la sostenibilidad y la preservación del entorno. Así, el proyecto busca crear un espacio habitable que sea accesible para diferentes estratos sociales y que se integre perfectamente con la comunidad local, fomentando ciudades inclusivas, resilientes y sostenibles.
En cuanto al ODS 13, la adaptación al cambio climático es clave en el diseño del complejo. El uso de materiales como el ladrillo y el hormigón no solo asegura la durabilidad del edificio, sino que también facilita la regulación térmica natural, lo que reduce la necesidad de calefacción en invierno y refrigeración en verano, disminuyendo el consumo de energía. Además, el pro-
yecto aprovecha al máximo la ventilación cruzada y la iluminación natural, lo que mejora la eficiencia energética de las viviendas. De esta manera, el diseño no solo minimiza la huella ambiental del complejo, sino que también contribuye a la acción climática mediante el uso de recursos naturales y materiales eficientes, alineándose con los objetivos globales de reducir el impacto ambiental y promover la sostenibilidad en la construcción urbana.
conclusión
El Complejo Residencial representa la habilidad de Álvaro Siza para abordar problemáticas de vivienda social con una sensibilidad hacia el contexto urbano y las necesidades habitacionales de la población.
Con un diseño que se adapta a la irregularidad del sitio y al entorno construido de Berlín, Siza crea un conjunto habitacional funcional, accesible y duradero. Los espacios están organizados para optimizar la luz natural y la privacidad de los residentes, y la fachada se
integra de manera coherente con la escala y los materiales de la zona. Este proyecto ilustra cómo la arquitectura social puede ser estética y respetuosa con el contexto, además de eficiente en el uso del espacio.
Resulta un excelente ejemplo de cómo la arquitectura puede abordar desafíos sociales y urbanos sin sacrificar la calidad estética ni la funcionalidad. La obra refleja una comprensión profunda del entorno y de las necesidades de sus habitantes.
Santiago de Compostela, España
1988-1993
Promotor público
Uso residencial colectivo
El Centro Galego de Arte Contemporáneo (CGAC) es una obra de gran relevancia en el panorama arquitectónico contemporáneo, diseñado por el reconocido arquitecto Álvaro Siza. El proceso de diseño comenzó en 1988 y la construcción se completó en 1993, convirtiéndose en uno de los proyectos más emblemáticos de la arquitectura moderna en Galicia. Situado en el corazón de Santiago de Compostela, el CGAC fue concebido para integrarse de manera armónica con el entorno histórico de la ciudad, respetando y dialogando con los elementos arquitectónicos que lo rodean, como el Convento de San Domingos de Bonaval y el Parque de Bonaval.
Esta integración no se limita a una simple adaptación estética, sino que Siza optó por un enfoque de continuidad, fusionando lo contemporáneo con lo histórico mediante líneas sencillas, volúmenes claros y un tratamiento respetuoso con el espacio urbano circundante. El diseño del CGAC refleja un
equilibrio entre la modernidad de la arquitectura contemporánea y la tradición monumental de Santiago de Compostela, creando un contraste que resalta ambos aspectos de manera complementaria. La simplicidad de las formas y la sobriedad del diseño permiten que el edificio no solo se inserte de forma respetuosa en el entorno, sino que también sea una pieza de gran belleza por sí misma. Además, uno de los aspectos más destacados de la obra es el uso inteligente de la luz natural. La luz se introduce de manera calculada, no solo como una fuente de iluminación funcional, sino también como un elemento artístico que resalta las obras de arte expuestas en el museo, creando una atmósfera única que favorece la contemplación y la interacción del visitante con las piezas exhibidas. Este manejo de la luz, junto con la distribución espacial del edificio, facilita una experiencia fluida, abierta y accesible, lo que convierte al CGAC en un lugar donde la arquitectura y el arte se fusionan de manera armoniosa.
logos, ethos y pathos
El Centro Galego de Arte Contemporáneo, diseñado por Álvaro Siza, establece un diálogo entre lo moderno y lo histórico, integrándose armoniosamente en el entorno de Santiago de Compostela.
Su diseño se basa en volúmenes geométricos puros que facilitan la circulación y la flexibilidad en las exposiciones, aprovechando estratégicamente la luz natural. Siza respeta el contexto patrimonial utilizando materiales locales, como la piedra, y manteniendo una escala adecuada para el entorno histórico de la que probablemente sea la ciudad mas patrimonional de Galicia.
El edificio aprovecha la luz natural y se abre a buscarla y generar los espacios expositivos con ella. El CGAC genera una atmósfera emotiva y contemplativa, invitando a la reflexión sobre la continuidad entre el pasado y el presente, y ofreciendo una experiencia serena y clara para el visitante.
utilitas, firmitas y venustas
El CGAC cumple eficientemente su función como museo de arte contemporáneo. La flexibilidad espacial permite adaptaciones para diferentes tipos de exposiciones y eventos. La organización de los espacios respeta tanto la función museística (con áreas de exposición, zonas de tránsito y espacios de transición) como el confort del visitante, asegurando una buena circulación y accesibilidad.
La estructura del proyecto es sólida y duradera, con un predominio del hormigón y piedra en la construcción que le otorga resistencia y coherencia con el entorno. Estos materiales no solo aseguran la durabilidad frente
al clima gallego, sino que permiten a Siza mantener una conexión visual con las edificaciones históricas de la zona. La piedra también ayuda a regular la temperatura interior, aprovechando las propiedades térmicas del material.
La belleza del museo reside en la simplicidad y en la armonía con el contexto. Siza emplea una estética minimalista y ordenada que se contrapone a la complejidad del entorno de Santiago, pero lo hace con una sensibilidad que evita el choque visual.
concepción inicial y resultado
Las demandas iniciales del cliente para el Centro Galego de Arte Contemporáneo incluían la creación de un museo que no solo albergase arte moderno, sino que también respetase profundamente el entorno monumental de Santiago de Compostela. Además, se buscaba que el museo promoviera el arte contemporáneo en Galicia, contribuyendo a la vida cultural de la región. Álvaro Siza cumplió con estas expectativas al diseñar un edificio que, más allá de un museo tradicional, se convierte en una transición sutil entre lo antiguo y lo contemporáneo.
El diseño del CGAC se integra armoniosamente en el contexto histórico de la ciudad, sin restar protagonismo al entorno, pero a la vez brindando una nueva identidad a la zona. Siza, fiel a su estilo sobrio y respetuoso, utilizó materiales locales como la piedra, lo que refuerza la conexión con la tradición arquitectónica gallega. Además, el edificio se adapta a las necesidades funcionales del cliente, maximizando el aprovechamiento de la luz natural y creando un espacio flexible para las exposiciones. La distribución de los espacios y la cuidadosa organización del edificio favorecen la circulación y la interacción entre las obras de arte y los visitantes. En este sentido, Siza no impuso un estilo que sobresaliera, sino que eligió un enfoque que se fusionara con el entorno sin perder su identidad contemporánea.
De este modo, no solo cumple los objetivos del cliente, sino que también se convierte en un referente cultural de la ciudad y de la región, sirviendo como un punto de encuentro entre el pasado y el presente y consolidando su papel como un espacio vital para el arte y la cultura.
sostenibilidad y desarrollo
El CGAC se relaciona principalmente con dos de los ODS: el 11 (Ciudades y comunidades sostenibles) y el 13 (Acción por el clima). En el caso del ODS 11, el CGAC fomenta la sostenibilidad mediante su integración armónica en el contexto histórico de Santiago de Compostela. La utilización de materiales locales, como la piedra gallega, no solo reduce el impacto ambiental, sino que también refuerza la conexión con la tradición arquitectónica de la región. Además, la disposición de los espacios exteriores y los patios del edificio establece un
diálogo con el paisaje urbano circundante, promoviendo una convivencia fluida y respetuosa entre la arquitectura y el entorno natural. En cuanto al ODS 13, el diseño del edificio aprovecha la luz natural para reducir el consumo energético y, gracias a la masa térmica de la piedra, controla de manera eficiente la temperatura interior. Siza también emplea una organización espacial que evita modificaciones drásticas del terreno y la construcción de estructuras invasivas, minimizando así el impacto ambiental. Estos elementos
conclusión
El Centro Galego de Arte Contemporáneo (CGAC) es una obra que destaca por su capacidad para integrar la arquitectura contemporánea en un contexto patrimonial único. Álvaro Siza logra, mediante un diseño sobrio y geométricamente equilibrado, una estructura que respeta y complementa el tejido histórico de Santiago de Compostela. La construcción responde a las necesidades de un museo moderno con espacios amplios y flexibles, iluminados principalmente por luz natural, lo cual enriquece la experiencia de quienes recorren las exhibiciones.
La integración en el entorno histórico, así como su sensibilidad hacia el paisaje y el uso de materiales que remiten a la arquitectura local, convierten este
edificio en un ejemplo de arquitectura cultural que conecta con la identidad de Galicia.
El CGAC es una obra que representa lo mejor de la filosofía arquitectónica de Álvaro Siza. La manera en que el edificio interactúa con su entorno está muy cuidada; no impone su presencia, sino que se convierte en parte del paisaje urbano de Santiago. Es una obra que combina belleza y humildad e invita a los visitantes a experimentar el arte. Además, el manejo de la luz natural y los espacios sobrios pero expresivos logran que el museo sea una experiencia arquitectónica en sí misma. El CGAC es un modelo de cómo la arquitectura puede dialogar con el pasado y, responder a necesidades culturales actuales.
Marco de Canaveses, Portugal 1996
Promotor privado Uso religioso
La iglesia de Santa María, diseñada por Álvaro Siza en 1996, es una obra que refleja su característico lenguaje arquitectónico, integrando de manera excepcional los elementos tradicionales y modernos. La estructura de la iglesia, marcada por el uso del hormigón armado blanco, el zócalo de piedra y los volúmenes contundentes, expresa una solidez que, sin embargo, se ve suavizada por la disposición cuidadosa de los elementos. Esta iglesia no solo es un espacio religioso, sino un complejo multifuncional que incluye una capilla mortuoria, una escuela dominical, un auditorio y la casa del sacerdote, lo que hace de la obra un referente comunitario.
Ubicada en la localidad de Marco de Canaveses, en Portugal, un pequeño pueblo de poco más de 10.000 habitantes, la iglesia se erige como un hito arquitectónico en el paisaje, ocupando una meseta elevada a más de 4 metros sobre el nivel del suelo, lo que permite que se vea desde varios puntos de la localidad. Esta ubicación estratégica no solo subraya su presencia imponente, sino que también
refuerza la idea de la iglesia como un espacio que se inserta de manera profunda en el contexto cultural y social del lugar, al tiempo que se distingue por su diseño atemporal y su capacidad para generar un diálogo con el paisaje circundante.
La iglesia de Santa María destaca por su simplicidad monumental, sin renunciar a una estética que se adentra en la modernidad sin perder el sentido de lo sagrado. Siza juega con los contrastes, combinando los materiales duraderos y austeros con una forma que parece fluir de manera orgánica con el entorno. De esta forma, la iglesia no solo cumple con su función religiosa, sino que también se convierte en un lugar de encuentro y reflexión, un espacio que trasciende su uso litúrgico para convertirse en un referente cultural de la región.
logos, ethos y pathos
La Iglesia integra de manera ejemplar los principios de logos, ethos y pathos en su arquitectura. En cuanto al su lógica, la iglesia se caracteriza por la claridad y racionalidad de su diseño. Siza emplea geometrías simples y proporciones cuidadosas, organizando los volúmenes de forma lógica y funcional, con un manejo preciso de la luz natural, que, a través de aperturas estratégicamente colocadas, dirige la atención hacia el altar y refuerza la funcionalidad del espacio litúrgico.
Su capacidad para representar los valores espirituales y culturales de la comunidad religiosa a la que sirve. Siza logra un delicado equilibrio entre lo
monumental y lo modesto, sin recurrir a ornamentaciones innecesarias, transmitiendo pureza y serenidad, tanto en el exterior como en el interior.
Finalmente, el pathos se hace sentir en la experiencia emocional que el espacio ofrece. La entrada al edificio, con su transición desde el exterior hacia un interior bañado por luz natural, genera una sensación de recogimiento y asombro, mientras que las proporciones y el vacío interior evocan una elevación espiritual. Los contrastes de luz y sombra crean una atmósfera de trascendencia, permitiendo a los fieles una conexión emocional con lo divino.
utilitas, firmitas y venustas
La funcionalidad del espacio se refleja en la disposición de los elementos arquitectónicos, que están pensados para cumplir con las necesidades litúrgicas y espirituales de la comunidad. Los espacios están organizados para facilitar el flujo de personas y dirigir la atención hacia el altar, mientras que el manejo de la luz natural no solo embellece el entorno, sino que también ilumina estratégicamente los elementos clave, mejorando la experiencia durante los rituales.
La solidez de la iglesia es evidente en el uso de materiales duraderos, como el hormigón blanco, que, junto a los muros gruesos y la forma monolítica
del edificio, confiere una sensación de estabilidad y permanencia. Esta robustez asegura que el espacio resista el paso del tiempo.
Finalmente, la venustas se encuentra en la belleza austera y elegante del diseño de Siza, caracterizado por formas puras y geometrías simples que crean una estética serena y contemplativa. La interacción de la luz y las sombras dentro de la iglesia genera una atmósfera espiritual, mientras que los acabados en blanco y la armonía con el paisaje circundante enriquecen la percepción del espacio, elevando tanto su belleza como su integración con el entorno natural y urbano.
concepción inicial y resultado
El proyecto de la Iglesia de Santa María de Marco de Canaveses es un claro ejemplo de cómo Álvaro Siza transformó un encargo inicialmente planteado como una simple edificación funcional en una obra arquitectónica de profunda carga simbólica.
El encargo original requería una iglesia parroquial que fuera sencilla, económica y adecuada para las prácticas litúrgicas del culto católico, cumpliendo con las necesidades prácticas de la comunidad local. Siza, conocido por su capacidad para combinar la funcionalidad con una fuerte carga conceptual, abordó estas demandas de manera precisa, creando un espacio diáfano, accesible y funcional que cumpliera con los requisitos funcionales.
Sin embargo, el arquitecto fue más allá de lo puramente utilitario, añadiendo una dimensión simbólica que transforma el espacio en algo mucho más que un lugar para el culto. Reinterpretó elementos tradicionales, como la luz natural y las formas geométricas puras, creando un ambiente que no solo facilita las actividades religiosas, sino que también invita a la reflexión y la contemplación. La luz natural, cuidadosamente dirigida a través de aberturas estratégicas, se convierte en un elemento clave que enmarca los momentos de la liturgia, al mismo tiempo que otorga al espacio una cualidad espiritual única. Al mismo tiempo, el uso de formas geométricas simples y puras, y la elección de materiales como el hormigón blanco, contribuyen a una estética minimalista que resalta la pureza y serenidad del lugar.
El resultado final de la Iglesia de Santa María es una obra que no solo cumple con las necesidades prácticas del cul
to, sino que también crea una atmósfera trascendental, permitiendo a los fieles experimentar una conexión profunda con lo espiritual. La integración del edificio con su entorno natural y urbano es crucial, ya que el diseño respeta y enriquece el contexto donde se inserta. Aunque su enfoque moderno y minimalista pudo haber generado tensiones con visiones más tradicionales de la arquitectura religiosa, con el tiempo la iglesia se ha consolidado como un referente de arquitectura contemporánea.
sostenibilidad y desarrollo
El análisis respecto a las ODS lleva a una relación con dos de ellos: el 11 (ciudades y comunidades sostenibles) y el 13 (acción por el clima).
El proyecto promueve la sostenibilidad urbana al integrarse armoniosamente con el entorno y respetar el contexto cultural de Marco de Canaveses. Un diseño simple y duradero utiliza materiales locales y técnicas constructivas
eficientes, garantizando la longevidad del edificio y es la mejor estrategia para reducir su impacto ambiental.
Siza aprovecha al máximo la luz natural mediante aberturas estratégicas, reduciendo la necesidad de iluminación artificial y, por ende, el consumo energético. La elección de materiales también contribuye a una huella ambiental controlada, principios de acción climática.
conclusión
La iglesia es una obra maestra que sintetiza de manera excepcional los principios de Aristóteles, Vitruvio y la sostenibilidad en un edificio que trasciende el tiempo. La iglesia combina de forma armoniosa la racionalidad, ética y espacios conmovedores al mismo tiempo que integra solidez, funcionalidad y belleza.
Siza, en respuesta a un encargo inicialmente funcional y modesto, crea un espacio sagrado que no solo cumple con las necesidades litúrgicas, sino que también invita a una experiencia trascendental, mediante el uso de luz natural y formas puras que evocan serenidad y espiritualidad. El diseño de la iglesia respeta el entorno natural y urbano de Marco de Canaveses, integrándose perfectamente en el paisaje, mientras optimiza los recursos de manera eficiente y coherente con los principios
de sostenibilidad, alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible pese a haber sido construida en la década de 1990, y por tanto no incorporar algunas de las prácticas de sostenibilidad modernas.
La iglesia demuestra una sensibilidad avanzada hacia la integración con el contexto cultural y el uso racional de los recursos. Su enfoque minimalista, la atención a los detalles materiales y su carácter atemporal han permitido que la Iglesia de Santa María se consolide como un referente arquitectónico que equilibra de manera ejemplar el pasado, el presente y el futuro, ofreciendo una obra que no solo es funcional y estética, sino también un testimonio de la capacidad de la arquitectura para generar espacios que conectan lo humano con lo trascendental.
“En la arquitectura, ya hemos pasado la etapa en la que pensábamos que la unidad de la lengua resolvería todo. Un lenguaje preestablecido, puro, hermoso, no me interesa. ” -Álvaro Siza (1978)
Peter Testa, The Architecture of Alvaro Siza Faculdade de Arquitectura da Universidade do Porto,
Este recorrido por parte de la obra de Siza destaca el por qué es uno de los principales arquitectos que marcaron la segunda mitad del Siglo XX y en la arquitectura moderna. Su estilo de trabajo sobresale ya que siempre intenta que sus diseños se ajusten al ambiente, conservando la naturaleza y los espacios ya existentes. Las cinco obras analizadas son muy variadas, pero con una característica común: la habilidad para convertir lo funcional en algo singular y hermoso que vincula con las personas.
Desde las Piscinas das Marés, que se integran de manera natural en un terreno pedregoso, hasta la Iglesia de Santa María de Marco de Canaveses, que se transforma en un emblema para su ciudad, cada proyecto demuestra su capacidad para combinar un diseño útil con belleza. Siza siempre valora el impacto de sus obras en los usuarios, dando prioridad a la comodidad, la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente. Por ejemplo, en la Casa de Chá da Boa Nova, no solo se establece un restaurante práctico, sino también un espacio donde los individuos pueden apreciar el
entorno y sentirse en sintonía con el océano.
También proyectos, como el Centro Galego de Arte Contemporáneo y el Complejo Residencial Schlesisches Tor, evidencian la habilidad de Siza para trabajar en contextos urbanos e históricos. En vez de imponer sus diseños, consigue que se fusionen con el entorno, preservando lo ya existente y generando lugares que mejoran la vida de las personas. Sus obras son simples, pero están repletas de detalles que hacen que todo parezca estar ubicado de forma natural.
En conclusión, Álvaro Siza es un arquitecto que considera la arquitectura como algo más que simplemente construir edificios. Sus obras no solo satisfacen lo necesario, sino que trascienden, generando espacios que respetan el entorno, se integran con el ambiente y establecen una conexión emocional con aquellos que los viven. Su labor nos muestra cómo la arquitectura puede potenciar nuestras vidas, nuestras localidades y nuestra interacción con el entorno que habitamos.
“La relación entre naturaleza y construcción es decisiva en arquitectura. Esta relación, fuente permanente de cualquier proyecto, es para mi una especie de obsesión; siempre fue determinante en el curso de la historia y, a pesar de ello, hoy tiende hacia una extinción progresiva.”
-Álvaro Siza (2016)
Duque, K. En perspectiva: Álvaro Siza
Archdaily.com
Frampton, K. Álvaro Siza. Complete works. (2006). Ed. Ilustrata
Zaera, A. Salvando las turbulencias: entrevista con Alvaro Siza. (1994). El Croquis, 68–69.
Pascucci, D. (2018, 15 enero). Clásicos de arquitectura: Residencia Schlesisches Tor (Bonjour Tristesse) / Álvaro Siza Vieira + Peter Brinkert. ArchDaily En Español. https://www.archdaily.cl/cl/624376/clasicos-de-arquitectura-residencia-schlesisches-tor-bonjour-tristesse-alvaro-siza-vieira-peter-brinkert
Souza, E. (2017, 28 noviembre). Alvaro Siza’s Galician Center of Contemporary Art Through the Lens of Fernando Guerra. ArchDaily. https://www.archdaily.com/875977/alvaro-sizas-galician-center-of-contemporary-art-through-the-lens-of-fernando-guerra
Archivo de Ideas Recibidas. (2023, 28 mayo). #165 Alvaro Siza // Arquitectura [Vídeo]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=LKJ5eZN_k5A
RTVE (2013, 6 enero). Elogio de la luz #4: Álvaro Siza, orden en el caos. [Vídeo]. YouTube. https://www. youtube.com/watch?v=Iq4fh-9XyBo
Gallery Originals. (2023, 1 abril). SIZA Documentary | Official Trailer | Gallery Originals [Vídeo]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=uJI3lDKKGVU
MAG ARQUITECTURA. (2019, 12 septiembre). Entrevista a Álvaro Siza por Nuno Grande [Vídeo]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=Wu9z2L7XD0Y
Duque, K. (2017, 13 septiembre). Clásicos de arquitectura: Iglesia Santa María / Álvaro Siza. ArchDaily En Español. https://www.archdaily.cl/cl/02-80243/clasicos-de-arquitectura-iglesia-de-santa-maria-alvaro-siza
Fundación DOCOMOMO Ibérico. (2022, 21 abril). Casa de Chá da Boa Nova - Fundación Docomomo Ibérico. https://docomomoiberico.com/edificios/casa-de-te-restaurante-da-boa-nova/ Fundación DOCOMOMO Ibérico. (2022, 21 abril). Piscina das Marés - Fundación Docomomo Ibérico https://docomomoiberico.com/edificios/piscina-de-las-mareas/ Constenla, T. (2024, 20 junio). Álvaro Siza: “Mis obras más importantes son las que no se han construido”. El País. https://elpais.com/eps/2024-06-20/alvaro-siza-mis-obras-mas-importantes-son-las-queno-se-han-construido.html
Fernández-Cobián, E., & Della Longa, G. (2007). Entrevista a Alvaro Siza sobre la iglesia de Santa María, Marco de Canaveses, Portugal. Actas de Arquitectura Religiosa Contemporánea, 1, 206-217. https://doi.org/10.17979/aarc.2007.1.0.5024
Álvaro Siza, ganador del Premio Nacional de Arquitectura 2019, Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana. (s. f.). https://www.mivau.gob.es/arquitectura-vivienda-y-suelo/arquitectura-y-edificacion/promocion-y-difusion/premio-nacional-de-arquitectura/alvaro-siza
Alvaro Siza (2021) Entrevista para LOFF.it, https://loff.it/society/efemerides/alvaro-siza-arquitecto-202155
Alvaro Siza (1978) [Peter Testa, The Architecture of Alvaro Siza (Oporto, Portugal: Faculdade de Arquitectura da Universidade do Porto, 1968), p. 39]. http://alvarosizavieira.com/
Duque, K. En perspectiva: Álvaro Siza, Archdaily.com (https://www.archdaily.cl/cl/02-271022/feliz-cumpleanos-antoni-gaudi-alvaro-siza-y-robert-venturi)
Arquitecto Álvaro Siza Vieira. (s. f.). https://www.sizavieira.pt/
Casa de Chá da Boa Nova. (s. f.). https://www.casadechadaboanova.pt/en/
Al vídeo realizado se puede acceder a través del siguiente enlace de YouTube.
https://www.youtube.com/watch?v=vQxxHXyDOVE
Estética y composición
Universidad de Las Palmas de Gran Canaria 2024/2025
·