El Movimiento Feminista.-Ada Zambonino.

EL MOVIMIENTO FEMINISTA

Informe creado por Ada Zambonino Troncoso 1º Bach C

M O V I M I E N T O

VIERNES, 17 NOVIEMBRE 2023

feminista

Núm.

198

LA EVOLUCIÓN DE LA DEMOCRACIA: UN VIAJE HACIA LA UNIVERSALIDAD DEL SUFRAGIO Hasta mediados del siglo XIX, el concepto de democracia se limitaba a reducidos grupos y sectores de la sociedad. Sin embargo, no es sino hasta el término de la Primera Guerra Mundial cuando se da inicio al proceso de democratización plena de las sociedades.

El sufragio, entendido como el derecho político y constitucional a votar por cargos públicos, marcó un hito crucial en este camino.

Se distinguía entre sufragio restringido y sufragio universal; este último permitía que todas las personas adultas tuvieran el derecho al voto, a diferencia del primero, que era limitado a ciertos sectores.

A finales del siglo XIX, los hombres obtuvieron el derecho al voto, pero las mujeres se vieron excluidas de este privilegio. Esta exclusión llevó a las mujeres a organizarse para exigir a los gobiernos su derecho al voto, el cual les estaba prohibido.

En el siglo XX, Emeline Pankhurst fundó el movimiento de las sufragistas, un movimiento que abogaba por reformas en los ámbitos social, político y económico. Su principal objetivo era reclamar el voto femenino y luchar por el reconocimiento de este derecho para las mujeres. Además, buscaban mejorar las condiciones de vida de las mujeres, fomentar su participación en el ámbito laboral y garantizar una educación equitativa, permitiendo a las mujeres acceder a oportunidades educativas similares a las de los hombres.

Este movimiento también procuró la igualdad de género dentro de la estructura familiar, que históricamente se había regido por la figura dominante del hombre. A pesar de estas demandas, no fue hasta después de la Primera Guerra Mundial que en Inglaterra se permitió el voto a las mujeres mayores de 30 años. Finalmente, en 1928, el parlamento inglés concedió el sufragio universal, otorgando el derecho al voto a todas las personas mayores de 18 años. Este logro marcó un hito trascendental en la evolución hacia una democracia más inclusiva y representativa.

EL MOVIMIENTO SUFRAGISTA: LUCHA POR LA DEMOCRACIA Y LA IGUALDAD El movimiento sufragista fue una destacada movilización colectiva que, mediante mítines, campañas propagandísticas y coordinación a nivel internacional, dio paso a múltiples facciones, algunas de tendencia moderada y otras más radicales.

En el contexto de la democracia, la participación del pueblo a través del voto es un instrumento esencial. La historia de este sistema de gobierno está estrechamente ligada a hombres y mujeres que lucharon por ampliar el derecho al voto para todos los ciudadanos. En España, hace 90 años, la aprobación del sufragio universal tuvo como protagonista a Clara Campoamor. Este hito marcó el colofón del sufragio femenino y simultáneamente el inicio de la lucha por la igualdad jurídica, política y social de las mujeres. En España, este proceso contó con nombres tan relevantes como Emilia Pardo Bazán, Concepción Arenal, Consuelo González Ramos, María Espinosa de los Monteros y la propia Clara Campoamor, pionera en muchos aspectos. Campoamor logró que la Constitución de 1931 otorgara los mismos derechos electorales a hombres y mujeres, sin distinción ni matices.

Clara Campoamor fue una mujer adelantada a su tiempo, cuya vida refleja su lucha. Nacida en Madrid en 1888, hija de una costurera y un contable, su infancia se vio marcada por la muerte temprana de su padre. Esta situación la llevó a abandonar sus estudios y trabajar para mantener a su familia. Sin embargo, persistió en su búsqueda de una carrera profesional independiente. Aunque no superó las oposiciones para taquígrafos del congreso, logró una plaza en los cuerpos auxiliares de telégrafos en 1909.

Residió en Zaragoza y San Sebastián antes de regresar a Madrid en 1914 para enseñar taquigrafía y mecanografía a adultos. Durante este tiempo, su interés por la situación de desventaja jurídica de la mujer en un entorno dominado por hombres la llevó a retomar sus estudios a los 32 años. Entre 1920 y 1924, aprobó el bachillerato y se licenció en derecho, convirtiéndose en la segunda mujer en ingresar al colegio de abogados de Madrid después de Victoria Kent.

Paralelamente, desarrolló una conciencia política basada en el republicanismo liberal, laico y democrático.

Campoamor, designada para la comisión redactora de la Constitución, defendió no solo el sufragio activo y pasivo de las mujeres, sino la completa igualdad jurídica entre sexos y la regulación de aspectos como el divorcio y la situación legal de los hijos ilegítimos. Fue la primera mujer en el mundo que defendió desde la tribuna parlamentaria el derecho al voto femenino. A pesar de que el proyecto de constitución original incluía el derecho al voto para todas las mujeres mayores de 23 años, su tramitación parlamentaria no fue sencilla. El momento crucial llegó durante el debate parlamentario del 1 de octubre de 1931. Campoamor defendió la necesidad de reconocer el derecho al voto sin restricciones, enfrentándose a los argumentos de la izquierda y la derecha.

El movimiento feminista ha sido una lucha histórica que buscaba la equidad de género en distintos ámbitos sociales, incluyendo el derecho a voto para las mujeres. Este movimiento, mediante diversas acciones, activismo y campañas, promovió la igualdad de derechos políticos, permitiendo a las mujeres participar activamente en la toma de decisiones a través del voto. Esta conquista representó un hito crucial en la lucha por la igualdad de género y marcó un avance significativo hacia la participación plena y la representación de las mujeres en la esfera política y social.