Roberts, nora trilogia de las llaves 01 la llave de la luz

Page 119

NORA ROBERTS

La llave de la luz

Horas después de que hubiese salido indignada del despacho de Flynn, Malory estaba aliviando su orgullo herido con una deliciosa botella de Pinot Grigio, compañía femenina y tratamientos de belleza en el confort de su propia casa. Había unas cuantas cosas de las que hablar, pero no podía pensar en cuadros, llaves y destinos hasta que no hubiese desahogado su cólera. —No me importa que sea tu hermano. Sigue siendo un hombre. —Lo es. —Dana miró su copa tristemente—. Lamento decirlo, pero lo es. Toma más patatas fritas. —Sí. —Con el pelo recogido hacia atrás y la cara cubierta por una mascarilla purificante de arcilla verde, Malory bebió y comió. Observó las tiras de papel de aluminio que Zoe estaba poniendo en el cabello de Dana—. Tal vez yo también debería hacerme reflejos. —No los necesitas —respondió Zoe, y aplicó tinte a otro mechón de la melena de Dana—. Lo que necesitas es darte forma. —Pero dar forma implica tijeras. —Ni siquiera notarás que te he cortado el pelo; sólo parecerá y estará mucho mejor. —Déjame que antes beba un poco más, y que vea cómo queda cuando hayas finiquitado el de Dana. —No digas «finiquitar» en una frase sobre mi cabello —advirtió Dana—. ¿Vas a contarnos por qué habéis discutido Flynn y tú? —Él sólo quiere sexo —respondió con desdén—. Típico. —Cerdo. —Dana metió la mano en el cuenco de patatas—. Echo muchísimo de menos el sexo. —Yo también. —Zoe le enrolló otra tira de papel de aluminio—. No sólo la parte del sexo, sino también la parte que lo precede y la de cuando caes en él. Previamente, la ilusión, la anticipación y los nervios. Toda esa piel, los movimientos y los hallazgos. Y esa sensación de estar colmada y flotando después. Eso lo añoro mucho. —Necesito otra copa. —Malory cogió la botella—. Llevo cuatro meses sin sexo. —Pues yo te gano. —Dana levantó la mano—. Siete y medio, y seguimos contando. —¡Qué par de guarrillas! —exclamó Zoe con una carcajada—. Intentadlo un año y medio. —¡Oh, uf! —Dana alcanzó la botella y llenó hasta arriba su vaso y el de Zoe—. No, muchísimas gracias, pero no creo que quiera probar un año y medio de abstinencia. —No es tan malo si te mantienes ocupada. —Zoe le dio unas palmaditas en el hombro—. Ahora has de quedarte así un rato. Relájate mientras le retiro la mascarilla a Malory. —Hagas lo que hagas, asegúrate de dejarme fantástica. Quiero que Flynn sufra la próxima vez que me vea. —Te lo garantizo.

‐ 119 ‐


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.