DÍA DE LA MADRE EN YMCA

El mes más hermoso y esperado del año es mayo pues la vida nos regala muchos motivos para celebrar. YMCA se viste de cumpleaños, pero antes de conmemorarlo, tenemos la oportunidad de abrazar a las madres, a todas. Tan solo pronunciamos la palabra y evocamos en síntesis las más excelsas virtudes.

Admiramos a aquella mujer, a la vez madre, trabajadora y luchadora que no solo se dedica al cumplimiento de su deber, sino que también se empeña en sacar adelante a sus hijos pues su principal motivación es su familia. La vida las va dotando de sabiduría y del arte de amar de una forma admirable, lo dan todo de sí, dado que su mayor satisfacción es ver a sus hijos convertidos en hombres y mujeres de bien.

El tiempo pasa, los niños crecen, pero su labor no termina, aun cuando el nido quede vacío sus pensamientos están con los suyos, que se extienden luego a los nietos. En esta etapa se cristaliza la transmisión de experiencias. De una manera distinta, siguen formando y guiando ya que está impresa en su ser, la labor de ser madre.

En YMCA Perú tenemos madres en distintos frentes. Tenemos a las asociadas básicas, las trabajadoras, las voluntarias, las destinatarias, las emprendedoras, las aliadas, las proveedoras. A todas ellas, nuestro reconocimiento y respeto siempre.

En el programa dirigido a personas adultas mayores, contamos con alrededor de 300 suscriptoras quienes acuden a los centros de bienestar en Pueblo Libre y Surco. En sus grupos ellas pasan momentos inolvidables e indudablemente, para el día de la madre, la alegría se desbordó porque se celebró con aprecio y entusiasmo, en mérito a los inmensos tesoros en recuerdos y experiencias.

Estos espacios reforzaron una de las características más importantes entre los miembros de YMCA, la forma como vivimos la amistad, la cual ayuda a reconocerse entre ellas, las mujeres y madres, más que amigas, sino hermanas. Es deseo de YMCA Perú que hallan vivido un bellísimo día de la madre.

En el año 2026 el mundo vivirá un nuevo mundial de fútbol, pero los líderes de YMCA tendremos tiempo y energía para encontrarnos en Toronto, en julio de ese año, a fin de celebrar los hitos alcanzados en torno a Visión 2030 y por supuesto, seguir creciendo como movimientos hermanos miembros de una fuerza extraordinaria a nivel global.

El equipo de diseño de este importante evento fue convocado a encontrarse en Toronto del 11 al 12 de mayo pasado. Con equilibrio de género, edad y procedencia regional, así como los espacios en los que participamos sea a nivel profesional o voluntario, pusimos todos nuestros distintos puntos de vista en mesa. Bajo la mirada atenta de Carlos Sanvee y dirigidos fantásticamente por Kerry Reilly (CEO de YMCA Escocia), partimos de las lecciones aprendidas en Aarhus (de la mano de la estupenda Christine Lund) para recorrer los aspectos sustantivos que debemos asegurar en Toronto.

Discutimos temas de accesibilidad como el idioma, los dilemas logísticos (visas, por ejemplo), las secciones clave del programa, el formato del evento, y, sobre todo, cómo compartiremos los avances de los movimientos integrantes sobre Visión 2030. Asimismo, el “design team” conoció las fabulosas instalaciones del Hotel Sheraton, donde tendrá lugar el evento. ¡En un solo lugar! Es una desafiante oportunidad para reunir intergeneracionalmente a los líderes que acudirán.

Contamos ya con las primeras notas de este encuentro y en lo sucesivo el equipo se reunirá virtualmente para profundizar en los temas planteados, que nos permitan llegar en tiempo y forma a julio de 2026. Especial agradecimiento a YMCA Canadá y a YMCA of Greater Toronto por su cálida hospitalidad al recibirnos en la multicultural Toronto.

Me siento especialmente honrada por la gentil invitación de la Alianza Mundial de YMCA para este propósito. Junto con José Ricardo Caporal (Brasil) pondremos pensamiento y acción para hacer del Consejo Mundial un evento con profundo impacto y relevancia para la familia YMCA.