Julio/Agosto 2008
la que no olvidó ni en sus más duros años de exilio. De este origen humilde surgió un político que abrió varios cauces para que pudiera entrar el progreso y la educación en España, convirtiéndose en el primer promotor de los discapacitados en el Estado español y sentando los principios de una efectiva política social, difícil tarea en un país roto por las guerras y carcomido de rencillas. Godoy se arrimaba a los personajes de valía y los exaltaba. Francisco de Goya le debe su nombramiento como pintor de Cámara. Otros protegidos fueron el escritor Juan Pablo Forner, al que Godoy nombró Fiscal del Consejo de Castilla, Juan Meléndez Valdés y el más crítico autor de comedias, Leandro Fernández Moratín. En materia de Hacienda, Godoy hizo recaer el peso de las medidas fiscales sobre los altos funcionarios y empleados, los cuales disfrutaban de altísimas retribuciones, que fueron gravadas con un impuesto del 4%, y suprimió sueldos a los que tenían más de uno. Ahí fue a parar el coste de las guerras, sin que la inevitable imposición fiscal recayera sobre el pueblo menos favorecido, extremo que nos hace reflexionar sobre el impacto que tendría una medida similar en nuestro momento. Además, el sistema recaudatorio precisaba una nueva estructura. Godoy estudió y diseñó un sistema de impuestos que aún parecen revolucionarios. En al aspecto educativo las acciones de Godoy son numerosas y de calado, cuyos efectos trascienden a la actualidad; fue el artífice de la creación de una Escuela de Veterinaria, el Real Colegio de Medicina de Madrid, el Real Estudio de Medicina Práctico-Clínica, el Cuerpo de Ingenieros Cosmógrafos del Estado, el Observatorio Astronómico y numerosas iniciativas en los campos de la arqueología y la investigación.
Sin embargo, donde se aprecia la sensibilidad social del político es en la creación de la Escuela de Sordomudos “gratuita” o en la protección de los expósitos, hasta ese momento privados de derechos civiles. Traslado de los restos de Godoy a España Traer los restos de Godoy a España fue una petición que, aunque ahora se cumpla, no reviste novedad, ya que fue realizada en 1967, en el transcurso del homenaje que culminó el 12 de mayo de ese año con el descubrimiento de una lápida en la casa natal de Godoy, precedido de un magistral discurso del Dr. Izquierdo Hernández, Presidente de la Asociación Nacional de Médicos Escritores en ese momento. En el homenaje intervinieron las personalidades más destacadas de Extremadura que, algunos durante toda su vida -otros continúan en la brecha-, dedicaron sus esfuerzos al “tema de Godoy”, en innumerables trabajos que pueden consultarse en cualquier biblioteca. Citamos a Miguel Muñoz de San Pedro (Conde Canilleros), Arcadio Guerra, Mariano Fernández Daza (Marqués de la Encomienda), Julio Cienfuegos Linares, Teodoro Encinas de la Rosa, Benigno López de Sosoaga y Borinaga (Padre López), Juan Enríquez Anselmo, Alfonso Bullón de Mendoza (Marqués de Selva Alegre), Tomás Rabanal Brito, Francisco Rodríguez Arias y Gonzalo Fausto García Morillas. Gran apoyo prestó la Revista del Centro de Estudios Extremeños, dependiente de la Diputación Provincial de Badajoz, dedicándole el número especial de mayo-diciembre de 1967, gracias a los esfuerzos de su director Enrique Segura Otaño. Justo es destacar a los que trataron de rescatar a Godoy del olvido y que ellos tampoco caigan en el mismo.
Badajoz salda su deuda bicentenaria
>> www.avidarte.com
Encuentro de Fernando VII y Godoy cuando éste era conducido a prisión.
Jorge Morgado
La ciudad de Badajoz ha saldado su deuda bicentenaria con la figura del Primer Ministro de Carlos IV gracias a la inauguración de la estatua en memoria de un personaje “olvidado” por la historia política de España. Autoridades, historiadores y cientos de ciudadanos se dieron cita en la Plaza de San Atón para dar la bienvenida a “uno de los más destacados hijos” de la capital pacense. Godoy estuvo durante toda su vida orgulloso de su origen y se refería siempre a su población natal como “la muy noble y leal ciudad de Badajoz”, algo que le valió el enero de 1807 la promesa del consistorio de levantar una estatua en su honor. Sin embargo, tras ser derrocado y desterrado un año más tarde, su figura se devaluó durante los 43 años que permaneció en el exilio hasta su muerte en París (Francia), en octubre de 1851, sin que su desaparición apenas interesara ni en Francia ni en España. Tras más de 200 años y 167 corporaciones municipales, el pleno municipal de Badajoz decidió hacer efectiva la promesa histórica de levantar una figura en su honor y trasladar los restos del fallecido político a la capital pacense para saldar la deuda pendiente y ensalzar una figura que se encontraba en el olvido. La imagen de Godoy mide 2,70 metros, recoge la figura entera del político vestido de militar, en recuerdo del bicentenario de la contienda que este año se celebra, y se asienta sobre un pedestal de mármol procedente de Portugal. Además, la estatua está orientada hacia el sur, en dirección a la localidad de Olivenza, como recuerdo a la firma del Tratado de Badajoz en 1801, por el cual el municipio fue devuelto a la Corona española.
tu revista online www.grada.es
·31·