Criar a los hijos para las amistades interraciales cristianas
emociones que pueden estar experimentando. Usted es quien mejor conoce a su hijo/hijos y qué información pueden manejar. Cuando trate con niños más pequeños, tómese el tiempo necesario para compartir pacientemente con ellos lo que está haciendo para mantener a su familia a salvo. Cuando trate con preadolescentes y niños mayores, pregunte si alguna vez han experimentado maltrato o racismo, o si han experimentado que le suceda a alguien más. Esté atento a los cambios en el comportamiento de su hijo. Algunos niños pueden volverse más hostiles, mientras que otros pueden volverse inhibidos o temerosos. Si le preocupa que su hijo pueda estar pasando por un momento difícil con ansiedad, miedo o angustia, llame a su pediatra o proveedor de salud mental para obtener más apoyo. Limite lo que su hijo ve en los medios de comunicación. Evite dejar la televisión encendida en el fondo. Con los niños mayores y los adolescentes, debe verlos y hablar con ellos sobre lo que están viendo. Preste atención a sus observaciones y comparta su propia perspectiva sobre lo que está sucediendo. Utilice las pausas de los anuncios o pause el vídeo para tener breves discusiones sobre lo que están viendo o acaban de presenciar en la televisión. Con los niños más pequeños, limite el uso de la televisión y del teléfono inteligente o de la tableta, especialmente cuando se trata de las noticias. Asegúrese de que cualquier medio de comunicación que estén consumiendo se encuentra en las zonas comunes de su casa donde pueda comprobarlo fácilmente. Sea consciente de sus propias emociones. Como adulto es vital sintonizar con lo que sientes y asegurarte de que estás bien. Si no te sientes bien o eres incapaz de afrontarlo, pide ayuda para lidiar con el trauma y el choque emocional que los eventos e imágenes pueden estar teniendo sobre ti. Además, haga una lista de sus propias estrategias de afrontamiento, y cuando necesite emplearlas, compruebe con su lista. Utilice este momento de enseñanza. Es una buena oportunidad para que las familias de todas las razas discutan la historia del racismo y la discriminación en el país en el que viven y decidan en familia cómo pueden involucrarse para ser agentes de cambio en su sociedad. Aprovechen los recursos adecuados: los buenos recursos pueden ayudar. Si tiene dificultades para encontrar las palabras adecuadas para compartir con sus hijos en estos momentos, no tenga miedo de utilizar buenos libros u otros recursos que puedan ayudarle a comunicarse eficazmente sobre este tema con sus hijos. Los consejos compartidos anteriormente también pueden ser útiles. Este es un buen momento para recordarles a sus hijos que nadie es perfecto. Además, comente lo que ha aprendido durante estos momentos de inquietud y lo que puede hacer como familia para intensificar sus esfuerzos no sólo para decir que no es racista sino para ser antirracista.
HABLA Y ACTÚA Está bien admitir que la gente es tratada de manera diferente según el color de su piel, su etnia, su casta, su tribu, su género, o donde podrían vivir, y dar ejemplos de dónde está ocurriendo esto actualmente, si lo sabes. Esta es también una oportunidad excelente para mostrar a sus hijos cómo hacer una diferencia positiva. Por ejemplo, su familia puede decidir ser proactiva al buscar la forma en que su iglesia u otra institución se ocupa de las diferencias. También puede decidir llamar a la persona del ayuntamiento o al superintendente de escuelas o a algún otro político local para RECURSOS DE LIDERAZGO PARA UNA MAYOR COMPRENSION CULTURAL Y RACIAL | 105