Treinta retratos de maestra

Page 168

30 retratos-3ª parte

22/12/04

15:41

Página 167

CARME ISALT CANALS

llo en la mirada, la libertad en el gesto, la curiosidad de la pregunta, la apertura a la verdad… Como maestra de Educación Especial, nos cuenta que tiene el privilegio de poder escuchar y estar a solas con niños o niñas que tienen muchas dificultades, pero también mucho para dar. Aunque sea poco tiempo, ella siente que lo amplía viviendo una relación real y con un sentido construido entre dos. Carme busca una relación donde vida, conocimiento y corazón se acompañen amistosamente, y por eso no está a gusto con la fragmentación de tiempos, de contenidos, de objetivos, de asignaturas, de espacios de la escuela normal, porque apaga lo que pueda surgir de vivo e intenso de cada una, de cada uno y de ella misma. Dice que le gusta el Tai chi y, desde que lo practica y forma parte de ella, ya no puede decir: “hasta aquí estoy yo, y hasta aquí ya no estoy. Cuando hago Tai chi, las criaturas de tres años lo están haciendo conmigo, porque de algún modo eso también soy yo”. Con ella, nos preguntamos cuánto hay de fuera de sí, fuera de una y uno mismo, en la escuela normal: en la maestra, en el maestro, en la niña y en el niño, en las familias, cuando vida, conocimiento y corazón no van juntos en la escuela y en la vida. En el fuera de sí está un mundo oscuro que nos llena de tensiones, de tristeza, de desazón, de desencuentro, de depresión, de poder, de conflicto, de locura… Carme nos explica que “lo importante es establecer vínculos de sentido entre aquello que están aprendiendo y lo que les estoy enseñando… Lo que pretendo básicamente es que aprendan a escribir y a leer integrando una manera de entender el mundo desde su propia experiencia; que aprendan a estudiar, a pensar por una misma y uno mismo, a tener ideas propias…” Carme se emociona recordando que esto lo aprendió de Antonia.

© PRAXIS

167

También ha buscado formas de enseñar donde no se pierda lo que para ella es importante: “Me gusta trabajar por proyectos porque las criaturas escogen lo que les interesa; hacen sus preguntas. Así podemos establecer un vínculo entre la vida y la escuela. La escuela no es una cosa que se autogenera, sino que sirve para explicar lo que les pueda interesar. Los proyectos me ofrecen este espacio de trabajar sin libros de texto, sin una realidad a priori construida, sin partir de una disciplina o una lectura concreta, sino desde su propia experiencia. Con los proyectos, las niñas y niños aprenden a pensar, aprenden a estudiar, aprenden que en la escuela hay maestras que escuchan y están atentas a sus preguntas… Para explicar, por ejemplo, cómo empezó la vida, les hablo y construimos conocimiento desde muchos lugares, aparte de su experiencia: la religión, la mitología, el arte, la historia, la filosofía, etc. Todo eso es más estimulante y gratificante para ellas y ellos y para mí, porque todos y todas formamos parte de esa construcción, nos ponemos a buscar, a ordenar, a sistematizar, a leer, a escribir, a disfrutar, a vivir…” Expresa la suerte de haber compartido esa pasión en la construcción de proyectos con Montse Ventura, que fue asesora en la escuela donde trabaja ahora. Con ella ha podido tender puentes entre lo que aprendió en el Leber, lo que es para ella la enseñanza y lo que reconoce de sus maestras anteriores.

La importancia de la complicidad

Para Carme es importante el vínculo, la relación y la complicidad con sus alumnas y alumnos, así como abordar la pregunta agazapada que despliega todo un universo de conocimiento. Un vínculo que se protege cuando no dejas que las normas,


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.