Maracaibo, martes, 27 de abril de 2010 SUCESOS VERSIÓN FINAL 19
TRAGEDIA
Su propia esposa pagó para que lo mataran
Caso del dueño de La Floresta tema del momento en Caracas Oswaldo Karam Maciá se salvó milagrosamente el 20 de marzo. Su esposa y su suegra contrataron a un par de sicarios para liquidarlo. Pero se cayó el plan. Ahora están detenidas en el Cicpc. Veamos. Equipo de Investigación investigacion@versionfinal.com.ve
O
swaldo Karam Maciá es el mayor accionista de la clínica La Floresta, una de las más prestigiosas de Caracas por ser líder en cardiología no invasiva, así como en cirugía de colon, recto y ano. Karam Maciá está a punto de construir en Maracaibo un centro de especialidades único en Latinoamérica, superior a uno que está por inaugurar en Punto Fijo. Perdió algo de dinero en la caída de Bolívar Banco y Banco Canarias. Es accionista en un periódico capitalino, y reside en el exclusivo condominio Galerías Country de la Lagunita, al este de Caracas. Pero desde el 20 de marzo su vida se convirtió en una noticia diferente al mundo de los avances científicos, al salvarse milagrosamente de ser asesinado por dos sicarios, que según el Cicpc fueron, aparentemente,
Karam Maciá, empresario, salvó su vida de un atentado gracias a una corazonada que le llevó a no atender a una vecina.
contratados por su esposa Raquel Terán de Karam. El empresario, de profesión abogado y economista, estaba solitario en su hogar en la medianoche cuando una vecina tocó a su puerta solicitando una ayuda. Karam la observó a través del ojo mágico de la puerta, pero guardó silencio porque sospechaba que se trataba de algo extraño. No le abrió y con ello se evitó una tragedia. Los sicarios acechaban a escasos metros. Extraño suceso Los delincuentes interceptaron a María Eugenia Rotaris y al chofer, cuando entraban en su Explorer al edificio. Lograron burlar a los vigilantes de la garita y se ocultaron de
los rondines internos. Entraron al apartamento de Rotaris y le explicaron el plan. Si quería sobrevivir, debía ir al apartamento de Karam. Ella accedió, pero no logró hacerlo salir. Los sicarios cambiaron de objetivo. Comenzaron a llenar maletas con objetos de valor y dinero. Entonces volvieron a la Explorer. Ella y su chofer iban en el piso del asiento trasero. Salieron sin problemas y se dirigieron a un barrio para notificarle al jefe de la banda que el crimen de Karam fue imposible, pero que para no perder el tiempo llenaron las maletas de objetos valiosos. Surgió una fuerte discusión entre los dos sicarios, quienes se culpaban entre sí del fiasco. Al momento se cayeron a tiros y quedaron mal heri-
La pesadilla del divorcio La actual semana comenzó con una Caracas –al menos en el estealborotada por el curso que lleva el caso, porque fue su esposa quien pagó por su cabeza, en aparente complicidad con la suegra. Karam y su esposa Raquel Terán, de 39 años, comenzaron en el 2006 un proceso de divorcio. De acuerdo con las investigaciones, el dueño de la clínica le habría ofrecido 8 millones de dólares, el apartamento y unos vehículos a cambio de la firma del divorcio. Sin embargo, ella rechazaba tal oferta al considerar que estaba lejos de sus aspiraciones. Mientras negociaban, Oswaldo Karam comenzó a aparecer en público con una joven elegante, lo cual molestó a la esposa.
El 24 de junio de 2007 apareció en El Nacional una reseña social sobre el bautizo de una niña. Karam sale en una foto sosteniéndola en los brazos. Y se señala que la madre de la bebé es Eglée de Karam. Esa información provocó la ira de Raquel. Introdujo una demanda para que ninguna otra mujer usara ese apellido, mientras no se concretara el divorcio. Logró su objetivo temporalmente, pero persistió la posición de Karam en no ofrecerle algo distinto al paquete original. De acuerdo con el Cicpc, Karam y Eglée se siguieron mostrando en sociedad, viajaban juntos y llevaban una vida feliz, lo cual incre-
mentaba la frustración de Raquel. En el curso de las investigaciones hubo pistas que condujeron a una lujosa casa de Santa Rosa, por la avenida Andrés Bello de Caracas, donde Raquel y su madre, la señora Raquel Hunter de Terán, de 54 años, se reunían con sujetos extraños. Un supuesto amante de la mamá de Raquel, de nombre Luis Eduardo Carrillo, de 38 años, coordinaba los encuentros. Fue ahí donde cuadraron el plan. Los dos asesinos a sueldo contratados fueron Edgardo Torres, de 24 años, y Kleiver García, de 19. Un tercer hombre aguardaría a las afueras del edificio. El par de malandros murió y el tercero ya está ubicado.
dos. El jefe de la banda ordenó a la francesa que los trasladara al hospital militar. Acataron, pero no les dieron cabida en ese centro asistencial. Cuando pasaban por El Guarataro, el jefe hamponil constató que sus compinches estaban muertos. Recogió las armas, bajó de la Explorer y se marchó. La dama y su chofer, con sus manos temblorosas, tomaron el mando de la camioneta y retornaron a su residencia con el par de muertos. Llamaron a la policía y entonces arrancó una de las más engorrosas investigaciones policíacas de los últimos tiempo. El punto de partida fue la imagen de uno de los sicarios que portaba una foto de Oswaldo Karam en uno de sus bolsillos. Se trataba de un crimen por encargo. ¿Quién lo ordenó?
Fin de las investigaciones El sábado en la madrugada el Cicpc capturó a Raquel Alicia, en Residencias “Raquel” de Valle Arriba y a su madre Raquel Hunter en Las Mercedes. Llega la fase final de los interrogatorios para reafirmar que las dos Raquel, hija y madre, financiaron el crimen de Oswaldo. Ayer permanecían en la División de Capturas de El Rosal. Llegan las audiencias de presentación que permitirán entre otras cosas conocer si es cierto que pagaron una altísima suma en dólares para liquidar al dueño de la clínica La Floresta, quien por ahora está en el exterior. De momento se desconoce si el nuevo centro de especialidades médicas en Maracaibo se concretará.
Riña familiar dejó tres hombres con quemaduras Juan José Faría Un padre y sus dos hijos sufrieron graves quemaduras de segundo y tercer grado en medio de una riña familiar que se registró el domingo a las 4:00 de la tarde en la avenida 4 del sector La Arrocera, en La Concepción, municipio Jesús Enrique Lossada. Jorge Pérez, de 48 años, fue internado en el Hospital Universitario de Maracaibo. Presentó fuertes heridas en el 90 por ciento de su cuerpo. Uno de sus hijos, Jonathan Pérez (24) sufrió heridas en el 30 por ciento de su cuerpo, como su hermano, Johan Pérez, de 20 años. Funcionarios de la Policía Regional de La Concepción no tienen exactitud de los hechos. Al parecer, uno de los dos hijos de Jorge Pérez estaba borracho y al parecer había consumido drogas. Llegó a la casa, se roció de gasolina y el fuego consumió parte de la residencia. Logró herir a dos de sus familiares. Los tres siguen bajo estricta observación médica.
LA CONCEPCIÓN
Murió un adolescente herido en protesta Juan José Faría Roberto Segundo Argote, adolescente de 17 años, murió ayer en horas de la mañana después de agonizar cuatro días en la unidad de cuidados intensivos del Hospital General del Sur. El joven, residente de La Concepción, recibió cuatro balazos en varias partes de su cuerpo cuando presenciaba una protesta protagonizada por trabajadores del Instituto Municipal de Aseo Urbano, frente al relleno sanitario La Ciénaga. Unos sujetos que viajaban en un vehículo dispararon al grupo. Esta versión no se ha confirmado. Fuentes policiales informaron que el adolescente recibió cuatro balazos en otros sitios y lo lanzaron en el basurero. Una ambulancia que pasaba cerca del cementerio El Edén, levantó al joven malherido y lo llevó al hospital de la localidad. Luego fue remitido al Hospital Universitario de Maracaibo y murió ayer en horas de la mañana.