Maracaibo, jueves, 16 de octubre de 2008 POLÍTICA VERSIÓN FINAL 9
Jerónimo Carrera Damas, presidente de la tolda, dice que no rinden culto a personalidades
“El PCV nunca fue chavista” Dice que Hugo Chávez es revolucionario que viene de capas de la pequeña burguesía. Opina que un verdadero revolucionario debe llevar una vida “incómoda”. Asegura que el Psuv no puede hacer una revolución socialista, ya que es “policlasista” como AD. José Flores Castellano (Urbe 2006) jflores@versionfinal.com.ve
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“Caramba!” “¡¿de Maracaibo?!”, exclama al atender la llamada de este rotativo en su residencia en Caracas. Jerónimo Carrera Damas, presidente del Partido Comunista de Venezuela (PCV), habló de su relación con el presidente Hugo Chávez, quien ya no pudo esconder más su descontento porque la tolda del gallo rojo no se haya disuelto para integrarse al PSUV. Considera que las recientes declaraciones y discursos presidenciales en contral del PCV se deben a una conveniencia electoral. Por eso no lo toma tan en serio. —El PCV y Manuel Rosales ahora tienen algo en común: La promesa del presidente Hugo Chávez de borrarlos del mapa político. ¿Qué opinión le merece que ahora pretendan meterlos en el mismo saco de la oposición? —Le puedo decir una sola cosa: En cosas electorales parece que es como una fiebre, yo la comparo más bien con el carnaval. Después viene, como todos sabemos, el miércoles de ceniza. Al terminar el carnaval hay muchos arrepentimientos y hay personas que han hecho tal o cual cosa y después dicen ‘caramba lamento esto’ o ‘debí hacer tal cosa y no la hice’, en fin. Por eso yo no tomo tan en serio estos episodios, creo que es parte de un juego electoral, cada quien sabe qué jugada es la que cree que le conviene. —¿El PCV ha dejado de ser revolucionario como dice el jefe de Estado, o ha dejado de ser “chavista”? —Nunca fue chavista. La única denominación que aceptamos con derivación del nombre de alguna persona es la de marxistas-leninistas, y es cuestionable incluso eso, Carlos Marx no hubiera estado de acuerdo con esa denominación, porque nosotros somos en realidad materialistas dialécticos. Somos un partido de la clase obrera, no tenemos cultos a ninguna personalidad, creemos que es la clase social la que determina la conducta de las personas. Hay personas que responden a intereses de la burguesía, otros a los intereses de la clase obrera y aquéllos intermedios que corresponden a lo que llamamos la pequeña burguesía. Nosotros
somos un partido que se declara de la clase obrera, al servicio del proletariado, tenemos una ideología que ha venido desarrollándose a lo largo de más de siglo y medio, y que no está ligada a circunstancias particulares en tal o cual país y mucho menos en cosas electorales. Para nosotros esto es un asunto electoral, esto actual, que no tiene mucho que ver con el fondo de la cuestión, con el desarrollo que cada pueblo debe asumir gradualmente hacia una etapa superior de la humanidad, que es el socialismo para abrir puertas al comunismo. —¿Estas arremetidas por parte del primer mandatario pudieran traducirse en agresiones más graves contra el PCV? —No creo, como acabo de decir, esto está legado a una situación concreta, electoral, y esto es pasajero. Las cosas que nuestro partido ha apreciado y por las cuales hemos respaldado a Hugo Chávez desde hace más de diez años, no han cambiado: Los problemas del país siguen siendo los mismos: Tenemos una economía dependiente del petróleo, con muy poca industria. Necesitamos resolver problemas sociales como el desempleo, de donde se deriva en gran parte la delincuencia. Gente que no consigue un empleo permanente, bien retribuido, fácilmente cae en la delincuencia. Lo que Marx llamó el lumpen proletariado, o sea, un proletariado que no tiene conciencia de clase se va sintiendo gradualmente desplazado y trata de sobrevivir por medio ilícitos. Eso es lo que sucede aquí en Venezuela. —¿Estos señalamientos repercuti-
rán negativamente en los resultados de las elecciones regionales de noviembre para el chavismo? —Eso depende de cada región del país. Por ejemplo, en una región como el Zulia, que es una de las cuatro regiones originarias del Partido Comunista de Venezuela, estamos muy arraigados. A nosotros no nos afecta en nada eso en el Zulia, es probable que haya algunos estados donde el PCV ha tenido menor influencia histórica y ello pueda hacer algo de mella. Pero eso no nos preocupa, nosotros no somos un partido electoral, somos un partido revolucionario precisamente. Lo cuestionable es el electoralismo cuando afecta muy a fondo a ciertos revolucionarios y los conduce a posiciones más bien opuestas. Aquí hemos tenido muchos casos, nosotros hemos visto figuras del partido comunista como Pompeyo Márquez y Teodoro Petkoff, que por la vía electoral han llegado a tener posiciones de derecha. Para nosotros las elecciones son un mero episodio, pero no tienen la clave para el futuro del país. —¿El Presidente de la República es un revolucionario? —Yo sí lo considero revolucionario. No es un revolucionario proletario, es un revolucionario que viene de capas de la pequeña burguesía, inspirado sobre todo por el pensamiento bolivariano. Yo conozco personalmente a Hugo, me considero su amigo, porque yo no rompo mis amistades. Admiro la evolución que él ha tenido en el sentido patriótico de querer sacar a Venezuela de la dominación de
ENFOQUE
“El socialismo del siglo XXI es como la etiqueta para la venta de un producto” —¿Cómo definiría el socialismo del siglo XXI? —Creo que eso es simplemente como una etiqueta para la venta de un producto, comercialmente hablando. No hay socialismo del siglo tal o del siglo cual. Es como si dijéramos ‘ahora necesitamos un socialismo del siglo XXI’, distinto al cristianismo de hace veinte siglos. Eso es absurdo, el socialismo es una cosa muy concreta: La abolición de la propiedad privada sobre los me-
Jerónimo Carrera Damas asegura que Chávez arremetió contra el PCV por una conveniencia electoral.
los Estados Unidos, romper con la doctrina Monroe tal como lo hizo Fidel Castro en Cuba. Eso ya es un gran mérito histórico que nosotros los comunistas apreciamos, pero no es un revolucionario en el sentido marxista, no es la revolución del proletariado. —¿Cuáles son las diferencias entre el PCV y el PSUV? —Aquí se había creado un partido comunista en 1931 como parte de la Internacional Comunista, y por lo tanto un partido de la clase obrera, y un comunista que vino del extranjero, conocido luego muy ampliamente, llamado Rómulo Betancourt, vino con la tesis de que aquí no se necesitaba un parti-
dios de producción. No podía producirse en siglos anteriores al XIX porque no había una gran producción industrial, y se trata precisamente de medios de producción, que basados en la tecnología, pueden dar una gran producción. Esa gran industria es la que genera un proletariado capaz de hacer el socialismo. —¿En Venezuela se toma verdaderamente en serio la lucha de clases? —Que la tomemos en serio o no, eso no cambia nada. La realidad es que la lucha de clases es independiente de la voluntad de las personas, la lucha de clase existe porque hay gente que vive del trabajo ajeno, esa es la pura verdad. Entonces hay una posición natural entre el patrono y el trabajador, es decir, entre el explotador y el explotado.
do de clase obrera, porque casi no había clase obrera, sino que se necesitaba un partido policlasista, de masas, amplio, que abarcara gente de clases sociales diversas. Por eso quedó fuera del partido comunista, y fundó un partido como él quería: Acción Democrática, con una labor nefasta, entregado por completo a los intereses norteamericanos. Hoy se pretende también que un partido policlasista, de masas, puede hacer una revolución que lleve al socialismo. Yo lo digo sinceramente, eso es una ridiculez. Es completamente imposible. —¿Su partido ha contemplado hacerle oposición frontal al Gobierno, ya sea antes o después de los comicios regionales? —No, de ninguna manera. El apoyo nuestro no está ligado a coyunturas electorales, sino en un análisis marxista de la situación del país. Aunque ellos no lo entiendan, el partido que ha creado Chávez es un instrumento de resistencia ante las presiones imperialistas que se van a acentuar más ahora con esta crisis del capitalismo, y es la que explica la agresividad de Estados Unidos a través de Bush y sus últimos presidentes. Esa agresividad es una amenaza para Venezuela, y los comunistas necesitamos enfrentarla y nuestro primer aliado es este partido que se está creando ahora.