22 VERSIÓN FINAL SUCESOS Maracaibo, viernes, 20 de febrero de 2009
A menos de un año del Acusó de corrupta a la familia Chávez en la Asamblea Nacional asesinato de dos de sus seguidores, pistoleros mataron ayer a su hermano en Barinas. Adán y Argenis Chávez son señalados de nuevo.
DESTIERRO Y PERSECUCIÓN
Las denuncias de Azuaje y su sentencia de muerte ARCHIVO
Juan José Faría (Unica 2006) jfaria@versionfinal.com.ve
N
o titubeó para acusar de asesinos a los hermanos del presidente Chávez. Wilmer Azuaje, el diputado chavista disidente, apuntó directamente a Argenis y a Adán Chávez de pagar para asesinar a su hermano César, ayer a las 4:00 de la mañana, en una estación de servicios de Barinas. La muerte le sopla la oreja, según asegura, desde principios de 2008 cuando denunció públicamente a la familia presidencial de mantener en Barinas un grifo abierto de corrupción. Fue el 26 de marzo del año pasado cuando llegó a la Asamblea Nacional con unas carpetas bajo el brazo. Dice que fue su sentencia de muerte. Antes, en el 2005, ya sostenía una muy mala relación con Argenis Chávez, con quien tuvo constantes enfrentamientos públicos desde que lo acusó de querer escoger a los candidatos por el estado Barinas para las parlamentarias. Se vio obligado entonces a solicitar amparo ante el Tribunal Supre-
mo de Justicia. Ya lo había dicho: lo que le pasara a él o a su familia, sería responsabilidad absoluta de, como lo llama él, el clan Chávez. La denuncia Fueron muchas, pero se concentraron en una sola: corrupción. Se basó, de acuerdo con Azuaje, en la compra de varias fincas en Barinas a través de testaferros desde que el padre del Presidente, Hugo de los Reyes Chávez, tomó la gobernación en 1999. Desde entonces los Chávez Frías tendrían más de 15 propiedades de innumerables hectáreas en todo lo ancho del sur llanero. Argenis y Narciso Chávez fueron blanco de sus denuncias. Habrían adquirido en 2008 dos fincas, valoradas juntas en casi dos mil millones de bolívares y cada una con más de 3.500 hectáreas. Los testaferros serían, según sus denuncias, trabajadores de la finca “La Chavera”, también propiedad de la familia presidencial. “Son fincas ubicadas en Barinas. Tengo la documentación de cinco, pero presuntamente son 17”, dijo el legislador a los medios hace un año. Decía estar seguro, pues su propia
madre fue la registradora de los documentos. Conocía detalles secretos de los negocios. La familia se vio rodeada de acusaciones como enriquecimiento ilícito, corrupción, tráfico de influencias. Azuaje y los Chávez se declararon la guerra. Éstos dijeron que ellos tenían dinero para adquirir las propiedades gracias a sus profesiones. Ese 26 de marzo Azuaje salió de nuevo con su carpeta bajo el brazo. Aunque llegó pidiendo una investigación por los casos de corrupción, los diputados acordaron que sería él el investigado. Un tribunal prohibió a los medios publicar algo respecto al caso. La familia Chávez nunca más fue tocada por el caso. Semanas más tarde el Tribunal cerró el expediente de averiguaciones de corrupción contra la familia. Alegato: No se presentó ningún recurso de apelación contra el fallo en los cinco días estipulados. El diputado no se calló. Acusó que la Gobernación construyó carreteras sólo hasta la entrada de esas fincas y hasta mostró videos de las nuevas residencias en los poblados de Sabaneta y la capital del es-
Wilmer Azuaje denunció ahora a los hermanos del Presidente de ser los asesinos de su hermano César José Azuaje.
tado. “Los hermanos míos que están siendo acusados de que compraron no sé cuántas haciendas, que salgan ellos a defenderse. Que den la cara. Yo no voy a asumir defensa automática. No voy a hacerlo con nadie, absolutamente con nadie”, dijo el mandatario en cadena nacional. Ellos, según el diputado Azuaje, ya le tomaron la palabra.
Según Wilmer Azuaje el 29 de abril sonaron las primeras detonaciones a sus pies. Hizo un mitin político a propósito de su postulación como candidato a alcalde de su municipio natal, el mismo de los Chávez. Rompió récord de asistencia. Minutos después de terminar el acto, pistoleros “pro oficialistas”, como él los nombró, acabaron con las vidas de dos de sus seguidores. Azuaje señaló públicamente a Argenis y Narciso. Un día después el Psuv lo expulsó de sus filas. Estuvo con el presidente Chávez desde 1998, con el Movimiento V República y hasta se postuló como diputado en el 2005 por ese partido. Aseguró que las amenazas lo persiguieron hasta el miércoles, cuando el ahora gobernador de ese estado Adán Chávez, dijo, según él, que daría muerte a los disidentes. Horas más tarde, César Azuaje estaba muerto, junto con un familiar, en una estación de servicios de Barinas. “Es innegable el desbordamiento del hampa en nuestro estado y el terror que hoy siente el ciudadano común cuando a diario lee las páginas de sucesos de los periódicos regionales: Robos, asaltos, violaciones, mutilaciones, secuestros, asesinatos, ajusticiamientos, son algunos de los titulares que nos enlutan permanentemente”, escribe de entrada el diputado en su página oficial.