RANCHO LA MARQUEZA

Elegancia

y Tradición

Podemos decir que Don Ignacio, desde hace cuatro generaciones, sembró en el seno de su familia el amor por el caballo. Éste se mantuvo alimentando su pasión la cual lo llevó a adquirir en el año 1908 al que fuese el mejor caballo de Paso Fino de la época, El Mico, quien pasteaba en la sabana de Bogotá. A través de los años, los descendientes de Don Ignacio continuaron su legado de amor por el caballo y la crianza de este en su finca de Popayán. Ubicada en Timbio, Cauca, a 13 kilómetros de su natal Popayán, rápidamente se convierte en la favorita de sus numerosas propiedades. Don Ignacio, reconocido ganadero y a la vez, uno de los terratenientes más grandes de Colombia, también fungió como fundador del Fondo Ganadero y fue creador de la empresa de correos en su país. Por otra parte, construyó gran

Tres generaciones después, nace el que eventualmente se convierte en el reconocido médico oftalmólogo, el Dr. Manuel Ignacio Vejarano, quién en honor a su bisabuelo hereda el nombre de “Ignacio”. Al igual que Don Ignacio, el benjamín lleva dentro esa pasión por el caballo que alimenta disfrutando de ellos durante largas temporadas de verano en Hacienda La Marqueza.

EL CRIADERO LA MARQUEZA ES UNA HACIENDA DE MÁS DE 100 AÑOS DE TRADICIÓN FAMILIAR, DEDICADA A LA CRIANZA, ENTRENAMIENTO Y COMPETENCIA DEL CABALLO COLOMBIANO.

parte del ferrocarril a finales del 1890 entre muchos otros aportes que propulsaron el avance socioeconómico en Colombia. En el año 1990 su biznieto, el Dr. Manuel Ignacio Vejarano Restrepo, crea lo que es el Criadero La Marqueza en las instalaciones de Popayán que ya se había establecido como finca de la familia llevando el nombre de Hacienda La Marqueza. Desde sus inicios hasta la fecha, La Marqueza ha sido propiedad de Don Ignacio Muñoz y sus descendientes conservando este valioso patrimonio familiar generación tras generación. El Criadero La Marqueza sostiene alrededor de 80

El Criadero La Marqueza nace gracias al distinguido y acaudalado empresario, Ignacio Muñoz (1857-1935), quien impulsado por su pasión y afición por el caballo adquiere la famosa Hacienda La Marqueza.

ejemplares en sus instalaciones por todos esos años. En 2008, el Dr. Manuel Vejarano basado en su amplio conocimiento de la raza en las cuatro modalidades del caballo colombiano, decide adquirir lo que a su entender son los mejores embriones de cada una de estas. Aparte de dichos embriones suma a su criadero las yeguas insignias de cada una de estas modalidades con fines reproductivos al más alto nivel. En el 2013 con fines de fortalecer el Criadero La Marqueza, adquiere el mejor reproductor de la historia del Paso Fino, Dulce Sueño de Lusitania FC repitiéndose la historia 105 años después cuando La Marqueza obtuvo el mejor caballo del momento. En ese mismo año, se ve con la necesidad de montar una nueva sede en Bogotá con la finalidad de facilitarle el acceso no solo a los colombianos amantes del caballo sino también a los extranjeros que quisiesen disfrutar de los ejemplares de La Marquesa. Ésta a su vez, continúa con el nombre ancestral de Hacienda La Marqueza donde funge como vitrina comercial del Criadero La Marqueza. La crianza continúa llevándose a cabo en las instalaciones de Hacienda La Marqueza en Popayán. Actualmente el Criadero La Marqueza cuenta con ambas sedes: Bogotá-Tenjo y Popayán. La Marqueza cuenta con tecnología de último modelo y un equipo de profesionales altamente capacitados dedicados a mantener cada aspecto de su criadero al más alto nivel. Conjuntamente cuenta con un departamento de asesoría respaldado por la experiencia incalculable de generaciones

UNA EMPRESA EQUINA CON VALORES DE HONESTIDAD Y HONORABILIDAD EN EL ÁREA DE COMERCIALIZACIÓN DEL EQUINO COLOMBIANO.

dedicadas a la excelencia dentro del deporte equino. Aparte de esto contrata genetistas de renombre internacional al igual que dentro de Colombia con fines de lograr soportes científicos que con mayor seguridad arrojan resultados de excelencia en sus cruces equinos. Con esto garantizan seguir aportando magnificencia al deporte con futuros reproductores y donantes élites en las cuatro modalidades del caballo colombiano. Es su misión formar parte de la evolución y mejoramiento del caballo colombiano reguardando el respeto, el amor y la pasión por el mismo. Parte de su proyecto es globalizar el caballo como producto singular de exportación a través de Embajadas y Consulados Colombianos haciéndolos llegar a los cinco continentes. Creyendo firmemente que con el entusiasmo adecuado, el trabajo en equipo, y una dosis de suerte, en años venideros sea una sólida industria equina desde Colombia para el mundo.