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Unión Profesional realiza una consulta a sus miembros a raíz del COVID-19
Lograr más interlocución, avanzar en la digitalización y reforzar la función deontológica aúnan el consenso entre las corporaciones colegiales Contenida en el plan de acción de Unión Profesional frente al COVID-19 se encuentra la consulta llevada a cabo entre sus miembros desde finales del mes de abril, cuyo nivel de respuesta ha sido mayoritario. Su propósito, acercarse a las actuaciones y asuntos que están desarrollando las corporaciones colegiales a nivel nacional y, de ese modo, afinar mejor los espacios comunes de trabajo y necesidades del conjunto de profesiones colegiadas. Estructurada en cinco bloques que recorren las cuestiones capitales que atañen a la actividad colegial y el ejercicio profesional, los resultados arrojan inquietudes compartidas, como lograr mayor interlocución con los poderes públicos y responder a las preocupaciones de profesionales y ciudadanos, y desafíos de futuro, como avanzar en la digitalización de los servicios y robustecer la función deontológica. Problemática profesional y social Al entrar en detalle, el primer bloque identifica las medidas adoptadas en esta situación por los Consejos Generales y Superiores, y Colegios Profesionales de ámbito nacional. Así, el desarrollo de guías y protocolos para profesionales en un 86,7% del total y la puesta a disposición de formación gratuita o con descuento efectuada por un 80% han sido las más aplicadas. En un segundo grupo de medidas, se ha puesto en marcha asesoramiento específico en materia laboral, recursos de la corporación gratuitos o iniciativas solidarias de ayuda frente al coronavirus. Por su parte, aproximadamente la mitad de los miembros ha habilitado o ampliado una comisión para analizar los impactos que puede generar en la sociedad la crisis actual. Junto a ello, se han articulado canales ad hoc para los ciudadanos por medio de buzones de consulta y teléfonos de atención. Entretanto, otros valoran cómo proceder para cubrir mejor este terreno. En el mismo plano, tres de cada cuatro acometieron un plan de contingencia en medios humanos, materiales y económicos para afrontar las prioridades vigentes. De los apartados confluyentes de estos planes sobresalen los protocolos de seguridad, facilitar el acceso a productos de protección para sus profesionales, el funcionamiento digital mediante el teletrabajo y de servicios a los colegiados y ciudadanos, o buscar una mayor interlocución con los poderes públicos. En otros casos, más allá del teletrabajo y algunos reajustes no se han tomado medidas extraordinarias. En relación con otras actuaciones, el 58,6% posee una comisión o función destinada a la prospección de escenarios y crisis futuras similares o diferentes a la 10 g Profesiones
actual cuya finalidad sería prevenirlas y poner en conocimiento de las autoridades. En el resto, se estudia su establecimiento o ya se contaba con una estructura semejante para esta tarea. Más consultas laborales y formativas Respecto al volumen de las actividades de las corporaciones colegiales que más han crecido, para el 75% está la formación, las asistencias varias a profesionales, la labor consultiva en el ámbito público y la coordinación interna de la organización. Precisamente, en este último aspecto ha destacado la unanimidad positiva en su proceder. A su vez, cabe apuntar el alza en la acción de comunicación. La función deontológica, la gestión de medios económicos de la corporación o la persecución del intrusismo han mantenido su tono en general. Los ámbitos principales de las consultas de los y las profesionales recibidas en las organizaciones colegiales han sido el laboral, acerca de los cambios en las condiciones de ejercicio y riesgos laborales, y el formativo. En la mitad de los casos también han recibido cuestiones sobre fiscalidad, de índole económico-financiera y de digitalización. Caída en el ejercicio por cuenta ajena en privado Uno de los datos más relevantes es que dos de cada tres miembros, el 66,7%, estiman que la actividad de su profesión se ha reducido, al menos en alguna rama, desde el estado de alarma. De forma inversa, el tercio restante sostiene que se ha incrementado ante una mayor demanda de sus servicios a causa de su campo concreto. Sobre la disminución sufrida se subraya que, en muchos casos, ha superado el 40%, mientras que las alzas han excedido el 60% en alguna ocupación. Si descendemos a la condición laboral, en el 70% de las profesiones el ejercicio por cuenta ajena en el sector privado ha sido el más castigado. En cambio, el ejercicio por cuenta ajena y propia en el sector público es el que parece mostrar una mayor estabilidad por el momento. En sintonía, más de la mitad considera que el grado de vulnerabilidad general que presenta su profesión ante el panorama actual es moderado, algo significativo. Y solo un tercio espera que pueda experimentar más oportunidades de actividad debido al COVID-19. Teletrabajo y avance de la digitalización En vínculo con el bloque anterior, el 80% de los miembros cuenta ya con una plataforma digital de servicios nº 185 g mayo-junio 2020