Opinión
“Los pájaros del mismo plumaje vuelan juntos”
¿La visibilidad te esconde? Recuerdo años en los que ir a la mani del 28J te exponía totalmente: pocos manifestantes, muchos periodistas, sin disfraces y con la homosexualidad encabezando “las listas de lo peor”; quien asistía, salía del armario del todo y de golpe. Ahora si vas a la mani-marcha-fiesta de junio nadie te ve, puedes hacer lo que quieras y nadie lo sabrá, entre tanta muchedumbre y tantos ropajes espectaculares pasarás desapercibido, puedes dar rienda suelta a tus fantasías como si estuvieras metido en un gran armario y aun así contar luego a tus colegas tu gran acto de valentía y visibilidad.
¿Puede considerarse gueto el colectivo LGTBI? ¿Cómo nos vemos, cómo nos ven? ¿Qué ha ocurrido que nos lleva a actuar tal y como lo hacemos? ¿Cómo lo hacemos en cualquier caso? Las personas, ¿como mismos pájaros, con mismo plumaje, volando juntos? Al menos Myers, D. dijo que “los pájaros del mismo plumaje vuelan juntos”, pero... ¿Qué ocurre con el colectivo LGTBI? ¿Somos pájaros de una misma especie que tratamos de volar juntos?
Hay quienes dicen que el semblante, la procedencia, ciertos rasgos de personalidad compartidos, gustos comunes,... permite que las personas ejercitemos el vuelo conjunto con quienes compartimos cierto parecido. Por otra Los años 80 y 90 supusieron un progresiparte, parece que lo que nos diferencia como seres humavo pero vertiginoso cambio en la mentalidad de la nos permitiría un acercamiento para aprender de los otros y seguir gente que culminó con la igualdad legal conseguida con el creciendo como personas. matrimonio. Con todo el entrecomillado posible, ¿acaso de determinada manera no nos ocurre como el/la emigrante que llega a tierra desconocida y busca a sus semejantes para sentirse recogid@, respetad@, querid@, aceptad@? ¿Acaso en tanto que persona LGTBI no nos ocurre, de alguna forma, que vemos al colectivo LGTBI como a un/a amig@ con el que podemos estar en desacuerdo en muchos aspectos pero que es por quien nos sabemos reconocidos y apoyados adelante en cuanto a nuestra sexualidad? Me gusta pensar que soy como ese cisne que se sabe como tal porque puede diferenciarse, por su caracterología, aun siendo ave por igual, al compararse con un pato. A propósito de cisnes, tal vez nos pase un poco como en el cuento de “El patito feo”: “Los cisnes (...) le respondieron: - ¡Claro que sí, eres uno de los nuestros!–, (...) el patito respondió: -¡No os burléis de mí! Ya sé que soy feo y flaco, pero no deberíais reír por eso–. Mira tu reflejo en el estanque –le dijeron ellos- y verás como no te mentimos. El patito se introdujo incrédulo en el agua transparente y lo que vió le dejó maravillado. ¡Durante el largo invierno se había transformado en un precioso cisne!. Aquel patito feo y desgarbado era ahora el cisne más blanco y elegante de todos cuantos había en el estanque”.
Pero ¿y ahora qué? ¿Ya sólo nos queda disfrutar lo conseguido? Aquel Chueca de yonquis y suciedad se ha convertido en una zona de consumo y diseño. El ocio ha cambiado los antros casi prohibidos por locales de alto postín, la heroína por las pastillas de diseño, el miedo a los atracos callejeros por la especulación inmobiliaria. ¿Aquí acaba todo? ¿Solo nos queda ver y ser vistos en zonas especializadas en homosexualidad? El caso es que en la actualidad un chico con novia la presenta en su instituto con tranquilidad, incluso alardeando de ella ¿lo hace igual el chico que tiene novio? En el trabajo una gran directiva de empresa se suele acompañar de su marido en las celebraciones, ¿lo haría igual si tuviera esposa en vez de esposo?
En la vida cotidiana numerosos gais y lesbianas siguen ocultándose, sobre todo en pueblos, pero también en familias, trabajo, colegios... o sea en todos los sitios salvo los especialmente creados para ellos, sitios como Chueca y la mani del 28J, sitios muy visibles, pero donde nadie te ve. Y es que No sé si como colectivo, tal vez como ese cisne, acaso segui- la verdadera visibilidad en la actualidad pasa por situaciones mos creyendo ser feos en algún momento. Acaso sea que fuimos, menos mediáticas, menos espectaculares, pero más difíciles y algunos somos rechazados aún tantas veces, que sentimos la ne- de afrontar. cesidad de reafirmarnos con nuestros semejantes y seguir volando juntos, aunque tan sólo nos una, en algunos momentos, el hecho de Vemos cómo inmigrantes árabes y chinos se esconden en defender nuestros derechos como personas diferentes de lo tipifica- sus guetos sin apenas relacionarse con los demás, mientras do como población normal, en términos estadísticos y por razón de que poblaciones latinas se mezclan sin problemas con los de identidad de género y/u orientación sexual. aquí sin que por ello renuncien a sus gustos y costumbres ¿a quien queremos parecernos? Aunque haya excepciones y pese a que algunas actividades se dirijan exclusivamente a personas del colectivo LGTBI, creo, y tenga Seria una pena que tras haber logrado tanto, ahora retroel valor de creencia, que si por algo compartimos vuelo es por pro- cediéramos embriagados por el éxito. mocionar el respeto y la tolerancia hacia la diversidad y, en ese sentido, no estaría de acuerdo en afirmar que lo que el colectivo LGTBI Pedro A. Pérez deseamos ser sea precisamente un gueto. Javier Águila Morales
07