Reprograma tu mente

Salud Reprograma tu mente

Por: Ana Claudia Delfín

Existe una nueva técnica energética que está cambiando la vida de las personas pulsando 32 puntos alrededor y a través de nuestra cabeza con la cual; tocando los lugares correctos tan solo con los dedos de las manos, se logra descargar nuestra mente permitiendo liberar el estrés, mejorando la calidad del sueño y también se ha comprobado que ayuda en el alivio de algunas enfermedades como Diabetes e Hipertensión.

La técnica llamada “Barras de access”, fue creada por el estadounidense Gary Douglas en 1990; estudioso de la Cienciología de Ron Hubbard y en la actualidad es aplicada en 178 países alrededor del mundo.

Api Espinoza, instructora de Yoga, es especialista en el tema desde el 2018, facilitando capacitaciones en esta materia y corriendo las barras a pacientes en nuestra ciudad.

“En una ocasión estando en Monterrey, unos maestros de Yoga me hablaron sobre ellas y dije: yo quiero experimentarlas. No exagero al decir que al día siguiente de mi sesión sentía una gran energía y quería hacer muchas cosas”, recordó.

Asombrada de los resultados tomó la capacitación y trajo a nuestra ciudad una técnica que apenas se está abriendo paso.

Destaca que lo que cada uno conocemos como “realidad”, es la suma de los juicios que a través de los años le han dado forma a nuestra vida, convirtiéndola siempre en la misma realidad; aun cambiando los escenarios los patrones se repiten, por ejemplo: mismos tipos de pareja, tendencia a no concluir proyectos, mismo estilo de ropa, mismo peinado, etcétera; asegurando que eso sucede por la información que tenemos guardada en nuestro cerebro en forma inconsciente.

“Desde nuestra niñez nos han sido sembradas una serie de ideas, juicios, pensamientos, emociones y conclusiones que nos pueden estar causando

conflicto en la actualidad, ¡y que nos han sido heredados por nuestros padres, abuelos o maestros!”, señaló y menciona algunos ejemplos como:

“Los hombres no lloran”. “El dinero no alcanza para nada”. “Hay que sufrir para merecer”.

Estos implantes, según lo explica Api, van definiendo nuestra realidad, la cual está basada en los pensamientos de las personas que nos rodean, ni siquiera ha sido una decisión propia.

Al “borrar” esas ideas implantadas las personas se sienten más relajadas, felices y capaces de tomar decisiones desde otro punto de vista, que nunca habían considerado, pero que siempre estuvieron a su alcance.

En que consiste esta técnica:

Barras: se refiere a las líneas de energía que corren en nuestra cabeza, y, al tocar cada extremo suavemente con los dedos se forma una línea por donde se puede acceder a diversos puntos de vista sobre la sexualidad, la felicidad, la salud, dinero, cuerpo y envejecimiento que han sido significativos en tu vida y que de alguna manera te han impedido avanzar en algún aspecto.

La magia se logra recostado en una camilla donde gracias a esa descarga que se efectúa con las yemas de los dedos colocados de manera estratégica sobre la cabeza, se “formatea” nuestro cerebro pasando de ondas Beta (estado de vigilia) a ondas Theta o Delta, (estados de relajación profunda).

¿Olvidarás todo?

¡No! Según nos explica la especialista, no se trata de que olvidaremos nombres o eventos de nuestra vida, se trata de la conciencia con la que veremos las situaciones que nos rodean, a partir de la liberación de esas ideas y juicios sembrados.

¿Existen efectos secundarios?

No. Muchas personas se duermen durante la sesión y en ese estado de inconsciencia la mente elimina la “basura” que impide tomar decisiones que pueden cambiarle la vida.

Una vez que el paciente recibe una sesión de Barras Access será mucho más perceptivo y entonces creará en su realidad la capacidad de elegir cambiar el “tengo que hacer” por “quiero hacer”.

¿Hay límite de edad?

No. La sesión puede durar hasta una hora en los adultos y en el caso de los bebés y niños de 20 a 30 minutos, ya que ellos están libres de muchos implantes.

¿Cuántas sesiones se recomiendan?

¡No hay límite! Te sentirás con tanta energía y felicidad, que desearás repetirlo constantemente.

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