"Consumir menos vivir mejor. Ideas prácticas para un consumo más consciente" Toni Lodeiro

Page 253

3.6.– CÓMO ALARGAR LA VIDA... DE LA COMIDA Mantener la chusma a raya Bacterias, hongos y demás microorganismos, si tienen condiciones adecuadas (calor, humedad, aire), proliferan degradando la comida. El frío los inactiva y mucho calor –cocinar– los mata, pero con el tiempo vuelven a aparecer. Qué hacer con los alimentos – Comprar y cocinar frecuentemente evita que se nos pierda comida o tener que congelar. – Sécalos (frutas, verduras) antes de guardarlos, y lava sólo los que vayas a comer o cocinar. – Separa lo maduro, que acelera la maduración de lo que le rodea. Ya habrás oído que “una manzana podrida pudre todo el cesto”. – Guárdalos bien tapados en recipientes limpios lo más llenos posible (cabe menos aire). Hay recipientes con mecanismos para extraer el aire una vez cerrados. Los recipientes opacos u oscuros (vidrio verde) protegen de la degradación que causa la luz. – La carne cruda necesita algo de aire. Si la untas con aceite conservará el color (aunque lo pierda no está mala). – Guárdalos en lugar fresco y seco. Pero ahorra energía evitando la nevera si no es necesaria. Una despensa fresca o un balcón pueden servir. – Devuelve cuanto antes los alimentos a la despensa o nevera para que no pierdan frío. – Cocina lo fresco si se va a echar a perder. Por ejemplo hervir la verdura hace que dure un par de días más. Tras esos dos días, puedes sofreírla y durará un par más aún. El caldo se puede congelar o rehervirlo cada dos días. – Lo cocinado, si vas a tardar en comértelo, déjalo destapado en lugar fresco para que enfríe cuanto antes. En cuanto enfríe, a la nevera (u otro lugar fresco). 253


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.