Revista "Las Majadillas" nº 5

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Numero 5 5 NUMERO

29 Septiembre 2014 29 SEPTIEMBRE 2014

D. JUAN DELGADO RETAMAL Alcalde de 1914 a 1923 Oleo de Manuel Gutierrez Navas


Revista de cultura, arte, historia y tradición

de los pueblos del Bajo Tietar en Avila

Guisando - Arenas de San Pedro - Candeleda - El Hornillo - El Arenal - Poyales del Hoyo Mombeltran - Cuevas del Valle - San Esteban del Valle - Santa Cruz del Valle - Villarejo del Valle El Raso - La Parra - Hontanares - Ramacastañas Dirección: San Nicolás, 10 28912 Leganés (Madrid)

Revista no dependiente ni adscrita a ninguna organización ni entidad privada o pública Revista de divulgación cultural y sin ánimo de lucro. Libre de publicidad o patrocinio. Director y Editor: Miguel Camacho Camacho Redacción: Jesús Jara García, Julio Fernando Palacios García, Rocío Nogal, Cristina Nogal Blázquez, Fidel Jara Tiemblo, Miguel Camacho Camacho, Juan Manuel Jara Garro. Colaboradores: está abierta a todo tipo de colaboración y se tendrán en cuenta todos los artículos y aportaciones que se realicen dentro del ámbito de la temática de la revista. DEPOSITO LEGAL: Solicitado

Remitid colaboraciones a la siguiente dirección:


SAN MIGUEL ARCÁNGEL La figura de Miguel, el poderoso ángel de Dios, es muy antigua. La Iglesia la ha heredado del judaísmo. Y en ambas tradiciones, judía y cristiana, y también en la islámica, Miguel es el mayor de los ángeles. Sin embargo, a pesar de esta antigüedad, no aparece en la Biblia hasta una época relativamente reciente. La primera referencia que encontramos de él en la Sagrada Escritura es en el libro de Daniel, una obra de contenido profético y apocalíptico que, a pesar de contar historias de la época exílica (siglo VI a.C.), su composición habría que situarla entre los siglos V y II a.C. Hasta este momento nada se dice en los textos bíblicos de este singular “guerrero” de Dios. Podemos, quizá, servirnos también, por lo que veremos después, de un texto más antiguo, el libro de Josué, que narra la entrada del pueblo de Dios en la tierra prometida. En él, sin darnos el nombre, se habla de un ángel que, con una espada en la mano, viene a socorrer a los israelitas, y dice de sí mismo: “Soy el general del ejército del Señor” (Jos 5,14). Volviendo al libro de Daniel, ¿en qué consiste la primera aparición de Miguel? Se nos dice que, estando los judíos desterrados en Babilonia, Daniel recibió una palabra divina que le hablaba acerca de un ejército inmenso. Al mismo tiempo, este Daniel tuvo una visión en la que se le aparecía un hombre vestido de lino, se trataba de un enviado divino (Gabriel), que no había podido manifestársele antes porque el ángel protector de Persia se lo había impedido. Finalmente las dificultades fueron vencidas gracias a que “Miguel, uno de los príncipes supremos, vino en mi auxilio”. La comunicación divina avanza hasta el punto de que habla de diversos enfrentamientos de este mensajero divino frente a sus adversarios. Y en estas luchas —dice— “nadie me ayuda contra aquellos si

no es vuestro príncipe, Miguel”. Así pues, en el capítulo 10 del libro de Daniel, Miguel aparece como un “príncipe” entre los mensajeros de Dios, es decir, entre los ángeles, que se enfrenta poderosamente a los enemigos del pueblo de Dios para su protección y salvación. Como bien sabemos, los nombres de los personajes bíblicos tienen siempre un significado, normalmente en relación con una misión, y Miguel no iba a ser menos. Su nombre nos habla de su poder y de su cometido. En hebreo su nombre es Mi-ka-el, que traducido significa: Quién-como-Dios. Es decir: ¿quién hay como Dios para salvar a su pueblo?, ¿quién podrá enfrentársele?, ¿quién podría derrotarlo? De este modo, la fuerza del ángel Miguel es la fuerza de Dios. Por muy poderoso que sea el enemigo, Miguel actúa con el poder de Dios y nada ni nadie podrá vencerlo. Los judíos habían establecido un orden entre los distintos seres espirituales que estaban al servicio de Dios en los cielos, a veces llamados en la Biblia, de un modo genérico, “los hijos de Dios”. Así distinguían una jerarquía entre: querubines y serafines, dominaciones, potestades y tronos, virtudes, arcángeles y ángeles. La palabra hebrea malak, en griego angel, significa “mensajero”, y el arcángel vendría a ser un ángel principal. El “jefe” de todos sería Miguel, y junto a él habría también otros seis arcángeles: Gabriel, Rafael, Uriel, Raguel, Sariel y Remiel. Si bien en la Biblia solo se mencionan tres: Miguel, Gabriel y Rafael. En este contexto, antiguos escritos judíos presentan a Miguel como uno de los ángeles que están ante el trono de Dios, y le reservan el papel de abogado de los justos en el juicio final. De ahí que se le represente en ocasiones con una balanza en la mano; también con una coraza y una espada o lanza, en su faceta de poderoso protector, sometiendo a las fuerzas del mal (representadas por un demonio o un dragón).


También el libro de Daniel (cap. 12) nos acerca a esta idea del juicio final, que vendrá precedido por la intervención definitiva de Miguel en favor del pueblo de Dios. Cuando esto suceda, incluso “los que duermen en el polvo de la tierra despertarán: unos para vida eterna, otros para vergüenza e ignominia perpetua”. Y dando un salto hacia adelante, al igual que el judaísmo, la Iglesia venera a Miguel como su protector frente a las insidias del gran enemigo, el diablo. En la literatura bíblica cristiana lo vemos aparecer en dos ocasiones. La carta de Judas recoge una antigua creencia judía según la cual Miguel le disputó al diablo el cuerpo de Moisés tras su muerte. Pero el texto más importante es el del libro del Apocalipsis (12,7-9), donde, simbólicamente, se habla de una lucha en la que Miguel, capitaneando a sus ángeles, combate contra el dragón (el diablo) y sus ángeles. El resultado de este enfrentamiento, como no podía ser de otro modo (recordemos el significado de su nombre), fue definitivo: “Y fue precipitado el gran dragón, la serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el que engaña al mundo entero; fue precipitado a la tierra y sus ángeles fueron precipitados con él”. La tradición cristiana ha tenido siempre gran veneración por este arcángel. Quizá uno de los monumentos más conocidos a él dedicado sea el Castel di Santangelo, en Roma. Allí, en el 611, el papa Adriano IV mandó

construir un oratorio, con el que rubricaba la tradición antigua que afirmaba haberse aparecido allí, librando a los romanos de una terrible peste que asolaba la ciudad. En la actualidad, el edificio está coronado por una imagen colosal de san Miguel, en bronce, de más de cuatro metros de altura, obra de Peter Anton Verschaffelt (1752). En su lugar hubo otras anteriores de mármol. Una curiosa tradición romana habla de que en 1348, mientras el icono de Santa Maria in Aracoeli era llevado en procesión para que librara a la ciudad de la peste, sesenta personas que en aquel momento se encontraban en el puente Sant’Angelo confesaron haber visto al ángel de mármol inclinado en actitud de veneración del santo icono. Son múltiples las tradiciones que hablan de acciones curativas de Miguel en favor del pueblo cristiano, pues su poder, que, no olvidemos, es el de Dios, actúa para salvar de todos los enemigos: los del cuerpo y los del alma. La veneración de este ángel supone para el creyente un reconocimiento del cuidado y favor que Dios tiene con todos los que confían en él; con el convencimiento de que, por duras que sean las dificultades, el Señor siempre logrará vencerlas. Miguel es la máxima expresión de ese poder divino. JUAN ANTONIO MAYORAL (Doctor en Teología)


LA GANADERÍA CAPRINA EN LA SIERRA DE GREDOS Silvestre de la Calle García Técnico de Grado Superior en Gestión y Organización de los Recursos Naturales y Paisajísticos. Alonso de la Calle Hidalgo Maestro, fotógrafo e investigador.

La ganadería caprina ha tenido una gran importancia en la Sierra de Gredos, especialmente en la vertiente sur que, por ser más abrupta, se presta mejor a la cría de la cabra que a la de la oveja y la vaca especies que, aunque se han criado también en la zona, son más propias de la vertiente norte. Desde la época de los vettones, pueblo prerromano dedicado esencialmente a la ganadería, esta actividad ha sido la principal fuente de vida de los habitantes de la zona hasta época muy reciente, lo que ha generado una rica cultura popular asociada a la cabra. Tradicionalmente, en la cara sur de Gredos (comarcas del Valle del Tiétar y La Vera) se ha criado un tipo de cabra de aptitud mixta leche-carne conocida como raza Serrana o raza de Las Mesetas que ocupaba gran parte de España. Poco a poco se irían seleccionando distintas variedades para dar lugar a diferentes razas pero en esta zona nos interesan especialmente dos de ellas: La Verata y la Guisandera. La Verata es una raza de tamaño medio, capas o coloraciones predominantemente oscuras y cornamenta muy desarrollada. Se cría para la producción de leche y carne. Aunque actualmente está en peligro de extinción, en otro tiempo ocupaba parte de la provincia de Ávila y gran parte de la provincia de Cáceres aunque era especialmente abundante en la comarca que le da nombre (La Vera) y en el municipio abulense de Candeleda. Una de las mejores ganaderías de la raza es la de Maribel Sánchez Vadillo, del pueblo de El Raso, anejo de Candeleda y con raíces joyancas. Se trata de una moderna ganadería que cuenta con ordeño mecánico y unas excelentes instalaciones. Esta ganadera fabrica y comercializa un excelente jabón elaborado con leche de cabra y aceite de oliva, dando así un nuevo uso a la leche que tradicionalmente se destinaba únicamente al consumo directo y a la elaboración de queso.


En el pueblo abulense de Guisando tiene su origen una particular raza caprina conocida como Guisandera. Se trata de una raza de mayor tamaño que la Verata y caracterizada por su capa roja o colorada (existen también las variedades negra y piñana) con degradaciones blancas en el hocico y las orejas. Al igual que la Verata, se cría para la producción de leche y de carne. Esta raza, que lamentablemente no está oficialmente reconocida por el Ministerio de Agricultura, está en gravísimo peligro de extinción. Sólo queda una piara que es propiedad de Fidel García Blázquez, quien la heredó de su padre Fidel García Tiemblo. Este ganadero mantiene la raza con gran ilusión por lo que el año pasado UNIPROCA, una de las cooperativas de caprino más importantes de España, le otorgó un premio por mantener y conservar esta singular raza caprina que debe ser un orgullo para el pueblo de Guisando pues forma parte de su historia y de su cultura.


La cabra Guisandera fue muy abundante en épocas pasadas, extendiéndose por los pueblos cercanos. En invierno, las piaras pastaban en las dehesas de las zonas bajas tanto en la provincia de Ávila como en las de Toledo y Cáceres. En verano, algunas piaras pastaban en la cara sur de Gredos pero la mayoría subían a los pastos de la cara norte de la sierra en municipios como Navarredonda de Gredos, Navacepeda de Tormes, Navalperal de Tormes o Zapardiel de La Ribera. Las piaras subían en fechas próximas a San Juan y regresaban a las dehesas en el otoño. Durante su estancia en la sierra, los cabreros vivían en las chozas, construcciones antiquísimas consistentes en un muro de piedra seca y una techumbre de palos y piornos. Sólo bajaban a los pueblos una vez por semana para vender el queso. Actualmente, la única piara de cabras de la raza aún sigue un sistema parecido de explotación. En verano pastan en la sierra de Guisando y en invierno en las zonas bajas.

Como muchas otras razas ganaderas españolas, la Guisandera ha sufrido las consecuencias de las repoblaciones forestales efectuadas a lo largo de los siglos, sobretodo en los siglos XIX y XX cuando muchas familias cabreras de Guisando se vieron obligadas a emigrar en busca de pasto para sus animales. Algunos cabreros se establecieron en pueblos cercanos como Arenas de San Pedro o Candeleda pero otros emigraron a pueblos de La Vera como Madrigal y Villanueva e incluso a zonas más lejanas como la comarca cacereña de Los Ibores. Estos cabreros llevaron consigo sus cabras Guisanderas pero se fueron cruzando con las cabras locales y acabaron por desaparecer, conservándose únicamente en Guisando hasta llegar a la dramática situación actual. Actualmente, la ganadería caprina es una actividad minoritaria en la Sierra de Gredos. En la vertiente norte de la sierra, prácticamente ha desaparecido el ganado menor, tanto cabras como ovejas mientras que en la vertiente sur, el caprino sólo tiene relativa importancia en el término municipal de Candeleda. Respecto a las razas autóctonas antes mencionadas, han sido sustituidas en gran medida por razas lecheras de mayor producción como la Murciano-Granadina, la Malagueña o la Florida. Se trata de razas cuidadosamente seleccionadas pero que no son tan rústicas para criarse en la sierra por lo que grandes extensiones que antes servían de zona de pasto a las razas locales, se encuentran hoy cubiertas de espesos matorrales con el consiguiente riesgo de incendios forestales. Por ello, los organismos oficiales deberían preocuparse un poco más y ayudar a los cabreros que aún mantengan razas autóctonas evitando así que desaparezca una parte importantísima de nuestro patrimonio cultural.


Ermita de San José — GUISANDO Datos e investigación: Fernando Palacios

La ermita de San José, humilde en su exterior, cuenta con un excelente frontal de azulejos de Talavera del siglo XVIII. Se creó la cofradía de San José en 1717. En la partida de defunción que se adjunta en la siguiente página se expone que se piden 5 misas cantadas a San José y una el día que se lleve a su ermita, lo que hace suponer que en diciembre de 1718 aún no se ha terminado de construir. Muy probablemente se inauguró en el año 1719. Aunque en el Catastro de Ensenada se hace mención al cimenterio de la ermita, este debe ser inexistente y fue un error de interpretación del funcionario que inscribía las fincas del catastro, no habiéndose enterrado a nadie ni en la ermita ni sus aledaños. Es posible que se quisiera referir a los cimientos de la misma y no cementerio. En Guisando se celebra la fiesta de San José con solemne procesión y absorbiendo en dicha festividad la celebración del Carnaval. Siendo el momento en que sobretodo niños y jóvenes se disfrazan de las formas más variopintas.


TESTAMENTO DE JUAN BORDES En el lugar de Guisando en veinte y dos días del mes de diciembre, del años mil setecientos y diez y ocho, falleció Juan Bordes, portugués de nación, y residente en este lugar, habiendo recibido los santos sacramentos de penitencia, viático y extremaunción, habiendo otorgado su testamento ante Ambrosio López Carrera, fiel de hechos del dicho lugar en la forma siguiente: Lo primero mandó enterrarse en sepultura propia de dicha parroquial. Por su limosna dejó misa de alma y de cuerpo presente, honras primeras y postreras, y responso cantado por un año. Mandó decir por su alma, que Dios perdone: Seiscientas misas rezadas……………………………………….…...600 Más por el ánima de Josefa Fernández doce misas……...............012 Más por las ánimas de sus padres cuarenta misas……...........….040 Más por sus abuelos ocho misas…………………………....……….008 Más por las ánimas benditas cuatro misas……………….........…..004 Al santo de su nombre tres misas…………………………….....…..003 A San Pedro de Alcántara tres misas………………………....…….003 A San Francisco dos misas………………………………………......002 Al ángel de su guarda seis misas………………………………..…..006 A Nuestra Señora del Rosario dos misas……………………......…002 A SAN JOSÉ CINCO MISAS CANTADAS Y UNA EL DÍA QUE SE LLEVE A SU ERMITA……………………………………….006 Que todas suman seiscientas y ochenta y seis misas…..............686 A las mandas pías lo acostumbrado, con que los desheredo de sus bienes. Por testamentarios al Licenciado Manuel de Luján, Francisco de la Plaza y Catalina Plaza, vecinos de dicho lugar, y así mismo por herederos. Y por ser verdad lo firmé. Manuel de Luján


FOTOTECA HISTOR

GUISANDO aprox. 1929 -

Fotografía de ANTONIO


RICA DE GUISANDO

O PASSAPORTE para LOTY - Fototeca Histรณrica - IPCE


RESPETO A LOS MAYORES (Pipi — Guisando nov. 1999) Voy a decir para ustedes, con cariño y humildad, una corta poesía, basada en la realidad. Recuerdo, siendo pequeño, igual que todos ustedes, que teníamos gran respeto, sin tener grandes placeres. Entonces era sagrado, contestar a los mayores, que con mucha educación, cumplíamos los menores. Fuimos muy poco al colegio, hay que decir la verdad, pero sí nos enseñaron, a tener que respetar. Ahora estudian muchos años, para tener más cultura, pero tocante al respeto, no hay ninguna asignatura. Y deberían de tenerla, sépanlo los profesores, que bien merece un suspenso, quien contesta a los mayores. Los hijos deben ser hijos, aun sobrados de potencia, los padres deben ser padres, por muchos años que tengan.

Y esto es triste y doloroso y más que nada inhumano, por no encontrar cariño, al llegar a ser anciano. Los nietos a los abuelos, los quieren cuando son niños, pero según van creciendo, se va mermando el cariño. Si el abuelo les reprende, le contestan enfadado: ¡Tu ya no entiendes ni papa, porque estás muy anticuado! Cabizbajo y dolorido, se queda solo el abuelo, llorando gotas de sangre, sin tener ningún consuelo. Por la mañana temprano, dicen muy fuerte y sin duelo: ¡No hay quien duerma en esta casa, por las toses del abuelo! Y el abuelo sufre y sufre, y les da todo su amor, a los hijos y a los nietos y no les guarda rencor. Queramos a los mayores, demostrándoles amor, dándoles nuestro cariño, ellos son igual que niños y si se sienten queridos, saben ser agradecidos.

No hay cosa para los padres, que les cause más placer, que les respeten sus hijos, por muy crecidos que estén.

¡Ay juventud del presente! Pensad pues en el futuro, que abuelos tendréis que ser, y Dios quiera que a vosotros, vuestros hijos y los nietos, os sepan mucho querer.

Se encuentran entusiasmados, llenos de felicidad, pero si ven lo contrario, lloran en su soledad.

A muchos seres les pasa, todo lo que estoy diciendo y que Dios les tenga en cuenta, lo mucho que están sufriendo.

Se muestran acobardados, constantemente sufriendo, pidiendo con ansiedad, que los llame “El Padre Eterno”.

Y me despido de ustedes, con lágrimas en la vista y les doy un fuerte abrazo, a todos los pensionistas. Félix Blázquez Galán (1930

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2014)

“Gracias Elías, por permitirme homenajear a tu tío Pipi”. Chuito


COSAS DE MUCHACHOS

Jesus Jara “Chuito” EL SEÑOR CURA Y LAS BRUJAS: Una de tantas noches de invierno, donde las sombras nocturnas se apoderan tempranamente de las calles de Guisando, un grupo de chavales decidió divertirse un poco, pero dejando a un lado el socorrido sajumorio. Provistos de un sedal de Nylon, aportado por uno de ellos, se dirigieron a la Fuente Chica. Ataron el sedal al llamador de la puerta de la casa de la Tía Josefa, en la cual se hospedaba el cura del pueblo, Don Ramiro. El otro extremo del sedal lo pasaron por una argolla que había en la fachada de la casa del Tio Casto, hoy de Antonio y Rosi, el cual solía estar, casi siempre, en el campo. Desde allí y portando el extremo del sedal, se escondieron en la oscuridad que les proporcionaba la Fuente Chica, donde no había luz. Situados así, tiraron del extremo del sedal y el llamador de la casa de la Tía Josefa golpeó varias veces sobre el soporte. Josefa, al oir los golpes del llamador, se levantó de la lumbre y asomándose a la ventana, que tenía encima de la puerta, gritó la palabra al uso para esos casos: ¿Quién? Nadie respondió a la requisitoria y la mujer, algo mosqueada, cerró la ventana y se volvió a sentar al amor de la lumbre. Unos minutos después, el llamador volvió a repetir los golpes, accionado por los muchachos desde su escondite y Josefa, de nuevo, se asomó a la ventana y requirió: ¿Quién llama? Nadie contesto, pero en tanto Josefa trataba de descubrir al autor de las llamadas, el muchacho encargado del sedal tiró de este y el llamador golpeó, de nuevo, sobre la puerta. Josefa, que seguía asomada a la ventan, tratando de descubrir al autor de las llamadas, exclamó: “¡Don Ramiro, esto es cosa de brujería, el llamador suena solo! El cura, en cuyas convicciones religiosas no tenía cabida la brujería, respondió: “Por Dios Bendito, no vuelva a decir nunca más esa frase en mi presencia. Usted necesita ir más a misa y confesarse de este gravísimo pecado. Cierre esa ventana que vamos a rezar el Santo Rosario.” La Tía Josefa, cerró obediente la ventana, momento que los muchachos aprovecharon para desatar el sedal del llamador y correr hacia la Plaza, donde lo pasaron en grande, recordando las consecuencias de su original broma.


POYALES DEL HOYO - LA MARCA DEL PROINDIVISO

En el puente romano que se tiende sobre el río Arvillas, hubo una cruz dibujada con almagre, que la lluvia ya borró, recordando al que le atravesaba, que desde allí cayó al río y se ahogó una niña, hija del molinero del pimiento. Llevaron el cadáver al campo santo. En un tugurio que llaman el depósito, en una mesa de piedra, fue tendida. Llegó el médico e hizo la autopsia. Se dio cuenta al señor juez de instrucción. Ya estaba abierta la fosa qué había de recibirla cuando llegó la pareja con un sobre para el alcalde. El juez de instrucción prohibía el entierro en el campo santo del pueblo. Ordenaba se cargara el ataúd en una mula y fuera llevado al de Arenas. Así se hizo. Sobre la albarda, a un lado colgaba el féretro, ya clavado. Al otro lado, sirviendo de contrapeso, una saca de paja. ¿Por qué ordenaría aquello el hombre de la toga? Recordaría el precepto de «dura lex, sed lex» y olvidó el de «máxima lex, máxima injuria». El campo santo de Poyales, donde reposaban los antepasados de la niña ahogada, dista tres kilómetros del lugar del accidente. El de Arenas, dieciséis. El juez pensaría: «La niña ha muerto en terreno común de Arenas y Candeleda. Que la entierren en uno o en otro. En Poyales jamás». Los joyancos lo consideraron como una afrenta colectiva. Pensarían: «No se conforman con nuestros impuestos, quieren también nuestros cadáveres». Y desde aquel día acordaron no volver a morirse en el proindiviso. ¿Aquél hombre que le dio el mal postrero estando en la viña y trajeron rápidamente su cadáver montado en un burro tapado con una manta? No, no, señores. No fue así. No trajeron el cadáver, le trajeron muy malito y murió en su cama cuando faltaba un poquitín para que llegara el señor médico. ¿Aquél otro que medio paralítico se ahogó en un manantial al ir a beber? Fue en una fuente ya dentro del pueblo. Las malas lenguas dicen que fue en la jurisdicción forastera, pero no hay que creerlo. El desgraciado que decide ahorcarse lo hace en una viga de su casa o en un olivar de las proximidades. No va a elegir chaparros del proindiviso. “Andorrilla Avila”. Casimiro Hernandez Rodriguez


El pueblo dónde nací, clavao lo llevo en el alma, todo cubierto de pinos Y mi Gredos de muralla. Envuelto en aromas puros, jara, tomillo y berezo, que al pasear por su entorno en la piel dejan un beso. Aguas claras y cristalinas por el rio bajan cantando y en su alegre melodía van proclamando ¡Guisando! ¡Guisando del alma mía! Al despertar la mañana se oyen los gallos cantar, anuncian que en los Galayos el sol ha llegado ¡ya! ¡Ay Guisando! Mi patria chica olvidarte yo no puedo, pues tu me viste nacer bajo el azul de tu cielo. María Inmaculada Garro García

REFRANES POPULARES Septiembre es frutero, alegre y festero. Septiembre o seca las fuentes o arrastra los puentes. Septiembre, mas que septiembre … se tiemble. Septiembre benigno, octubre florido. Por San Miguel los higos son miel. En septiembre ...cosecha, no siembres. Septiembre muy mojado, mucho mosto pero aguado. En octubre no molesta la lumbre. Octubre llovioso, año copioso. De duelo se cubre, quien no sembró en octubre. Cuando octubre truena, vientos lleva. Quien cava en noviembre, el tiempo pierde. Marzo trae las hojas y noviembre las despoja.


LAS BROMAS DE DURA TESTA (Cualquier coincidencia que pueda existir con lugares, personajes, costumbre, etc., debe considerarse pura casualidad ajena a la voluntad del autor, ya que solo ha tratado de sacar a la luz una inventiva de su mente). ¡Jué, jué ……..! La acición al ocicio no se le va a uno nunca. Pero ahora, a lo que vamos. Somos una panda de jente güena que mos encontramos encerraos aquí por una gromilla de ná. A mí, que soy el más deslustrao mán comisiona mis compañeros pa que escriba a nuestro deputao pa que mus saque deste aprillo y aquí está la carta que dice asina: Señor don deputao: A mi poquita palabra, como perro que bien ladra, le viá icí lo cá pasao. Comosté sabe: puaquí hay ciesta pa San Miguel y que le juro por él que es to como lo escrebí. Resulta que Bartolón, el de la Tía Calabazas, el hijo de Tío Lucazas y yo que soy Miguelón, dijimos: ya que es la ciesta, daremos una gromilla, a esta gente tan sencilla, del pueblo de Dura Testa. El primer día de ciesta, jué Pericón, de Tío Honorio y preparó un sajumorio, que total ná, una monserja Echó raspauras de cuernos, pelos, azuzre, guindillas y algunas otras cosisllas, pa más zamosos jacermos. Cociendo como manesía, yo le cogí a toa prisa y cuando decían misa, lencendí dentro la Iglesia. Penzó la gente a toser y aunque el cura suplicó, la Iglesia se vació, pero más que a to correr. Y tan pronto tos se jueron, que no me atrevo a jurar, pero pueo asegurar, que angunos se escompusieron El día de San Miguelón, a zorma de regiletes,

tiramos muchos cobetes, por entre la procesión. Y que juerga, que acientes, Peían entre las patas y corrían como chivatas, despavorías las gentes. Que risa, si hasta quemamos, a las mujeres el manto, por poco si chuscarramos, hasta las andas del Santo. Y esto cuasi no jué ná, porque el día San Miguelillo, el de Lucazas, Luquillo, preparó otra esparramá ¡Uy que juerga, los chiquillos! Se jué al prao del Tío Paraca y atando unas cuantas vacas, con maromas y con grillos, y en después de restregallas, bajo el rabo azuzre y sal, mos cogimos de un zarzal, unas zarzas pa pinchallas. Y ya que estaban rabuisas, las chuscarramos con heno y en el baile, estando lleno, las soltamos. ¡Que graciosas! Daban brincos como corzas, Saltaban hasta las tejas. Allí chillaban las viejas, allí volaban las mozas. Entre brincos y trompazos, pateaban a los críos y hubo quince u veinte jeríos, de cornás y batacazos. Pero aluego los ceviles, una trampa mos jicieron: pa pillarmos mos dijeron que mos jarían ediles. Y aquí mos han encerrao, y por eso, tos en restri¡o, le pedimos que al menistro, mos haga un recomendao. Le diga que no quisimos, que se zormara este pisto. Que no lo vean mal visto, porque a güena fe lo jicimos. Que hogaño nosotros juimos, que otro año lo jarán otros, questo se jace entre musotros, solamente pa reirmos. Anónimo


PROGRAMA DE FIESTAS VIERNES, 26 DE SETIEMBRE 22:00 H Pregón de Fiestas a cargo de MARI-BEL JARA CARVAJAL 23:00 H Gran Verbena con la orquesta “RETOS”

SABADO, 27 DE SETIEMBRE 12:00 H Encierro ecológico por “LOS SEGOVIANOS” 14:00 H Migas con huevos fritos por la Asociación de Jubilados y Pensionistas de Guisando 16:30 H Proyección de la Fototeca Histórica de Guisando y Clausura de la Exposición de Arte Rural. Colabora la Casa del Parque y Miguel Camacho. 17:30 H I Jornada de Liga Provincial entre el equipo local C.D. Guisando y C.D. Colegio Diocesano de Avila. 20:00 H Presentación del libro “TAN ALTA COMO UN CIPRÉS” de la Asociación contra el cáncer. 23:00 H Gran Verbena con la orquesta “BERLIN”

DOMINGO, 28 DE SETIEMBRE 15:00 H CALDERETA para todos los asistentes en la plaza. 18:00 H Espectáculo Flamenco a cargo de Virginia García Arnáiz y Paula Muñoz Sánchez-Fuentes. 23:00 H Gran Verbena con la orquesta “FASHION”

LUNES, 29 DE SETIEMBRE 09:00 H DIANA FLOREADA por la gaitilla “ECOS DE GREDOS”. 12:00 H MISA SOLEMNE en honor a San Miguel. Procesión y Subasta de Banzos. A continuación la cofradía de San Miguel invitará a dulces y limonada. 20:00 H Disco Móvil ”D.J. MARIO SHOW” y Fin de Fiesta.


LA ÚLTIMA TRASHUMANCIA Despuntaba el Sol sobre el cerro el Guijo y los últimos reflejos lunares besaban el lomo gris del viejo Polán; quién sabe si esta sería su última travesía, antes de irse a jugar con Platero. Los broncos ladridos del longevo mastín daban el adiós a la cálida noche de principios de verano, mientras, ponía en pie al rebaño, impaciente ya de trashumar al los pastos de las laderas del Cobacho.

Viejo el asno y viejo el mastín, viejas las manos de la madre que cuajan este viejo oficio, como tan viejo es el camino de las Herrezuelas hasta este nuevo mundo, donde lo de ayer ya es viejo y el mañana oculto.

¿Quién hizo viejo el oficio?, ¿Quién dejó que el pino cegara los campos con sus ácidos agajúos que infectan los pastos?, ¿Quién hirió de melancolía a este pueblo que antaño sus cantos brotaban en balidos? Quizá el tiempo, seguro el Hombre, con su devastador progreso que posterga al olvido la natural relación con la Tierra. A la hora que cantan los gallos partió el rebaño de guisanderas, con Polán a la cabeza, y detrás de éste, Fidel el cabrero, con la mochila a la espalda y garrota en la mano. Al compás de una rondalla sonaban los cencerros como bandurrias y guitarras que alegres plañían sus acordes a la púrpura mañana. De las antiguas escuelas pasando por el Parador de la Alegría, y en Guisandillo, el Sol ya tintaba de magia y romance los rojos lomos de las astadas, y de allí a las Tejedillas y del Benerón a Guisando. Al pasar por la travesía despertaba la chicharra y algún que otro vecino al que se le pegaron las sábanas. Alguno miraría con asombro porque ya no recordaba que esta fue tierra de cabras. Y mientras, Polán, el que siempre fue viejo, seguía el primero camino del Hoyuelo, pese a que Cesar el Grillo apostaba que esta sería su última travesía. Quién sabe si el día que se marche a jugar con Platero también sea el último viaje del cabrero.


Lejos quedan ya los tiempos en que Fidel y Carlos García Blazquez, junto a sus padres, tenían hasta 500 cabras y unas pocas de vacas. Entonces los pastos de invierno estaban en las zonas más bajas, próximas al término de Navalcán y en verano subían el ganado hasta la zona norte de Gredos. Aquellas trashumancias duraban hasta cuatro días seguidos. La reducción del nucleo familiar, así como las trabas administrativas obligaron a reducir el número de cabezas hasta las doscientas cabras que poseen en la actualidad. Los actuales pastos de invierno se sitúan en el mismo término municipal de Guisando, situados por las proximidades de las antiguas escuelas de las Herrezuelas. Normalmente, a mediados de junio, cuando escasean los pastos y el agua, inician lo que llamamos trashumancia, pero que es más bien una trasterminancia, al tratarse de un recorrido corto dentro del mismo término municipal. El traslado se hace hacia la parte posterior del pico del Cobacho, en el lugar conocido como el Horco, situado a unos 1100/1200 metros de altitud. Esta zona es abundante en pastos y en agua, sin embargo no deja de ser más dura para el pastoreo al tratarse de un terreno casi de alta montaña. El trayecto puede estar en torno a los quince quilómetros, que no es mucho, pero supone un desnivel de unos 600 metros aproximadamente, principalmente en el último tramo, desde Guisando hasta la majada de verano. Esto supone un esfuerzo considerable para el ganado pues buena parte del trayecto es por asfalto, que castiga las pezuñas, no adaptadas para ese firme. Pese a la dureza del asfalto, como hemos dicho, la raza autóctona “guisandera”, original de nuestro pueblo, es una cabra perfectamente adaptada a nuestro terreno y en especial a la montaña, en contra de otras razas, que aun pudiendo dar más leche, necesitan terrenos más llanos. La piara de Fidel y Carlos es la última de esta especie que queda en nuestra zona y en el resto del territorio, por lo que no deja de ser un patrimonio del pueblo en peligro de desaparición. Al igual que la raza guisandera, la familia de Benigna Blazquez supone el último reducto del oficio de cabreros en Guisando. Centrado en el núcleo familiar compuesto por los hermanos Fidel y Carlos junto a la madre de éstos, Benigna, ya de avanzada edad. Al requerir el cuidado de las cabras una dedicación constante, en muchos casos es necesario la ayuda de la familia y gente del pueblo, sobre todo durante la trasterminancia, que supone trasladar todos los enseres de trabajo y de la vivienda al nuevo emplazamiento de la sierra. Por otro lado no deja de ser un acontecimiento que cada vez atrae a más gente al ser algo ya tan poco habitual. De hecho, en la zona sur de Gredos, los tradicionales rebaños de razas verata (de la vera) y guisanderas se están sustituyendo por razas de otros territorios que producen más leche y no requieren ser trasladadas, por lo que se adaptan mejor a instalaciones más modernas y mecanizadas. En Guisando el futuro de esta tradicional forma de vida está avocado a la desaparición de no producirse una gran trasformación del modelo y de no incorporarse nuevos rebaños. Existen casos de nuevos ganaderos en la zona sur de Gredos, recientemente en Candeleda, que intentan adaptar la producción a los nuevos tiempos y que podrían ser un ejemplo a seguir en Guisando, eso sí, sería necesario de la ayuda de las administraciones y de un modelo distinto de gestión del monte. Por poner un ejemplo, el queso Monte Enebro que produce la Quesería del Tietar en la localidad de la Adrada, se puede encontrar en las mejores tiendas de gourmet de Nueva York. No es necesario aspirar a tanto pero si sería interesante encontrar un modelo sostenible que permitiera mantener las tradicionales formas de vida de nuestra tierra en un entorno económico actual. Juan Manuel Jara Garro


TRASHUMANCIA DE LA CABRA GUISANDERA - 2014 Foto: Miguel Camacho JOYANCO


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