La historia del Hada y el Agua

Page 1

En el cuento que vas a escuchar a continuaci贸n, cada instrumento representa a un personaje. Cuando escuches el nombre de tu personaje, deber谩s tocar, junto a tu grupo, la partitura que has preparado.


Historia del Hada y el Agua Había una vez un hada bosque en el que había una

que vivía en preciosa fuente.

un

Un día, el hada decidió ir a visitar a una amiga que vivía en el otro lado del bosque. Cuando iba de camino, se le ocurrió que podía pararse en la fuente para darse un baño y, de esta manera, llegar más limpia a casa de su amiga. Así que cuando llegó a la fuente, el hada, sin pensarlo dos veces, se zambulló en el agua. Le encantaba bucear, así que se metió hasta lo más profundo de la fuente., con tan mala suerte, que sin darse cuenta, se le enganchó un pie en un plástico que alguien había tirado al fondo. El hada tiraba y tiraba, pero cada vez se apretaba más el plástico alrededor de su diminuto pie. Estaba desesperada, con la cabecilla asomando a ras del agua, cuando volando tranquilamente se acercó una libélula.. El hada vio el cielo abierto y le pidió que le ayudara. Y la libélula, le agarró de las manos y empezó a tirar con todas sus fuerzas, pero todo resultó inútil. Así que se le ocurrió que podía ir a buscar a su amiga la ardilla..


Justo cuando se alejaba volando la libélula, empezó a caer una finísima lluvia.. El hada pensó: “Qué mala suerte, con lo que me gusta la lluvia, pero si sigue lloviendo así subirá el nivel del agua y me ahogaré. Espero que la libélula vuelva pronto”. Pero no sólo empezó a llover más fuerte sino que además comenzó una tormenta. El nivel del agua iba subiendo peligrosamente y el hada cada vez estaba más preocupada. Pero de pronto, llegó volando una cigüeña que venía a la fuente a buscar comida. “Ayúdame, por favor, que estoy enganchada en el fondo”_ le pidió nuestra protagonista. Así que la cigüeña, compadecida de la mala suerte del hada, arrancó con su largo pico el plástico del fondo de la fuente. Justo cuando ya cesaba la lluvia y se alejaba la tormenta, apareció la libélula con su amiga la ardilla. “Llegáis justo a tiempo para ayudarme a desengancharme el maldito plástico del pie”. De esta manera, la ardilla, con sus afilados dientes rompió el plástico, y la libélula se lo llevó a un contenedor. “A mí también me podía haber pasado”, dijo la cigüeña.. El hada les dio las gracias a sus tres nuevas amigas y se fue toda empapada pero contenta de haber vivido esta aventura.


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.