Asimismo, la educación reduce la necesidad de programas de protección social (Palmer, Groce, Mont, Nguyen, & Mitra, 2015). Existen indicios que muestran que cuando una niña o un niño sin discapacidad es educado en un entorno inclusivo, presentan mejores resultados en lectura y matemáticas (Cosier, Cuaston-Theoharis, & Theoharis, 2013). Los estudiantes sin discapacidad que son educados en un aula inclusiva son también más tolerantes a la diversidad y expresan un sentimiento de pertenencia a la cultura de su escuela (Shogren et al. 2015). Además, los estudiantes con y sin discapacidad que han sido educados en aulas inclusivas tiene más posibilidades de establecer relaciones de amistad entre ellos comparado con alumnos y alumnas educados en aulas segregadas (Bunch & Valeo, 2004). Los niños y niñas que forman parte de una clase inclusiva son, en consecuencia, más proclives a aceptar e incluir a las personas con discapacidad en la edad adulta (Rafferty & Griffin, 2005).
AF
T
Es importante observar que el acceso a la educación no implica una educación inclusiva. Para que la inclusión sea reconocida como importante, los alumnos y alumnas con discapacidad deben tener acceso al programa nacional y a materiales para el aprendizaje en condiciones de igualdad con los alumnos sin discapacidad.2 Esto incluye materiales de aprendizaje de alfabetización y de matemáticas básicos además de materiales que favorezcan otros elementos clave del programa nacional. Para muchos estudiantes con discapacidad, acceder a la información implica que los materiales y los libros de texto estén en un formato especializado (por ej. : braille, letra grande o texto digital). Frecuentemente, el contenido de dichos materiales también debe ser adaptado a los respectivos estilos de aprendizaje de diferentes alumnos y alumnas con discapacidad (National Center on the Accessible Educational Materials [Centro Nacional de Materiales Educativos Accesibles], 2018). La tecnología es muchas veces un intermediario eficaz para hacer posible el acceso a la información.
2.3 Marcos y políticas de educación inclusivas
DR
Exiten varios marcos y políticas de educación internacionales que apoyan el desarrollo de materiales y libros de texto accesibles para la educación de estudiantes con discapacidad. Dichas políticas y marcos incluyen: ●
Marco de Acción de Salamanca. Adoptado en 1994, este marco promueve la educación de alumnos y alumnas con discapacidad adaptando el contenido de los programas a sus necesidades e incorporando una pedagogía centrada en los intereses del niño. Para obtener mayor información : http://www.unesco.org/education/pdf/SALAMA_E.PDF.
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La Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD). Adoptado en 2006, el artículo 24 de la CDPD reconoce los derechos a la educación de las personas con discapacidad. Además, la CDPD establece que las personas con discapacidad deben recibir el apoyo necesario dentro
A la vez que reconoce la importancia de crear un programa de educación nacional inclusivo accesible a personas con discapacidad, la Iniciativa Libros de texto digitales accesibles hace hincapié en la creación de libros de texto accesibles. El libro de texto accesible es uno de los muchos elementos que constituyen un programa de educación nacional. Este enfoque no debe ser percibido como si UNICEF no valorase el resto de los elementos del programa, tales como contenidos didácticos, evaluaciones y actividades extracurriculares, sino que apunta a producir un documento preciso sobre la necesidad de acceder a materiales de aprendizaje accesibles. 2
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