mis temáticas, pero cada caso suele ser resuelto de manera distinta: escultura, ropa, animales, máquinas. Con lo del jabón y el lenguaje publicitario, descubrí lo actoral, me di cuenta de que mi cuerpo tenía mucha plasticidad. Así, llegué al video. -Siempre dentro de una estética clásica... -En eso, no hay discusión. Me gusta el estilo, la luz, esa cosa oscura, barroca... Estuve haciendo muchas fotos porque quería armar una suerte de edición de la historia de la pintura. Lo fui haciendo de a poco y mostrando a medida que lo hacía, pero lo ideal hubiera sido guardarlo hasta tener todas y presentarlas juntas. Son treinta y cinco fotos y, además, el video de Trailer, donde entra el tema de mi maternidad. Siempre me meto con temas difíciles, arte contemporáneo y maternidad es un tema difícil... -Recurriste a técnicas de inseminación artificial para tener a tu hijo... -Tenía 45 años, quería tener un hijo, no tenía pareja e hice de todo. No fue fácil, terminé con un embrión donado porque tampoco tenía óvulos propios, pero ahora tengo un niño hermoso de cuatro años y medio... Trailer es un film donde trabajo la técnica del calco, es decir, me reproduje a mí misma, como una manera de no enfrentar el proceso de maternidad sola... La obra se presentó en cinco casas rodantes (o trailers), en una, estaba todo el taller con las sillas, las herramientas; en otra, estaba el taller de la modista; después, el dormitorio de Aquiles con la cuna; y en otro trailer, podías entrar y ver la proyección de la obra como en un cine en miniatura. O sea, veías el “Trailer” dentro del “trailer”. Y en el último te encontrabas con la muñeca en pedazos, descuartizada. Al final, tuve que eliminar a mi doble, porque era lo más sano mentalmente. Lo menos raro. Después de Trailer, quise seguir con esa combinación de instalación y video, pero con algo mucho más ambicioso, que tuviera un recorrido, que fueran varias etapas... Así, surge el proyecto de Eva. Se trata de la instalación que hace unos meses Nicola montó en la Bienal de Venecia. Por el peso político del personaje elegido, terminó por generar un tironeo institucional que derivó en una suerte de intervención de la obra con la consiguiente reacción de la artista y concluyó en el escándalo artístico mediático del año. -La idea de representar a Evita partió de vos... -Sí, desde 2010, me puse a trabajar con todas estas ideas en lo de Eva. Una obra en la que la moda vuelve a ser fundamental, como concepto de la feminidad como mascarada
"Eva, La Fuerza", presentada en la 55a Bienal de Arte de Venecia.
Es notable como evita cambia su identidad de mujer de los años cuarenta, medio gordita, mal vestida, a ser una reina vestida por Dior. de Joan Rivière, que habla de la mujer que se construye a partir del maquillaje y la ropa... En Eva, su vestuario fue una suerte de arsenal, era la época de la estetización de la política, y ella fue un genio en ese sentido. Es notable cómo cambia su identidad de mujer de los años cuarenta, medio gordita, mal vestida, a ser una reina yendo al Colón vestida de blanco por Dior. Todo en seis años, un cambio fuertísimo como discurso de lo femenino... Yo sabía que era un terreno difícil, porque Evita es también el dogma político, pero pretendía lo contrario, la figura femenina, una búsqueda más íntima. Se trataba de representar la complejidad de su personalidad. Para unos, era el demonio, para otros, una santa, y creo que todos tenían razón. Por eso, hice esta multiplicidad de Evitas.
-¿Pensás en montar la obra acá? -No lo sé, la verdad es que estamos viendo. Toda la discusión de la preproducción de Venecia fue sobre un quinto cuadro final que mostrara a Eva viva y en el pueblo, cosa que no quise hacer, primero porque no quería, segundo porque ya no era posible. Entonces, los representantes del gobierno decidieron que la harían ellos mismos, cosa que arruinó mi obra y también generó una mala percepción general hacia afuera. Así que, por ahora, no se va a presentar -como quería la Presidentaen el Museo del Bicentenario, tampoco sé si conviene presentarla acá, no sé si me interesa que se perciba con la lectura de lo que pasó allá en Venecia. Esto es justamente lo que estoy pensando ahora.
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MARZO 2014 BACANAL
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