Lucho y Paloma:Dos testigos de nuestra fe

Page 1

Boletín de los Sagrados Corazones - PPerú erú

Tomo XIX - Año 40 - N° 286

Abril 2007


EDITORES Hermanos: Provincia del Perú Hermanas: Provincia del Perú-Brasil-México Laicos: Rama Secular SS.CC. - Sector Perú

RESPONSABLES P. Raúl Pariamachi, ss.cc. Hna. Candelaria Núñez, ss.cc. DIRECTOR Hno. Pedro Vidarte, ss.cc. vidartepb@yahoo.com

SUMARIO

REDACCIÓN Hna. Graciela Zúñiga, ss.cc. Hna. Juana Gómez-Loayza, ss.cc. Sra. Haydeé de la Puente

Editorial Paloma y Lucho dos testigos de nuestra fe

p. 2

DIAGRAMACIÓN Y DISEÑO

Homenaje La gloria de Dios es el hombre vivo Luis Dalle ss.cc., el Obispo que no fue, pero que marcó una línea importante en el sur andino Luis Dalle y los Runas Lucho, Libre y Recio - extractos El Pastor - Entrevista Bodas de Diamante Gracias por tu docilidad al Proyecto de Dios Paloma, una mujer de Dios Bodas de Diamante de Paloma Aguirre Superiora General 1975 - 1983

p. 3

Srta. Delia Amado R.

p. 4 p. 6 p. 8 p. 11

CARÁTULA Y DIBUJOS Sr. Fredy Caballero B. Sr. Manuel Lozano L.

p. 14 p. 15

APORTES Y SUGERENCIAS Dirección del Boletín boletin@ssccperu.com Secretaría Hermanos secperusscc@telefonica.net.pe Secretaría Hermanas ssccsec@telefonica.net.pe

p. 17

Vida de las Provincias Primer Aniversario de la Pascua del P. Hubert Lanssiers Homilía de la misa del P. Hubert Tiempo favorable para el corazón Como signos de esperanza

p. p. p. p.

Noticias

p. 24

Estudiantes ss.cc. La Comunidad de Formación en Laderas: Amelia Mera, Martha Tacca y Jenniffer Gutiérrez

p. 25

19 20 21 23

www.ssccperu.com

Reflexión La Religión cristiana y las costumbres, la fe cristiana y las creencias y ritos

p. 26

Rama Secular ss.cc. Historia de la reja - cuento Retiro de Comunidades de Plaza Francia

p. 28 p. 29

90° PUCP: Instalados en el siglo XXI

p. 30 N U E S T R A

F A M I L I A


2

EDITORIAL

Paloma y Lucho Dos testigos de nuestra fe El autor de la carta a los Hebreos nos pide que tengamos los ojos fijos en Jesús, que corramos con constancia la carrera que se nos propone, sabiendo que nos acompaña una nube de testigos (cf. 12, 1). Paloma Aguirre está celebrando 60 años de vida religiosa ss.cc. Nació en Madrid (1928). Luego de haber sido Superiora Provincial fue elegida Superiora General (1975). Paloma es una mujer que se ha destacado por la bondad, sabiduría y audacia propias de quien ha sido tocada por el Espíritu. Se le reconoce haber sido la impulsora de un nuevo modo de vivir el liderazgo en la Congregación. Una vez terminado su servicio en Roma, fue a vivir siete años a tierras del Asia. Estos días sigue atenta a la Congregación, desde su casa en El Escorial (España). Lucho Dalle murió hace 25 años en un accidente de carretera, cuando regresaba a su Prelatura de Ayaviri. Nació en Francia (1922). Lucho fue un hombre libre, alguien que había sido capacitado con la fuerza del Espíritu de Dios; su corazón de buen pastor buscaba, acompañaba y protegía a las mujeres y los hombres del sur andino en el Perú. Fue un apasionado defensor de los pobres; al recordar lo que tuvo que vivir en la guerra, escribió: «He sufrido tanto que no puedo soportar ver sufrir a los otros». Dalle descansa en su Catedral, cobijado por el cariño del pueblo al que quiso tanto. En un célebre estudio titulado «El Despacho», Lucho acaba reflexionando sobre la religiosidad andina a partir de las orientaciones del Concilio Vaticano II (Ad gentes); su pregunta final suena como las palabras de un profeta: A los misioneros del Ande, el Concilio y el mundo indígena lanzan el mismo reto: ¿Tendremos la verdadera caridad, la imaginación, el espíritu de creatividad necesarios para volver a escribir nuestros catecismos, nuestros sermonarios, nuestra espiritualidad, nuestra teología, en el contexto de la pachamama, de los apus, de las estrellas? Este número de «Nuestra Familia» quiere ser un sencillo homenaje a Paloma y a Lucho; aquí hermanas y hermanos escriben sobre ambos. Se dice que un pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla; sin embargo, cuando se trata de personas como Paloma y Lucho, habría que decir que una congregación que no conoce su historia se arriesga a perder la fuerza inspiradora de sus antepasados. Vivimos tiempos nuevos en la Congregación y en la Iglesia –ay, qué tiempos–, caminemos pues teniendo los ojos fijos en Jesús, sabiendo que nos acompaña una nube de testigos. P. Raúl Pariamachi ss.cc.

N U E S T R A

F A M I L I A


3

HOMENAJE

Testimonio de un sacerdote amigo de la Congregación

La gloria de Dios es el hombre vivo P. Francisco Fritsch

Encontrar buenos amigos, tener un trabajo interesante y ser algo útil a la gente, son regalos de Dios, que nos permiten ser felices en la vida. El Obispo Lucho Dalle me permitió recibir esos dos dones y gracias de Dios. Él me acogió hace más de 33 anos en su Prelatura de Ayaviri. Mi primer encuentro con él, fue un poco desconcertante. Le pregunté: «¿Qué tengo que hacer en el trabajo pastoral?». Me contestó Lucho: «¡Nada!» Les confieso que esta respuesta me sorprendió; vine a los Andes con unas ganas de trabajar… «Nada», me dijo Lucho. «El primer año no hagas nada… sino mira a la gente, escucha al pueblo, respira el aire fresco de los Andes, déjate quemar por el sol, el inti, abraza la Pachamama y… estudia el quechua». Ese «nada que hacer» era mucho, era lo más importante, lo esencial. Supe después que Lucho hizo él mismo lo que predicó. Era hombre de pocas palabras, pero de mucha coherencia y acción. Su gran preocupación, cuando fue el primer director del Instituto de Pastoral Andina – IPA, fue «conocer al hombre andino y acompañarle para que se ponga de pie». Él no era el que sabía todo, el que puede todo, el que hace todo. «Conocer al runa – co-nacer en y con el pueblo andino – es un segundo nacimiento, un parto difícil pero indispensable, si el misionero nacido en otras tierras, no quiere agredir ni atropellar la cultura del pueblo quechua y aymara». Para Lucho, evangelizar no era traer a los Andes una Verdad desde afuera, sino descubrir, revelar, desvelar, quitar el velo de «las semillas del Verbo» sembradas por Dios en la cultura andina desde antes de la llegada del primer misionero. Lucho fue un precursor de la inculturación de la fe y de la evangelización de la cultura andina.

N U E S T R A

Para Lucho, la «opción preferencial por los pobres» no era de palabra, sino «de verdad», como dicen los niños andinos. Lucho nació en una familia numerosa y pobre, necesitaba becas para estudiar, sufrió la pobreza absoluta en el campo de concentración nazi, acompañó a los pobres del sur andino en su lucha por su tierra y su dignidad y murió en un accidente de carretera como miles de pobres, despojado de todo; le robaron hasta su anillo pastoral y sus documentos de identidad. Cuando viajaba a Lima, le dije: «¿Por qué no viajas en avión para evitar mayor cansancio?» me contestó: «Francisco, los pobres no viajan en avión». Cuando Lucho recibió la «Legión de Honor», la mayor distinción del gobierno francés, nos dijo: «¿Qué hago?… ¡no tengo terno para la ceremonia!… me pondré mi poncho». Cuando el embajador francés en el Perú le otorgó la medalla de la Legión de Honor, dijo emocionado: «Es por primera vez en la historia de la República Francesa que esta alta distinción está puesta en un poncho.» «Luis Dalle, un hombre libre» es el título de la biografía de Lucho. Liberado del campo de concentración in extremis, Lucho supo siempre defender la vida, la dignidad y la libertad de la gente del pueblo, diciendo su palabra clara y profética dentro y fuera de la Iglesia. Leyendo sus cartas y declaraciones en defensa de los derechos de los runas, dije a Lucho: «Hay momentos en que uno está verdaderamente feliz y orgulloso de pertenecer a esta Iglesia»- «No todos los que me leen están felices», me contestó. Pero nada ni nadie podía parar a Lucho cuando había que defender a los campesinos. Lucho hizo suya la palabra de Ireneo de Lyon:

F A M I L I A


4

HOMENAJE

«La gloria de Dios es el hombre vivo», de pie, libre. Tayta Lucho, gracias a ti y a muchos responsables de pastoral, las mujeres y hombres del sur andino llaman a la Iglesia «Nuestra Iglesia». Ellos sienten que la Iglesia les pertenece. Se identifican con ella. El pueblo andino está convencido que la opción por los pobres que hace

la Iglesia es para él, promesa de liberación» (Lupe Jara). Ahora soplan otros vientos, vientos fríos, clericales y reaccionarios en Ayaviri y en el sur andino. Podrán congelar las semillas que tú sembraste, pero no podrán matarlas. Tus palabras proféticas, grabadas en la lápida de tu sepulcro de la catedral de Ayaviri mantienen viva nuestra esperanza: «Allpanchis Phuturinqa – Nuestra tierra germinará y dará su fruto».

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

Luis Dalle ss.cc., el Obispo que no fue, pero que marcó una línea importante en el sur andino P. Gastón Garatea, ss.cc.

La

experiencia humana de Luis Dalle en el Perú fue muy rica y tiene muchas aristas por las que se le puede tomar. No fue un hombre fácil y su experiencia no fue corriente entre los miembros de la Congregación y al mismo tiempo tuvo las características más típicas de la familia de los Sagrados Corazones. Yo quiero tomar el ángulo del hombresacerdote-religioso-pastor que se dio cuenta que había venido a trabajar en un país lleno de injusticias estructurales que habían postrado a un pueblo que «teníamos que poner de pie». Nuestro hermano llegó al Perú marcado por una tremenda experiencia que nunca olvidaría: la Segunda Guerra Mundial, precisamente en el campo de concentración de Buchenbald. Fue una vivencia humana al borde de la muerte, un profundo sentimiento, de lo que es perder todos los derechos humanos. En esa realidad, como muchas veces lo conversó conmigo, aprendió a compartir lo poco de vida que tenía con los que sufrían la misma injusticia. N U E S T R A

Su primera misión en el Perú, fue en el colegio de los Sagrados Corazones (Recoleta), lleno de vida se entregó con una fuerza increíble al trabajo de la educación, sin saber mucho de ella. No quiero seguir hablando del servcio de Luis Dalle en el colegio, pues no llegaría al tema que se me ha pedido. Sólo quiero decir que para gente como yo y mis compañeros fue un hombre impresionante que nos marcó como gente que tenía algo que dar de lo más propio de su personalidad. Dar para hacer el mundo mejor. Las primeras experiencias pastorales de Luis Dalle comenzaron por las haciendas que estaban en torno a Lima, por la parte norte: Pro, Infantas, Mulería, Comas, Caballero, Trapiche, Chillón, Chocas, Punchauca, Puente Piedra, Yangas, Santa Rosa de Quives, Canta, y las que se me pueden haber olvidado. Este servicio pastoral junto con los viajes que había hecho con los alumnos del colegio, le habían mostrado una país lleno de contradicciones y diferencias. Sus deseos de estar cerca de los más desfavorecidos de la sociedad, que eran también los más indefensos, lo hacen buscar el alma de estos hermanos con los que lo separaba una distancia cultural inmensa.

F A M I L I A


5

HOMENAJE

5 Por esas cosas que tiene la vida, y de las que no siempre sabemos dar razón, terminado su tiempo de provincial entra a la universidad de San Marcos a estudiar antropología con el fin de entender de una forma más ordenada a esa gente a la que estaba dispuesta a servir. Providencialmente, le interrumpen sus estudios sanmarquinos con el fin de hacerse cargo de una institución que aparecía en esos momentos: el Instituto Pastoral Andino. Lo decía el mismo Lucho que le parecía cosa de Dios, pues si bien en su tiempo de provincial había entrado en contacto con el sur andino, no había tenido ningún trabajo importante en esos nuevos campos que el Señor le proponía servir. Se instala en el convento de los franciscanos en el Cusco y desde allí empieza a caminar por esas nuevas tierras para él que se siente gozoso en descubrir. Los obispos del sur andino peruano le han pedido estudiar el alma, lo más profundo de las gentes de esos lugares. Empieza por lo más lógico que es el aprender el quechua. Poco a poco se fue metiendo en el alma quechua y descubrió no sólo la vitalidad de quienes viven en esos lugares, sino también la presencia del Dios verdadero en medio de los pequeños, los despreciados, los olvidados. Recordaba sus años de pastorcito en la zona dura de su tierra. Se encontraba en una tierra muy dura que era despreciada por los que tenían el poder. Era una tierra sometida y la pobre gente se sentía como «viviendo en tierra extranjera». Su preocupación era ayudar a que la gente «se ponga de pie». Son hijos de Dios pertenecientes a una cultura diferente a la dominante, pero que es la más auténticamente peruana. Para poder entender lo que estos hermanos creen, valoran, enseñan a sus hijos y gozan se dio cuenta que había que estar en la vida de esos pequeños, aunque muchos piensen que perdería el tiempo con ellos. Se instaló durante algún tiempo en los lugares más significativos, conversaba con las personas que encarnan las tradiciones del lugar, y, reflexionaba largamente acerca de lo que había visto. Buscaba entender

N U E S T R A

lo que la gente hacía y lo que Dios hacía con la gente. Se dio cuenta, no sin dolor, de lo marginada que vivía la población por los poderosos que no mostraban el más mínimo interés por ellos. Un tiempo después se le pidió el servicio de hacerse cargo de la Prelatura de Ayaviri. Si bien nunca había pasado una temporada larga por esos lares, sabía muy bien de lo que se trataba, pues conocía bien a ese pueblo quechua. Desde el comienzo tuvo una opción muy clara y coincidente con la Conferencia de Medellín: los pobres, que en este caso eran los campesinos. Si bien es cierto que nunca fue nombrado Obispo, sino únicamente Administrador Apostólico «ad nutum Sanctae Sedis», para muchos fue el ejemplo de Pastor que los pobres campesinos de las alturas necesitaban. Le interesó mucho lo que los pobres podían explicar de Dios, pues sabía que ellos eran los privilegiados en su Revelación de Dios mismo. Coincidiendo con la teología de Medellín, proclamaba que la realidad pobre y humilde de los campesinos, era el primer lugar teológico que había que entender si uno pretendía anunciar la Buena Nueva. Pero también experimentó que, en la misma medida en que quería anunciar esa Buena Nueva, en esa misma medida, la recibía. Quién sabe este fue el mejor aporte que él hizo a los Obispos del Sur andino con quienes compartía lo que iba descubriendo en su experiencia cristiana. Toda la pastoral surandina bebió de esa fuente de conocimiento y de experiencia de nuestro buen Lucho. Nos dejó a todos con una ruta muy clara de espiritualidad, de teología, de pastoral y sobre todo de convivencia humana en los medios de altura. Ojalá que estos tiempos, que no son precisamente favorables, sepan mantener con mucha claridad el don de Dios que es trabajar en este mundo andino que necesita que se le quiera como Lucho quien dio su vida por ellos.

F A M I L I A


6

HOMENAJE

Reflexión

Luis Dalle y los Runas P. Hilario Huanca Mamani, ss.cc. San Juan del Oro

Respeto a la identidad personal y colectiva del hombre andino

Mons. Dalle, camino a la catedral, acompañando a Hilario para su ordenación, en unión de familiares y el pueblo de Ayaviri.

Considero que nuestro hermano Luis Dalle es un icono de una experiencia religiosa colectiva, de una generación en un tiempo y espacio determinados en la que estuvieron involucrados no sólo nuestra familia religiosa sino muchos otros de la iglesia y la sociedad. Personalmente no he sido su estudiante ni hermano de comunidad, pero doy fe que en la casa de formación y en las comunidades que me tocó estar en ese tiempo se vivía un espíritu peculiar donde, entre otros, el referente importante era Luis Dalle. Por eso me parece que no hay que individualizarlo ni menos idealizarlo para hacerlo inalcanzable para luego ensalzarlo sin comprometernos, sino a través de él, escudriñar cómo esa generación fue tocada por Dios que les dio las agallas para vivir y anunciar su reino de ese modo, los valores evangélicos que fueron urgidos a proclamar y las consecuencias de su compromiso. En lo referente a Luis Dalle y la cultura andina, su aspiración fue hacer realidad el respeto del ser humano en su identidad personal y colectiva, en este caso de los pueblos andinos que le tocó servir; para que esto sea posible es necesaria una convivencia justa y la construcción de una sociedad nueva en el país.

N U E S T R A

La obediencia religiosa trajo a Luis Dalle, como a muchos otros, a nuestro pueblo. Desde este lugar enseñó a todos con su palabra y acción su íntima convicción de la condición sagrada de todo ser humano, de todas las culturas por ser hijos de Dios y por tanto el respeto que se le debe en su identidad personal y colectiva. Esto lo fue explicitando en su compromiso concreto con la vida y destino de nuestros pueblos indígenas del sur andino. Él sabía que el Perú es un conjunto de nacionalidades que se ignoran, dominan o confrontan entre ellas; sabía que está en medio de una porción de mancha india considerada como problema para el país; y sabía que la vida del blanco es historia y del indio cuento, la primera digna de ser contada y la segunda simplemente ignorada. No olvidemos que es aún la época de las haciendas. Urgido por el Señor empezó a acercarse y conocer a ese «Otro» y su entorno pero en profundidad. «Conocer el alma indígena» fue su objetivo, es decir, llegar a la fuente que estructura un modelo de sociedad con rasgos y horizontes propios que llamamos cultura, en este caso la cultura andina. Lo hizo en una actitud de diálogo. Numerosas visitas a distintas comunidades, muchas experiencias de compartir la vida en sus distintos aspectos y largas horas de plática. Se esforzó por aprender el quechua, por lo menos una palabra o frase porque era consciente que el idioma era uno de los medios importantes por donde el otro revela su misterio. Como resultado pudo confirmar su posición de que los indios no eran pobres, paganos ni bárbaros, pudo apreciar en los pueblos andinos un conjunto de valores propios que no sólo daban sentido a su vida, sino que podrían ser un aporte a la cultura universal. Entonces empezó la ardua tarea de difundir estos valores por todos los

F A M I L I A


7

HOMENAJE

medios a su alcance y convencer, tanto a los de adentro como a los de afuera, la importancia de reconocer, respetar y vivirlos. Así empieza el proceso de restauración del hombre andino y su paso de indio a runa. La necesidad de una convivencia justa Luis Dalle y su generación saben también que una cultura para ser vital y desarrollarse necesita de unas condiciones económicas, políticas y legales mínimas; así como abrirse a otras culturas y saber convivir con ellas en fraternidad. Además se dan cuenta que no están ante una clase social empobrecida sino de pueblos sojuzgados. Donde una cultura prevalece, posee las condiciones para desarrollarse y se impone a las otras. En esas condiciones las culturas andinas no pueden sobrevivir, menos desarrollarse. Esto amplía su perspectiva. No sólo trabajarán por la identidad cultural, sino por una justicia social a favor de los pueblos andinos. Así se inicia otra etapa de su quehacer pastoral. Su aspiración fue «Poner al hombre andino de pie». Es decir, no pretendieron convertir a los andinos en objetos de sus limosnas, tampoco convertirse en sus voceros; al contrario comprometieron a los propios andinos a ser agentes de su propio destino y por ende conquistar sus derechos. Así se desarrollaron sucesivamente las tareas de formación, concientización, capacitación, organización y la movilización. Una tarea importante fue la promoción y acompañamiento de los líderes locales en distintos campos, tanto en la iglesia como en el pueblo. Luis Dalle apreciaba particularmente los líderes y estaba cerca de ellos. Buscó que cada hombre o mujer andinos se comprometan con su pueblo. Construcción de una nueva sociedad Lamentablemente esta aspiración no fue acogida por los gobiernos de turno ni los grupos privilegiados, fue más bien satanizada y combatida. Estos consideraron y lo siguen haciendo que estas reivindicaciones no solucionan el problema del país sino al contrario N U E S T R A

crean caos social. Para nosotros fue claro que las reivindicaciones reclamadas no fueron para promover la confrontación por la confrontación y crear así el caos social, tampoco buscó la eliminación de las culturas que detentaban el poder; sino que los demás reconozcan el derecho a la identidad cultural propia, cree las condiciones para que esta sea posible y acepten una convivencia en igualdad de condiciones. Aspiraban a la construcción de una nueva sociedad donde todos tengan un lugar, donde la diversidad cultural no sea considerada como un obstáculo sino una riqueza, una apertura dialogante a las otras para un enriquecimiento mutuo. La resistencia de los gobiernos, la irrupción de la violencia armada y la inconsecuencia de los propios andinos debilitaron este proceso. Tal vez se dirá que es poco lo que se ha logrado y los problemas se mantienen. Sin embargo, es importante reconocer que esa generación en el tiempo y las circunstancias que les tocó vivir, en nombre de su fe proclamaron a los de su tiempo la dignidad del ser humano, el derecho a la identidad cultural, a la convivencia basada en la justicia y que es posible una nueva sociedad. Fueron pues el espíritu de su tiempo. En este mundo post moderno y globalizado que pareciera decirnos que vivimos una nueva y mejor etapa de nuestra historia y que lo anterior ya ha sido superado, el testimonio de Luis Dalle y su generación continúa vigente. La deshumanización se acentúa y los hombres y pueblos de este tiempo necesitan que alguien les recuerde su condición humana. En lo que toca a nuestra familia religiosa, en ese contexto se vivió y desarrolló lo que se llama el proyecto misionero de la prelatura de Ayaviri que involucró al conjunto de nuestra provincia pero que actualmente parece llegar a su fin. Espero equivocarme. Pero cualquiera sea el futuro, al conmemorar los 25 años de la partida de nuestro hermano Luis Dalle nos toca descubrir en el testimonio y compromiso de él y su generación la presencia de Dios y hacer nuestro ese legado espiritual que nos ayude a continuar el camino del Resucitado como otra generación, en otras circunstancias y desafíos. F A M I L I A


8

HOMENAJE

Vivencias Personales

LUCHO, LIBRE Y RECIO

6

- EXTRACTOS Hna. M. Bernarda Ballón-Landa, ss.cc.

RECIÉN LLEGADO Lo conocí recién llegado al Perú, por los años 40 ó 50, joven, e n t u s i a s t a , «revolucionario», trabajando en la educación muy activamente. Tengo en mis manos un librito de cantos que él hizo imprimir, con música gregoriana y otras, pero con textos en español, que resultaban una novedad para la época (comenzaban las llamadas «misas comunitarias»). Iba a Belén para hacer revisar los textos con sor Hermassie, «la Musa de Belén», la más calificada para la lengua. Esto era otra novedad: un padre yendo a buscar a una hermana para hacerse corregir escritos... Ya se percibía en él las características que lo acompañaron hasta su muerte: libre en la acción, respetuoso de las culturas y apreciador sincero de las capacidades ajenas. ENSEÑADOS POR EL PUEBLO El IPA, organizado y respaldado por los Obispos del Sur, comenzó a hacer noticia en la Iglesia peruana. Los cursos se daban por varias semanas en el Cusco. En la selección de éstos y en la organización de la casa que nos acogía (no recuerdo si era el seminario) se notaba novedad. Todos estábamos en el mismo edificio; los hombres en un piso y las mujeres en otro. Se eliminaron los cursos muy académicos y se daba tiempo para vivencias, experiencias y todo lo que nos acercara al pueblo que queríamos «evangelizar»: folklore, lengua quechua, música y danzas, en las que tomábamos parte todos: curas, monjas, laicos; entre éstos los líderes campesinos. (El P. Luis nos recordaba siempre que el pueblo nos enseñaba a nosotros muchas cosas...)…En el paso por el IPA, en el tiempo en

N U E S T R A

que Lucho era el ejecutivo, aprendimos más cómo vivir en el pueblo en el que queríamos insertarnos, que cosas doctas para el cerebro…En ese tiempo, Lucho fundó la revista del IPA que llamó «Allpanchis Phuturinqa» («Y nuestra tierra dará su fruto»). PROMOCIÓN DE LA MUJER ANDINA Por razones de salud tuve que dejar, con gran sentimiento, la Prelatura en 1972. Un día que nos encontramos en Belén con Mons. Dalle, en uno de sus viajes a Lima, le manifesté la nostalgia que sentía y mi deseo de visitar Ayaviri -ya que por el momento no podía residir allípero por algo útil, porque no quería darme el lujo de hacer turismo. Al poco tiempo recibí la invitación para participar con él y una hermana de Santa María de la Providencia de San Juan del Oro, en un curso que había organizado en Cuyo-Cuyo, para la promoción de catequistas mujeres campesinas. Otra novedad…Al comenzar el curso, nos reunimos a campo abierto en un patio de tierra. Nos sentamos en un gran círculo en el suelo o sobre pedrones. Monseñor hablaba e ilustraba sus explicaciones con dibujos que hacía con un palo en la tierra. Me pareció estar trasportada al tiempo de Jesús de Galilea…Para ejercitar a las campesinas a vencer la timidez y a hablar en voz alta, las hacía leer o hablar desde el fondo del huerto. Todo simple…En esa reunión en la que los asesores hablaban quechua (siempre había un alma piadosa que hacía la traducción para los ignorantes como yo), al tratar de los sacramentos y en especial de la confesión, Monseñor nos hizo palpar la diferencia del concepto de pecado que hay con la gente del ande. Lo que para nosotros es un crimen, ellos no le dan tanta importancia, y a lo que nosotros nos parece una bagatela, para ellos es falta grave. Por supuesto que todo era muy pobre y sencillo; nada de audiovisuales sofisticados…

F A M I L I A


9

HOMENAJE

7 Ayaviri. Me explicó que eso era ponerse del lado de los poderosos: ricos y militares, que serían los únicos que utilizarían la vía aérea. De hecho ese campo quedó al servicio exclusivo del ejército, según creo. UN HOMBRE LIBRE

El P. Luis Dalle en el Altiplano

Pero este primer ensayo resultó prematuro y no se pudo seguir con las mujeres catequistas, lástima! pero no fue inútil; sirvió para despertar un mayor aprecio de la mujer andina, y a ella para autovalorarse. Terminada la experiencia regresé a Lima. ANÉCDOTAS Un buen día le robaron unas piezas de su carro, las que no se conseguían en el Perú. La policía «no encontraba» a los ladrones; al poco tiempo le robaron el carro. La policía «no sabía» quiénes eran los ladrones. Mons. Dalle, perdiendo la paciencia, les dijo que se iba a quejar al ministerio, a Lima. Al día siguiente «encontraron» todo lo robado... Desde entonces guardó su carro en nuestra casa, lo que nos daba la ocasión de verlo y tomar juntos «un cafecito». Lo veíamos tan solo... Nos enternecía mirarlo a lo lejos en la calle, entrar en una tienducha para comprarse unos panes que metía en sus bolsillos. A veces lo observábamos desde nuestra casa, caminar solo por la moya (pradera), algunos domingos, cerca del río, recogiendo hongos comestibles. En el desfile de la gran fiesta nacional, siendo «el Obispo», tenía una poltrona en la tribuna oficial. Nunca fue. Pero no se escondía. Yo lo vi como espectador del desfile, en medio de la multitud, donde su estatura lo hacía destacarse inconfundiblemente. Tampoco quiso ir a bendecir un aeropuerto que se inauguró en N U E S T R A

Resultaba incómodo para el gobierno y para el ala derecha de la Iglesia, en cambio, el gobierno francés le concedió, en 1981, la Legión de Honor, para lo que el Embajador y su esposa viajaron a Ayaviri. Se alojaron en la humilde Prelatura. Mons. Luis, desconcertado nos llamó a las Hermanas para que lo ayudáramos. Nos confesó que no tenía un terno presentable para la ceremonia. Le dijimos que en su lugar tenía lindos ponchos; nos enseñó dos, de los que escogimos el blanco que le caía pintado. El grupo que lo rodeó ese día fue el de los íntimos y de los modestos empleados de la Prelatura. Me reía para mis adentros viendo el despliegue de elegancia que hizo la embajadora, de traje largo, en un medio tan sencillo y lejano de diplomacias… Amaba la creación y comprendió el alma andina, el respeto por la tierra (la Pachamama), por la planta sagrada de la coca, lo que influyó en mí, que en una noche de San Juan, en la que se «maccha» coca después de «decirle secretos» a la hoja más linda, yo tomé parte en el rito con auténtico respeto... ese respeto auténtico que él tuvo por el pueblo de los Andes, por sus valores humanos, por su arte, del que fue gran apreciador. Se veía que no era política de conveniencia. El pueblo lo supo captar y por eso pudo asistir a sus ceremonias y ritos secretos a los que no se admite a los «mistis»… LOS ÚLTIMOS DÍAS… EL FINAL En un encuentro de toda la Prelatura en Chucuito, tuve la oportunidad de conversar con él, las largas horas que duró el viaje. Habló de su niñez, de su familia, de la Congregación. Me contó cómo de pequeño cuidaba el rebaño de todo el pueblo, y cómo, siendo niño, se fue solo por el camino con su equipaje para encontrar al Padre F A M I L I A


10

HOMENAJE

SS.CC. que lo llevaría al convento. Me dijo: «Me acusan de no querer a la Congregación, cuando la Congregación ha sido mi familia».

8

También quería profundamente a su familia según la sangre. Habló de su terrible experiencia de la guerra y de lo que hacía secretamente para proteger a sus hermanos. Cuando poco tiempo después recibió en Ayaviri la visita de sus familiares, creo que recién se enteraron de lo que había hecho por ellos… En Chucuito nos esperaba un hermoso edificio junto al lago, con una linda capilla. Nadie había pensado en reclamar el Santísimo; él sí lo pensó y lo pusieron…La reunión fue muy dura; todos lo atacaban con agresividad, y, para mí, con injusticia. Él, como una roca resistiendo «los embates de las olas», pero se le veía triste ¿estaría presintiendo el fin? Cuando éste llegó, un 9 de mayo de 1982, en un accidente de carretera, cerca de Arequipa, la consternación removió Ayaviri como un terremoto. Recuerdo que, llorando le dije a Paco «¿Y ahora qué hacemos?». Me respondió: «Seguir adelante, ser como él valientes y continuar su obra». Su ataúd fue llevado en una caravana de autos desde Juliaca, adonde había llegado en avión de Arequipa. Fue un acontecimiento en el que todo el pueblo tomó parte. Se lo recibió como a un héroe. Sus enemigos no eran los menos afanosos en rendirle este homenaje… El entierro fue grandioso; todo el Sur Andino presente, más las autoridades civiles… En la Misa del funeral se ofrecieron en el ofertorio, los pedrones que, caídos en la Prelatura, allí se conservan. Todos quisieron cargar el cajón, por lo que se hicieron turnos entre los distintos grupos; los últimos fueron los Obispos, que lo llevaron dentro de la Catedral, a la tumba sobria, con lápida blanca, que desde entonces es un lugar de peregrinación. Paco d’Alteroche que reemplazó a Mons. Dalle en la Prelatura, se portó como su digno sucesor… Recogí de encima de su tumba una cinta con los colores de Francia y un poco de tierra que envié a su hermana SS.CC. N U E S T R A

Luis Dalle junto a un campesino

Tierra, esa tierra por la que luchó y a la que nos enseñó a querer... Nuestro Lucho, libre y recio, dos facetas de su persona que hicieron de él un eficaz luchador de la buena causa y un personaje incómodo en las relaciones personales. Por eso tuvo tantos amigos y tantos enemigos. Pero ese gigante, escondía con pudor una sensibilidad que no todos apreciaron. Era igualmente capaz de arrojar a puntapiés de la Prelatura a un «mascalzone» (literalmente...), como de llorar (literalmente...) por una herida hecha a su corazón fraterno. Rechazaba todo lo que fuera contra la dignidad del pueblo: se opuso a recibir ayudas que le parecían limosnas y que adormecían su lucha por la superación. Por eso en un momento, se negó a aceptar la ayuda de Caritas, cosa que costaba entender. Y es que tenía una obsesión: Quería al pueblo DE PIE. Era un contemplativo en medio de su imparable actividad, y la sierra peruana le ofrecía «material» para estas dos vertientes: los picos nevados, los ríos tumultuosos, los cielos estrellados, los amaneceres luminosos, los horizontes infinitos, la austeridad, el silencio... y dentro de este panorama, la gente, la gente que él amó con ternura y por la que luchó; la gente con su pobreza, su opresión, su dolor, su cultura, sus valores. ¡Lucho... qué falta nos hace...!

F A M I L I A


11

HOMENAJE

Testimonio - Entrevista

EL PASTOR Hno. Pedro Vidarte Enriquez, ss.cc.

Nuestra hermana Adela Villanueva, nos comparte en esta entrevista su experiencia cercana a nuestro hermano Luis Dalle. Adela ¿Cuántos años sirviendo en Ayaviri?

es nuestro hermano… ni me acordé del frío, soporté y me pareció tan lindo; él (Lucho) era tan entusiasta que Veinte años seguidos contagiaba, a poco me interrumpiendo dos años, después enseñó a unas hermanas, vuelvo dos años más. Veintidós en cómo debía desempeñarme de total. Los dos años que interrumpí secretaria; en fin, aprenderé bajé a Arequipa a apoyar un poco la con dos deditos a escribir a pastoral en el colegio Padre Damián, máquina. Me dio una después me volví a la prelatura de maquinita vieja: «como Ayaviri, ésta comprende tres puedas vas a contestar estas provincias; donde más he apoyado cartas, al ministerio, esto, lo ha sido Carabaya porque mi primo el otro»… No sé si lo hice bien o padre Berto tuvo percances y estuvo regular pero él estuvo abandonada esa zona, ahí apoyé Hna. Adela Villanueva, ss.cc. contento. Cuando se iba un acompañada por Benigna, nuestra mes, regresaba, estaba una semana, quince días hermana mayor, un año (el ‘88) solas con apoyo y volvía a un sitio a otro donde seguro le de algún sacerdote que pasaba de vez en comunicaban que había problemas en las cuando. Monseñor Luis Dalle me había enseñado parroquias abandonadas donde los fieles sufrían lo esencial y cómo desempeñarme donde no había de parte de los «mistis» (blancos), los gamonales, sacerdote. Yo tomaba notas para cumplir, en lo que oprimían a la pobre gente…les quitaban sus posible, fielmente…me sentía medio cura y feliz cosas, les hacían trabajar en vano, los metían decía: qué pena que las mujeres no podemos presos por cualquier cosa; ahí estaba el Pastor. hacerlo todo. Linda experiencia. Dejaba la prelatura y me decía «bueno, tú procura atender todo esto y si no pide socorro ¿Qué año conociste a Dalle? al padre Paco que está de párroco». Se iba, solucionaba las cosas, regresaba, algunas veces Ya lo conocía de mucho antes, pero en el muy apenado de las cosas que pasaban entre ’78 yo estaba, todavía, en Surquillo formando cristianos que han sido preparados, que han una pequeña comunidad con otras cinco tenido posibilidades de estudiar, ¡todo! y que hermanas; entonces, Begonia, la hermana opriman a la pobre gente analfabeta, que las española que le hacía de secretaria, se había utilicen. Se desfogaba con nosotras, conmigo y accidentado y debía volverse a España, quedaba con Benigna, decía «hermanachas, qué dolor, sin un apoyo Monseñor Luis Dalle. Pidió una qué hacer. Éstos que Dios les ha bendecido con hermana… Me dio pena ver un hermano obispo dinero, con sabiduría, con educación, cómo que clame apoyo a las hermanas y nadie se tratan a sus hermanos. Qué haremos.» Y yo le ofreciera porque todas estaban copadas de decía: «monseñor, enséñeme a mí la teología, trabajo… Me ofrecí el mes de mayo del año ’78. mándeme a algún curso y yo iré a predicar» Me fui a pesar de temer al frío. Había conocido (risas). Después decía, «qué predicar, difícil es (el lugar) años antes y dije: ¡nunca vendré a predicar, pero, viviendo poco a poco con cariño este frío!, moriré. Pero ahí me olvidé y dije ¡no! los ganaré a que traten mejor, que sean más Dios me dará fuerzas y el obispo me enseñará, N U E S T R A

F A M I L I A


12

HOMENAJE

10

justos». Así comprendía, él a su manera, algunas veces yo lo veía muy duro… otras veces sabía ganar con dulzura… Un día que pasó la procesión decía (Luis) «mira la fe de la gente sencilla, así debe haber sido en Caná de Galilea, en Jerusalén, allá en la Palestina… Dios es de esa gente sencilla de corazón, por eso hay que tratar de comprenderle nos predican a nosotros con su fe»…, y yo le interrumpía: Monseñor, lo dice porque mezclan un poco el paganismo con la fe con eso de que rinden con la coquita y los despachos… «Mira, tan humildes se sienten que ponen a la naturaleza de por medio para poder llegar a Dios porque dicen que la naturaleza es más santa, que cumple las leyes de Dios». Él había descubierto y valorado la cultura de la gente, y la respetaba. Decía, «no podemos nosotros imponerles el europeismo, el castellanismo sino aprender de ellos esa sencillez de fe para poder nosotros dirigirnos a ellos con esa humildad»… ¿Qué imagen sientes que proyectaba de Dios? Proyectaba al Dios de la verdad y de la justicia que es el Dios amor, porque el amor sin justicia, sin verdad no es amor. Creo que eso lo vivieron nuestros fundadores; el Buen Padre lo vivió; la Buena Madre de otra manera, femenina… Creo que muchos hermanos nuestros lo vivieron: Hubert Lanssiers, Nicolás Castel, Alberto Gicquel, José Luis Ramírez, todos éstos que he conocido más de cerca… Creo que han sido formados en esa época en que si uno vive al Dios amor tiene que ser veraz y justo y defender esos valores. ¿Cómo era en su trato con ustedes las hermanas? Con nosotras era muy tierno. Imagínate que nos enseñaba a degustar los champiñones…decía «hermanachas, es tan rico eso, un día les voy hacer probar», y venía tempranito con su lavadorcito, su sombrero en la mano «vamos a la Moya a recoger». Íbamos, con su navajita cortaba y recogíamos; nos enseñó los que eran de comer… «eso es tónico, hay que aprovecharlo, Dios lo da como el maná en el desierto»… «hay que quitarse los zapatos, N U E S T R A

el rocío del pastito da salud»… Después íbamos a la prelatura, él los lavaba, los cortaba y preparaba en la sartén; nos sentábamos y él nos hacía degustar y, después, nos llevaba a la capilla a orar. Era bonito. «Quiero orar en comunidad, decía, solo diario oro, pero quiero con ustedes dos orar. Ustedes se van a la misa, es verdad, pero hoy día la misa es tarde, entonces, vamos a orar en comunidad…» Le encantaba tener oración en comunidad ya que vivía sólo, era muy tierno y cariñoso. ¿Cuál era su mayor anhelo como Pastor de aquella zona? Decía «formar la juventud para que se puedan autodefender no sólo materialmente sino, también defender su fe del bautismo». Para eso quería también agentes pastorales jóvenes: hermanas, sacerdotes, catequistas que de joven a joven contagien porque decía: «ya los mayores están hecho cayo, te dicen sí, sí a la media vuelta el vicio les gana; la juventud es todavía masa suave, abierta en que se puede trabajar». Anhelaba formar la juventud… ¿Cuál crees tú fue el legado de Lucho a su muerte? Dejó la fe de la gente en las congregaciones religiosas… los sacerdotes, por lo que viven en familia, como familia, se mantienen más y pueden trabajar mejor «no abandonan tanto su sotana», decía la gente… Siempre a mí me llama la gente y me dicen: «madrecita, recuerdas nuestro obispo, monseñor Luis, cómo en quechua nos decía tantos consejos buenos; cómo quisiéramos que hoy en día haya padrecitos así que lleguen a nuestros jóvenes pero sólo es mando, cosas exteriores, no hay una cosa fuerte como en esos tiempos. Monseñor nos decía «a Dios hay que temerle con amor». Eso recuerda la gente. ¿Recuerdas alguna anécdota de Lucho? Una anécdota dolorosa, peligrosa y de susto. Regresaba de Paralimbani trayendo a una monjita que se encontraba allí, creo eran Dominicas del Rosario. En ese tiempo ya estaba con eso de que F A M I L I A


13

HOMENAJE

se dormía manejando («ojo abierto»); estaban justo rodeando la laguna y monseñor Dalle se quedó dormido, el carro se iba al cerro ¡monseñor! le gritó la monjita, dice (Lucho) que el carro se «bailó» en la ladera y no se volteó…cuando nos contó la monjita fuimos con Benigna preocupadas: Monseñor, tiene que tomar su cafecito antes de salir para que no le venza el sueño, «sí hermanachas había tomado mi cafecito pero este demonio del sueño casi nos mata, pero no pudo conmigo gracias a la monjita.» Adela, algunas palabras finales Quiero decir humildemente que lo que todavía vivo en la fe con alegría, con entusiasmo

eso lo he bebido de él. De ver un obispo casi no tomado en cuenta, humillado por autoridades, aún las autoridades eclesiásticas, no considerado como lo que era por lo que era extranjero, no valorado su trabajo, muchas veces dudando de él, eso me ha enseñado a ser humilde; me ha enseñado a saber alegrarme cuando soy humillada, cuando algo se me niega sin querer; creo que me ha enseñado el camino que hay que seguir como religioso(a): no esperar ser alabado, no esperar ser atendido sino servir; atender, alabar a los demás, valorar a los demás y estar contento con lo que Dios te presenta, sea la vida, sea la salud.

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

N U E S T R A

F A M I L I A


14

BODAS DE DIAMANTE

Testimonio

Gracias por tu docilidad al Proyecto de Dios Hna. Candy Núñez, ss.cc.

Queridas

hermanas, hermanos y amigos, dedicamos estas sencillas pero sentidas páginas, a nuestra querida hermana María Paloma Aguirre, con motivo de su aniversario de Bodas de Diamante. Estas páginas parten de nuestra experiencia y de lo que hemos podido apreciar en su vida. También queremos expresarle nuestra gratitud y reconocimiento por todo lo que ella nos ha aportado y sigue aportando como hermana y discípula de Cristo en nuestra familia SS.CC., especialmente por su gran apoyo y cariño a nuestra Provincia en los difíciles pero enriquecedores momentos de la renovación de la Vida Religiosa post-conciliar.

Una Autoridad con Carisma Desde que tuve mi primer encuentro con Paloma, pude percibir que la autoridad que ella ejercía, estaba inspirada y guiada por la autoridad de Jesús, muy clara y distinta de los modelos civiles y políticos que la sociedad nos propone en todo tiempo de nuestra historia. Cuando una estaba frente a ella, sentía su mirada penetrante, serena, paciente, sin arrogancia, profundamente acogedora y adornada de una sonrisa tierna que generaba confianza para abrir la vida con simplicidad; entonces era el momento propicio para facilitar el desarrollo de la persona y su propio crecimiento. Cada experiencia de encuentro con ella sentía que me suscitaba esperanza, alegría y paz; verdaderamente era un foco de luz, un alivio para mi incertidumbre. Motivaba a que las personas sean libres, generosas, equilibradas y comprensivas. Me producía profunda admiración su capacidad contemplativa, de escucha y el arte que poseía para facilitarnos el encuentro con Dios y hacer la lectura de fe de los acontecimientos; suscitándonos seguridad y confianza en la misericordia de Dios y a la vez una fuerte exigencia de desprendimiento y fidelidad. Paloma creía, confiaba en la persona, en sus capacidades y en los dones que Dios había puesto en cada una; por ello alentaba a desarrollarlos y a ponerlos con generosidad al servicio del Reino. Nos ayudaba a canalizar nuestras energías e impulsos en el anuncio del Evangelio y en el compromiso con los pobres. N U E S T R A

María Paloma y Candy

Su amor por la Iglesia y la Congregación, la impulsaba a vivir el tiempo presente, no he escuchado en ella añorar el tiempo pasado, como si fuera mejor, sino afrontar el presente con visión de futuro. Con su visión clara de la realidad podía adelantarse a los acontecimientos y ante los conflictos, buscaba los medios adecuados para enfrentarlos con fe evangélica, confianza y seguridad en Dios. Gracias querida Paloma, por este gran testimonio de tu vida, por tu gran docilidad al proyecto de Dios y a la acción del Espíritu en el Mundo, junto a tu don especial en la animación, suscitaste un nuevo modelo de Vida Religiosa y una manera especial de ejercer el servicio de autoridad, promoviendo calidad de relaciones en pro de la unidad y la fraternidad. F A M I L I A


15

BODAS DE DIAMANTE

PALOMA, UNA MUJER DE DIOS Hna. Marcela de Taboada ss.cc.

E ste

año, el 15 de abril, celebramos en la

Congregación, las Bodas de Diamante de nuestra querida e inolvidable hermana María Paloma Aguirre, acontecimiento muy significativo para todas/os las/os Hermanas/os que hemos tenido la suerte de encontrarnos con ella en algún momento de nuestra vida. Sin duda, Paloma es un Don de Dios para nuestra Congregación. Dotada de una naturaleza muy rica, posee una personalidad definida y una visión clara de la realidad. Sumamente inteligente, inquieta siempre por saber, indagar, conocer, profundizar. A su capacidad intelectual une una gran bondad de corazón y una sencillez muy propia de su ser SS.CC. Los estudios y la vida misma a través de las múltiples y variadas experiencias vividas, le han ido dando la verdadera Sabiduría del Espíritu. Las Hermanas le debemos mucho. Durante los años que la tuvimos, por gracia de Dios, como Superiora General, nos condujo sin temor por los caminos de la renovación de la Vida Religiosa, apoyada en la certeza de la Voluntad de Dios manifestada en el Concilio Vaticano II y los fuertes cuestionamientos de la Iglesia Latinoamericana. Pudimos experimentar un nuevo estilo de relacionarnos entre nosotras y con la autoridad, ejerció un liderazgo de servicio que fue realmente de animación de nuestra vida. Nos fue llevando por caminos de libertad y audacia, convencida de la riqueza profética de nuestra Vocación y Misión SS.CC. Fueron años llenos de dinamismo y creatividad, no siempre fáciles, había mucha tierra que remover, mucho polvo que sacudir… como ella misma lo decía muy acertadamente, le tocó ser una especie de excavadora-aplanadora que iba preparando la tierra para oportunamente, sembrar y dar fruto… Gracias a su visión y docilidad al Espíritu, pudimos empezar a vivir una Vida Religiosa mucho más humana y una búsqueda incansable de nuevos horizontes para la Congregación. Paloma es toda una mujer, una mujer de fe profunda, su presencia sencilla y cercana, irradia paz, serenidad, contagia optimismo, seguridad. Siempre positiva, confiando tercamente en el otro, en sus N U E S T R A

María Paloma, durante su visita como Superiora General a las comunidades de Ayaviri capacidades muchas veces ocultas. Sabe despertar lo mejor de cada uno. Sin mucho alarde, es formadora y forjadora de grandes cosas. Con una capacidad de escucha impresionante, respetuosa de los demás hasta el exceso, vive la libertad evangélica del que todo lo espera del Señor. Su riqueza interior es profunda, va al fondo de las cosas y desde allí actúa, arriesgando y entregando su vida con increíble generosidad. Siempre está disponible, sea en distintos servicios en su Provincia, España, como en necesidades las más variadas de la Iglesia y de la Congregación: Vicaria General, Superiora General, Coordinadora de Formación, Formadora, Maestra, discípula, en España, en Roma, en América Latina, en Asia… siempre contagiando optimismo, sabiduría y audacia. Toda una vida entregada al Señor sin poner límites. Las Hermanas del Perú tuvimos la oportunidad de «gozarla» y «saborearla» muchas veces en distintas ocasiones. Siempre nos hemos sentido muy a gusto con ella. Gracias a sus cuestionamientos, cuando estuvo de Superiora General, empezamos a confiar más en nuestras propias posibilidades, F A M I L I A


16

BODAS DE DIAMANTE

asumiendo de corazón la realidad que nos tocaba vivir en aquellos momentos de cambios. Nos abrió horizontes y nos animó a buscar siempre más allá… Nuestra Provincia vivió profundamente la renovación, no sin dificultades y sufrimientos, pero con gran entusiasmo y esperanza. Es bonito sentir cómo ama Paloma nuestra Congregación, cómo valora y se entusiasma con nuestra Vocación y Misión. Ella misma es un reflejo de nuestro Carisma SS.CC. Ese gran amor por lo nuestro la llevó a luchar con fuerza y convencimiento profundo, por la unidad de Hermanos y Hermanas, como el don de la Congregación para la Iglesia y para el Mundo. Tuvo que sufrir muchas incomprensiones, pero el camino estaba abierto y gracias a ella pudimos llegar a la redacción conjunta del Capítulo I de nuestras Constituciones y a la celebración gozosa de nuestra unidad en 1988. Desde entonces, con avances y

retrocesos, vamos intentando vivir mejor la riqueza de ser una sola y única Congregación. Por donde ha pasado Paloma ha sembrado unidad y comunión, esos han sido los valores que siempre la han inspirado y motivado y que la siguen caracterizando. Conversando con ella en el Escorial, antes del último Capítulo General, quedé impresionada viendo su lucidez frente a la Congregación y su machacona insistencia en los aspectos fundamentales de nuestra vida. Sigue siendo para nosotros/as una referencia importante, una Maestra del espíritu. Realmente la Congregación le debe mucho a Paloma y sin duda cada una/o de nosotras/os tenemos muchos motivos para dar GRACIAS a Dios por su vida. Esta es una buena ocasión para hacerlo. Que los Sagrados Corazones la bendigan y que siga contagiando a su alrededor, el gozo, la esperanza y la paz.

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

N U E S T R A

F A M I L I A


17

BODAS DE DIAMANTE

FIGURAS ACTUALES PICPUCIANAS

BODAS DE DIAMANTE DE PALOMA AGUIRRE Superiora General 1975– 1983 Hna. Juanita Gómez-Loayza, ss.cc.

E l 15 de Abril, Paloma Aguirre celebra sus Bodas de Diamante de Vida Consagrada en nuestra Familia Religiosa SS.CC. Para nosotras, hermanas del Perú, es un motivo de gozo y de infinitas gracias al Señor por el don de su vida.

Hermanas y así profundizaban lo que estaban recibiendo. Eso me permitió valorar en ella, su capacidad de liderazgo, y estar abierta a los signos de los tiempos y a la Voluntad de Dios.

Desde mi etapa de formación inicial, pude percibir que Paloma ante todo buscaba la UNIDAD en las Paloma, en las Provincias, en las comunidades diferentes responsabilidades locales, entre los hermanos y que le han sido confiadas, va hermanas, a pesar de las dejándonos una huella dificultades que encontraba en el imborrable, de servicio y diario vivir, pero ella, no se inmutaba. entrega incondicional que no Siento que Paloma ha tenido siempre debe caer en el olvido, una gran fortaleza interior que le M. Paloma en la 1ra Sesión de Picpus especialmente en los ocho permitía pasar por alto: críticas 2005 -Lovaina años de generalato, que negativas, indeferencias… etc. Yo marcaron una nueva etapa sentía que ella, estaba convencida en la vida de nuestra Congregación. que nuestra Familia religiosa necesitaba dar una respuesta de fidelidad al llamado de Dios que nos Ella es una de las figuras femeninas hacía a través de Vaticano II y Medellín. Así se importantes, que las nuevas generaciones deben inició un proceso de transformación profunda de conocer a fin de valorar el proceso de la Vida Religiosa en América Latina. transformación y cambio vivido en la Congregación. Paloma, en el rapport de su primer periodo El Concilio Vaticano II, las orientaciones de de Gobierno dice: «Nuestro principal objetivo la II Conferencia General del Episcopado ha sido el progresar y ayudar a progresar en Latinoamericano, Medellín, el CELAM y la CLAR, la unidad…» y así fue. Yo me atrevería decir, influyeron mucho en la renovación de la Vida que Paloma inició un nuevo estilo de Superiora Consagrada. General: La autoridad como servicio y con su nueva manera, ser una hermana fraterna, sencilla, Paloma, en 1973, vino especialmente a Lima cercana, dialogante, entusiasmante y coherente. a participar del I Seminario CLAR para Formadores Ayudó a la Congregación a hacer el paso de un de religiosas y religiosos de todo Latinoamérica. gobierno vertical, piramidal, a un gobierno En dicho seminario también participaban varias horizontal, de servicio y animación. Promovió la de nuestras hermanas de diferentes países. Una participación activa de las hermanas en la vida y de las cosas que más me llamó la atención de toma de decisiones en las Provincias, en las Paloma, en ese entonces, fue su sencillez, comunidades locales. Incentivó la búsqueda del cercanía, apertura y serenidad. En los días libres bien común, la atención, el respeto a la vida, a la Paloma aprovechaba para reunirse con nuestras persona, la simplificación de estructuras, cambio N U E S T R A

F A M I L I A


18

BODAS DE DIAMANTE

de mentalidad a todo nivel. Ella misma reconoce en su rapport, que su principal objetivo ha sido: «Hemos procurado poner el acento sobre la animación: era una necesidad repetidamente señalada por la Congregación y constituía también para nosotras una aspiración profunda». Unos años antes de entrar a la Congregación, yo conocí a las hermanas con un estilo de vida muy estructurada, pero dos años después, se nos comunicó en el colegio en 1971, el nombramiento de una nueva Superiora Provincial (peruana): Carmen María Villegas. Con ella, en el Perú, comenzaron los pequeños cambios. Pero con la nueva Superiora General, se acentuaron. Es como decía una hermana: «Si abrimos una sola ventana, el huracán va a invadir nuestra casa». Efectivamente, los cambios que se iban dando en la Congregación muchas hermanas los vivieron con miedo o espanto, otras con desfaces e inmadurez, otras con alegría y esperanza. Es así, como se fue dando el paso progresivo de comunidades semimonásticas a comunidades apostólicas, de inserción entre los pobres, como decía Paloma al referirse a los pobres: «…a quienes reconocemos como los preferidos del Señor». Comunidades abiertas «donde todos puedan llegar y ser recibidos como verdaderos hermanos» (Doc. 1-2 ProvinciaPerú 1975). Comunidades en la que cada persona pudiera desarrollar todas sus potencialidades en función de la misión. También se dio el cambio de estructuras de uniformidad a estructuras de comunión fraterna, de una progresiva aceptación de la

pluralidad como riqueza y no como obstáculo: «El nombre cristiano de la unidad no es uniformidad, sino comunión, aceptación en el amor con todo lo que nos diferencia».(carta Circular del 10/12/1975 dirigida a todas las hermanas de la Congregación con ocasión del 175 aniversario de la Congregación). En su carta circular del 12 de mayo de 1975, invita a todas las hermanas de la Congregación: «El intentar vivir con autenticidad siempre creciente nuestra Consagración al amor, hará que sobrepasando las fronteras demasiado reducidas de nuestra propia comunidad, Provincia o Congregación, pongamos lo mejor de nuestro esfuerzo en «anunciar» a todas las gentes la Nueva Evangélica, para que la humanidad se haga familia de Dios, y la plenitud de la ley sea el Amor» (GS n° 32) En otra carta circular con motivo del Adviento de 1979 dice: «Vivir la vida nueva según el Espíritu, dejándonos orientar siempre por Dios y no por los esquemas de este mundo, aprendiendo a comprender su lenguaje, descubrir sus signos y orientar según Él nuestra vida y decisiones». (2/12/975) En las bodas de Diamante de nuestra querida hermana Paloma Aguirre, deseo expresar mi agradecimiento al Señor, por el don de su vida, por su visión profética de la Vida Religiosa, por su capacidad de riesgo, espíritu de discernimiento y apertura a los signos de los tiempos. Por su testimonio de amistad y trabajo en complementariedad con el Padre Juan Scheepens, quienes en un trabajo conjunto, nos han abierto nuevos caminos de Vida Consagrada.

Gracias Paloma, porque tú eres Mujer de: Paz, profunda y contemplativa Animadora por excelencia Libre como una paloma que sólo se deja guiar y Orientar por el Señor, en la Misión de animar la vida de la Congregación. Mujer de fe, con visión profética y espíritu de discernimiento. Amante de la verdad, capaz de escuchar la voz del Espíritu que te impulsó a abrirnos nuevos caminos de Vida Consagrada N U E S T R A

F A M I L I A


19

VIDA DE LAS PROVINCIAS

Inroducción en la celebración eucarística

Primer Aniversario de la Pascua del P. Hubert Lanssiers Sr. Pablo Espinoza Espinoza

Al

cumplirse un año de la partida de nuestro hermano y amigo Hubert Lanssiers, sacerdote, religioso de los Sagrados Corazones, nuestra fe y una común memoria agradecida nos invitan hoy a recordarlo y celebrar el regalo de su vida. Nadie que hoy lo recuerde con verdad, en lo más auténtico de sus gestos y afanes podrá quedar indiferente al evocar el sentido de su entrega. Su vida sigue hoy interrogándonos: ¿Dónde está tu hermano? ¿Comprenden lo que he hecho? Celebrar la Cena del Señor, nos remite al actuar de Jesús, el Cristo, quien se hizo siervo y ofreció su vida para darnos vida plena. Hubert, discípulo, prolongó en miles de gestos cotidianos el mismo sentido de aquel primer gesto servidor de su Señor. Agradecemos en Hubert el vigor de sus convicciones y la hondura de su amor por la vida. Hoy vuelven a nuestra memoria su figura compañera en este Colegio de La Recoleta, su infatigable presencia en el mundo de los penales, las causas por las que gastó su vida, los conflictos que supo enfrentar con firmeza, sus innumerables expresiones de ternura, la lucidez de su palabra, su reflexión permanente sobre el tiempo que vivió, escudriñando siempre el sentido de la historia en medio de la turbidez de los acontecimientos que le tocó enfrentar. Interpelante en sus palabras, evocador de mil figuras con las que nos invitaba siempre a estar alertas, despiertos. Y cómo no agradecer también su sentido del humor, su sarcasmo e ironía. Hizo de su vida un permanente esfuerzo por colocar a la persona humana en el centro de las diversas situaciones en las que desplegó su ser. Supo reflexionar sobre el misterio de lo que significa el ser humano, ser persona y por ello mismo vivió intensamente el abrazo, la escucha, la mirada. Se hizo cargo de la suerte N U E S T R A

de muchos. Amigo de la Sabiduría y amigo de todos nosotros. Medimos con sentido cronológico este año de distancia, pero la intensidad con la que vivió Hubert le da al tiempo su hondura y sabor definitivos. Celebremos con él esta noche la Eucaristía de la que se alimentó, y de la que ya disfruta plenamente, y si nos sentimos agradecidos renovemos también nuestros compromisos por restituir en todo ser humano, su condición de persona, para así llamarlo y tratarlo como un hermano.

NOTAS PARA EL BOLETÍN PROVINCIAL 2007 A partir de mi responsabilidad como corresponsal del Boletín «Nuestra familia» en el colegio, me propongo lograr un mayor conocimiento de la vida institucional y de las personas que integran la Comunidad Recoletana. En este sentido he pensado desarrollar un conjunto de notas para los números correspondientes a este año 2007, y que son los siguientes: ABRIL: La Pascua Juvenil en el colegio (CER). MAYO: La celebración del Día del Trabajo en el colegio (CAS). JUNIO: La experiencia de las comunidades en el colegio (entrevista a José Kuwae). JULIO: La educación peruana y el aporte del colegio Recoleta (Pamela Olano). SETIEMBRE: La relación con los Padres de Familia en el colegio (Teresa Solé y Rossana Quiñones). OCTUBRE: Aniversario del colegio ss.cc. Recoleta: propiciar el Reino desde la Educación (Harry Patrón). NOVIEMBRE: Opiniones de lectores del colegio Recoleta para el boletín «Nuestra Familia» Estos son los temas y personas que sugiero para este año. Espero respuesta y sugerencias, gracias. Manuel Lozano.

F A M I L I A


20

VIDA DE LAS PROVINCIAS

Homilía de la misa del P. Hubert Ap.3 15-20 - Mt. 25 34-41 P. José Serrand, ss.cc.

Amigos, amigas, después de ver

sí, cada uno de nosotros, a nuestra manera, estamos llamados a visitar, a acompañar, a amar. Creo que el «amor que tenemos a Dios es el amor que tenemos para el hermano que más necesita» vasto programa, imposible a realizar, sin el contacto íntimo con Jesús que vivía nuestro amigo Hubert cada día a su manera.

juntos, varias fotos de Hubert, estamos llenos de emoción, con un nudo en la garganta, con ganas de gritar o más bien de guardar el silencio profundo; la palabra de Dios que hemos escuchado nos ayuda a redescubrir la «Humanidad de Dios» en Hubert. Esta noche, Jesús nos hace un guiño personal. Con la «R» de Hubert, quisiera decirles alguito para Nuestra Vida Hoy. Para Hubert, como para Jesús, Dios no es un Dios lejano y castigador sino un Dios cercano, me atrevería a decir que es un Dios-Mamá que se conmueve en las entrañas hasta dar la vida por «sus hijos, los pequeños». Así lo hizo hasta el último día de su Vida. Mucho más que Roma o los poderosos, para Hubert eran importantes los pequeños, los desechados, los rechazados, los no amados». Más que pregunta y respuesta del catecismo, que nos deja el corazón seco, el Dios de Hubert es mirar en silencio a los ojos de aquel que sufre y devolverle la esperanza, el Dios de Hubert está identificado con los más pobres, es Jesús cercano que nos calienta el corazón de hecho. Hubert no se fue con las manos limpias, vacías, sino con las manos con callos y llenas: VIVIÓ. En la primera lectura Hubert nos dice a cada uno. «Estoy a la puerta y llamo, escucha mi voz, quiero compartir la vida contigo» y Hubert tan poeta, tan cariñoso y sarcástico, por momentos grosero nos dice hoy: «Ustedes mis amigos, los quiero, conozco sus obras, tal vez no son ni fríos ni calientes son TIBIOS, los vomitaré de mi boca»; nada de quedarse con sólo mi recuerdo, cosa que es tan importante, les invita a «VIVIR». Sé que hay un solo Hubert, no hay clonación, pero N U E S T R A

El Evangelio de hoy, lo leo así: «Es por su Hijo, hecho hombre, que Dios visita a los hombres, también es visitando al hombre que nosotros visitamos a Dios. En la última visita dirán: «Cuándo te hemos visitado?». Jesús, nos dirá: «cuando visitaron a los hambrientos, los enfermos, los encarcelados a mí me visitaron». Nos lo repitió Hubert con toda su Vida Amigos, tenemos la tendencia , tal vez inconsciente, de derretirnos, de ternura, de lágrimas frente a un crucifijo lindo de madera mientras pisoteamos sin escrúpulo a Cristo vivo que pasa junto a nosotros, cada día. No lo tomen mal, creo que es hora de revisar nuestra manera de entender y vivir nuestro cristianismo. Tratemos de no ser Extraterrestres Angélicos. De hecho lo esencial es «estar atento a la vida de los demás.» «Sin construir nuestra vida sobre la muerte del Otro.» Gracias Hubert por ser un hombre normal común y corriente, por tu corazón, por tu amistad, tu carácter, tu ternura, gracias por desinstalarnos, gracias por invitarnos a no ser Tibios…Gracias por invitarnos a «defender lo mínimo que es lo máximo, don de Dios, LA VIDA.» Desde el cielo, donde no debes estar quieto, sino no serías TÚ, nos recuerdas que, «La felicidad es lo único que estamos seguros de poseer cuando la hemos regalado». Gracias Hubert.

F A M I L I A


21

VIDA DE LAS PROVINCIAS

15

Retiro de Preparación a sus Votos Perpetuos

Tiempo favorable para el corazón Hna. Lucy Santa Cruz, ss.cc.

El retiro se inició el 3 de marzo. Llegué el 1º en la tarde a las hermosas tierras de Chuchito-Puno, tierras que se bañan en el inmenso Lago Titicaca, imponente por su belleza. Para los que no conocen el monasterio Benedictino está a unos 336 pasos del lago (a mis pasos por supuesto). Aquí se trataba todo de «tiempo», tiempo para descansar, para meditar, para rezar, para caminar y por el lugar, tiempo para aclimatarse. Así empezamos el retiro, con muchas expectativas y muy abiertas a la nueva experiencia: «Algo resultará de todo esto»… Qué bonito recibimiento y qué detalle, realmente, nos acogieron con los brazos abiertos. Pues la hospitalidad es una característica propia de los Benedictinos, ahora lo supe. El P. Simón Pedro Arnold nos presentó su propia Lectio Divina del Evangelio de Lucas en 4 tiempos: 1. Tiempo de Fidelidad; 2. Tiempo de Fascinación; 3. Tiempo de Entrega; 4. Tiempo de Transfiguración en lo cotidiano. Pues aunque ya conocemos el Evangelio de Lucas y a Jesús Nazareno, sin embargo era irreconocible por todas. La novedad del evangelio volvía a impactar en nosotros, pues era justamente tiempo de novedades. Muchos signos me hablaban ya de un tiempo propicio para releer mi historia y en ella «al Dios de mi vida». Este tiempo que no era el esperado, era el tiempo adecuado. Encontramos en el Evangelio muchos pasajes que hablan de hechos que eran necesarios que sucedieran, pues ahora también para mí, estos N U E S T R A

acontecimientos como el problema de visa para Chile, «eran necesarios» para vivir profundamente esta experiencia. «Era necesario» que en este tiempo hiciera un alto y pudiera hacer memoria de mi vida: «el Quipu de mi vida» y tejer los diferentes hilos que la conforman. En tiempo de confusiones el Señor me tenía reservado algo nuevo. A eso lo llamo tiempo favorable de preparación. Tiempo de gracia que se devela en mi vida personal y a través de la vida de los demás. Poco a poco se fueron calmando las aguas, y pude ver las cosas tranquilamente y fue bueno en todos los sentidos. Es inmensamente gratificante, después de un tiempo volver «a levantar cabeza», al estilo de los encuentros de los que se hablan en los Evangelios, de aquellos que después del encuentro con Jesús «se ponen de pie y caminan». Creo que de eso se trata, de ponerse de pie y echar a andar siempre hacia adelante con todo lo que implica el «trayecto del peregrino». En realidad algo cambia, ya no somos las mismas, algo fundante acontece, hay un profundo llamado a permanecer siempre de pie delante del Señor, compromiso muy fuerte que implica caminar con mi historia, con mi vida familiar, con mi comunidad, con mi Iglesia aún a pesar de sus debilidades. En medio de ello el Señor se manifestará, es ya una convicción. Fue muy significativo compartir las eucaristías dominicales con la gente del pueblo. El P. Simón Pedro con mucha agudeza entregaba la novedad del Evangelio con mucha cercanía y sencillez. Un día representó, con algunos gestos, la actitud de F A M I L I A


22

VIDA DE LAS PROVINCIAS

Jesús con la adúltera. La Palabra no podía ser más vivencial. Finalmente la gente comprendía que Jesús se abaja para levantar al necesitado.

meditación y del lenguaje de Dios en nuestras vidas. Obviamente había mezcla de impotencia humana con un deseo profundo de seguir confiando en Dios.

Un día llegaron dos personas buscando al padre Simón Pedro. Uno de los abuelitos, llamado Alberto, del asilo estaba agonizando. El papito Alberto, tenía gangrena y este mal ya casi había consumido toda la pierna, estaba prácticamente solo y desahuciado. Aunque estaba acompañado por otros abuelitos, sentía la falta de su familia. Pues fue muy triste, sufría mucho. Frente a esta pena, nos preguntábamos ¿por qué este buen hombre tiene que padecer tanto?, ¿ Qué quiere decir todo este sufrimiento?. Pues el misterio de la vida y de la muerte es un caso sin resolver. Lo único que él pedía era que le pusieran su ropa nueva y ser llevado al cementerio para su gran encuentro con el Señor. Fue muy significativo que después de todo partiera a la casa del Padre un Viernes Santo. Finalmente su oración fue escuchada.

Días antes, cuando caminaba por la calles de Chucuito, una señora me preguntó: ¿espera a alguien?.... en el momento le respondí que estaba de retiro en el Monasterio. Después ella se alejó y me quedé meditando: «¿A quién espero? Espero a Jesús y ahora lo he encontrado», esa era mi respuesta más profunda.

Al final del retiro nos propusieron tener una celebración recogiendo toda la experiencia, pues todo el grupo decidió celebrarlo con todos los abuelitos, ya que habían sido parte de nuestra

Pronto saldrá el Cancionero y Oraciones de la Provincia

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

N U E S T R A

Fue novedoso tener la liturgia de las horas salmodiadas, propias del monasterio. El p. Simón Pedro nos transmitía la oración viva a través de su voz y su guitarra. Fue una ayuda que enriqueció nuestra liturgia diaria. El día libre estaba programado un paseo: iríamos a Copacabana y lo más significativo, participar de un rito del pago de la tierra: «Misa dulce». Sentí una sintonía con los Apus, la madre tierra y todo el cosmos. El Yatiri «Don José», es un poblador de Chucuito que tiene una fe que mueve montañas. El decía: «es el corazón quien habla, ahí lo siento». ¡Qué experiencia tan bonita!. Ahora a challar la tierra (pedir bendición de la tierra). Al final: «Que sea buena hora». Con toda la riqueza de estas tierras es que nos tocó convivir todo este tiempo y también por qué no decirlo, con lo difícil que está haciendo el camino de la Iglesia del Sur Andino. Desde estás tierras conocí la realidad y también fueron motivo para preguntarme por los desafíos de nuestra Iglesia Peruana y de dónde tiene que estar puesta nuestra centralidad. Tiene sentido el rugido como el de un león en el desierto cuando estamos centrados en el Dios de la vida. En este caso quedo muy agradecida porque Dios me habló a través de este testimonio de vida profética del P. Simón Pedro que ruge como un león en las tierras de Chuchito. Agradezco infinitamente a mi Dios y a mis hermanas ss.cc. por este maravilloso regalo; a Candy por darse este tiempo de acompañarme a mitad del retiro; al P. Simón Pedro y a la hermana Evelyn, ambos Benedictinos, por acompañarme en este tiempo maravilloso de gracia, de encuentro especial con el Señor. F A M I L I A


23

VIDA DE LAS PROVINCIAS

TESTIMONIO

COMO SIGNOS DE ESPERANZA Hna. Graciela Zúñiga, ss.cc.

Me siento feliz de compartir con ustedes algunos detalles de mi viaje a Francia, que han sido para mí como signos de esperanza. Sin embargo, antes quiero dar gracias a Dios por mis hermanas que posibilitaron esta visita a mi madre. En Picpus, con la acogida tan cariñosa de Myriam y su comunidad, pasé momentos inolvidables ante la imagen de Nuestra Señora de la Paz y la tumba de nuestros fundadores. Respecto a los signos de los tiempos, creo que es bueno saber leerlos, para encontrar vías de futuro y animarnos a afrontar los retos que la realidad nos presenta. Tres me han parecido significativos. La partida de L’abbé Pierre junto al Padre, no ha sorprendido, dada su edad, pero el impacto que ha tenido su desaparición, creo que ha planteado interrogantes. «Él, intentó amar» son las palabras que L’abbé Pierre quiso ver grabadas sobre su tumba. Epitafio que resume la historia de este sacerdote que por amor dio su vida al servicio de los excluidos de la tierra, hombres y mujeres deshechos por la pobreza a quienes él hizo sus compañeros. Hombre de fe y oración, sabía decir, que vivir es aprender a amar y prepararse al encuentro con el Eterno Amor, este amor L’abbé lo vivió en la adoración silenciosa delante del tabernáculo. Este don de la adoración, él lo experimentó desde los 16 años y nunca lo dejó. Emaús es un camino… un camino de tristeza que se vuelve promesa de esperanza. En este episodio de la tarde de Pascua, L’abbé Pierre vio su misión. Emaús es una casa. Es como un refugio para todos aquellos que lo necesitan. Restituir al hombre su dignidad, decía L’abbé Pierre, he aquí el gran secreto. Emaús, en fin, es compartir el pan. Este compartir, es el momento de una revelación. Es el compartir el pan que se vivió en la celebración Eucarística el día de sus funerales en Notre-Dame, de Paris, donde L’abbé Pierre toma parte misteriosamente. Él, partió junto al Padre, pero nosotros, como los compañeros de Emaús, daremos testimonio de este amor y servicio a nuestros hermanos. La familia ha sido para mí el signo más palpable del amor de Dios. He visto la vida de mi madre, N U E S T R A

como un misterio, pero no como un misterio duro e impenetrable, sino como un misterio pleno de dulzura que la esconde en ella misma y al mismo tiempo la proyecta a los demás llena de encanto y sabiduría. Por otra parte, en Lille, donde viví, la Iglesia trabaja mucho por la familia a nivel de seminarios, retiros, jornadas y encuentros. En la Universidad Católica se ha abierto una cátedra sobre Ética Familiar. El trabajo con los laicos y los pobres, me pareció significativo. En Lille hay un edificio al servicio de los movimientos laicales. El rol del delegado de laicos es favorecer la existencia de estos movimientos, animarlos a dar testimonio de su fe y ponerles a su disposición salas donde puedan reunirse, reflexionar, proponer actividades y rezar juntos. Uno de ellos es el Movimiento Cristiano de Líderes; el MCM es creado para dar testimonio del Evangelio en el corazón de realidades económicas y sociales; se dirige a cristianos hombres y mujeres, casados o solteros que fieles a su vocación de bautizados, tienen el deseo de compartir su experiencia de Cristo y comprometerse en el camino de crecimiento personal y comunitario de su fe y de su vida espiritual. El equipo es el lugar de la fraternidad, del discernimiento, donde en un ambiente de confianza, aprenden a conocerse y a dialogar en verdad. Es un lugar de Iglesia donde el amor y la libertad une a las personas. En cuanto al servicio a los pobres, la Fundación D’Auteuil acoge actualmente ocho mil jóvenes en sus ciento sesenta establecimientos organizados en catorce direcciones regionales. La región del norte acompaña trescientos cincuenta jóvenes de 6 a 25 años en sus diez establecimientos localizados principalmente en Lille y en sus cercanías. Su proyecto se articula alrededor de cuatro temas: Acoger, Educar, Orientar e Insertar. Los jóvenes acogidos por la fundación, vienen de medios desfavorecidos, víctimas del maltrato, huérfanos de padre o madre, menores extranjeros y solos, mujeres menores de edad encinta, alumnos con fracasos escolares y con problemas de comportamiento… En fin, son caminos de entrega con promesa de esperanza en el Resucitado que nos envía a contemplar, vivir y anunciar su amor. ¡Aleluya! F A M I L I A


24

NOTICIAS

Misa por el P. Hubert Lanssiers ss.cc. El pasado 23 de marzo se celebró la Eucaristía con motivo de cumplirse el primer año del fallecimiento del P. Hubert Lanssiers. La capilla del Colegio SS.CC. Recoleta estuvo llena de personas que llegaron a dar gracias a Dios por la vida entregada del P. Lanssiers. La misa fue presidida por el P. José Serrand ss.cc. Por la mañana un grupo de personas fue en romería a la tumba del P. Lanssiers.

Nuevo Párroco de «Padre Damián de Molokai» El Domingo de Ramos el P. Rafael Sánchez-Concha ss.cc. recibió de manos de Mons. Lino Panizo (Obispo de Carabayllo) las llaves de la Parroquia, un rito con el que asume como nuevo párroco de la Parroquia «Padre Damián de Molokai» (Ensenada).

Reuniones de Hermanas, Hermanos y Laicos El pasado 10 de abril se reunieron los Consejos Provinciales de las Hermanas y de los Hermanos con la Directiva de la Rama Secular. En la reunión se compartió sobre la marcha de las respectivas ramas, especialmente sobre sus perspectivas de trabajo para el 2007. Se evaluó el servicio común en la Comisión de Pastoral Juvenil y en el Equipo del Boletín. Finalmente, se coordinó las actividades anuales.

Premio a la Parroquia «Padre Damián de Molokai» El Centro Oscar Romero (una institución que promueve el desarrollo del cono norte de Lima), ha concedido un premio a la Parroquia «Padre Damián de Molokai» (Ensenada) por su destacada labor social en favor de los más pobres del sector norte de Lima.

Viajes de Hermanos El 2 de abril el P. Juan María Olivier viajó a Francia para pasar sus vacaciones de tres meses. El P. Raúl Pariamachi estará fuera del país del 11 al 21 de abril, va a Chile a visitar a los estudiantes de la Provincia y a Paraguay a la asamblea anual de provinciales de América Latina. Los primeros días de mayo el P. Hermann Wendling viajará a Alemania donde estará tomando sus vacaciones. El 26 del presente mes, Edith Paredes llegó de Putina Punco y en bus salió al día siguiente a Santiago de Chile, Viña del Mar, para su preparación a los votos perpetuos. Sabemos que tuvo un buen viaje y llegó bien a Santiago el día jueves.

N U E S T R A

Sara Banda, regresó de Colombia el 31 de marzo, después de haber finalizado el curso de PJV en el ITEPAL; Teresa Lazcano regresó el 4 de abril, tuvo problemas de visa. Graciela Zúñiga, regresó de Francia el 1º de abril. ¡Bienvenida Gracielita! Angelina Cabrera, aún se encuentra en Bolivia por trámites. Martha Tacca, el día 3 de abril regresó de Ayaviri, estuvo visitando a su familia y tramitando su título profesional. Teresa Lazcano y Sara Banda, tuvieron que viajar el 11 de abril hacia Arica-Chile, para recibir sus visas. El día 12 de abril, Susana Villarreal viajó a Chuchito-Puno para participar de un retiro espiritual.

Comunidades Candy Núñez, visitó la comunidad de Arequipa, las hermanas se encuentran bien, con mucho trabajo, a pesar de ello no deja de estar presente la alegría y la esperanza. En cada una de nuestras comunidades, recordamos y celebramos de una manera sencilla la fiesta de nuestro Fundador, el Buen Padre. En todos nuestros colegios y comunidades vivimos un tiempo de preparación para celebrar con gozo la Pascua de nuestro Señor Resucitado.

Formación Inicial Lucy Santa Cruz, ya se encuentra en la Comunidad Provincial, después de su retiro de un mes para su preparación a los votos perpetuos realizado en Chuchito-Puno; dirigido por el P. Simón Pedro Arnold. Manifiesta su gratitud a Dios y a nuestra familia SS.CC. por este regalo de amor de Dios en su vida.

Pastoral Juvenil y Vocacional En Juliaca se realizó la primera jornada vocacional, participaron siete jóvenes. La jornada estuvo a cargo de María Elena Arizaca y Edith Paredes.

Votos Perpetuos Con gran alegría anunciamos los Votos Perpetuos de nuestras hermanas: Irany Martins, el día 8 de julio en Brasil y Lucy Santa Cruz, el 28 de julio en Lima-Perú. Lucy permanecerá en Lima hasta sus votos perpetuos.

F A M I L I A


25

E S T U D I A N T E S S S . C C.

La Comunidad de Formación en Laderas Con mucha alegría les presentamos la comunidad de Formación en Laderas. Queremos darles a conocer a una comunidad alegre y fraterna integrada por Graciela Simón (conocida como Chela) y Teresa Lazcano (formadoras - ambas de México) y las postulantes: Amelia Mera (mexicana), Jenniffer Gutiérrez (Arequipa), Martha Tacca (Puno). Las cuales se han acogido y han podido formar parte de las actividades que la congregación asume en el lugar donde está el postulantado de las hermanas que es la Parroquia Padre Damián. Nuestra comunidad ya está completa con el regreso de Teresa quien participó en un curso de 16 Pastoral Juvenil en Colombia. Ella será la encargada de la Pastoral Juvenil en la Parroquia. Martha también se integró a la comunidad después de tres meses en Ayaviri por motivo de trámites de su titulación. Podemos decir que la comunidad está alegre de iniciar sus actividades de formación, como la CONFER, y apoyando a la parroquia de Laderas.

CONFIANZA EN DIOS

Hola, me llamo Amelia Mera Silva, soy mexicana, tercera de once hermanos. Una de mis más grandes experiencias de Jesús Resucitado es sentirme animada por Dios a vivir esta gran aventura; dejé mi país y vine al Perú con la confianza y el abandono en Dios, pues no conocía a nadie de las hermanas peruanas que me acogieron con gran cariño, acogida que hasta el día de hoy ha sido muy importante para mi caminar. Este año continúo mi proceso con mucho ánimo, en la casa de formación en Laderas; Chela es quien me acompaña en el proceso de afianzar mi vocación. Junto con toda la comunidad, me siento muy animada a caminar y vencer todos los obstáculos que se nos presenten en el camino para lograr la verdadera felicidad. Agradezco a las hermanas de los Sagrados Corazones, por la invitación a vivir esta gran aventura con el Señor.

«TODO LO PUEDO EN CRISTO QUE ME FORTALECE» Hola, soy Ruth Martha Tacca Huaynillo, vengo de la ciudad de Ayaviri del departamento de Puno, me gustaría compartirles mi experiencia de comunidad. Inicié mi discernimiento el año pasado en la casa del Prenoviciado como aspirante interna, donde con más profundidad sentí el Amor de DIOS. En la experiencia de mi aspirantado en la comunidad me tocó compartir con hermanas de diferentes países con las que inicié mi vida comunitaria con mucho entusiasmo y donde cada vez más se fortalecía la amistad y hermandad. Cada día íbamos conociéndonos mejor, dándonos cuenta de nuestras virtudes y valores, así como también de nuestras limitaciones, de esta manera fui aprendiendo la convivencia, trabajo y oración. Ahora inicio un año de bendiciones como postulante, con experiencias de Dios y desafíos de discernimiento. Sólo me queda darle Gracias a Dios porque es Él quien obra en mí y por eso le dispongo mi corazón con toda confianza. sigue en la p. 27

N U E S T R A

F A M I L I A


26

REFLEXIÓN

21

La Religión cristiana y las costumbres, la Fe cristiana y las creencias y ritos P. Francisco d'Ynglemare, ss.cc.

No

hay que confundir Religión con Fe, ni éstas con las prácticas costumbristas, creencias populares y ritos. Hay muchas religiones, o sea formas, conjunto de relaciones de pueblos, de etnias, con supuestas divinidades que son proyecciones mitológicas propias de cada cultura, ¿serán maneras de buscar el único verdadero Dios?. Es posible, a excepción de dos religiones, el judaísmo, y la Fe cristiana; todas son proyecciones humanas, parten de fundadores carismáticos, que se decían iluminados. Incluso la fe musulmana, por más monoteísta que es, adorando al Dios de Abraham, por más devoto que sea su fundador, a los personajes bíblicos como el mismo Jesús y a su Madre. Después de la religión judía, Dios funda la religión cristiana, entroncándola en el judaísmo. Que los judíos la rechacen, es su problema. Es un hecho que no fue por alguna proyección o institución humana, sino por iniciativa divina, a través de toda la Historia de la Salvación como la encontramos revelada en el A.T., desde Abraham, hasta el Apocalipsis. Para la salvación universal, la religión cristiana y la Iglesia católica son importantes aunque no imprescindibles (felizmente). Igual que las demás Comunidades, la Iglesia Católica ha instituido y asumido muchas costumbres, algunas son recibidas de los judíos, otras de distintas culturas: costumbres ancestrales y europeas: ninguna puede ser ni necesaria, ni obligatoria para nada. Cada adepto es libre de practicarlas: todo depende de la afición personal o grupal. Lo importante es entender el por qué de cada costumbre y conservar expresiones, gestos culturales que convocan a un pueblo oprimido y marginado de esta sociedad. Pero ¿qué se creen los que obligan o prohíben cumplir las costumbres?. En todo caso sería muy lamentable cumplir N U E S T R A

costumbres por miedo a castigos: sólo Dios puede castigar, pero no lo quiere, y no tendría por qué, en caso de incumplimiento. No confundir costumbre con vicio, descuido, ignorancia, abuso, consumismo, etc.: por esas desviaciones uno mismo se castiga, también la sociedad de «pecado» y de «consumo» golpea al indefenso que se cree obligado hasta de endeudarse bajo la presión social. Eso favorece el negocio fabuloso de multitransnacionales y sus «satélites» en desmedro de las masas empobrecidas. Es por esa razón que los misioneros harían una labor evangelizadora y liberadora denunciando esa trampa, ayudando dichas masas a concientizarse y educarse: que se liberen de esos miedos inútiles y alienantes (como opio, según Marx), también de toda presión social, al descuidar esas advertencias se comprometería a la Iglesia como si fuera cómplice de este orden injusto. Las creencias con sus ritos son ciertamente muy respetables, sobre todo si son ancestrales, pero no deben ser confundidas con la Fe cristiana, don del Señor, tampoco con su contenido el cual es revelado por el único verdadero Dios, a través del Hijo eterno del Padre eterno, con la garantía de su Espíritu Santo que inspira a su Iglesia, como lo hizo a sus profetas desde Abraham hasta ahora. La Fe cristiana es religión puesta por Dios Hijo, hecho Hombre, llamado Jesús, el Salvador de la humanidad y del mundo mediante su enseñanza, su sacrificio, como rescate garantizado por su propia resurrección. Este misterio llamado de la REDENCIÓN es hecho presente por el misterio del máximo Sacramento, la Eucaristía, por orden de Cristo a sus primeros sacerdotes, los Apóstoles y sucesores. Los demás Sacramentos también son instituidos por el Señor, luego, en sus esencias, no son costumbres, aunque son celebrados con ritos F A M I L I A


27

REFLEXIÓN

y costumbres que varían según las culturas. En cuanto al contenido de la Fe cristiana, tal como fue esbozada más arriba, negar un punto u otro equivaldría a una mutilación de ese don, lo que sería grave, siempre y cuando sería de mala fe. Mientras que con los contenidos de las creencias, aún ancestrales, ritos, costumbres, pasarlos por alto no trae consecuencia para la propia salvación por más útiles y hermosas que sean. Por ejemplo, en el mundo andino florecen varias creencias con los ritos y costumbres correspondientes, sobre la Pachamama, los Apus y Aukis, los Ccochas, las Chullpas, Machunayra y Almas, el trueno, las Cruces, los «Santos» (imágenes de ciertos santos, especialmente de la Virgen María). Para esos seres hay muchas maneras de expresar la devoción o el temor de los aficionados y de ministros, los «Paccos», los «Huatoc», los «Cocaccahuac», los cuales usan hojas de coca y alcoholes para el «K’intuchasqa», el «ch’allasqa», el «despacho» o «mesachakuy». Sería un error, o al menos una falta de respeto menospreciarlos y sus prácticas. Sin ir tan lejos, nuestros ambientes

abundan en cosas y gestos por devociones notables a Santos y a sus imágenes, con proyecciones no tan evangélicas que se diga, pero con la convicción de actuar según la Fe católica; por ejemplo inundando el templo de velas, reclamando agua bendita, pasando muchos días de fiestas, celebrando procesiones pomposas con andas pesadas, llevando imágenes revestidas con ornamentos lujosos rodeados de múltiples adornos; todo conforme a las costumbres de cada lugar, tomado en cuenta su nivel económico, pero siempre presionados, o bajo presión de una vecindad exigente. Me han contado que, por temor a ser nombrados «Alferados» u otro cargo, los hay que pasan a sectas implantadas en el mismo lugar. Eso me sorprendió, pues creería que el apego a dichas costumbres formaría como una barrera contra la penetración de sectas. Dicho de paso, éstas no son respetuosas de esas prácticas que tratan de idolátricas. Con o sin razón, esas devociones convocan frecuentemente a un pueblo humilde y marginado, oportunidad que hay que aprovechar para hacerle descubrir el Evangelio y madurar en la Fe cristiana.

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

UN DIARIO DISCERNIMIENTO

viene de la p. 25

Soy Lisbeth Jenniffer Gutiérrez Vizarreta, arequipeña, tengo 21 años de edad, ex alumna del colegio «Padre Damián de Molokai» en Arequipa. Mi proceso comenzó al terminar el colegio, nació en mí una inquietud en mi corazón que fue creciendo más con el tiempo, gracias a las hermanas de la Congregación que me ayudaron a despejar esta duda, no puedo olvidar a mis hermanos que también fueron parte de mi búsqueda de lo que realmente yo quería o me sentía inclinada. Después de muchos años, me siento muy feliz en decir que tomé una buena decisión al entrar y darme la oportunidad de ser feliz o por lo menos buscar ese espacio que me hacía falta para llenar mi corazón. En estos tres meses que estoy en Lima me ha ido muy bien, gracias a Dios son muchas las personas que me han acogido y ayudado cuando me he sentido muy triste al dejar mi casa, mi familia, y mi vida pasada; me siento alegre por todo lo que vivo, especialmente por la gente que me rodea, estoy en un constante discernimiento. Bueno por ahora me siento así, espero que los hermanos y las hermanas me acojan como una hermanita suya. Gracias por ser parte de mi corazón y darme la oportunidad de integrarme a la familia de los Sagrados Corazones. N U E S T R A

F A M I L I A


28

R A M A S E C U L A R S S .C C.

Cuento

HISTORIA DE LA REJA Sr. Manuel Lozano Lesma, ss.cc. Rama Secular ss.cc.

Esta

es la historia de un colegio con algunos problemas de seguridad. De vez en cuando se perdían las cosas, sin que nadie las pudiera hallar. Cierto día, el director en reunión con el personal docente comentó el problema, causando una gran incomodidad en los profesores, que se dieron por aludidos y que molestos dijeron que no tenían nada que ver con el problema. El director entonces anunció que haría construir una reja para evitar el ingreso de personas desconocidas al colegio. La instalación de la reja se realizó inmediatamente, sin embargo una vez instalada, ésta se mantenía abierta un día y otro. Cuando al director se acercó, al verla abierta pensó: Voy a encargar al jefe de disciplina, para que esté aquí y la mantenga cerrada. Cuando llegó el turno del encargado de normas, éste pensó: voy a decirle a un profesor que me ayude, yo tengo que ver por la seguridad de las aulas. La tarea fue luego asignada a un profesor, éste al segundo día de estar cerrando y abriendo la reja pensó: Yo estoy muy ocupado, a mí me pagan por dar clases, estoy muy ocupado. Voy a hablar al jefe de personal para que asigne esta tarea a alguien de servicio. Finalmente llegó el turno del personal de servicio, que tenía la dificultad de no conocer a nadie de los que pasaban, y cometía muchos errores dejando pasar a los que no deberían e impidiendo el paso a quienes verdaderamente tenían derecho al ingreso. A la semana de estar en ese puesto, el encargado solicitó que le quitaran esa responsabilidad, puesto que no la hacía bien y además, tenía retrasado el trabajo que normalmente le correspondía.

N U E S T R A

Llegó el día en que al ver el problema, un padre de familia decidió cerrar la reja los días que iba a dejar a sus hijos al colegio. Es cierto que no era su trabajo –después me lo dijo- pero lo hizo. Al poco tiempo de estar realizando esta actividad, se observó que otros padres de familia, profesores y trabajadores hacían también lo mismo, inclusive los alumnos terminaron involucrándose en la tarea. El ambiente de participación que rodeaba esa área del colegio, hizo además que surgiera entre los voluntarios, cierta camaradería que pronto generó cierta agrupación informal que era llamada «Los amigos de la reja». El cambio generó un ambiente positivo en el colegio, mejorando los problemas de seguridad a las horas de entrada y salida de clases. El beneficio que generó esta actividad llegó a oídos del director, quien decidió convocar a una reunión con los docentes, para felicitarlos por su noble y abnegada participación. Los profesores recibieron el elogio orgullosos y agradecidos por la atención que tomaba la autoridad estudiantil para con su labor cotidiana. Como todo elogio inmerecido se transforma en una epidemia de sobreestimación, a la salida de la reunión algunos profesores decidieron buscar al encargado de disciplina, para reconocer públicamente su brillante estrategia de participación. El hombre, luciendo la mejor de sus sonrisas, agradeció el comentario indicando que además de lo ocurrido era producto de la capacitación que hacía unos meses recibió en la Departamental, en un taller sobre «Liderazgo y proactividad».

F A M I L I A


29

R A M A S E C U L A R S S. C C.

Y para no quedar sólo con el premio, el jefe de disciplina, desatándose el ceño fruncido y el trato áspero que lo caracterizaba, pidió al jefe de personal que convocara al personal de servicio a una reunión. Ya en la reunión, locuaz y afectuoso como nunca, hizo mención de «la importante contribución del personal de servicio, en la mejora y desarrollo institucional», y también les expresó su agradecimiento «para con esta iniciativa que contribuye al crecimiento y mejora institucional». La impensada avalancha de elogios, generó sorpresa y miradas entre las caras nerviosas de los trabajadores de servicio, quienes murmuraban si es que «esto quizás sería otra treta de la dirección para

ablandarnos y quitarnos alguno de los pocos derechos laborales que nos quedan en pie». Esto sucedió hace muchos años, y mi padre, la persona que inició el cambio de actitud en aquella oportunidad, nunca fue mencionado como el iniciador de la medida. Recuerdo que me dijo que eso no era necesario. La historia que hoy les cuento, viene a mi memoria después de encontrar, en un viejo libro que perteneció a mi padre, una tarjeta al parecer muy apreciada por él. En ella se lee con dificultad el siguiente pensamiento: «El mejor trabajo: el que se hace siempre, pensando en los demás, invirtiendo lo mejor de sí mismo y sin calcular beneficios sobre los resultados».

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

RETIRO DE COMUNIDADES DE PLAZA FRANCIA Sra. Hilda Zúñiga de Astuquipan Rama Secular

Las

comunidades laicales: Nicolás Castel y Luciano Metzinger de Plaza Francia decidimos vivir nuestro retiro del año el sábado santo y el domingo de Resurrección. Lo hicimos en las instalaciones del convento SS.CC. Recoleta, utilizando para ello los locales en que habitualmente nos reunimos, con mucha sencillez y alegría. Estuvimos al principio preocupados por nuestras familias (hijos, sobrinos, padres, hermanos) que habíamos dejado solos o encargados. Quisimos hacer nuestro retiro cerca de la parroquia porque creíamos que lo más importante era celebrar junto con los fieles de la parroquia ss.cc. Recoleta la vigilia del sábado y la eucaristía del domingo de Resurrección. Todo nuestro retiro estuvo motivado por el padre Raúl Pariamachi ss.cc., quien nos ayudó con las reflexiones donde fuimos viviendo la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús. Primero revisamos el tema de la Eucaristía: el creer, celebrar y vivir, reconociendo el esfuerzo por buscar el equilibrio entre las tres experiencias, vivir el servicio, anunciando y siendo testimonio en la vida diaria, reconociendo la vivencia comunitaria en donde podemos vivir la Eucaristía. En El misterio de la cruz, fuimos reconociendo la experiencia de asumir la cruz de Jesús como parte de la vida laical. Reconocimos a la comunidad como el medio que nos ayuda a cada uno a pasar con esta cruz en nuestra vida, reconociendo que la cruz nos hace más sensibles a los signos de los tiempos. En el tema La fuerza de la Resurrección, reconocimos la Pascua de Jesús como el acontecimiento más importante para los cristianos. Muchas veces como les sucedió a los apóstoles, no lo reconocemos y se nos dificulta reconocer la Vida en nuestra vida cotidiana. Es en la comunidad donde recogemos desde este espacio de comunión los signos de esperanza que nos ayuda a orientar nuestro compromiso como seguidores del Resucitado. N U E S T R A

F A M I L I A


30

Instalados en el siglo XXI edu

N°69 Edición Especial p.18

La globalización, los avances tecnológicos, la formación continua, la investigación, la responsabilidad social, son aspectos que han sido incorporados plenamente en la vida de la Pontificia Universidad Católica del Perú en estos últimos años. La década de 1990 fue una época de cambios en la Pontificia Universidad Católica del Perú, que sin renunciar a sus principios fundamentales, supo adaptarse a los nuevos tiempos y convertir el campus en un escenario académico del siglo XXI: los avances tecnológicos, la formación continua, la internacionalización, las nuevas carreras y la responsabilidad social universitaria son desde entonces parte sustancial de la vida PUCP. AMPLIANDO HORIZONTES. En el año 1994, cuando asumió el rectorado el Dr. Salomón Lerner Febres, se tomaron una serie de medidas en los aspectos académico, administrativo y económico. Ya se hacía impostergable la creación de nuevas facultades, carreras y estudios de posgrado, así como más modalidades de ingreso, para satisfacer las necesidades de formación de los profesionales en el país. Por ello, en 1998, se creó la Facultad de Ciencias y Artes de la Comunicación, que desde el 2006 cuenta con un moderno estudio de TV; en el 2001, CENTRUM Católica inauguró su local en Monterrico; la Facultad de Arquitectura y Urbanismo inició sus actividades ese mismo año, y la Facultad de Gestión y Alta Dirección se fundó en el 2005. También se crearon las especialidades de Ingeniería de las Telecomunicaciones (2001), Ciencia Política y Gobierno (2003), y Geografía y Medio Ambiente (2003). La oferta de estudios de posgrado se ha multiplicado en los últimos años: actualmente, la PUCP ofrece más de 60 maestrías y doctorados. La incorporación de los avances tecnológicos ha sido también fundamental en la vida universitaria. A partir de 1995, la Dirección de Informática adoptó plenamente las tecnologías de la información para ponerlas al servicio de alumnos y docentes. La PUCP fue la primera universidad N U E S T R A

peruana en implementar comunicación inalámbrica: desde el 2004 está disponible la tecnología WiFi, con 46 puntos de acceso inalámbrico a Internet en el campus. También se han creado nuevos laboratorios, especialmente en el área de Ciencias e Ingeniería, y modernizado los ya existentes. Con la llegada del nuevo siglo se puso en marcha el Plan Estratégico Institucional 2000-2010 Formación Integral en Tiempos de Cambio, que puso especial énfasis en la formación, investigación y responsabilidad social, con el objetivo de establecer metas definidas que se van cumpliendo por etapas. El año 2004 asumió el rectorado de la Universidad el Ing. Luis Guzmán-Barrón Sobrevilla y se fortalecieron los procesos iniciados en años anteriores. Uno de los objetivos centrales es lograr la internacionalización de la PUCP, y para ellos nuestra Universidad cuenta con decenas de convenios firmados con instituciones internacionales de prestigio, lo que permite el intercambio de alumnos y docentes y la realización de proyectos de investigación conjunta. La PUCP es la universidad peruana con más y mejores contactos en el extranjero y prueba de ello lo dan las decenas de alumnos PUCP que aprovechan los programas de intercambio para estudiar en otros países, así como la presencia en nuestro campus de aproximadamente 200 estudiantes extranjeros por año. Así, la Pontificia Universidad Católica del Perú llega a sus 90 años de vida como una institución que ha sabido respetar sus tradiciones y adaptarse a los tiempos modernos. Rankings internacionales la reconocen como una de las mejores universidades del continente. El sueño del R.P. Jorge Dintilhac SS.CC., nueve décadas después, se sigue cumpliendo cada día, con nuevas generaciones de estudiantes que trabajan en busca de un mundo mejor. F A M I L I A


29

N U E S T R A

F A M I L I A


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.