Price of a kiss

Page 261

Traducido por Michelle♡ Corregido por Juli

La noche de brujas puede ser la temporada para un buen susto, pero nada me ha asustado más que el primer momento en que vi a Reese. En serio, me refiero a petrificarme.

página 261

Era mi primer día en la universidad. Estaba muy animado porque por fin pude asistir a algún tipo de educación superior después de guardar una parte de mi dinero duramente ganado. Me puse mi bolso de mensajero como una pieza de armadura y marché a la guerra, también conocido como el campus principal. Sentí como si hubiera estado fuera de la escena social hace unos años, lo cual es cierto, lo estuve. Sin embargo, después del giro que había tomado mi vida, era una incógnita cómo me iban a tratar mis compañeros. Y gracias a Dios, la suerte comenzó a mi favor. Un grupo de chicos con los que fui a la escuela secundaria —todos más jóvenes que yo— merodeaban por lo que todo el mundo llama el jardín de la estatua. Cuando me saludaron amablemente, me dirigí hacia ellos y encontré una estatua libre sobre la que apoyarme mientras trataba de entrar en la discusión que tenían sobre qué pegatina era la más increíble. Desde que era dueño de un Jeep, apoyaba a la maravilla de todas las pegatinas para Jeep cuando lo escuché. Su risa. No se parecía a ninguna risa que había escuchado antes, era ruidosa y animada y sin embargo, agradable con una capa de mujer intrigante. Estaba acostumbrado a esas chicas que se cubrían la boca cuando dejaban escapar una risita avergonzada o esas risas roncas de “haz lo que quieras para ser mi secreto” de todas las asalta cunas en las que no quería pensar. Lo más cercano que se podría comparar a esa risa eran los gritos de placer de mi hermana cuando le hacía cosquillas, salvo que esto no era un grito. Era una risa completa. Levanté la cara y miré por encima, teniendo que ver quién haría un sonido tan alegre y abierto. Y fue entonces cuando sucedió. El temor se apoderó de mí. No sé si se reía en mi dirección, o si ya había estado centrada en mí pero cuando miré otra vez, nuestras miradas se encontraron —y no hubo toda esa


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.