Ulises Tomo 2

Page 226

James Joyce

en otra, se repite prótasis, epítasis, catástasis, catástrofe. Se repite nuevamente cuando él está cerca de la tumba, cuando su hija casada Susana, astilla de tal palo, es acusada de adulterio. Pero fue el pecado original el que oscureció su entendimiento, debilitó su voluntad y dejó en él una fuerte inclinación al mal. Las palabras son las de mis señores los obispos de Maynooth: un pecado original cometido, como el pecado original, por otro en cuyo pecado él también ha pecado. Está entre las líneas de sus últimas palabras escritas, está petrificado sobre la lápida de su sepulcro bajo la cual los cuatro huesos de ella no han de ser depositados. La edad no lo ha debilitado. La belleza y la paz no lo han hecho desaparecer. Está con infinitas variantes por todas partes en el mundo que él ha creado, en Mucho ruido para nada, dos veces en Como Gustéis, en La tempestad, en Hamlet, en Medida por Medida y en todos los otros dramas que no he leído.

725


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.