SerEs 6

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EDICIÓN N°6 – REVISTA DIGITAL DE COUNSELING Y PSICOEDUCACION -ARGENTINA – 2021

LIC. ANDRÉS SANCHEZ BODAS

ENTREVISTA

MICK COOPER “LA PERSONA PROFUNDA y LA RELACIÓN HUMANA”

“SOBRE la TRANSDISCIPLINA y el COUNSELING”

Clr. ANALÍA CORDERO LA SOLEDAD Sin miedo a la palabra

Ser

JORGE KAPPEL Clr. FABIANA SEGURA

“CON TODOS NOSOTROS” De él aprendimos Hoy lo conocemos

SUICIDIO Un proceso Saber y prevenir “La libertad es irreversible” Carl Rogers

DOSSIER

Clr. EZEQUIEL PÉREZ “NECESITAMOS VER A”LA PERSONA” Reflexiones sobre el abordaje de las Adicciones



EDITORIAL SerEs vuelve a Ser, es su tendencia, acontecer. Sigue siendo. Entre las diferentes búsquedas, a lo largo de su desarrollo, continúa y, más vigente que nunca, la de compartir un espacio de amor, de amor a “la persona” y eso, nos incluye a todos. Me animo a volver – actualización mediante – a la Editorial aquella, la primera, en la que pude decir: -“Mi propuesta es compartir esto con amor. Amor a los que somos, a las bases teóricas y filosóficas en los que se basa nuestro ejercicio profesional, y a la persona, al ser, a ese otro que no tiene nombre ni rostro pero que existe, como parte de un todo, que constituye el pedacito de mundo en el que podemos aportar-nos en la diferencia cualitativa que lo transforme en un lugar mejor”. Seguimos también, y lamentablemente, en un contexto por demás acuciante. Muchos, sino todos, desearíamos que éste no sea el escenario que habitar, tan crecido como nuestros miedos, nuestra angustia e incertidumbre, más las tantas pérdidas que venimos afrontando. Pero sí. Esta es la realidad que nos envuelve y, sigue siendo un mundo muy diferente al que quisiéramos pertenecer. Seguimos bordeando el saber y sintiendo la temida omnipresencia de lo que no entendemos, pero cansados, a veces desorientados y, claramente obstaculizados en el desarrollo pleno. Cuánto puede brindarnos hoy el pensamiento profundo, la apertura a la experiencia presente, los recursos emergentes para resolver el día a día, la reflexión intrapersonal, el fortalecimiento de algunos vínculos, la universalización de lo acontecido y, por sobre todas las cosas, la transitoriedad de los aconteceres generales y particulares: el nombrado “todo pasa” del que da cuenta la humanidad. Una vez más, deseo concluir con dedicatorias y agradecimientos por este trabajo, en la producción editorial de este 13 de Agosto de 2021. A todos y cada uno de los colaboradores, colaboradoras y entrevistados en esta sexta edición. Muy especialmente, al Prof. Mick Cooper, al Lic. Andrés Sánchez Bodas y al Dr. Jorge Kappel por la humildad y la generosidad con las que me han recibido a mí y a este ESPACIO, a ellos, mi más profundo agradecimiento. Una vez más, debo agradecer el apoyo incondicional de mi familia y el siempre presente deseo de crecimiento. Por supuesto, nuevamente, deseo dedicar éste y todo mi trabajo a mi hija, Lucía, a quien permanentemente miro, para admirarla. A las personas de mi vida, presentes en ella o no, pero que son parte indeleble de quien soy, y de en quien me voy conformando AMOR MEDIANTE. A mis amigos, y a sus miradas, porque son mis SerEs queridos y la condición “necesaria y suficiente” para poder ir siendo la que necesito SER. A los lectores y lectoras de este contenido, no solo las gracias sino, también, mi disponibilidad para lo que pueda aportar personalmente. A mis colegas, ya que hoy celebramos juntos el día del Counselor en Argentina. ¡Qué lleguen mis mejores deseos para cada uno de ellos y para la profesión” Soy puro agradecimiento y mi bienvenida es para todos.

Clr. Analía Cordero Directora Editorial


“SOBRE la TRANSDISCIPLINA y el COUNSELING” Lic. A. Sánchez Bodas -Pág. 3

UN CUENTO “La Mujer Olvidada” COVID Y ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICA Pág. Clr. Fernanda Otero - Pág. 6 48

CONTENIDOS

UN CUENTO “La Mujer

ESAS RARAS PALABRAS NUEVAS Sexualidad Centrada Persona - Clr. Claudia Quiroga Daldi - Pág. 8

EL Dr. JORGE KAPPEL Con todos nosotros Clr. Analía Cordero -Pág. 11 MICK COOPER “LA PERSONA PROFUNDA y LA RELACIÓN HUMANA” Clr. Analía Cordero – Pág. 21 LA SOLEDAD Clr. Analía Cordero – Pág. 27 PAREJAS - Convivencia 24 x 7 Clr. Jorge Stile - Pág. 30 SUICIDIO “UN PROCESO” Clr. Fabiana Segura - Pág. 35 NECESITAMOS VER A LA PERSONA Analía Clr. Ezequiel Pérez -Pág. 42 JULIO BARNES RECORRIDO HACIA EL CRECIMIENTO Por Analía Cordero - Pág. 47 UN CUENTO “La Mujer Olvidada” Pág. 54

STAFF Clr. Analía Cordero Directora Editorial

Clr. Hugo Fuscaldo Supervisión de Contenidos y Colaboración Editorial

Editora Propietaria: Clr. Analía Cordero E-mail: clranaliacordero@hotmail.com Cel: (011) 15 5 053 9690 Reg. de la Propiedad Intelectual N°3603832 Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido, si no se mencionara la fuente. La Editorial no se hace responsable por las opiniones vertidas por los colaboradores, entrevistados, las notas firmadas y el contenido de los avisos publicitarios. La Dirección agradece a todos los que figuran en el 4 Staff, por su colaboración Ad Honorem.

Lic. Andrés Sánchez Bodas Prof. Mick Cooper Dr. Jorge Kappel Clr. Ezequiel Pérez Lic. Ernesto Vitale Clr. Jorge Stile Clr. Fernanda Otero Clr. Julio Barnes Clr. Claudia Quiroga Daldi Colaboración Editorial

Paula Abogado Camila Furcade


Por el Lic. Andrés Ricardo Sánchez Bodas

SOBRE LA TRANSDISCIPLINA

Y EL COUNSELING


Las Intenciones y los Efectos de las acciones profesionales Las relaciones de ayuda Inter e intrapersonales están siendo ejercidas por distintas profesiones o disciplinas y cada una de ellas posee una intencionalidad profesional para la ayuda, cuenta con una formación específica, y recursos metodológicos para brindar adecuadamente sus servicios.

consultantes de los segundos requieren alguna medicación para facilitar el tratamiento o asistencia. De tales acciones médicas, pueden surgir resultados inespecíficos de orden psicológico, social o espiritual, en tanto la persona mejora y estará mejor dispuesta para ello.

Cuando menciono lo de intencionalidad profesional, me refiero a los objetivos que posee cada disciplina, eso no quita que al aplicarlos produzca efectos esperables positivos, que puedan superponerse con las otras, colaborando y sumando para que las personas atendidas alcancen mejorías y desarrollos favorables en su calidad de vida.

Los Psicólogos Clínicos se forman esencialmente para el ejercicio de la psicoterapia, se entiende por ella a la disciplina que busca la 'reestructuración de la personalidad dañada' por alguna problemática o conflicto de índole neurótico y patologías severas. Trabajan con la palabra y con la incorporación de multiplicidad de recursos que se vinculan con la línea/postura/posición teórica del profesional. En su tarea se relacionan con Psiquiatras, Counselors y otros en la transdisciplina. De tales acciones pueden surgir resultados inespecíficos relacionados con el desarrollo personal, espiritual y una mejor calidad de vida.

Por ello es muy necesario poder pensar la ayuda desde lo transdisciplinario buscando una entrama entre profesionales en coherencia con la necesidad/problemática que presente el paciente/consultante. Esta vinculación debe poder discriminar entre 'intenciones' y 'efectos' de las acciones terapéuticas. Las primeras, las intenciones, definen objetivos de cada disciplina o profesión, y las segundas, los efectos, podemos dividirlas en dos: efectos específicos e inespecíficos. Como efecto específico definimos a aquellos que dan cuenta directamente del objetivo del accionar de cada profesión. Como efecto inespecífico, a aquellos que favorecen otras áreas de la persona. Veamos, por ejemplo tres tipos de acciones: Los Psiquiatras trabajan, en tanto son Médicos especializados para ello, en el diagnóstico y tratamiento de patologías severas que requieren medicación, y también como complemento de las psicoterapias o procesos de counseling, cuando los pacientes de las primeras y los

Los Pastores, Rabinos y Sacerdotes que ayudan pastoral y espiritualmente, en concordancia con los preceptos de sus religiones, producen resultados inespecíficos en la salud mental. Nadie podría decir que un sacerdote ejerce la psicoterapia cuando ayuda espiritualmente, sin embargo, no cabe duda, que de una adecuada ayuda pastoral emerge un mejoramiento en su salud mental de la persona que la recibe. En lo que nos incumbe, el Counseling, como todos sabemos es una profesión diseñada para la prevención, la resolución de conflictos y el desarrollo personal, para personas que en principio no padezcan de patologías psíquicas severas.


Esto es lo especifico de la profesión que nos compete. Es obvio que de la tarea de un Counselor surgen resultados inespecíficos vinculantes a la salud mental de los consultantes y un mejor desarrollo espiritual. salud mental y si así lo desea, una mejor conexión con su espiritualidad. Esto no quiere decir que un Counselor hace psicoterapia 'en el sentido que en nuestro país se utiliza este término', aquel que

Es obvio que cuando una persona puede resolver sus problemas de consulta y alcanza un adecuado desarrollo personal y aún más, trabaja para su despliegue, la armonía de su persona resulta en una mejor calidad de vida y por supuesto una mejor refiere a la curación de lo patológico, ni tampoco ayuda espiritual en el sentido que lo hacen los religiosos.

En síntesis, y en lo que nos incumbe para aclarar aún más:  Psicoterapia y Psiquiatría: Intención: Trabajar para la salud mental de sus pacientes. Efecto Específico: Prevención y curación Efectos inespecíficos: Diversos, tales como espirituales, desarrollo personal.  Ayuda Pastoral: Intención: Trabajar para un mejor despliegue de la espiritualidad en concordancia con la religión de ambas partes de la relación de ayuda. Efecto específico: Desarrollo espiritual/religioso Efectos Inespecíficos: Mejoramiento de la calidad de vida y de la salud mental.  Counseling: Intención: Trabajar para el Desarrollo Personal de sus consultantes Efecto Específico: Prevención, Promoción de calidad de vida, Desarrollo y Despliegue. Efectos Inespecíficos: Espirituales y de mejoramiento de la salud mental.


La Psicología es una Ciencia, el Counseling una disciplina profesional. Como Ciencia la Psicología, se ocupa de investigar el comportamiento humano; para ello estudia los procesos mentales, en sus distintas funciones y capacidades, tales como la memoria, la imaginación, la percepción, la sensibilidad, las emociones y sentimientos, la inteligencia, el carácter el temperamento, el aprendizaje en sus distintas expresiones, la salud mental, las patologías, etc. Como toda Ciencia, se entrama con otras, tales como la Biología, Neurociencias, Sociología, Antropología, y aporta los resultados de sus estudios e investigaciones a distintas disciplinas y prácticas, y a sus propias derivaciones. Entre otras, directamente vinculadas, tenemos la Psicología Clínica que, como su nombre lo indica, asiste en tareas de prevención y, como Psicoterapia, en la curación de patologías mentales; por otro lado, la Psicología Genética y la evolución del niño, su pedagogía deriva en lo que hoy se llama Psicopedagogía y que es una disciplina propia, que se dicta como carrera independiente de la Psicología. Otra disciplina en sí misma, que transita similares caminos, es el Psicoanálisis como tal, creado por Sigmund Freud, también independiente de la Psicología, salvo en aquellos casos, que se toman sus bases conceptuales, para ejercer una Psicoterapia Psicoanalítica. Toda Ciencia, como mencioné integra sus resultados a las distintas prácticas, por ejemplo, la Biología y Bioquímica, aportan remedios y vacunas a la Medicina y la Veterinaria. En lo que nos implica, el Counseling nació en la década del 30, como una praxis emergente de la crisis económica en Estados Unidos de Norteamérica, creada

por Trabajadores Sociales y Educadores, con alto contenido social, se dedicó a la ayuda de personas que estaban sufriendo existencialmente. Años después, al darse cuenta que para facilitar la resolución de los problemas y conflictos de personas que no tenían patologías mentales, y promocionar el bienestar personal y social. Necesitaban conocimientos de Psicología, recurrieron a esa Ciencia, y encontraron en la teoría y práctica de Carl Rogers la más óptima para sus objetivos. Fue entonces que agregaron a los iniciales: Promoción del Bienestar y resolución de los problemas que lo dificultaban, una tercera que es Desarrollo Personal. Es así que de llamarse solo “Counseling”, paso a nominarse como “Psychological Counselling”. La disciplina fue creciendo, y hoy se dicta como formación independiente en 43 países del mundo. Estamos, entonces, ante una profesión de la ayuda que promociona el bienestar y desarrollo humano y, por ello, facilita la resolución de problemas existenciales que lo dificultan, y desde allí el despliegue de potenciales que posibilitan el Desarrollo Personal y Social. No son sus objetivos principales, la Salud Mental y el Desarrollo Espiritual pero, obviamente, de lograr sus objetivos, los favorece. Es por ello que es una profesión muy valiosa en sí misma, respetando su identidad, tanto sea para asistir en sus gabinetes, como en empresas, instituciones educativas, ONGS, geriátricos, centros asistenciales, organismos del Estado, y entramarse en la transdisciplina, con Psicólogos Clínicos, Psiquiatras, Neurólogos, Médicos en sus distintas especialidades, Sociólogos, Trabajadores


Sociales, Educadores, Abogados, Coaches, Programas de Adicciones etc. La sociedad necesita esta profesión, y se nota cada vez más por la cantidad de consultas y ofertas de servicios que tienen los egresados, así como aumentan exponencialmente, los interesados en estudiar esta carrera. Nota de cierre: Quizás a muchos, llame la atención el comentario que sigue: El Counseling Humanistico y el Psicoanálisis en si mismo- no como Psicoterapia- tienen los mismos objetivos, el mismo sentido, la misma relación con la Psicología, facilitar el autodescubrimiento, para que la persona asistida se adueñe de sí misma, y pueda

elegir como tramitar una existencia más plena. Poseen distintas epistemologías, sin embargo ambas se basan en una escucha que tiene similitudes, la Freudiana con la asociación libre, y la Humanística en la No Directividad en esa instancia – curioso parecido en el dejar que el otro se deje llevar por lo que le sale en su relato-, es obvio que luego cada praxis tiene su diferencia en el tipo de intervenciones posteriores, pero su rango identitario ante la Ciencia Psicológica es similar.

No debemos olvidar que el Counseling nació como una integración de disciplinas y ciencias, vinculadas con lo educacional, lo social, lo psicológico y lo filosófico, siendo por ello relativamente sencillo el poder plantearse la necesidad del trabajo entramado con colegas de otras profesiones en la idea de una ayuda eficaz y eficiente, sin que ello vaya en desmedro de su especificidad. Necesitamos convencernos de ello y ubicarnos teórica y prácticamente en una mirada holística de la ayuda.

Lic. Andrés Ricardo Sánchez Bodas www.holossanchezbodas.com


Por la Clr. Fernanda Otero

COVID Y ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICA


Un virus poderoso nos arrincona, nos mata de miedo, de soledad y también de virus. Nos suspende en la cadencia de la temporalidad. Saca a la luz y muestra nuestras oscuridades como humanos, como sociedad, como “ocupas” del planeta… Y eso es solo un aspecto. Otro aspecto, el mismo virus, al mismo tiempo, nos libera, nos motoriza, nos quita un velo de los ojos, nos ilusiona… Otro aspecto, el mismo virus, nos emparenta con otros, esos semejantes (de ahora, de otros siglos, del futuro que está golpeando la puerta) que, en éstas y otras situaciones límites, han sacado de sí eso, que sin saber muy bien si está no, se presiente y se materializa ahí, cuando florece. Aquí está la pandemia: Duda. Estupor. Conciencia. Miedo. ¿Qué es la vida? ¿Qué es el Amor? ¿Qué sentido tiene este sufrimiento? ¿Quién soy? ¿Qué es la felicidad? ¿Qué es la muerte? ¿Quién quiero ser? ¿A dónde voy? ¿Cuál es el sentido de mi vida? Las mismas preguntas de siglos atrás en otro contexto. El fenómeno humano en el centro de la escena anuncia su presencia en esas manifestaciones, en esas preguntas. Quizá entrañan enigmas con respuestas cambiantes a lo largo de nuestro proceso como especie, y también dentro del propio proceso de existencia en el aquí y ahora: juicios de valor, conceptos de libertad, política, fidelidades, medios de comunicación, fundamentalismos en todas sus expresiones, diversidades. Pura Antropología filosófica como efecto post COVID: reflexión sobre la vida y la condición humana a la luz de la ontología de la vincularidad. El ser humano no es un individuo aislado, sino que ALCANZA SENTIDO a partir de su vinculación existencial: su relación con sí mismo, su relación con lo sagrado, su relación con la naturaleza, su relación con los otros. Es en el despliegue de estos vínculos donde se sitúa la persona histórica y culturalmente, atravesada por las coordenadas espacio-temporales en las que se significan y re-significan dichos vínculos. Se cuestionan, se validan. Somos seres abiertos a múltiples experiencias del mundo en el que estamos insertos: el virus no existe, el virus te mata, la vacuna es agua, la vacuna te salva.

Invitación a pensar, repensar, preguntarnos, producir filosofía en las calles, las casas, las mesas de bar o los zoom. Lo que podamos: la salida es colectiva. Mónica Castro, mi profesora de filosofía, allá por la cursada del primer año de la Carrera de Counseling, nos compartió el pensamiento de un filósofo argentino, llamado Héctor Mandrioni, que había sido su maestro. Nos contaba que él decía que hablar de solidaridad implica hablar del vinculo con el que debemos encontrarnos como HUMANOS, y en tal sentido SER: a) SER POR: El encuentro con el otro, a la vez que se nos revela, nos revela a nosotros mismos. b) SER PARA: El otro despierta en mí la participación, y con ella, la responsabilidad y la solidaridad. c) SER CON: Lo que posibilita la intersubjetividad es la experiencia de la previa “con-subjetividad”. d) SER DESDE: Una vez que el YO ingresa y se coloca en el mundo del TU, la situación del Tu se altera, y a la vez que se altera el mundo del Tu, cambia también el mundo del YO. Siglo XXI, COVID-19: bisagra en la historia, los corazones, las mentes, los cuerpos, y sin embargo, nosotros vamos siendo mientras vamos. Como escribía en otro siglo Héctor Germán Oesterheld (el creador de la historieta El Eternauta) “El único héroe válido es el héroe en grupo, nunca el héroe individual, el héroe solo” Que así sea.

Clr. Fernanda Otero Ferotero24@gmail.com


Por la Clr. Claudia Quiroga Daldi

“Tenemos la maravillosa oportunidad de expresar, a través del lenguaje, respeto.”

Sexualidad Centrada en la Persona


ESAS RARAS PALABRAS NUEVAS Las palabras están obviamente cargadas de significados, literales, explícitos, subyacentes, ocultos, más o menos amorosas, con mayor o menor carga emocional y un sinfín de etcéteras. Las palabras y sus implicancias nunca fueron inocentes, tienen una intencionalidad y un peso cuya trascendencia no podemos soslayar, pero últimamente las palabras ligadas a nuestra sexualidad, que otrora eran tabú, y que provocaban quizás cierto pudor, hoy en ciertos casos producen indignación, incluso son objeto de chistes, y no aquellos chistes chabacanos de la televisión de los 80, otro tipo de chistes que tratan de menospreciar su valor y ridiculizar a quien las emite. No se puede ignorar que lo que produce resistencia, es su relación con nuestra sexualidad, con nuestra identidad de género u orientación sexual; porque atribuirla a la tan nombrada (para estos casos nada más) aprobación de la RAE no tiene sustento, porque adoptamos alegremente otras que aparentemente son menos amenazantes sin consultar si la Real Academia las incluye o no, es más, hasta se vuelven modas que debemos adoptar para no pecar de falta de modernidad; como “instagramer” o “youtuber”, frases como: “estoy con delete” o “stalkee el Facebook de mi ex”, son emitidas y no producen la misma reacción que, por ejemplo: “soy

“Implicarnos con naturalidad y amorosidad en esta ampliación de nuestro idioma, que paralela e indefectiblemente acompaña la adquisición de derechos nos enriquece y nos convierte en parte de una sociedad más justa e igualitaria” pansexual” u “hoy me encuentro con les chiques”. A raíz de tan curiosa situación surgen preguntas: ¿La sexualidad y sus implicancias aún hoy resultan amenazantes? ¿Qué temores esconden la burla o la ridiculización hacia quienes las usan? ¿Molesta el supuesto mal uso del idioma o la libertad que expresan? ¿El ataque es hacia las palabras o hacia las personas que las emiten? Es tan contradictoria la posición acalorada de quienes se oponen a éstas y no a otras expresiones, que amerita una reflexión colectiva y profunda en lo que concierne al respeto hacia las diversidades que afortunadamente nos constituyen como comunidad, respeto hacia la forma de expresarnos, porque lo que decimos, como lo decimos, lo que nombramos y como lo hacemos, como nos definimos y de que modo nos describimos es parte de nuestra singularidad y nos enriquece porque suma más expresiones a las que ya existían con el fin de incluir ¿Hay algún argumento lógico que pueda oponerse a esto?


Tenemos la maravillosa oportunidad de expresar a través del lenguaje respeto. Implicarnos con naturalidad y amorosidad en esta ampliación de nuestro idioma, que paralela e indefectiblemente acompaña la adquisición de derechos nos enriquece y nos convierte en parte de una sociedad más justa e igualitaria. Es hermoso formar parte activa de esta transformación que implica un aprendizaje

y una actualización continua, que incluye y por eso nos incluye. Pretender contradecir esta realidad avasallante y vigorosa con argumentaciones débiles y tendenciosas no evita un cambio que ya se impone como necesario, al contrario, lo robustece y expone los intentos de invisibilizar no a palabras, sino lo que representan, y eso, afortunadamente ya no es posible. Un abrazo y hasta la próxima.

Clr. Claudia Quiroga Daldi Especializada en Consultoría en Sexualidad Diplomada en Género claudiaquirogadaldi@gmail.com

“El ser humano es como un río que fluye. Entre orillas que lo contienen y le dan su cauce y su nombre” Son las dos primeras oraciones. Un libro. Una promesa. Una promesa cumplida. Humanizador, creativo y creador. Generador de un clima en la lectura por el que se experimenta la necesidad de compartirlo. Es un encuentro personal con Andrés, si hay algo que se asoma, en cada página, es su amor por la persona. “El Suceder Humano”, sucede.


Por la Clr. Analía Cordero

Ser

EL DR. JORGE KAPPEL CON TODOS NOSOTROS


Lo leímos, lo estudiamos, crecimos de la mano de sus textos, aprendimos de él. Hoy tenemos la oportunidad de conocerlo un poco más. Estamos frente a un ser humano de una profunda calidez, de conocimientos inconmensurables y una trayectoria tan admirable como su persona. Especialista, y amante, diría yo, de la Dinámica Grupal y de ayudar a las personas. Generoso con sus saberes, con su tiempo y con sus “ayudados”. Se percibe tanto amor en su voz, tantas ganas de brindarse y seguir enseñando. Hoy, es nuestro “Ser” de SerEs, por lo cual, homenajearlo y agradecerle lo que nos da a todos los que hacemos e hicimos del Counseling nuestra formación, sigue siendo una nueva oportunidad de aprendizaje.


La mejor de las bienvenidas, y todo el agradecimiento de quien escribe. También, por la emoción en este acercamiento y la gratificación de conocerlo. Con nosotros… nuestro Ser convocado. -“Bueno, entonces empiezo por una presentación.”

Ejerciendo como Pediatra, trabajé y acumulé mucha experiencia personal sobre mí mismo; es decir, el conocerme.

Será un honor para mí y para este espacio. -“Bueno, yo me puedo presentar de la siguiente forma: soy Jorge Kappel, soy Médico, soy Pediatra - o era pediatra-. Esto es lo primero que menciono para que vos y la gente que lea esta entrevista, sepan que pertenezco a ese grupo pionero que comenzó a desarrollar el Counseling aquí en Buenos Aires. Nací en 1938. No soy argentino nativo. Vivo en este país desde hace muchos años. A los 10 años vine desde Rumania. Llegué al puerto de Buenos Aires en 1948, después de la guerra echamos anclas aquí. Iniciaría pidiéndole un recorrido por su trayectoria. ¿Cómo ha sido ese desplazamiento desde la Pediatría a tantos años de Counseling y Dinámica Grupal? Me tengo que remontar a muchos años atrás; me recibí en el año 63. Me matriculé y comencé a ejercer la Pediatría. Era un pediatra del barrio de Almagro y trabajé con niños, pero me gusta decir con familias, hasta el año 83. Veinte años redonditos. No se cierra el consultorio de un día para otro sino lentamente, gradualmente me fui despidiendo de mis pacientes, a la usanza del médico de familia. Comencé mi terapia, como paciente del Psicoanálisis en el año 64, llevaba muy poquito tiempo de recibido, iba cuatro veces por semana, ¡por semana! Hoy la psicoterapia se puede hacer cuatro veces pero al mes, una vez por semana, y ya está muy bien. Bueno, yo iba lunes, martes, jueves y viernes, y así durante 5 años. El psicoanálisis era bastante dogmático, yo no le veía nunca a la cara a mi terapeuta salvo cuando nos saludábamos al entrar y salir de la sesión.

Le debo mucho al psicoanálisis pero también fui descubriendo, a través de la Pediatría, mi gusto por entrevistar personas, conocerlas; y fue así que fui desarrollando la idea de dedicarme a la psicoterapia en algún momento de mi vida. Esto, durante esos inicios como paciente. Finalmente, yo no sé si me dio el alta, me di el alta, o nos dimos mutuamente el alta, pero después de años terminó mi terapia y salí tratando de encontrar mi camino. Fui despidiéndome de los pacientes pediátricos, como te decía; en esa época recorrí los cien barrios porteños en un Renault 4. Te aseguro que me dio mucha, mucha satisfacción haber conocido tantísimas familias, pero yo quería, y estaba convencido, de que iba a parar en alguna estación que tuviera que ver con la psicoterapia. Lo que sí sabía era que no quería ser psicoanalista, no quería repetir el rol que le vi hacer a mi terapeuta durante tantos años. ¿Lo critico? Un poco. ¿Lo agradezco? Sí, mucho, por todo lo que el psicoanálisis me dio Poquito a poco, fui buscando y por eso, tengo alguna experiencia en Análisis Transaccional


pero no soy Pscioterapeuta del Transaccionalismo, no soy Gestaltista pero hice un curso prolongado de terapia Gestalt. Llegué a conocer a Pinchon Riviere, fui alumno de él; y finalmente, a través de Manuel Artiles, que fue profesor mío también, me formé en su escuela, el CEPOR (Centro de Estudios Psicológicos con Orientación Rogeriana). Ahí fue donde conocí a varios de los compañeros, con los cuales tuvimos vínculo durante años. El más significativo para mí fue y es Andrés Sánchez Bodas. Porque con Andrés trabaje 9 años seguidos. Trabajamos teniendo, en una misma semana, dos grupos diferentes, y donde yo aprendí mucho, aprendí mucho con él; es Psicólogo, yo soy Médico, los dos con antecedentes de haber sido pacientes muchos años y, bueno… aprendí mucho de él y aprendí mucho del grupo a través del trabajo diario, eran dos grupos chicos,, abiertos de manera que la gente iba recambiando de tanto en tanto.

“Prefiero que haya heterogeneidad de personalidades (…) y también en cuanto motivos para ingresar. Porque todas las personas algo quieren cambiar, con algo de ellos no están conformes, algo quieren modificar, por eso vienen al grupo” ¿Se aprende mucho de la ayuda que se brinda no? ¿Si se aprende trabajando? ¿Si se aprende ayudando? ¿A eso vas? Y yo aprendí muchísimo, sobre todo aprendí lo que no tenía que hacer, había muchas cosas con las que durante tanto tiempo me había identificado, esto de una excesiva intelectualización, excesiva elucubración, e interpretación.

En ese momento no existía el Counseling, todavía. Durante esos 9 años Andrés fue trabajando la idea de crear la primera escuela, porque él fue la primera persona que creó una escuela de Counseling en Argentina, y después todos esos años de trabajo compartido mantuvimos nuestra relación. Y, como te decía antes, la Pediatría me ha dejado un aprendizaje enorme acerca de las personas. ¿Cuál es su mirada acerca del Counseling? Yo concibo un Counseling de tipo humanístico donde Rogers es la persona más preeminente, pero indudablemente hay personas muy destacadas que pertenecen a la línea post-rogeriana. Yo lo que traté de hacer es tomando como eje coordinador a Rogers - no sé si llamarlo enriquecer o ampliar, con algunos conocimientos, sobre todo de la Gestalt. Jorge: La pandemia y todo este contexto y sus actividades ¿cómo se articularon? El comienzo de esta triste pandemia, esto me llevo a tomar la decisión de renunciar después de 24 años en San Isidro en la docencia y de 29 en Holos Capital. Este año, me dediqué a hacer una especie de resumen, nunca con la idea de publicarlo como libro, pero un resumen del programa que yo enseñaba en segundo año que aparece en Counseling. Serían notas y apuntes ya que en castellano no tenemos mucho material. Cuando termine la pandemia, quizá retome, no la docencia, sino alguna actividad. Dictar un postítulo una vez por semana, dos horas, un año entero, para Counselors, que han cursado la carrera, para que puedan afinar un poco el instrumento con el que van a trabajar. Todavía estoy con entusiasmo, así que si termina la pandemia y se puede volver a la presencialidad, por lo menos durante un año, volvería a dictar un postítulo. No depende solo de mí, sino también de lo que va a pasar con el país después que la pandemia. Pero bueno, yo me despedí de ambas instituciones con la idea de, si es posible, reencontrarnos el año que viene, y si se vuelve completamente a la normalidad.


Con su experiencia y recorrido a través de la Dinámica Grupal, ¿de qué tipo de grupo podríamos hablar hoy, como él o los que tienen más vigencia y ha permanecido en ejercicio para las personas que buscan esta modalidad de ayuda? Sobre esto he escrito mucho, tengo experiencia de haber trabajado con cada una, que son el grupo de Encuentro, el grupo de Debate y después, los dos caballitos de batalla que son el grupo de Desarrollo Personal y, lo que yo llamo, grupos Temáticos El grupo de Encuentro no tuvo tanta difusión como lo tuvo a través de Rogers en la California en la década de los 60 y 70. Tampoco el grupo Debate ha tenido tanta trascendencia, pero sí, en cambio, el grupo de Desarrollo Personal donde yo hice mucha práctica, y del cual podría decir, como definición, que es un conjunto de personas sin alteraciones psíquicas estructuradas - esto es importantísimo, porque yo quiero siempre difundir la idea de que los Counselors son especialistas en prevención de psicopatologías y promoción de la salud - que se reúnen en torno a un facilitador, o dos - y que tienen un propósito, facilitadores e integrantes, que es ayudarlos a resolver aquellos problemas, ya sean personales y/o interpersonales, que dificultan su desarrollo, por eso se llaman grupos de Desarrollo Personal y lo hacen en el marco de una pequeña o micro comunidad de ayuda que se basa en la interacción. Sin interacción no hay grupo. Estos grupos, y recordando cómo te estaba diciendo al principio esos 9 años de experiencia junto a Andrés, más las experiencias que siguieron en años posteriores me gustan si son pequeños. ¿Por qué ese número reducido de personas? ¿Es por alguna particularidad? ¿Qué factores entran en juego? La particularidad es que, sin que sea proceso individual en grupo - eso hay que evitarlo - es grupal donde la interacción, la intimidad, la confidencialidad, tienen que estar subrayadas y valoradas al máximo. Tuve la experiencia de trabajar con 10 o 12 personas y no me dio resultado porque ¿qué pasaba? Dos horas para

tantas personas, es un tiempo breve. Quizá sea una deformación mía, lo puedo reconocer, pero me quedaba con la idea y con la sensación de que le había dado poco a la gente. Me quedaba insatisfecho. Había que recortar por algún lugar y le quitaba un poco el sentido. Me he acostumbrado a trabajar, incluso, con grupos de cinco personas y hay dinámica, hay interacción, siempre que sean personas comprometidas, porque los grupos de Desarrollo Personal duran aproximadamente, desde el comienzo a la finalización, de 12 a 18 meses. En estos grupos reducidos, por lo que fui entendiendo también, el clima, la seguridad y la posibilidad de encuentro son, justamente, lo que aporta el grupo pequeño. Es mucho más viable que en un número más grande. Hasta he tenido la experiencia de trabajar con 3 personas de 5 porque dos tenían gripe, el grupo no se suspende. ¡¿Se puede hacer un grupo con tres personas?! Sí, se puede. Siempre procuro que haya un número similar de varones y mujeres. Sin embargo, recuerdo grupos de dos varones y cinco mujeres que han ido muy bien también. Los grupos mixtos son muy ricos. Por otra parte, me fijo mucho en la edad entre el integrante mayor y el menor del grupo, en general prefiero que no supere los 20 años. Quiero decir que esto es flexible, porque si en un grupo tengo una persona de 20 años y otra de 40 parece mucho la diferencia, pero suena distinto a que participe alguien de 45 y alguien de 65 años. Otra cosa que considero es que haya heterogeneidad de personalidades. Con 5 o 7 personas muy calladas es muy difícil, igual que con 5 o 7 personas muy verborrágicas. Heterogeneidad entre personalidades y, también, en motivos para ingresar. Porque todas estas personas algo quieren cambiar, con algo de ellos mismos no están conformes, algo quieren modificar por eso vienen al grupo, entonces es muy bueno que haya una persona que tenga una tendencia - digo tendencia no hablo de patología - más depre, otro que tenga una tendencia más extrovertida, el otro que es más intelectual y el otro que es mucho más emocional.


Entonces ahí el grupo se enriquece. Que cada uno tenga su motivo particular por el que ingresa. Por miedos, otro por mala relación con sus hijos, el otro, a lo mejor, malas relaciones de pareja. Y estos grupos se especializan en eso. Diferente es en los grupos Temáticos, en ellos cada uno ingresa con una problemática similar a la de los demás, pero de la experiencia de otro, todos van aprendiendo. Creo, de todos modos, que idealmente serían 7 los integrantes de un grupo u otro. Se hacen entrevistas previas. ¿Por qué las entrevistas previas? Porque tengo que asegurarme de que se trata personas, que sí tiene problemas que resolver pero que no necesiten una psicoterapia, ya sea psicoanalítica o de otra índole. Le concedo un entrevista de admisión, de una hora amplia, como para realmente conocer a la persona y conocer también - esto es una responsabilidad del Counselor- porque la idea es que esta persona trabaje durante un año o año y medio con 6 personas más y explico, a quien quiere ingresar, que es un grupo abierto. Si es que de los 7, 1 persona se va, queda 1 silla disponible para otra persona. También, es importante para que la gente sepa que es un grupo que puede tener cambios en el número de integrantes. No hay que olvidar otras cuestiones relevantes, durante la entrevista individual, como por ejemplo, la preparación pre grupal, hay que hablar del “contrato”. Esto es la puntualidad, el dinero, feriados… que todo sea consensuado. Aquí aparece, también, la noción de lo interpersonal, entre lo que puedo tomar del grupo y lo que puedo brindar al grupo. Exactamente. Una pregunta que suelo hacer, si me decís que te gustaría ingresar a un grupo por tal y cual motivo, es qué pensás que podés darle al grupo. Esa puede ser una buena pregunta para ir viendo los proyectos de esa persona. También le puedo preguntar que espera recibir del grupo. La primera pregunta suele ser más sorprendente porque las personas, generalmente, llegan con la

idea de recibir ayuda. A veces se quedan sorprendidos - ¿Yo, dar? – Esto es muy importante para que la persona que viene, no delegue todo en el facilitador: -”todo lo espero de él”, y entonces no haya responsabilidad. Por esto hablaba en la heterogeneidad de personalidades y motivos para ingresar al grupo, que se pueden desvirtuar o desviar. Otra cosa a tener muy en cuenta es el respeto hacia las normas del grupo, eso es muy importante, el respeto por la confidencialidad, lo que se habla en el grupo, allí queda.

“Me dio mucha, mucha satisfacción haber conocido tantísimas familias, pero yo quería, estaba convencido, de que iba a parar en alguna estación que tuviera que ver con la psicoterapia. Lo que sí sabía era que no quería ser psicoanalista, no quería repetir el rol que le ví hacer a mi terapeuta durante tantos años”

¿Qué características le atribuye necesarias a la co-facilitación? Para mí, cuando se trabaja de a dos tiene que ser una co-facilitación igualitaria. Y esas personas tienen que tener mucha confianza, porque si un día uno de los facilitadores no puede concurrir, el grupo sigue con uno. ¿Y cómo es para el grupo que queda cuando un integrante se va? Eso es algo que hay que trabajarlo con tiempo. El grupo que pierde un compañero, al mismo tiempo, se tiene que alegrar porque ese compañero se va con agradecimiento por lo que ha recibido de cada integrante y del facilitador. El que se va, desde ya, que va dando señales de que ya está cerca de su autonomía. Ya no viene con tanta ansiedad, ya no viene con tanta


angustia. La persona habla de “cuando yo deje este grupo”, “cuando ya no tenga ayuda del grupo”, inconscientemente la persona ya nos va preparando para que nos hagamos a la idea de que algún día se puede ir y que va a ser pronto. ¿Qué situaciones/problema traen las personas que buscan un grupo para ser ayudados? Siempre a estos grupos se ingresa por problemas de crecimiento personal y por despliegue de potencialidades y no por cuestiones de psicopatología. Si no, sería un grupo Terapéutico. Y el despliegue y el desarrollo, entiendo que no viene planteado por el integrante del grupo, termina siendo la resultante. En estos grupos hay, lo que yo llamo, movimientos grupales. Lo esperable son las transformaciones individuales exitosas.

“¿Si se aprende trabajando? ¿Si se aprende ayudando? Aprendí muchísimo, sobre todo aprendí lo que no tenía que hacer, había muchas cosas con las que durante tanto tiempo me había identificado… esto de una excesiva intelectualización, excesiva elucubración e interpretación. En ese momento no existía el Counseling, todavía.”

¿Y los conflictos, Doctor? El conflicto también es todo un tema pero es infaltable. Inherente al ser humano. Como dicen, con razón, una pareja ya es un grupo. ¿Hay parejas sin conflicto?

NO. (Risas) Ahí tenés la respuesta y estos conflictos hay que trabajarlos en el grupo. Estos conflictos te enseñan muchísimo. Pero son mucho más moderados que en los grupos Terapéuticos, circula menos ansiedad en el clima. ¿Cuáles son las otras modalidades de grupos de ayuda? Ahora podríamos ampliar acerca del Temático y se podría hacer una comparación. Acá también los integrantes, a mi gusto, hasta 7 personas. Aquí, la diferencia es que los integrantes comparten una problemática, muy similar entre todos, como dijimos. Estos son grupos que tienen un objetivo, promover la salud y la prevención de trastornos psíquicos. Supongamos nosotros que, ahora durante la pandemia, para hacerlo más actual, pudiéramos hacer un grupo presencial, todavía creo que no. Virtual sí. Podrías hacerlo con toda la ayuda técnica, tecnológica y supongamos que digas: -“bueno yo trabajo con grupos Temáticos”. Entonces la diferencia es que acá el problema es común a todos. Por ejemplo, que el problema sea por esta situación de pandemia, ¿qué se te ocurre? Desde el encierro, la pérdida de seres queridos, el miedo al virus… El encierro, el aislamiento, tomamos ese. Supongamos que vas a abrir un grupo Temático, le tenés que poner un título. Por ejemplo: “Llevo meses encerrado y necesito…” Y que se difunda esto entre personas que tengan en interés en compartir un grupo de hasta siete personas, que lo hacemos con la tecnología. También es necesario que sea posible que esas personas que se reúnan con los facilitadores para poder realizar una entrevista preliminar, con cada uno, para que en estos grupos no haya una persona con un trastorno de depresión seria. Puede suceder que el tema, para ella, podría ser “la soledad que te entristece” y le expliquemos que el grupo Temático va girar alrededor de este tema. Porque que si vos tenés este tema, en el grupo no se te va a rechazar, sino que se va a buscar un punto de contacto entre tu


problemática y la del grupo, pero el eje fundamental sigue siendo el aislamiento. Estos grupos son breves, una vez por semana, cuatro meses, a veces tres, dos meses. Son grupos que se reúnen para enfocar un tema de una forma tal que no tiene ni el recorrido ni la amplitud que el grupo de Desarrollo Personal. Son grupos cerrados, aquí no entran nuevos miembros. Es importante tener el compromiso de que la persona va a seguir hasta el final. En este caso si llegara a haber un tipo de deserción, no se reemplaza. Son cerrados y esto se explicita. También se hace una fase de preparación pre grupal en ambos grupos, el de Desarrollo Personal y el Temático. Y entonces bueno, hay muchos ejemplos. Hemos hecho experiencias con adolescentes tímidos (no depresivos) en la vida de relación, como estos chicos y chicas en un grupo de cinco o siete, cada uno empieza a hablar de su propia dificultad y de repente se ven a sí mismos interactuando. También, como fui mucho tiempo Pediatra, he trabajado con padres de bebés prematuros, que pasan mucho tiempo en la incubadora. La cantidad de angustias y de cosas que aparecen, o madres y padres que acompañan a sus hijos internados en salas de terapia pediátrica. Grupos de adolescentes embarazadas. Padres que no saben cómo poner límites a sus hijos. Padres con sus hijos lejos del hogar...

con los grupos de Desarrollo Personal, como una herramienta muy valiosa para el Counselor. Siempre con una entrevista preliminar y tratando de asegurarte que las personas que ingresan al grupo tengan realmente el compromiso. Obviamente, no se la puede obligar pero se le puede pedir a la persona que permanezca un mínimo de tiempo como para probar. La virtualidad nos está proporcionando, más allá de lo que nos quita, es que la distancia hoy no sea un obstáculo. Exactamente. Bueno sobre esto se podría hablar largo y tendido. Esa es la riqueza de trabajar con esta modalidad, y ayudar en este contexto de pandemia tan angustiante porque está dejando efectos creo, en lo personal, que no queda ninguna dimensión en particular sin afectar.

Qué decir para concluir. Y qué agregar después de tanta generosidad. El honor de conocer a un absoluto referente de los que somos profesionales del Counseling, dequién tanto hemos tomado para crecer en conocimientos y en experiencia. Qué decir ¡Gracias! Dr. Kappel!, en nombre de SerEs, en el mío personal, y en el de cada lector que hoy también ha aprendido, y de todos los que esperamos, con usted, un pronto Encuentro.

¿Qué debe considerar el Counselor que quiera iniciarse en esta modalidad? Vale destacar, que se requiere una capacitación, una especialización. Puedo tener que atender familiares de adictos y si no tengo experiencia con adictos y sus familias, tengo que tener una especialización. Estaba pensando en la violencia de género. ¡También! O, por ejemplo, un grupo de familiares de paciente terminales, ahí vos tenés que tener una experiencia y proceso personal para enfrentar temas como la muerte, o familiares del paciente psiquiátrico. Los grupos Temáticos, yo creo que están indicados, junto

Clr. Analía Cordero clranaliacordero@hotmail.com


PARA EL Dr. JORGE A. K APPEL SALUDOS Y MENSAJES DE SUS AFECTOS DEL LIC. ANDRÉS SÁNCHEZ BODAS Me siento honrado ante la convocatoria de la Revista SerEs, de escribir unas líneas sobre mi querido y muy respetado Prof. Jorge A. Kappel, con motivo de la entrevista que le hizo la citada revista. Nos conocimos en 1981/2 – hace 40 años!! a la fecha- cuando comenzó su formación, como terapeuta del Enfoque Centrado en la Persona, que se dictaba en el CEPOR (Centro de Estudios Psicológicos de Orientación Rogeriana) que dirigía el Prof. Manuel Artiles, donde yo era profesor. De hecho, Jorge fue alumno del grupo que coordinaba, y en 1984 lo supervise como parte de los requisitos para obtener la titulación que Manuel exigía, luego de los dos años y medio de cursada. En relación a esa instancia, también era necesario presentar una Monografía, que presentó con el título de: “Del Diálogo real al Monólogo Imaginario”, un brillante trabajo que inauguró un modo de evaluación del principiante en el aprendizaje del modelo de Carl Rogers. En el mismo el comparaba intervenciones del modelo psicoanalítico con los del Enfoque, en el cual si uno leía las de un psicoanalista experto con uno Rogeriano, y uniendo los “discursos” de paciente/consultante con los de los profesionales, como diálogos terapéuticos” podía detectar rápidamente cuál de ellos se basaba en la Fenomenología. Por supuesto aclaraba que no era una crítica al Psicoanálisis, sino una forma, como dije, de evaluar si se había adquirido una escucha Centrada en la Persona, desde el marco actitudinal planteado por el ECP. Es aún hoy un modo muy eficiente para aplicarlo en la formación de los Counselors. Esa monografía fue publicada en la Revista Congruencia en 1987, y la ha reproducido como un capítulo de mi libro “Enfoque Holístico Centrado en La Persona”, de Editorial Lea, como un apéndice, al final del mismo, que nomino

como” Test de Coherencia Epistemológica”. Espero que lo estén aprovechando, sean docentes, supervisores, y los propios profesionales. Nuestra relación se fue profundizando, nos hicimos amigos, y en 1984 decidimos trabajar juntos coordinando Grupos Terapéuticos, tarea que realizamos durante muchos años. Sinceramente, creo que ambos fuimos adelantados en la integración de recursos en la facilitación de grupos, Jorge aportando su formación en Gestalt y yo en Ensueño Despierto. Recuerdo esos años con mucho cariño, acumulé muchísima experiencia profesional en el trabajo en co-terapia. En nuestro mutuo devenir, hemos participado en varios Grupos de Encuentro, presentando trabajos con ideas novedosas, dos de ellos están en mi libro “Estar Presente”, editado 1987, y segunda edición de 2005, son los capítulos 9- “La Psicoterapia Grupal desde el ECP- Un modelo Integrador-, y el 10 “ El terapeuta como Catalizador”, al cual se sumó el Lic. Julio Artiles, que presentamos en el Encuentro Argentino realizado en 1987, en Mercedes. También puedo mencionar su aporte sobre “Counseling Grupal”, en el primer libro Argentino sobre la profesión, “Crear Salud o Curar Enfermedad” en 1993, que fue reproducido en el manual “Counseling Humanístico” editado y reeditado posteriormente en varias oportunidades y que sigue vigente. Esta convocatoria me hace recordar que, un día, saliendo de su consultorio en la calle Medrano, en 1986, caminando por la vereda, me detuve, y le dije, Jorge tengo una idea, me miró atentamente, tengo ganas de introducir el Counseling como Profesión en Argentina, de organizar una Carrera, en la que puedan estudiar personas con estudios secundarios y porque no Universitarios, y le hice unos breves comentarios, por supuesto, se ofreció a apoyarme y ayudarme en el armado de las


materias y sus contenidos. Fue el primer colega con el que compartí mi intención. Desde entonces, hasta al año pasado que se jubiló como docente de la materia Dinámica y Coordinación de Grupos, ha sido profesor en mi organización educativa, siendo formador no solo de alumnos, sino de muchos docentes que retomaron su legado. En lo amical, nos hemos acompañado en distintas vicisitudes de nuestras vidas. Lo quiero mucho, es un ejemplo, como pocos, de coherencia personal y profesional.

Lic. Andrés Sánchez Bodas

DEL LA CLR. VALERIA RODRÍGUEZ Querido Jorge: Cuando Analía me comentó que quería entrevistarte para su revista, sentí profunda alegría, viendo allí la oportunidad de homenajearte como me gustaría y como siento, te mereces!! Así que le pedí, me permitiera escribir unas líneas, pasa SER PARTE. Esta necesidad mía de ser parte, de PERTENECER, aprendí a identificarla, valorarla y acunarla, en tus clases. Imagino que como yo, muchos de tus alumnos…. tantos, tantos alumnos que has recibido en tus clases y en tus grupos, que han pasado por tu aula, en años de amor, compromiso y entrega con TU DOCENCIA. Gracias, gracias eternas, en nombre mío y de ellos por compartirnos tu pasión por esta profesión. Hace un par de años, cuando me presentaba frente a un grupo como tu CO , en Holos Capital, luego de dar mi lista de certificaciones , vos agregaste : “además , es buena persona”. Creo que esa frase habla más de vos, que de mí. Muestra tu manera de percibir el mundo. Gracias por facilitarme mis aprendizajes en la Co Docencia, gracias por tu presencia: cálida, amorosa, congruente y NECESARIA!

Gracias por tu mirada, me he sentido contenida y aceptada, más de una vez, al reflejarme en tus ojos Te quiero muchísimo, espero no estar transgrediendo ningún límite profesional, al decirlo! Feliz Homenaje, Jorge querido y ¡ojalá pronto, podamos volver a encontrarnos! Cariños.

Clr. Valeria Rodríguez


Mick Cooper LA PERSONA PROFUNDA Y LA RELACIÓN HUMANA


La Profundidad, palabra con la que tanto lo identificamos, está en él. La Profundidad es él. Genera y promueve la reflexión y la conexión que le resultan tan relevantes para ser quién es y quienes somos nosotros. Lo humano lo ocupa. Sabe lo que conoce y siente no conocerlo todo. Lo que sabe de sí es su vocación de ayudar y su genuino interés por la justicia social y el bienestar como posibilidad humana. Gustoso con nuestras inquietudes, sorprendido gratamente con algunas de las preguntas que recibió y siempre accesible “en profundidad” con el compromiso en sus respuesta.


Para dar comienzo al encuentro, lo invitamos a presentarse de la manera que le gustaría ser recibido al inicio de la entrevista. Mi nombre es Mick Cooper, soy profesor de Counselling Psychology, en la Universidad de Roehampton en Londres. Escribo investigaciones sobre enfoques de terapias pluralistas, relacionales, centrados en la persona. Me interesan las conexiones entre la terapia y la justicia social. Profesor: ¿Qué significa “ser persona”? ¿Qué se pregunta existencialmente? Wow, ¿Qué significa ser una persona? Mi entrenamiento es en terapia existencial. Supongoque eso influye significativamente en mi visión sobre ser persona. Vería la esencia del ser humano como experimentar mientras intentamos avanzar, lo que describiría como algo llamado “direccionalidad”, intentamos avanzar en la vida a través de proyectos, a través de desafíos, es un flujo continuo de experimentación en relación con otros y con el mundo. Entonces, vería a la persona como una red de movimiento y de fluidez mientras nos movemos hacia diferentes proyectos y posibilidades. ¿Qué “fuerzas” lo motivan? ¿Qué le duele? ¿A qué le teme? ¿Con qué sueña? (Después de sonreír, responde) Es una pregunta muy personal. Una a la vez. Me interesa mucho la justicia social. Para mí, tratar de crear un mundo que sea mejor para otra gente y más justo es importante. En un nivel más personal, la conexión, el amor, la intimidad, pero también las motivaciones más bajas de la gratificación del ego y el placer. Un amplio rango de diferentes cosas me motivan, en un nivel tanto consciente como inconsciente, pero me gustaría pensar, en términos de mis valores, que la justicia social juega un rol importante. Lo que me hiere es la búsqueda de conexión que no es recíproca. Supongo que la gente,

la falta de conexión, el rechazo, el fracaso. ¿Temer? La separación, el aislamiento, probablemente más que cualquier otra cosa. La desconexión. Supongo que lo me gustaría en mi vida sería ver algo de esta justicia social realmente, hacer una contribución positiva para ayudar a que otra gente sea más feliz y empoderada. Y ser capaz de disfrutar eso a un nivel personal. Estoy aceptando que estoy llegando al final de mi carrera, entonces me gustaría sentirme satisfecho de que he hecho algo útil y poder dormir bien. Me gustaría poder ver fútbol y sentarme en el jardín sabiendo que hice algo útil. ¿Aún le faltan respuestas? ¿Qué se está preguntando existencialmente? Aún me faltan respuestas totalmente. Creo que hay muchas cosas que no sé o no entiendo, probablemente cada vez entiendo menos. Algo que me gustaría entender, tal vez sea una respuesta obvia, pero me gustaría saber cuál es el propósito o si hay un propósito en nuestras vidas, creo que me encantaría saber eso, o sentir que tengo una respuesta para eso. No siento que haya alcanzado una respuesta.


“Para mí, tratar de crear un mundo que sea mejor para otra gente y más justo, es muy importante” Conozco muchas, sea espirituales o existenciales, pero para mí, esa respuesta a si hay alguna razón, más allá del aspecto evolutivo porque sabemos que estamos aquí, pero si hay una razón para qué estemos aquí, no lo sé. Esa es la respuesta que más me gustaría tener pero sospecho que nunca la tendré. Pero creo que en términos como terapia, que funciona la terapia, como funciona la gente, siento que aprendí algunas cosas, pero no muchas. Mejor pregúntenme que entiendo en realidad. (Risas) ¿Qué es lo que entiende realmente? Creo que entiendo, sobre lo que estoy escribiendo ahora, que hay unos principios subyacentes de cambio, sea que mires en una persona, una comunidad o una nación, que definen y articulan algo bueno. Yo creo que hay algo sobre cuando las cosas trabajan juntas, sean las diferentes partes de nosotros mismos, o comunidades dentro de una sociedad, o gente en una pareja o naciones, que cuando la persona hable encuentre una sinergia o soluciones colaborativas, que sistematizan las cosas. Y me interesa mucho, sea que mires psicológicamente o económicamente, o desde el trabajo de resolución de conflictos o terapia de parejas, como estos procesos estructurales subyacentes parecen ser consistentes. Pienso que puedo entender eso, el bien de las cosas juntándose en vez de separarse. Y el bien es cuando tenemos más de lo que queremos en nuestras vidas y menos de lo otro. ¿Quién escucha a Mick Cooper? ¿Tiene espacios de “profundidad relacional”? Lo tengo y es muy importante. Creo que tengo algunas personas en mi vida que me

entienden muy profundamente, y con quienes puedo compartir todo mi ser y que entienden que esto es quien soy realmente. Tener esas relaciones es increíblemente importante para mí. Tener gente con la que puedo ser honesto en un nivel muy profundo, así que sí, las tengo y soy muy agradecido de tenerlas. Creo que es muy raro, aún con terapeutas, he sentido que ese entendimiento no es común. Valoro mucho a las personas con las que puedo ser yo mismo. Tres palabras: VÍNCULO – PERSONA – CRECIMIENTO ¿Existe un orden de prioridades entre estas tres palabras? Creo que es muy difícil, están demasiado conectadas, pero empezaría con conexión, y relación y a través de esas, honestidad y apertura con alguien está el crecimiento. Podemos decir que somos personas a través de esas conexiones. Antes me preguntabas que es ser persona, creo que somos una red abierta de conexiones y a través de ella es que una identidad sensata y una personalidad individual emergen. Diría que, en primer lugar, ubicaría a los vínculos, y luego crecemos a partir de esas conexiones.

¿Hay una palabra para comprender qué es lo que le da profundidad relacional a la relación terapéutica? Diría que ser genuino, que el terapeuta sea genuino, pero tal vez esa palabra no revele


la intensidad necesaria. Tal vez, sea despojado o revelador. Creo que la profundidad viene de ser absolutamente honesto, pero no es solamente eso, se trata también, sobre nuestra experiencia y el cómo somos, sea lo que sea. Creo que eso permite esa intimidad. Es desafiante, pero es importante ser real y honesto en ese encuentro. ¿Qué trajo y que se lleva la pandemia humanamente hablando? ¿Cómo se crece de una crisis como ésta? No podría responder eso porque no soy científico, realmente no lo sé. Okey, ahora sí, es difícil, creo que ha sido un periodo difícil para mucha gente, incluso para mí, pero hay potencial para el crecimiento. ¿Cómo se crece? Creo que aceptando el dolor, el desafío y el dolor de corazón, la separación y la experiencia que esto trae y darle lugar a esto. Ojalá que esto de lugar para el crecimiento y el aprendizaje, pero no sé si se lo puede hacer aparecer, sino que emerge de la experiencia de vivirlo.

“Intentamos avanzar en la vida a través de proyectos, a través de desafíos que son un flujo continuo de experimentación en relación con otros y con el mundo..” ¿Hay algo que le gustaría decir en una entrevista como esta? ¿Quizá algo que nadie le haya preguntado? Es muy lindo hablar con ustedes. Supongo que hemos hablado de conexión, ser persona y crecimiento, creo que, para los estudiantes de la terapia centrada en la persona, el proceso es lograr ser honestos y sinceros consigo mismos sobre su experiencia, sus vidas, sus vulnerabilidades, sus miedos, sus fortalezas y ese es un proceso muy emocionante, realmente conocernos a nosotros mismos. También es un proceso muy desafiante y no es uno que pueda apurarse, es un proceso continuo.

Justamente, antes me preguntabas sobre lo que no sé, y creo que cuando uno busca explorar en sí mismo en algún punto cada vez siente que sabe menos y menos, aunque tiene atisbos de lo que es real, también hay muchas áreas que se pierden o se vuelven poco claras. Creo que vivir y aprender a vivir, en esa desprolijidad e incertidumbre y el no saber es importante. Sospecho que al final de la vida tampoco tenemos todas las respuestas, que no hay un final perfecto, probablemente muramos en ese estado de desprolijidad, entonces, para mí, el desafío es aceptar eso. Creo que entrenar en centrarse en las personas es aceptar eso y saberlo y estar abierto al respecto. Trascendimos la distancia. Las limitaciones que los idiomas parecían proponer. ¿Un honor? Sí ¿Un gran privilegio? También. A cada momento, experiencio el agradecimiento creciendo por el descubrimiento de una gran honestidad y apertura generosa de dejarse ser en el Encuentro. Lo ha sido, honor, privilegio y un gran Encuentro. Profundo, como él ES.

Clr. Analía Cordero clranaliacordero@hotmail.com

Equipo de Producción: Lucía L. Irazoqui, Marcela A. Gil Traducción: Camila Fourcade, Paula Abogado


“Me gustaría en mi vida ver algo de esta justicia social realmente, hacer una contribución positiva para ayudar a que otra gente sea más feliz y empoderada”


Por la Clr Analía Cordero

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La Soledad Sin miedo a la palabra


¿Qué es la soledad? ¿Es un estado, un sentimiento, una condición, un concepto? Reconozco la necesidad de describirla, sabiendo que lo subjetivo de mi experiencia me pertenece, y que mi percepción habla solo de mí y de mi proceso para transitarla. Para saber qué es la soledad, necesité saber lo que no es. De a miles, se cuentan los años de reflexiones filosóficas, construcciones antropológicas, conceptualizaciones sociológicas y psicológicas, y otros tantos, de obras de arte escritas, talladas, pintadas, interpretadas, de tantas maneras, como lo humano se manifiesta; estimo que persiste la búsqueda de su trascendencia y sentido, lo que será siempre un por venir. ¿Cómo es la soledad? Por momentos no se parece a nada, y en los tiempos de mayor intensidad, se parece a todo. Ineludible a veces, me atrevo a decir que considero, personalmente, que es una experiencia singular, vivenciada en función del distanciamiento de personas significativas, ausencias. Resultante de vínculos rotos o no construidos; un devenir que promueve sentimientos de vacío y abandono, dolientes, inmanentes. La carencia de intimidad la constituye, y le imprime connotaciones negativas, privativas, obstaculizantes. Ahora bien, ¿será siempre así? ¿Será siempre sinonimia de dolor? Quizá tenga oportunidad de ser resignificada, a raíz del fortalecimiento del vínculo con la yo que soy. Algunos autores la definen como “la discrepancia entre las relaciones interpersonales del ahora y las deseadas. La respuesta ante la ausencia de una relación particular. Experiencia por demás estresante y displacentera”. Puede ser… aún es posible pensar en la soledad como en las monedas, también las soledades tienen dos caras. Es la belleza de un tiempo revelador. La voz de Freud manifiesta: “como el valor de toda belleza solo existe en relación al significado que tiene para nuestras propias vidas emocionales, no hace ninguna falta que nos

sobreviva y es independiente de la duración absoluta” Las características cualitativas de la experiencia solitaria, unida a las limitaciones humanas, puede conducir a la autoconciencia, esencial para el desarrollo, y ser fuente de creatividad y fortaleza. Quizá esto dependa de sus múltiples causas, muchas de sus condiciones, y varias de sus consecuencias. Es Erick Fromm quien en “El arte de amar” describe a la separatidad como “el estado de separación inicial, la conciencia de nuestra individualidad, la percepción de que no pertenecemos a nuestro alrededor”. Razón de una gran angustia, pasible de vergüenza y culpa pero, por sobre todo, de temor. Miedo a ser olvidados Es un fenómeno multidimensional que involucra todos los aspectos de la persona, y, esto también, la viste de características constructivas asociadas al significado atribuido. ¿Acaso podría estar vinculada con procesos de crecimiento y madurez? La soledad emocional, disruptiva muchas veces, distópica siempre, deviene de la percepción de ciertos acontecimientos que amenazan la integridad, la matriz vincular, y el sistema de valores y creencias. Promueve la introversión que, paradójicamente, incrementa el vaciamiento existencial y la tendencia al aislamiento. La perspectiva temporal de la soledad, asociada al dolor y la incertidumbre, deconstruye sueños y momentos anhelados; sin embargo, una vez atravesado su periodo más crítico y revalorizado su significado, podría conducirnos a la resignación, o invitarnos a la transición hacia el despliegue potencial de recursos personales de superación y autovalía. Como en las monedas, es posible identificar su faceta positiva y singular. Somos en nosotros mismos y eso también es inexorable. ¿Hay alguien aquí? Sí. Estoy siendo quien puedo ser, a pesar y a favor de mí.


Martín Bubber nos ha pensado así: “El hombre que tiene experiencia de las cosas no participa en absoluto del mundo, pues es “en él” donde la experiencia surge, y no entre él y el mundo” Asimismo, el sentimiento consciente de soledad, acrecienta la necesidad de sobrevivir y admite la adaptabilidad; pero ronda la nostalgia que promete quedarse, y es capaz de cumplir. Tengo argumentos para mi tristeza, aun siendo testigo de su transitoriedad, quizá eso le dé sentido de ser; se lo añade. En la soledad experimento la angustia que me da el miedo y le tengo miedo a la angustia. Es un puente corroído, a cruzar hacia senderos significativos por donde transitar la vida. En soledad hay varias caras en el espejo que se reflejan junto a la mía, que sabe que ya no están detrás de mí. “Convertite en quien sos” sugiero, y me escucho en silencio, prestando mi atención. Entre tantas palabras regaladas por Carl Rogers, estas me alumbran: “ser la persona que uno es, implica confiar en el proceso que uno es, significa llevar al máximo sus propias posibilidades de cambio y desarrollo. Con orgullo de ser una persona sensible, abierta, realista y orientada hacia su propio interior, y se adapta con valor e imaginación a las complejidades de una situación cambiante”. Inspirador como siempre, esperanzador. “Convertite en quien sos” insisto. La soledad se propaga como hilos vitales que enredan los sentimientos entramados en noemas sensibles de intensidades desproporcionadas, gastando andares por realidades truncas. Es un solo té, una única canción y algunos poemas.

En mi tiempo, se une la perplejidad del ahora, lo pretérito de la melancolía y la inestructura de mi porvenir. En “El suceder humano” es Andrés Sánchez Bodas quien me permite comprender “podemos recuperar el amor que circula en nuestro Ser como lo que Es. Si lo logramos, podremos ser siendo lo que nuestro deseo de potencia – y no el de carencia –nos va pidiendo”. Es aliviador hablar de amor pensándome. “Cómo asumimos una responsabilidad sobre nosotros mismos y los demás nosotros. Solo siendo respetuosos de lo que se nos da y de lo que damos. Sin ser dualistas, ni causales, y la única manera de serlo es perder el miedo a la inconsistencia del vivir”. Estoy sucediendo. Mi soledad es de alguien, mi mismidad me sorprende. Soy una más de mis seres queridos, y me debo aceptación con el dolor que me habita bajo la piel y sobre ella, y el miedo que circunda la posibilidad de vivir esta vida, una y otra vez. Mi escenario se oculta, pero mi escena se produce, interna y prodigiosamente, en oportunidad de ser el papel que encarno y autora de mi guion. Ahora, si vuelvo al borrador, descubro que en el final, no termino. La soledad aumenta la conciencia de mi vida, de mi existencia, de mi ser en el mundo en cuerpo y alma. Sólo yo soy responsable de estos momentos cruciales, del quehacer con mi conmoción, de crear un destino digno de ser amado y, por cierto, sanador. Sin miedo a la palabra, ni a mi contradicción. Soy fluidez e impermanencia, mi soledad se gastará mientras la use para crecer. Soy mi soledad, pero también mi presencia. En la soledad hay espacio y tiempo y eso… eso se parece a la libertad.

Clr. Analía Cordero clranaliacordero@hotmail.com



Por el Clr. Jorge Luis Stile

Parejas Convivencia 24 x 7, en pandemia


Las parejas de hoy Estas parejas de hoy, como las llamo, son parte de los cambios socios-culturales e ideológicos, junto con un cambio de pensamiento, de sentir y de relacionarse. Se pueden nombrar varias condiciones que acompañan estos cambios, hoy son relaciones más casuales, con poco compromiso y responsabilidad, una libre elección de convivencia, proyectos en común, elecciones, ideales. Sin embargo, no todas las parejas viven una relación líquida como diría Bauman, también hay otras parejas que siguen las creencias de sus familias o una dinámica más tradicional. Los Consultores Psicológicos podemos acompañar a cualquier pareja, sentirnos cómodos con toda problemática, su comunicación, incluida la sexualidad de ésta, sin amenazas ni juzgamiento, acompañando desde su marco.

¿Para qué hago esta salvedad? Para poder decir que, para nosotros, los Counselors, también ha sido un cambio de rutinas; para algunos colegas pasar de la presencialidad a la virtualidad, hacer nuevos encuadres con sus consultantes, como así también en algunos casos, ampliar los horizontes hacia personas que están en otras localidades, provincias e incluso otros países, nos hizo también “acordar” con el entorno profesional. Para los colegas nóveles, pareciera que la virtualidad y la tecnología se transforma en la herramienta principal frente a este nuevo escenario, como si fuera poco el tiempo de horas de estudio también, se suman las horas frente a una pantalla. El empleo de este tiempo, a la vez, resta para las propias familias, ya que también algunos Counselors tenemos parejas y no somos ajenos a esos tiempos…

De allá y entonces, al aquí y ahora Los llamados asuntos inconclusos…pareciera que se instauran como algo a trabajar, revisar, confrontar en el ámbito de la pareja. En esta modalidad de convivencia 24x7, estar juntos todo el día; o bien, estar en casas separadas en relaciones a distancia, pone delante de las parejas temas no resueltos que pasaron allá y entonces, y sin embargo, se hacen figura en el aquí y ahora. Los cambios de rutina han y están dejando secuelas, no solo en lo emocional, sino también en forma experiencial en cada uno

de los miembros. Los lleva a hablar de algo no resuelto, como si este fuera el momento de dar un cierre a esos eventos que no se atendieron en su momento; por nombrar algunos temas que podrían ser motivo de consulta: infidelidades, duelos no elaborados, mentiras, secretos de familia, violencia, toma de decisiones. El querer, por una de las partes, hablar sobre esto, no implica que la otra persona lo acepte, llevando a una respuesta no satisfactoria a la que tiene esa necesidad. Un ejemplo más sería la indecisión de una convivencia por una de las partes y la no


aceptación de la otra, también llevando a obtener una respuesta insatisfactoria, creando una comunicación poco asertiva, he llegado a escuchar frases como: “No nos fuimos a vivir juntos en esta cuarentena por qué estar juntos 24x7…pesa” Temas como secretos y mentiras, se podrían unir, por ejemplo, con una infidelidad que quedó al descubierto en algún momento o por este confinamiento. Este contexto, el del encierro, ha hecho tomar decisiones de todo tipo en las parejas, por dar un dato no menor, solo en la Ciudad de Buenos Aires, en 2020 hubo, por primera vez, más divorcios que casamientos, 4480 divorcios sobre 3861 casamientos. Estos asuntos se podría decir, en forma metafórica, que causan una “indigestión” en el organismo pareja, generando a la vez un estancamiento, afectando el libre funcionamiento y el uso de energía en tratar de concluir la experiencia pasada, desatendiendo las situaciones que se producen en el aquí y ahora.

Las parejas necesitan encontrar un equilibrio que les permita volver a tener una homeostasis y así poder resolver el emergente. Ir más allá del darse cuenta, conduce a los integrantes de una pareja a preguntarse si se hacen cargo de esto que les pasa; hay situaciones que también sirven para reconocer que no es momento de abrirlos, pareciera que en algunos casos prima la zona de confort. Con esto no quiero decir que todas las parejas se vean en una crisis dentro de este contexto, así también hay lugar para fortalecer el vínculo, reencontrarse con ese otro ser con el que se comparte y se convive y, que la nueva realidad no le permite proyectar, en algunos casos no solo la pareja se ve afectada, también lo hace su entorno, hijos, pares… Estos temas que nombre con anterioridad (infidelidades, duelos, etc.) también son, en algunos casos, parte de la historia de una persona y su pareja, según mi entender, sería más que la suma de las partes. Cada ser, dentro de este contexto reacciona emocionalmente a lo que le toca experimentar, algunos con temas más resueltos que otros, sin embargo, no deja de ser su marco de referencia emocional o experimental

De lo general a lo particular Con esto no quiero decir que los asuntos inconclusos sean exclusivos de las parejas que vienen al encuentro, también aparecen en los procesos individuales, en los cuales estos mismos asuntos parecieran no poder ser puestos en palabras por los consultantes para con sus parejas, llevando a ser esto también un motivo de consulta, en nuestro rol podemos llegar a escuchar frases como: “todo bien en el nuevo puesto del trabajo, pero con mi pareja me pasa que este tema no lo puedo hablar” Se llega a un punto dentro del proceso de parejas que una vez formado el vínculo y

con la atmosfera oportuna una de las partes abre un tema que no había sido trabajado con anterioridad o que la otra parte no sabía de la necesidad del otro, podemos así estar asistiendo a necesidades latentes y una falla en la comunicación de ambos. Como mencioné antes, el consultante que personaliza los asuntos inconclusos con su pareja también es confrontado con lo que le pasa al tener temas sin resolver, para ambas partes se crea una tensión, sin embargo, el cierre pareciera ser particular para cada uno, luchando por completar la figura, acorde a la necesidad individual.


La resolución de asuntos inconclusos puede ser también el significado que se le encuentra al reconocimiento de la sensación y el significado de contacto con la otra persona, es un aprendizaje también, se

cierran aquellos asuntos que le quitan energía física y emocional al vinculo de la pareja y así poder enfocarse en resolver nuevas situaciones que se presentan en el aquí y ahora

En burbujas Si hay algo que también ha modificado la convivencia 24x7, es la forma de “tratarse” como parejas, los modos y las formas, que a la vez también afecta al resto del sistema y de los subsistemas. Así como en la sociedad ha aparecido un nuevo término que se aplica a espacios educativos, laborales, también se podría decir que las parejas arman su propia “burbuja”, donde se aplica el distanciamiento social con otras “burbujas”. Dentro de este sistema/burbuja de la pareja también hay situaciones que vienen a modificar los hábitos, pareciera que un simple cambio puede llegar a alterar el orden, algo que afecta al organismo. Dentro de los espacios de trabajo se generan ciertos cambios, ¿qué pasa cuando uno de los miembros de la pareja sale a trabajar y el otro queda en casa?, o al revés, si el trabajo es en casa, lo que se llama home office, y la otra parte está a la espera de retomar la actividad o está sin trabajo, también hay que resignificar la manera de vincularse. Así también, se ha visto afectado en las parejas que tienen hijos, cambios de horarios, empleo de tiempo en clases virtuales, la supervisión por parte de algún

miembro de la familia en algunas cosas, sumado a etapas de bimodalidad, otro cambio… Todos estos cambios han alterado el espacio relacional de cada subsistema dentro del sistema principal, ¡toda una prueba para la pareja! Esa energía vital que forman dos personas que están juntas se ve amenazada por lo que pareciera una disfuncionalidad en la pareja ha encontrado en su relación, llevándolos, en algunos casos, un verdadero desgaste y desencuentro. No es de extrañar que tanto estos temas como los asuntos inconclusos sean hoy motivos de consulta, disponiendo a los Counselors poder acompañar y ¡por qué no!, a aprehender también como es la configuración en los límites de una pareja en los procesos virtuales y en algunos casos presenciales, así poder también poder observar los que aparecen individualmente, todo este proceso de acompañar permitirá ver a la pareja como una tercera entidad, y así también tener observaciones fenomenológicas que muestren, al profesional en su tarea, un mejor despliegue. Acompañamos a personas…en distintas etapas de su vida, esta es una más, para los consultantes y los Counselors.


Por la Clr. Fabiana Segura

SUICIDIO

Un proceso


Existen numerosos mitos acerca del suicidio y de las ideaciones suicidas. El más popular, tal vez, sea que el que afirma que quien lo anuncia lo hace para llamar la atención o quien tiene intentos suicidas es porque tiene algún trastorno mental. Esto es porque tendemos a juzgar, despreciar o ignorar aquellas cosas que no entendemos o no podemos, al menos, darnos una explicación que a nuestra lógica personal nos “cierre” para darle sentido. Saber acerca del tema nos brinda una herramienta invaluable a la hora de atender a una persona con ideas suicidas, o a un familiar o amigo allegado a una persona que murió por suicidio.


La realidad es que el suicidio existe, desde comienzos de la humanidad, pero fue idealizado o juzgado, y hasta en algunas oportunidades, condenado. En los últimos años, se escudaron englobándolo como enfermedad psicológica. El tema es muy amplio y hay muchas aristas, pero lo que siempre tenemos que tener presente es:

.

El suicidio es una decisión personal única e

irreversible.

.

Todos podemos prevenir un suicidio o al

menos, y no es poca cosa, un pensamiento suicida o una ideación.

. El suicida, o

quien tiene ideaciones

suicidas, es alguien que sufre y, por lo tanto, tenemos que respetarlo siempre, tanto en sus pensamientos, sentimientos y acciones. No importa si va a llegar o no al acto. El pensamiento es muestra de sufrimiento, y la muerte es el único posible camino para esa persona para calmar ese sufrimiento extremo. Lo que por sobre todo no tenemos que hacer es ignorar lo que nos dice o sabemos que piensa.

VAMOS A DEFINIR ALGUNOS TÉRMINOS PRIMERO Suicidio es el acto concreto único e irreversible- una acción, por la cual, se termina con la propia vida por medios elegidos por la persona.Intento de suicidio es el acto fallido del objetivo, ya sea por ignorancia en el método, error, omisión, o por distintas causales, dentro de las cuales también se puede encontrar la búsqueda de cambio de su entorno. Pero acá, lo que nunca tenemos que olvidar es que esa persona, aun habiendo fallado por la razón que sea, lo intentó. Entonces, puede o no repetirse pero, siempre, es un alerta de sufrimiento y una oportunidad para cambiar

su destino si se detecta y se actúa sobre las causas de su sufrimiento que lo llevaron a el. Pensamiento o ideaciones suicidas es el paso previo donde se encuentra como una solución o camino para salir del sufrimiento la muerte o “desaparecer”. El suicidio es multicausal; es decir, no existe un único motivo por lo que se llega, aunque a veces puede ser un tema el detonador de un estado de crisis. El acto suicida es el final de un proceso suicida; es decir, desde una crisis al pensamiento o ideación suicida, hay un proceso hasta llegar al acto. Este proceso puede durar años, puede durar meses, puede ser horas o minutos.

“En la actualidad muchas muertes por suicidio se las encubre bajo sobredosis o accidente” ¿Qué es el proceso suicida? La vida está repleta de hechos cotidianos que afrontarnos con mayor o menor dificultad. A veces, nos encontramos con cuestiones discutibles para nosotros mismos y que hay que resolver o, al menos, buscarle una explicación o una alternativa; cuando no se halla una salida se transforma en problema. Cuando los problemas se suman, se incrementan o para las alternativas que aparecen no se está dispuesto a afrontarlas, por las consecuencias que aparejan, el problema pasa a ser conflicto. A lo largo de la vida, se aprende a convivir con distintos problemas y conflictos aceptándolos o transitándolos. Cuando estos conflictos pasan a ser parte del yo, deteniéndolo en su desarrollo personal y, encegueciendo posibles alternativas o imposibilitando resolver la situación, decimos que está en crisis. Una crisis remite a la necesidad de un cambio en la organización. Puede ser provocada por cambios bruscos o situaciones


crónicas que requiere transformaciones en los procesos organizacionales. La persona afectada, si no resuelve su crisis, y no puede tomar distancia de su sufrimiento; es cuando puede o no, aparecer el proceso suicida. Cuando piensa que es él quien debe alejarse. Este es el principio donde verbaliza ideas que anticipan su decisión, que pueden ser productivas, de estancamiento o polarizarse. Este es el punto de inflexión, ya que una fantasía permanente de huida, el sentimiento de soledad y de que no existe solución ni comprensión para su sufrimiento, transforma el deseo de alejamiento en la idea de desaparecer, de matarse. La reiteración de estos pensamientos, hacen que se vuelvan la única salida y se transforma en solución. Allí, se piensa en cómo, cuándo y dónde, según la personalidad previa y la situación personal. ¿El suicidio, acaso es una muerte distinta a las “otras” muertes posibles? La distinción radica, no en la muerte, sino en el “cómo” se llegó. Es una muerte por decisión propia del suicida y no ajena (causada por otro), ni aleatoria (accidente, por ejemplo) ni natural (por enfermedad o edad). ¿A quién defendemos cuando le buscamos una explicación? El hecho de que sea una decisión personal, en un momento único de la persona, hace que nos ubique fuera de la situación, y sabemos que cuando no tenemos una respuesta al “por qué” murió de esa forma, evitamos el tema o etiquetamos al suicida. Muchas veces, es el miedo a no saber cómo actuar, o el descubrimiento de la culpa de sentir que teníamos la posibilidad de evitarlo o al menos preverlo - y no lo hicimos (idea completamente errónea, ya que la decisión del acto es, por demás, personal). Una idea suicida es individual sí, pero ¿también íntima? Si tenemos cuenta, que quien tiene una idea suicida, es alguien que “sufre”, no importa si va a llegar o no al acto, siempre da señales de su sufrimiento o de su idea de desaparición. Distinto es el acto suicida que, en la mayoría

de los casos, es un momento íntimo; principalmente, para no ser retenido ni juzgado, o por vergüenza de no saber resolver su problema de otra forma. LAS PREGUNTAS DE UN COUNSELOR ¿Puede haber pensamientos suicidas en una persona “sana”? Nadie está exento de pasar por este proceso, todo depende de las circunstancia, el entorno, pero sobre todo, de las herramientas personales que tiene cada ser para afrontar las crisis. Es cierto que determinadas trastornos psicológicos, hacen que el potencial suicida se incremente, al igual que el consumo de sustancias; pero no es menos cierto que son una de las condiciones necesarias para un pensamiento o acto suicida. ¿Estoy frente a una persona en crisis “diferente” a las demás? NO, estoy frente a una persona en crisis con pensamientos diferentes a los demás. ¿Puedo ver a la persona y no al problema, una vez que está puesta en palabras. ¿Qué hago con lo que podría pasarme? Lo importante, ante una ideación suicida, es no asustarse por las posibles consecuencias, ni dejar de indagar qué significa, para esa persona, “desaparecer”. Qué es lo que le gustaría hacer o, qué es lo que necesita y no tiene, para poder seguir. Solo esa persona puede responder qué es lo que quiere, si morir, o no vivir más así. Y es bueno preguntarlo con firmeza y respeto. Sin miedo a las palabras. No por hablar del tema, la idea se potenciara. ¿Puedo aceptar, positiva e incondicionalmente, esta experiencia en la totalización de la persona? Acá está el punto de nuestra expertiz, saquemos el peso a las palabras. No etiquetemos. No es el problema la ideación suicida, ese es un pensamiento. No es el problema el intento de suicidio, esa es una acción. Si podemos sacar nuestra carga emocional y tomar esta experiencia como propia del individuo, no difiere de otras


experiencias donde respetamos las acciones, la decisión o pensamiento del consultante y, por lo tanto, aceptaremos a la persona en un todo.

Escuchar, acompañar, comprender, recibir ¿es prevención? Y “la pregunta” es: ¿Alcanza? La pregunta es: -“¿Qué te hizo llegar a este pensamiento?” Porque lo importante es el por qué o para qué llega a ese pensamiento donde tenemos que poner el foco. Escuchar, comprender y acompañar ese proceso que hizo la persona para llegar a ese punto, ayuda a recapacitar, a sacar el peso, a pensar otras alternativas, a poder encontrar sentido a la vida y por sobre todo, poder acompañarlo a ver un futuro diferente a su realidad actual. Nunca sabremos si alcanza o no, solo sabemos que la persona al expresar lo que siente y sentirse comprendido, tiene la posibilidad de ver otras alternativas. ¿Qué tiene de “aquí y ahora” la idea suicida? Recordemos que el suicidio es multicausal. No hay una razón única por cual se llega. Como dijimos anteriormente, no es un momento puntual es un proceso. Como Counselors, lo que tenemos que tener en cuenta, es en qué punto del proceso está, aquí y ahora. Es decir, si es una idea “calmadora”, o si es una decisión tomada, donde solo falta el cuándo y el cómo hacerlo. El counselor tiene un rol preventivo per se; a partir de escuchar “suicidio”, ¿tiene que tomar un rol protector? ¿Se sugiere, desde tu experiencia, protocolo alguno o medidas a tomar? No hay que protegerlo de sí mismo, si no buscar la forma de responsabilizarlo de sus acciones o sus pensamientos, y acompañarlo a que él mismo descubra que hay otras salidas. Llevarlo a pensamientos futuros, proyectos, objetivos pero, principalmente, que descubra qué necesita y cómo buscarlo o cómo pedir esa ayuda necesaria. Cuando el pensamiento está muy arraigado o hay riesgo inminente, lo recomendable es que pueda contar con una red de contención; que

pueda pedir siempre ayuda antes de cometer algún acto autodestructivo, o antes que el estado de angustia lo lleve a un estado extremo. Indagar amigos, familiares, personas de confianza o líneas de ayuda. ¿Se escucha esta tendencia sin palabras mediantes? Siempre, a veces por cambios de actitud, cambios de estilo de vida, palabras repetitivas como morir, desparecer, dormir y no despertar más, estarían mejor sin mí. La palabra suicidio es tabú, socialmente en todo el mundo y, como toda palabra tabú, si se descubre se toma conciencia. A veces, las mismas personas con ideaciones no lo nombran, lo reemplazan por pensamientos feos, o negros, o algo que nadie entenderá. ¿Cómo interjuegan el fenómeno humano, la tendencia actualizante y la existencia? El suicidio es siempre un misterio insondable, personal y, entonces, respetable. El pensamiento es muestra de sufrimiento, y el suicidio solo un posible camino a la calma de ese sufrimiento. Siempre existe la tendencia actualizante donde la persona busca mejorar su vivir, solo que no encuentra la forma o, en la muerte, la única que le resulta óptima.

“La responsabilidad social es tener en cuenta al otro, es saber que está sufriendo,y respetar que no puede, no sabe o no quiere pensar de otra forma, Sin ayuda” ¿Es la existencia lo que pierde sentido o propósito? Depende de la persona, no podemos generalizar. A veces, se desconoce el propósito propio y por eso es importante hacérselo ver, como así también, el sentido de su vivir como único y especial. Otras veces, son los problemas, o su realidad, los que lo llevan a un grado de sufrimiento extremo y en su imaginario esta situación nunca cambiara.


La lista de mitos sobre el suicidio y el suicida es larguísima… ¿qué hay que deconstruir respecto a esto? Lo primero que hay que hacer, y todos podemos hacer, es hablar del tema. Aprender que no importa el pensamiento ni el acto en sí mismo, sino que es una persona que sufre y que todos podemos evitarlo si podemos acompañarlo a calmar ese sufrimiento y recuperar el sentido de su vida. Intentar, que esa persona, recupere su concepto de ser único, con todos sus defectos pero, por sobre todo, sus virtudes, valores y capacidades. Revalorizar la importancia que tiene su vida en el mundo.

“El acto suicida es el final de un proceso suicida; es decir, desde una crisis al pensamiento o ideación suicida, hay un proceso hasta llegar al acto”

LA COMUNIDAD Y SU RESPONSABILIDAD ¿Todos podemos prevenir el suicidio? Nadie es lo suficientemente omnipotente para evitarlo, pero nadie es impotente ante la situación. No es categórico, pero sí todos somos agentes posibles preventores de suicidio. Hablemos de factores de riesgo: la familia, la cultura, la sociedad, los entornos, la salud. El factor de riesgo que más tenemos que tener en cuenta, es la intención de la persona de quitarse la vida. El resto son circunstancia;, lo importante es la habilidad de la persona para salir de su crisis. ¿Subestimamos “el intento”? Le decimos “llamada de atención”, “enfermedad”, “cobardía”, y más depreciaciones. ¿Qué subyace en esta lectura de un acontecimiento tan límite?

Esto es porque tendemos a juzgar, despreciar o ignorar aquellas cosas que no entendemos o no podemos, al menos, darnos una explicación que a nuestra lógica personal nos “cierre” para darle sentido. Sentimos que “no formamos parte de esa decisión” y eso, hace que intentemos ignorarlo, etiquetarlo o frustrarnos. Muchos de nosotros creemos que cuando la decisión está tomada es inevitable ¿es realmente así? Es un proceso, desde una idea suicida, el planeamiento del cómo y el cuándo hasta el acto, pueden pasar minutos, horas, días o nunca ocurrir. Existen líneas telefónicas por ejemplo; porque está comprobado que, en muchas oportunidades, ante un intento de suicidio en curso, puede evitarse con escucharlo, que sienta que lo que dice me importa, entiendo lo que le pasa, le escucho, no está solo, y la situación puede revertirse, en la mayoría de los casos. No indica que no lo vuelva a intentar, lo que indica es que, al menos, ese suicidio, fue evitado. Consumos problemáticos y adicciones, psicopatologías severas, discriminación y violencia, bullying, fracasos vinculares, frustraciones intolerables, duelos y pérdidas, eventos traumáticos, y podría seguir… ¿Explican algo? ¿Cuánto hay de responsabilidad social en todo esto? Es cierto que la psiquis tiene mucho que ver en todo el tema, pero no es el único motivo. Aunque no todos los suicidas tienen patología mental ni adicciones, es cierto que estos factores aumentan el riesgo potencial de suicidio. Principalmente, aquellas que alteran los sentidos y el discernimiento. La responsabilidad social es tener en cuenta al otro, es saber que está sufriendo, y respetar que no puede, no sabe o no quiere pensar de otra forma, sin ayuda. ¿La ley castiga el intento de suicidio? En la actualidad no tanto, existían religiones donde se enterraban los cuerpos de cara a la pared para castigar al suicida, o hasta se han perdido fortunas que no pasaron a sus herederos por ser considerado un acto de


asesinato a sí mismo. También, se ha llegado a no ser atendido en clínicas, si se sabe que el daño físico fue causado por un intento de suicidio. Lo cierto, es que no existe castigo legal pero aún, si existe castigo o discriminación social. En la actualidad muchas muertes por suicidio se las encubre bajo sobredosis o accidente.

“Escuchar, comprender y acompañar ese proceso que hizo la persona para llegar a ese punto, ayuda a recapacitar, a sacar el peso, a pensar otras alternativas, a poder encontrar sentido a la viday por sobre todo, poder acompañarlo a ver un futuro diferentea su realidad actual”. En Argentina ¿existe una Organización o Institución de asistencia? Si. Existe hace 54 años una Institución formada por voluntarios que asiste telefónicamente, en forma anónima, confidencial y gratuita es el Centro de Asistencia al Suicida, Asociación Civil, más conocida por sus siglas C.A.S. Posee la línea 135, gratuita en Capital Federal y Provincia de Buenos Aires, y los teléfonos: (011) 5275-1135 o 0800 345 1435 gratuito para los que llaman desde el interior del país. También dictan cursos, charlas y brinda mucha información en su sitio web: www.asistenciaalsuicida.org.ar

pensamientos, no siempre en el momento oportuno o de la forma adecuada, pero si logramos respetar, sin negar o desconsiderar los derechos de los demás, podremos colaborar en prevenir un suicidio. Como Counselor, solo me resta decir que no temamos a abordar el tema en el momento que se nos presente. Es cierto que, a veces, supera nuestras incumbencias el por qué y/o para qué llego a ese punto, pero el aquí y ahora, es el momento ideal para que vea que está estancado y que tiene que moverse, por que la muerte solo lo entierra y no lo hace salir. Hay veces que es cierto que no estamos capacitados para abordar las causas por los cuales una persona llega a la conclusión de que es la muerte es su única salida. Lo importante es que tengamos presente que, en cierto punto, tal vez tengamos que derivar a una terapia, en el caso de que veamos que subyace en la ideación suicida, una posible patología y/o sea necesaria una medicación para regular determinados estados anímicos que, por sí solo, no puede controlar o porque, la complejidad de la historia vivida, supera nuestros alcances. Pero nunca evitar el tema, es un momento muy apropia, ya sea para sacarlo de ese estado, o para ser un puente, donde se aprenda la capacidad de confiar, de la escucha o de sacarle el peso al término “locura”.

¿Podemos hablar de esperanzas para terminar? Todos podemos intentar prevenir un suicidio o, al menos, desarmar un pensamiento suicida o una ideación de muerte con el solo hecho de escuchar, acompañar. Tenemos una habilidad natural y personal que nos permite expresar sentimientos, opiniones y

Clr. Fabiana Segura Consultora Psicológica fcsegura67@gmail.com


Por el Clr. Ezequiel Pérez

NECESITAMOS VER A LA PERSONA Consumos Problemáticos y Adicciones

“Hay que construir

una relación de ayuda que promocione las capacidades de la persona hacia un desarrollo tal, que le permita construir nuevos modos de relacionarse desde la independencia responsabilizada”.


En el recorrido de mi experiencia en relaciones de ayuda en el campo de los consumos indebidos de sustancias, o también podría decir consumos problemáticos de sustancias y adicciones, he pasado por diferentes etapas en un camino de formación y especialización. Esto me ha permitido aprender, revisar, repensar, replantear, reflexionar, y hasta redireccionar mis modos de ayuda, mis metodologías si se quiere, pero especialmente mi modo de estar y vincularme con las personas, y familiares. Llevo más de 25 años trabajando en diferentes ámbitos, en relaciones de ayuda con personas y familias con consumos problemáticos y adicciones. En este camino, fui actualizando mi modo de relación de ayuda, y en aspectos que entiendo fundamentales en el proceso de cambio y transformación de alguien que ha tenido o tiene dificultades con sustancias psicoactivas. Me gustaría que el lector sienta la necesidad de replantearse sus conocimientos y saberes al respecto. Existe una evidente necesidad de reconocer que la mayoría de los abordajes y, especialmente, sus posicionamientos teóricos, no llegan a ser suficientes, y en algunos casos, creo que son funcionales a las adicciones. Entiendo que esto puede generar incomodidad, sin embargo, espero que sea de ayuda y facilitación. Pensar más en la persona y VERLA más, porque además de muchos problemas, tal vez, tiene un consumo problemático o una adicción. Una de las frases que suelo escuchar de profesionales es: “Ah, pero si tiene una adicción ya es otro tema, necesita otra ayuda, es otra cosa”, o: -“Hay que derivarlo urgente”. Claro, la sola información del uso de sustancias, o la posibilidad de la existencia de una adicción, pareciera que corre la mirada de la persona y automáticamente, casi sin percibirlo, hasta el lenguaje corporal comienza a modificarse, se toma otra postura. Algunos profesionales que han sentido y percibido la complejidad de las adicciones, tanto en el período de sus formaciones, experiencias personales o profesionales refieren “que no tiene sentido trabajar en el área de las adicciones, que es una “patología” sin cura, que la persona nunca dejará de ser adicta, que la adicción es crónica y siempre vuelven a lo mismo”. Cuando alguien en su consultorio, en alguna Organización e Institución, recibe la información

de que alguien está consumiendo sustancias, es decir “drogas” - y peor aún si son “ilegales” - algo cambia, algo sucede, entre ese profesional y el consultante. De pronto, casi sin poder verlo venir, irrumpe, y en muchos casos bruscamente, un obstáculo se interpone en la relación. -“Ok, tienes toda mi atención, aquí estoy, preparado para lo que se venga”. -“Estoy listo para lo tremendo que será ayudar a este consultante. -“Para eso me capacite y forme tantos años”. -“Bueno vamos, desenfundá amigo”. “Tengo que pensar en los pasos importantes para que esta persona deje de drogarse”. Mientras tanto, el consultante continúa contando lo que para él hoy es su problema, que es la relación con sus padres, con su pareja, su rendimiento laboral, su sensación de estancamiento personal, etc. El Consultor, continúa desplegando estrategias en su mente de cómo afrontar semejante “patología”, entonces, casi en modo fórmula 1, las ideas van y vienen, los libros leídos pasan de página en página. -“Ah, recuerdo a ese profesional cuando dijo en su cátedra que “los adictos” son mentirosos, manipuladores, que proyectan todo en los demás, no son responsables, y un Counselor no puede atender adictos” Cuando aparece con tanta potencia una idea, una teoría, o algunos estudios que sostienen una cierta relación patológica en la persona que consume sustancias, la relación del profesional, o de los equipos terapéuticos, dejan de ver a la persona y centran su atención en la supuesta patología y sus implicancias.

“La persona no es una adicción, tampoco es la adicción, la persona es un todo, y es fundamental poder acercarnos a ella desde una perspectiva humanista centrada en la persona y no en la sustancia o sus consecuencias”. En esta época estamos viendo cómo las organizaciones mundiales, las organizaciones gubernamentales especializadas en consumo de sustancias y adicciones, cada vez se corren más de poner el foco en la sustancia, en la supuesta patología o el intento darle peso de personalidad a la patología. Esto tiene una razón, y es que ha aumentado el consumo de sustancias en todo el mundo y en todas las franjas etarias. También el reconocimiento de que existen muchos modos y


tipos de consumos; es decir, hay variadas relaciones con las sustancias psicoactivas y que todas tienen su complejidad de factores y variables. Necesitamos ver a la persona, sentir a la persona en su angustia, en su problema, en su dificultad, en sus valores, en su realidad contextual, en su entorno, en su historia. La necesidad de un acompañamiento holístico y especifico. Una amplificación de los programas de prevención basados en una mirada promotora del desarrollo personal. Es imprescindible reconocer la complejidad desde una relación que se construye desde su entorno familiar o primario, su comunidad más cercana, la sociedad, las instituciones y la simbolización de ellas, las normas que se naturalizan reproduciendo representaciones de ciertas experiencias, así surge o se construye al “adicto”. La mirada que propongo, es la que promueve un encuentro entre personas, contraria a la que promueve el encuentro entre Profesional-Adicto, desde una perspectiva humanista y desde el Enfoque Centrado en la Persona (Carl Rogers). La persona no es una adicción, tampoco es la adicción, la persona es un todo, y es fundamental poder acercarnos a ella desde una perspectiva humanista centrada en la persona y no en la sustancia o sus consecuencias. Tener conocimiento de las consecuencias de los consumos de sustancias es indispensable, especialmente si vamos a trabajar en este campo; comprender el funcionamiento de las personas en el proceso de una adicción, en caso de que así sea, es necesario. Por supuesto que el consumo de sustancias genera cambios en las personas, y en muchos casos generan trastornos, aún así, incluso si llegara a desarrollar una adicción crónica - que no es en todos los casos - nunca deja de ser persona, con derechos, con sentimientos, con existencia, que piensa, que se afecta, que en la mayoría de los casos sabe de su dificultad, aunque no dimensiona o le cuesta reconocerla. En muchos casos, saben muy bien el daño que se están causando y sin embargo no están pudiendo dejar de hacérselo y, a su vez, causan daños a terceros. Las personas que tiene capacidades y fortalezas, además de otros aspectos que se denominan “disfuncionales” o “negativos”, suelen sostener

las conductas de relaciones improductivas o que atentan contra el desarrollo personal integral. Estoy convencido que el uso de los términos, de las palabras tienen mucha significancia en cómo vemos, qué entendemos, cómo interpretamos, desde dónde hacemos el proceso de comprensión de ciertas ideas. Por eso, mi desafío es que nos animemos a repensar ciertas terminologías que la mayoría de las personas asimilan como verdades, como normales y hasta naturales, sin embargo, no lo son, están basadas en ciertas experiencias, posicionamientos de perspectivas teóricas, y conclusiones con pocas comprobaciones científicas.

“Existe una experiencia común en la mayoría de las personas que llegan a tener una adicción, es la de dejar de sentirse personas, en algunos casos no tienen registro de haberse sentido persona alguna vez” El término “adicto” es una creación, una identificación, ni siquiera existe ese término en el DSM5, es una construcción más social, y me animaría a proponer que podamos revisar estos términos que construyen modos de relacionarnos, modos de vincularnos, especialmente desde los roles de profesionales de ayuda. “El adicto” tiene una simbología pesada, poderosa, limitante y condicionante. Ver un adicto es pensar en una persona definida, es un seudo-diagnóstico; el término define una personalidad, un modo de ser, un condicionamiento conductual, se será siempre adicto. Se relaciona con lo punitivo, con el diagnóstico crónico, y por cierto, con una mirada de enfermo y no de enfermedad, desde una concepción prejuiciosa actitudinal. Toda esta simbolización del adicto, aunque pueda controlar su adicción, tampoco deja de ser “el adicto”;

“La persona necesita volver a vincularse con sí mismo, pudiendo reconectarse con muchos aspectos personales rechazados o demonizados”


“Hay que pensar más en la persona y VERLA más, porque además de muchos problemas, tal vez, tiene un consumo problemático o una adicción”. ahora, aunque “recuperado”, tal vez en algunos casos “ex – adicto”, pero siempre adicto. Entonces, siempre manipulador, mentiroso, ocultador, poco confiable, impulsivo, incapaz de tolerar la frustración, ¡siempre un fenómeno! Hasta la misma persona, muchas veces, adopta esa postura de presentarse como un adicto o exadicto, incluso en muchos casos siente la presión de tener que contar su problema de ser un ex y su historia en nuevas relaciones, intuyo, para sentirse comprendido, porque a “los adictos” hay que entenderlos. Pero socialmente se los entiende como adictos, no como cualquier otra persona, algo cambia en los encuentros para mejor o peor, cuando alguien conoce la historia del “adicto”. Las personas pueden desarrollar un consumo problemático sin llegar a una adicción crónica, y si así fuera, son PERSONAS con una o varias adicciones. La perspectiva en la que se posicione el profesional ante el otro determinará qué tipo de encuentro se iniciará y, tal vez, se sostendrá a lo largo del proceso. Si es de persona-persona, entonces se construirá un vínculo, posiblemente una de ellas tiene una adicción, pero el encuentro es entre personas. Es importante esta revisión, porque si existe una experiencia común en la mayoría de las personas que llegan a tener una adicción, es la de dejar de sentirse personas, en algunos casos no tienen registro de haberse sentido persona alguna vez. Conocemos las afecciones que causan el consumo indebido y las adicciones a sustancias psicoactivas, si desde nuestra responsabilidad profesional continuamos creando relaciones con “adictos”, como si a éstos hay que hacerles algo diferente para que se “recuperen”; me refiero a que en muchos casos se utilizan metodologías como someterlos, condicionarlos en sus libertades, sojuzgarlos, confrontarlos con violencia para que aprendan a respetar la autoridad, incluso manipularlos para que dejen de consumir, para que hagan lo que se les indica; entonces, este tipo

de vínculos Profesional-Adicto consolidan y afirman los modos vinculares adictivos, no facilitan el cambio, por el contrario, son funcionales al desarrollo de las adicciones o a la producción de los adictos. Sí entendemos que el que está delante nuestro es alguien manipulador, mentiroso, negador - como si fuera voluntario -, estafador, delincuente, psicópata, con falta de empatía - solo por nombrar algunas características que suelen definir como adicto - no sería incoherente que el profesional se posicione desde una perspectiva defensiva, desde un lugar que intente lograr, mantener, y ejercer poder. Cuando una persona llega a un profesional, sea Psicólogo, Psiquiatra, Counselor, o a una Institución Especializada en Adicciones, en la mayoría de los casos, ya intentó otros procesos o tratamientos, es decir, llega con otras experiencias que le han dejado algún tipo de información y conclusión acerca de él mismo, de los diferentes dispositivos, y profesionales. Algunos cuentan lo mal que la pasaron, que no les funcionó, no se sintieron entendidos o respetados, llegan sin esperanzas de cambio porque siempre serán adictos. Otros, negando su realidad de consumo, y se encuentran con alguien profesional les dice que es un adicto, es peor que el problema que están evidenciando, ese miedo, esa presión de encontrarse siendo “eso”, que tal vez descalificaron en sus valores en algún momento, es tan amenazante que se convierte en un obstáculo al momento de comprender la seriedad de su dificultad y el modo de estar haciéndose daño.

“Las personas pueden desarrollar un consumo problemático sin llegar a una adicción crónica, y si así fuera, son PERSONAS con una o varias adicciones” Convertirnos en personas confiables para el otro, el consultante, que llega en algún estado de conflicto, angustia, desesperanza, e incluso de varios intentos frustrados, es un desafío. Necesitamos ser profesionales, con un alto nivel de autenticidad al relacionarnos, con un profundo grado de empatía en la escucha, y un evidente proceso de congruencia al momento de


ayudar en lo que la persona quiere, necesita y está dispuesta a hacer algo para mejorar su calidad de vida, su modo de estar y ser. Existe tanta necesidad que, cuando una persona llega a pedir ayuda, es una señal de que ya está realizando un movimiento importante; nuestra valoración adecuada puede ser vital después de tanto recorrido, tanta confusión, temor, y muchas experiencias dolorosas. Ser recibido, sin previos conceptos de quién es – preconceptos -, de qué se supone que hace, simplemente, ser recibido y escuchado con verdadera atención, validando su experiencia, aunque suene incongruente, sin estar a la defensiva, creando y facilitando una relación simétrica, puede promover la motivación al cambio que ya está en la persona. Cuando creemos saber a quién recibimos solo porque tiene una adicción, entonces, ya sabemos cómo es esa persona y las cosas que hace, tendremos pensado previamente una estrategia para ese supuesto diagnóstico simbólico, pero no estaremos centrados en ¿cómo poder ser para que el otro me perciba como una persona digna de fe, coherente y segura, en sentido profundo? (Carl Rogers “El proceso de convertirse en Persona”)

“Necesitamos ver a la persona, sentir a la persona en su angustia, en su problema, en su dificultad, en sus valores, en su realidad contextual, en su entorno, en su historia” Reconocer una o varias adicciones no es igual a ser adicto, no, definitivamente, ser adicto es una experiencia relacional condicionante y determinista. Necesita ser vista como una persona, que tiene problemas, modos de relacionarse con el mundo, con los otros, con las personas significantes, con las sustancias, con su trabajo, consigo mismo, con muchas cosas que desconocemos y necesitamos ir conociendo a medida que construimos un vínculo de aceptación positiva incondicional, sin confundir esto con no reconocer sus dificultades, sino todo lo contrario, reconocer sus consecuencias, sus afecciones, sus problemas y también sus habilidades, sus

fortalezas, capacidades, recursos, y valores como persona. Una de las cuestiones que más se trabaja en el proceso de una persona con adicciones, es cómo se vincula, cómo se relaciona consigo mismo, con los otros, y con el mundo. Nosotros vamos a promocionar un espacio vincular desde la autenticidad y congruencia que serán fundamentales para crear un espacio educativo vinculante. La persona necesita volver a vincularse con sí mismo, pudiendo reconectarse con muchos aspectos personales rechazados o demonizados. Caminar, acompañado, su proceso de integración, después de haberse desintegrado en aspectos fundamentales durante años, es posible desde un encuentro en que se pueda sentir la posibilidad de considerarse positivamente en aquellas características personales que se ha desaprobado o considerado condicionalmente o no positivamente, y que es posible cambiar. “Cuando me siento recibido, escuchado con verdadero interés y atención, siento que allí es un lugar seguro para poder abrirme y dejarme ayudar, que independientemente de si me entiende, existe un profesional que me mostrará consideración, será humano y me ayudará a sentirme persona con su modo de estar y con su saber. Sí, ese es un lugar seguro para dejarme ayudar, es un lugar donde se siente el encuentro entre personas, y una de esas personas soy yo, y no un adicto”

Clr. Ezequiel Pérez Consultoría en Consumos Problemáticos ezequi.perez@gmail.com


Por la Clr. Analía Cordero

JULIO BARNES COMPROMISO, CREATIVIDAD Y CRECIMIENTO


“Entonces, ese otro, también soy yo”


Julio, bienvenido ¿Querés contarme cómo ha sido este recorrido de compromiso, creatividad y crecimiento en el que te venís desplegando? Es, realmente, como contar un cuento lindo de contar. El primer esbozo de mi deseo, de mi sueño, que es difundir el Counseling, a partir del enorme valor que tiene, nace con el animarme a escribir “El Artesano de Vidas”. Lo que me pasaba, en ese entonces, era que había leído todos los libros de Andrés Sánchez Bodas; cuando fui a visitarlo para contarle el proyecto del libro – que fue cuando me ofrece escribir el prólogo – yo sentía – y en algún punto, lo sigo sintiendo – es que con todo lo que había escrito Andrés, más la base previa de Rogers, estaba todo escrito. Esto me sigue pasando hoy en día, porque si hay algo que yo admiro de Andrés es esa capacidad, es ese ir creciendo, que profundiza y le aporta una mirada filosófica y, en definitiva es la base de nuestra profesión. De todos modos, yo tenía mi idea, mi ilusión de escribir un libro y, decidí hacerlo como una historia. No soy escritor, soy un audaz que se animó a escribir algo. Fue contar la historia de un Counselor de nuestro tiempo y ahí aparece León Bariac, el protagonista. Más allá del libro en sí, era dar con el sentido de la intención, dar a conocer la profesión, que se conozca a través de una historia que, de algún modo, tenga rigor científico y académico. Pude establecer el límite de lo que se puede transcribir. Yo quería que si lo leía un alumno, no me leyera a mí, por eso la presencia textual de Andrés y de Rogers y, a la vez, contando una historia y así salió “El Artesano de Vidas” Cerré el libro con la Laudato Sí del Papa Francisco, a partir de un encuentro que tuve con un amigo, que me pareció

interesante e, incluso, eso también fue una transcripción. Yo ya tenía esta suerte, compromiso, y deseo de difundir el Counseling. Después de treinta y pico de años, todavía estamos escuchando que hay un problema de identidad. Bueno, eso nos interpela a que revisemos qué estamos haciendo en ese sentido. Si nos extrapolamos en el tiempo, vamos a encontrar un giro enorme en la profesión, pero te voy a contar el mío. Hasta acá, era un Counselor solitario, tratando de hacer algo. Después, muy cerca en el tiempo, surge la idea de “El Camino del Counselor”, aún sin la irrupción de la tecnología como la de hoy, simplemente se desarrolló la idea de una plataforma, donde nos convocamos profesionales y le agregamos contenidos académicos. Otra vez: la difusión de la profesión, tanto puertas adentro – entre nosotros – como puertas afuera, el porqué del “El Artesano de Vidas”; fue escrito para que lo lea cualquier persona y que desde ahí, descubra el Counseling y el ECP de Rogers. El Camino del Counselor seguía teniendo la impronta individual de un Counselor, en este caso Julio Barnes, que estaba haciendo esto. Un atrevido. (Nos reímos) porque existe El Camino del Ser y yo dije: -“Vamos a hacer “El Camino del Counselor”, un atrevido total (Volvimos a reir). Otra vez Andrés, también Facundo Cincunegui, este último quien me permitió escribir todo un capítulo del libro; para mí fue tener la bendición de ellos. Así se pensó toda la estructura de la plataforma. Ahora bien, en una de las pestañas había algo que se llamaba “Escuela Universo Rogeriano” con Enfoque Centrado en el Alumno. E.U.R.E.C.A. – con C -. No hubiera podido definir lo que iba a ser ese espacio en ese momento. Sí, estaba la idea de tomar el modelo educacional de Rogers, con todos los puntos de encuentro con el modelo de Freire y pensar: -“Bueno,


esto algún día va a ser algo”. Porque si vamos al caso, en el sentido académico de la profesión, de cómo se enseña y como se transmite, todavía tiene el formato tradicional y a mí me faltaba esto, el deseo propiamente de un Instituto o una Escuela que sea desde el Enfoque Centrado en el Alumno. Fue una idea que quedó dando vueltas y que algún día iba a tomar su forma, hasta ahí era una pestaña más. En medio de todo esto, me convocan a escribir los manuales de la carrera a distancia y, además y por otro lado, descubro que la UNESCO trabajaba en los REA (Recursos Educativos Abiertos). Hablo con la Editorial, y les digo que no quiero vender más el libro, sino ponerlo como REA y lo autorizaron. Decido volver a dar difusión a “El Artesano de Vidas” Comienza a suceder que teníamos la Página de Escuela Universo Rogeriano; te diría…como si hoy tuvieras una página de Facebook y la dejás ahí, esperando también que le llegue el momento… Empezó a tener movimiento, gente que se manifestaba gustando de todo lo que había, interés. Yo lo tomo como una señal, más que como algo concreto, porque no había una acción en sí. Nos sorprende la pandemia. Y aquello que era una señal se fue fortaleciendo y cada vez se acercaba más gente. Coincidimos con otros colegas que nuestra profesión comienza a correrse del ámbito individual o del gabinete (o consultorio) y empieza a ser necesaria en el contexto social, lo que podemos llamar “salir al campo”. A medida que avanza el tiempo y crece la pandemia como figura, más concreto se hace el espacio de Universo Rogeriano. Y surge la idea de abrirlo como un espacio de encuentro. Vos estuviste el primer día, quisiera saber qué te pasó con eso? Sorpresa. Cuando pude comprender de qué se trataba: evidentemente un espacio necesario que surgió en un momento

adecuado para ser lo que, finalmente, terminó siendo. Esto que digo se expresa en la convocatoria y fue ofrecido de manera muy asertiva. Tuvo mucho sentido, después, el sostenimiento de ese espacio como estructura de trabajo y la dirección que fue tomando como proceso de crecimiento. A mí también me generó esa sorpresa, y eso mismo generó el compromiso que se fue consolidando a través de cada encuentro. Y se comenzó a ver lo que nos habíamos propuesto: un espacio de encuentro, un espacio de encuentro para desarrollar proyectos y que todos los profesionales que lo conformamos, pudiéramos sentir que había una base organizacional que nos permitiría consolidar esos proyectos. Esto, efectivamente, se produjo, fue una dinámica muy concreta. Los encuentros eran todos los sábados, lo propusimos así, y fue manteniendo el nivel de interés y empezaba a demandar otros tiempos. Ya en el tercer encuentro, se empezó a generar la idea de que no nos alcanzaba con los días sábados, la idea era hacer encuentros, abríamos salas en el zoom, cada uno iba a la sala que elegía según la temática que le interesaba desarrollar y, después nos encontrábamos todos para contarnos lo que habíamos hecho. A esa altura habíamos convocado a profesionales destacados para cada área y con temáticas muy interesantes, que tenían la necesidad de tener otros tiempos. Es cuando se habilitaron los encuentros entre semanas y fue muy bueno, porque también, a raíz del despliegue individual, acontece una conformación grupal. Fueron subgrupos que nosotros llamábamos “mesas de desarrollo”, más los encuentros de los sábados. Hemos convocado disertantes, también en algún momento, que exponían algún tema en particular y eso, lo compartíamos entre todos. Esto, no solo ya estaba aconteciendo, sino que ya siendo, de algún modo, el que gestó la idea, me empezó a generar un


compromiso, había que dar respuesta a este gran trabajo que estaban haciendo. Por tanto, se empieza a desarrollar la idea de darle un marco institucional para que, en definitiva, cada profesional que estaba poniendo su esfuerzo, su dedicación, conformando equipos y demás… tuviera una respuesta organizacional en un aspecto formal. Empecé a buscar y a asesorarme en las distintas figuras para llegar a dar esa respuesta y, la que aparece como la más contundente, es la de la Fundación. Empezamos a pensar: -¿qué puede hacer esta Fundación? Porque, por lo general, existe el concepto humanitario de acercar ayuda; unos lo hacen con bienes materiales, otros con alimentos; otros lo hacen con obras, etc. Lo nuestro es, propiamente, la ayuda humanística, es decir, nosotros como profesionales de la relación de ayuda acercándonos a un otro. Así nace el concepto que, si bien es conocido, nos identifica: “somos el primer eslabón de la cadena de ayuda”. En cualquier ámbito en el que sea necesario; siempre, el primer acercamiento será el que hacemos nosotros, el de la escucha, el acompañamiento, de la orientación y facilitación. Nuestra profesión no tiene espacio únicamente en el gabinete. Esto entra en otro concepto que implica la responsabilidad y para esto me encanta usar una metáfora que es casi una representación de la realidad de cómo explicar responsabilidad, lo que dice Cullen: “¿Quién es responsable? El que responde ¿Y quién responde? Alguien golpea una puerta y ahí… o se puede abrir para recibirlo, brindarle ayuda, asistirlo o para volver a cerrársela en la cara” En este sentido yo siento que la humanidad nos está golpeando la puerta, y digo: -“nos está golpeando la puerta a nosotros”, los profesionales de la relación de ayuda. A todos. A nuestra profesión en particular, el Counseling, pero también a Psicólogos,

Psicólogos Sociales, Médicos, todo aquel que esté vinculado a una relación profesional de ayuda. Iniciamos este 2021 y, como todo en la grupalidad, los formatos no son estáticos, toda aquella conformación que incluso nos demandó una respuesta tecnológica, por lo que armamos una plataforma específica para el acceso al desarrollo de todas las mesas, con su propio espacio de encuentro, y demás, como te decía toda aquella conformación se movió… Ha habido movimientos, no están todos los que estuvieron en un principio, muchos de los que están ahora no iniciaron en aquel momento, lo cual es muy enriquecedor porque cada espacio va tomando su propia dinámica, su propia esencia; y aparecen, incluso, propuestas novedosas, en distintos temas que, algunos pueden constituirse como una mesa en sí misma, y otros pueden ser ya un proyecto en particular y que buscan – en función al mensaje original que hemos dado allí – como profesionales, que no solo se los acompañe, sino que también si este proyecto tiene que salir a la comunidad, a la población, para eso se vuelve a tener la necesidad de la figura de una Institución que dé respuesta. Los Counselors, todos con su inscripción, algunos monotributistas, otros autónomos, nosotros como organización, como consultora, pero todo dentro del ámbito privado, la idea de la Fundación da otra perspectiva hacia el futuro y de imagen de puertas afuera también; es ahí donde estamos hoy. En esta etapa fundacional de la Fundación a la que nombramos Fundación Ayuda Humanística de Argentina. ¿Qué soñás a partir de ahora? Creo que lo valioso en esta etapa es el encuentro profundo. Tengo la certeza de que nuestra formación, por distintas circunstancias, tiene el rasgo de la formación continua muy a flor de piel. Hablás con cualquier Counselor que está en


actividad y siempre está formándose, haciendo especializaciones, por ejemplo, profundiza algún tema o hace un postítulo. Entonces, mi sueño es, precisamente, desde el encuentro profundo y con esta mirada filosófica del espacio – y no desde lo abstracto sino desde un posicionamiento ético – es desarrollarnos hacia “la mirada del otro”. Emmanuel Lévinas dijo: -“parece que nos hemos olvidado de ver al otro en tanto otro”; Cullen lo explica diciendo que, mientras la filosofía pensó al otro como un “semejante”, más adelante como un “igual” o, incluso, como un “diferente”, para eso era necesario una construcción cognitiva desde nosotros hacia el otro, y dice que, lo que sostiene Lévinas, ya no se trata de una construcción cognitiva sino que se trata de una posición ética, porque menciona el rostro del otro, ese rostro del otro que me interpela de manera de hacerme responsable del otro. Si pensamos a nuestra profesión en función de lo que tanto enunciamos y es que somos nuestro propio instrumento, somos todo nuestro ser puesto al servicio del otro, sin descuidar el cuidado de sí, pero cuando descubrimos que en el cuidado del otro está el cuidado de sí, diría que los Counselors estamos en el camino más noble en el que puede estar el ser humano. Rogers decía, ya en el siglo XX, que el futuro de la humanidad no está solamente en la física, ni en la ciencia, sino que está en el trabajo de aquellos que estamos en el ámbito de las relaciones interpersonales: Docentes, Educadores, Psicoterapeutas, Counselors. Él hablaba de un gran desafío, que iba a ser una gran empresa que nos teníamos que poner al hombro. Entonces, mi sueño es que muchos puedan captar el sentido y que juntos podamos ir en ese sentido de la vida y después, bueno, es a donde nos lleve nuestro propio quehacer. Mi sueño es que podamos llegar en todos los ámbitos donde no solo nuestra labor,

sino toda nuestra humanidad, estén al servicio de otro y hagamos de este mundo, un lugar mejor. Ese otro, el último eslabón de la cadena ¿Quién es? Yo siento, en ese otro, que todos somos los ayudados. Cuando tenemos la bendición de dar una ayuda al otro, nosotros también nos estamos ayudando. Entonces, ese otro también soy yo. Cuando demos inicio a la Fundación, será desde una mirada filosófica. Venimos hablando, de alguna manera, de la “vulnerabilidad”. El que se siente impune se siente invulnerable, en cambio, aquel que sí se sabe vulnerable – y fíjate como la humanidad, en ese sentido está de rodillas frente a algo que ni siquiera es visible; justamente, el virus, haciendo tanto daño, y nos marca el nivel de vulnerabilidad que tenemos y quizá hasta la incapacidad que tenemos de poder dar una respuesta contundente; esto también, lo frágiles que somos en todo sentido, cuando el hombre se cree que es un Dios porque, más allá de tener una parte Divina, claramente hay cosas que no podemos dominar; yo creo que desde esta vulnerabilidad toda vez que estamos ayudando nos estamos ayudando. ¿Tu cierre para este encuentro? Siempre agradezco. Siento que si hay algo que nos ofrece la vida, permanentemente, es la bendición de estar vivos y de poder hacer algo con nuestra vida, y ese desafío de transitarla del modo que cada uno elija. Para mí, ya eso es una bendición. Yo agradezco el encuentro que estamos teniendo hoy con vos, el que tengo con tantas personas queridas, agradezco también que con otras personas, bueno, como se dice: “no es por ahí”… será por otros lados, agradezco la vida que Dios me ha dado, o que la vida misma ofrece, más allá de las creencias. El enorme agradecimiento a esta profesión, por ponernos en un lugar de poder ayudar a


otro porque eso es maravilloso, es hermoso. ¡Gracias, gracias, gracias! (Sonreímos) Y sí, como yo digo siempre, agreguemos, el “Gracias por tanto”.

Clr. Analía Cordero clranaliacordero@hotmail.com


Un Cuento


LA CONSULTANTE OLVIDADA… en la sala de espera Ella, la Sra. Y, estaba muy ansiosa, con mezcla de amargura, desalientos y tantas emociones que explotaban en su pecho. Había hablado por teléfono a una Institución de promoción y prevención de la salud, para solicitar un turno. El Sr. XX, un profesional muy recomendado la atendería, se le aclaro que debía estar allí puntualmente el día y la hora indicada. Ella llego exactamente cuando su reloj le indicaba las diez en punto. Una hermosa joven la hizo pasar a la sala de espera, la invito a sentarse cerca de la estufa y le ofreció un té. Ella bebió su té, hojeó unas revistas y miró los bonitos cuadros. En una pared el reloj anunciaba: las diez y diez. Sonó el teléfono, y luego la secretaria le anuncio que el Sr XX había tenido un problema con el tránsito y se retrasaría un poco. - “¿Quiere que le cambie el turno para otro día?” - le dijo amablemente… Entonces la Sra. Y sintió algo muy frío que se le instalo en medio de su pecho, le bajo al estómago. -”Señora ¿se siente bien?”-“Si señorita, solo un poco de cansancio, he viajado bastante para venir aquí y ahora usted me dice que...” - “Está bien, quédese, le tomare sus datos y le avisare al Sr. XX que lo esperará”. - “¿Su nombre? ¿Edad ?... ¿Domicilio?… ¿Teléfono?” Las preguntas continuaban saliendo a borbotones. Hasta que la Sra. Y, interrumpió: - “¿Usted tiene hijos? - “No” - contesto la joven. - “Yo si…mejor dicho tenía, ahora ya no está.”

Fue entonces, cuando se inició una cálida conversación entre ambas, parecían dos personas que se conocían desde hacia tiempo, se escuchaban con atención, una contaba los nuevos proyectos que emprendería, y la otra, un poco más animada le hablaba de algunos recuerdos familiares. La Sra. Y ya no sentía ese dolor en el pecho, pudo acomodarse mejor en su silla y tomar otro té…cuando se escucho las campanadas de la iglesia que anunciaban la misa de once. - “Me tengo que ir” – dijo amablemente. Casi al mediodía se vio descender de un coche al Dr. XX, quien al entrar a la Institución preguntó a su secretaria por la Sra. Y. Esta le contestó que ya se había ido, y que la vio irse mucho mejor que cuando había llegado. Este relato me recordó a la Dra. Montessori, cuando en una de sus conferencias a sus alumnas de Pedagogía, les decía: -“La mejor maestra que he visto, fue en un asilo nido de Roma; cuando en ausencia de la maestra, debió ocuparse de los niños, era la hija de la portera. Recibió a los niños con mucho esmero, se sentó en medio de ellos y los observo jugar. La mejor educadora es aquella que no necesita tanta técnica ni metodología…sólo basta la actitud, la disposición, el acompañarlos y atenderlos cuando lo piden…” Agrego yo: sólo el amor basta.-

María del Sol


“No quise encontrar una manera centrada en el cliente, quise encontrar una manera de ayudar a las personas” Carl Rogers

Cuánto de esta frase subyace en el ejercicio diario de nuestra profesión. Cada encuentro, inicia desde esta concepción, ayudar a las personas. Cada encuentro es una celebración en sí misma, la vida buscándose vida mejor. Atravesando el dolor, yendo a lo profundo del ser, cuando se puede, cuanto se pueda. Descubriendo, abrazando realidades subjetivas que tienen la oportunidad de transformarse, si están dadas las condiciones. Somos acompañando. Somos acompañados a la vez, ayudados siempre para comprehender ese mundo que se presenta con sus significados y sus sentires. Testigos de potenciales semillas que en su centro llevan la inmensidad en la que puede desarrollarse el ser humano. Es tiempo de celebración y agradecimiento. Celebro hoy, con cada uno de mis colegas, el PODER de la persona; y sé que agradecemos juntos, el honor de estar presentes frente a ellos, cada Ser, buscando, surgiendo, saliendo a superficies vitales, recuperando la fuerza vital que empodera la esperanza que posibilita la experiencia de CONVERTIRSE EN PERSONA.

13 de Agosto CELEBRAMOS EL DÍA DEL COUNSELOR ARGENTINO ¡Feliz día para todos! Clr. Analía Cordero


NO DEJEMOS DE CUIDARNOS Y CUIDAR A NUESTROS SERES QUERIDOS BARBIJO, LAVADO DE MANOS, ALCOHOL EN GEL DISTANCIA PRUDENCIAL Y VENTILACIÓN CRUSADA LA VACUNACIÓN NOS AYUDA A TODOS ES EL COMPROMISO DE


Agosto Mes del Counseling


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