DELEGACIONES Viernes 22 de Febrero de 2013
BLANCA BRAVO ANTROPOFAGIA CULTURAL
PERRA VIDA ÂżCĂłmo le va con esta perra vida mi estimadĂsimo tlajomulca? ÂżAnda de buena suerte o de plano se le atravesĂł un gato negro en el camino? Las frases o palabras alusivas a animales son tan comunes como indicadoras de nuestra cultura: Que si al compadre “le chilla la ardillaâ€?, que si nos “andan venadeandoâ€?, que si nos tratan “como su ‌che gatoâ€? o que alguien es “bien perrĂłnâ€? o “una perraâ€?, son parte de nuestro vocabulario. Y quĂŠ tal con el compaĂąerito muelĂłn de la escuela al que se le quedĂł el apodo de “el coneâ€? o el que con “el nervioâ€? de pasar al pizarrĂłn sufrĂa GH LQFRQWLQHQFLD \ GHVGH DKt HV HO Âł]RUUL´ R OD QLxD Ă€DFD SDWDV largas apodada “la campamochaâ€? o la de amplia boca que terminĂł siendo “la mojarraâ€?. Los animales son pues, desde tiempos inmemoriales, parte de la vida del ser humano. Pero, ÂżSe ha usted preguntado cĂłmo surgiĂł esta relaciĂłn hombre-bestia? Al contrario de lo que muchos pudieran pensar, fue el animal el que dio el primer paso en esto de la domesticaciĂłn animal, al seguir a las hordas de humanos para consumir las sobras de su comida y sus desechos en general. SegĂşn escriben algunos, el animal (yo creo que el humano) fue poco a poco perdiendo el miedo; se acortĂł la distancia a la que las manadas o parvadas seguĂa al clan hasta que terminaron siendo parte del grupo. De ahĂ el inicio del lobo domesticado usado para protecciĂłn y de las especies de menor envergadura destinadas a ser consumidas. Hoy en dĂa existe toda una disciplina llamada EtologĂa, que permite analizar mĂĄs metĂłdicamente lo que ya el hombre de las cavernas analizaba: el comportamiento de los animales. No se trata de psicologĂa del animal, es decir de lo que siente un chango o su perro en particular, sino de una sociologĂa de especie o de grupo: JerarquĂas, sexualidad, matriarcado o patriarcado, distribuciĂłn de funciones, etc. Sin embargo, se ha puesto usted a pensar en lo difĂcil que se ha vuelto el estudiar el comportamiento de un perro o gato callejero, cuando estos pobres animales han sido despojados de gran parte de sus recursos de sobrevivencia y de prĂĄcticamente todo su entorno natural. ÂżQuĂŠ queda en un perro del lobo que fue algĂşn dĂa? Ni el fĂsico, ni el medio ambiente, ni las posibles presas de las que podrĂa alimentarse. El ser humano lo ha despojado de su “serâ€?, lo ha manipulado para que termine siendo un animal totalmente dependiente de ĂŠl. El majestuoso lobo, de mirada profunda y defensor de su manada, es ahora un animalillo aislado, que con la cola entre las patas recibe una patada del amo malhumorado. Y si esto ya le va pareciendo medio gachito (lo cual es el objetivo de esta columna) ahora piense que, ademĂĄs, las “personasâ€? nos sentimos con el derecho de desechar al bicho cuando ya no es un cachorro encantador, cuando rompiĂł algo, cuando nace hembra o saliĂł “feitoâ€?. Usted bien sabe que yo no le ando con “consejitos del corazĂłnâ€?, pero por el dĂa de hoy, permĂtame meterme en su vida y ser de lo mĂĄs comĂşn y corriente repitiendo lo que los demĂĄs medios de comunicaciĂłn le dicen: ÂĄSEA RESPONSABLE! ‡ Las mascotas no son un juguete. ‡ Si adquiere una, vacune, desparasite de inmediato. ‡ En cuanto el animal (mascota, no pariente polĂtico) WHQJD OD HGDG VXÂżFLHQWH HVWHULOtFHOR /RV VHUHV KXmanos tendemos a humanizar los comportamientos animales, pero esto es errĂłneo. Ellos no sufrirĂĄn por no consagrarse como madres o por no “desahogarseâ€? sexualmente y tener descendencia. Ni siquiera lo quiera ver como negocio; vender cachorritos es entregarlos, en un alto porcentaje, a un mal dueĂąo. ‡ NUNCA, NUNCA, tire a la calle a un perro o gato ni los OOHYH DO DQWLUUiELFR DKt VHUiQ VDFULÂżFDGRV %8648( un refugio de animales. ‡ Y lo mĂĄs importante, eduque a sus mĂŠndigos escuincles. EnsĂŠĂąeles que todo ser vivo es digno de respeto. ÂżO usted quĂŠ opina? P.D. Tenga madre; cuide a sus mascotas, coma frutas y verduras.
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AĂąos con el mismo problema
A pesar de trabajos previos, la vĂa no estĂĄ totalmente terminada Por Ă ngel Barajas La Privada Guadalupe Victoria en CajititlĂĄn, desde Zapata hasta PanteĂłn, a pesar de las obras realizadas, es una calle improvisada que pasĂł de ser el cauce de un arroyo a ser la vĂa de entrada de mĂĄs de 20 familias a sus casas. En la ĂŠpoca de lluvias es cuando surgen los problemas, pues el agua reconoce su cauce y la calle se transforma en un pequeĂąo rĂo que conduce las aguas desde la parte alta del poblado hacia la laguna, “Cada que llueve ya sabemos, aquĂ en el patio metemos todo y por eso pusimos las piedras, asĂ por lo menos da la vuelta y no se nos mete tantoâ€?, comentĂł la seĂąora Marcela, vecina de esta calle. En los cruces con las calles PanteĂłn y Emiliano Zapata, el desgaste por la corriente ha dejado zanjas, mientras las secciones de cemento zampeado, apenas muestran uso, “En las campaĂąas pasadas, cuando estaba Alfaro compitiendo, nos dijo que iba a arreglar aquĂ, pero ĂŠl ya saliĂł y mira, todo sigue igualâ€?, agregĂł Marcela. Al ser un poblado principalmente turĂstico, los visitantes suelen buscar rutas mĂĄs rĂĄpidas o con PHQRV WUiÂżFR SRU OR TXH QR HV UDUR TXH ORV YHKtculos intenten circulen por esta vĂa, sĂłlo para encontrarse con una alcantarilla que sobresale mĂĄs de 20 centĂmetros, “Seguido los carros se quedan ahĂ atorados, mĂĄs porque aquĂ se estacionan todos -en la calle PanteĂłn- y se quedan atorados con la alcantarilla, pero si es un carro chico sĂ se puede salirâ€?, nos comentĂł otro vecino del lugar.
CONTRASTE EN OBRAS A unas cuadras de este callejĂłn, la Privada PanteĂłn ha visto nuevas mejoras, pues hace poco mĂĄs de dos semanas comenzaron los trabajos de adoquinado, “Empezaron bien, estaban trabajan-
do råpido, pero llegaron a la esquina y se pararon, espero que no se tarden mucho, porque sà hace falta�, comentó Rogelio, uno de los habitantes de HVWD SULYDGD \ XQR GH ORV SULQFLSDOHV EHQH¿FLDGRV
“Cada que llueve ya sabemos, aquĂ en el patio metemos todo y por eso pusimos las piedras, asĂ por lo menos da la vuelta y no se nos mete tantoâ€? En este lugar la situaciĂłn era muy similar a la Privada Guadalupe Victoria, dada la inclinaciĂłn de la calle y al ser de tierra, la temporada de lluvias en un verdadero martirio, “En lluvias casi nos dan ganas de traernos una de las lanchas de la laguna para salir, porque aquĂ es puro lodo y allĂĄ abajo -calle PanteĂłn- se hace como rĂo de toda el agua que bajaâ€?, terminĂł Rogelio. La situaciĂłn de estas calles no es la Ăşnica, pero sĂ mĂĄs urgente, debido al uso que se le da, tanto como vĂa de circulaciĂłn como de ingreso a las viviendas.
230 metros
lineales de adoquĂn
6 aĂąos
que no arreglan Privada Guadalupe Victoria