"SENTIRES"

y solo existirá el tu y el yo...el nosotros cruzaremos en un instante nuestros cuerpos ya livianos y hermosos y nuestras pupilas enfrentadas se disfrazarán de silencios celestiales y otra vez ,nuevamente podré decirme que sé...que te quiero... y como por arte de magia tu nombre fabrica cien burbujas y las quiero y las admiro embelesado y me vuelvo sospechoso de vigilante de alfileres traicioneras que acechan en la oscuridad y me contengo y confío en palabras supuestamente seguras hasta el punto de llegar a pensar que solo soy un mísero payaso.

Y viene "hulk" y en vez de rugirme posa una de sus enormes manos en mi hombro y me habla con voz tierna y me dice...no te vuelvas verde, ¿ves como soy?... y se marcha haciendo temblar el suelo y sentado en una banca bajo cielo nocturno plomizo me quedo con las manos flácidas esperando,siempre esperando y dejando que las burbujas vivan su aire y mi brisa como mejor les parezca, y si aparecen puntas afiladas ya se sabrá que hacer,por ahora el trino de un pájaro es hermoso y la perfección de esas burbujas son el horizonte de una mente rara y de un corazón que a veces piensa que ya es una especie en extinción.

A veces retrocedo y me cuento de aquellos amigos encerrados dentro de cuatro paredes donde se inventan mundos salvavidas y se calzan la corona de cartulina en su cabeza y la silla casi destartalada se vuelve un trono dorado forrado de terciopelo rojo punzó, y envueltos en una capa monárquica cierran sus oídos y no escuchan a sus ojos y sus mentes laten juventudes extrañadas y sus corazones piensan sueños que sin que lo sepan se van volviendo utopías y aquella banca donde estuve solitario es un descanso para volver a empezar y me conozco señor de la abundancia de fuerzas para no ir muriendo de a poco como esos pobres amigos que viven mundos que se van descascarando poco a poco mostrando las debilidades de sus cimientos que ya les van diciendo ...ya no te esfuerces, ya no da para mas...

Y al final toda esta palabrería tan solo es al santo pedo, porque ya dejé aquella banca que existía bajo un cielo plomizo y voy otra vez andando, pero esta vez pidiéndole a Dios que ayude a aquellos reyes de barro, viejos amigos encerrados dentro de paredes de cartón, para así ,a lo mejor