lujo, pero está bueno pensar en el otro ya que esos partidos, por cómo se vive el fútbol aquí, son una amenaza hasta para los corazones más tranquilos. Listo, dicho lo bueno, hay que contarles a los lectores más jóvenes que el próximo torneo será igual que uno que se jugó hace 21 años y fue... un fracaso. Un sistema que fue debut y despedida. Pero ahora, de pronto, un puñado de dirigentes decidieron revivir aquel formato. Por suerte, no es difícil de explicar: se jugará igual que como se venía jugando pero los campeones de cada semestre ya no serán campeones sino ganadores. Para alzar la Copa, habrá final entre los dos ganadores. El problema es que en este fútbol poco previsible, el equipo que gane el primer semestre podría jugar la final, seis meses después, con un plantel diferente. Y no sólo porque venda a sus futbolistas sino porque los calendarios no están acomodados con la Conmebol, por ejemplo. En la temporada 90/91, el único torneo que se jugó con el formato que ahora se va a llevar adelante, Newell´s le ganó la final a Boca por penales. Por la Copa América, ambos equipos sufrieron bajas importantes: Gamboa y Darío Franco por un lado y Latorre y Batistuta, nada menos, por el otro. ¿Alguien se imagina una final entre Real Madrid y Barcelona sin los jugadores de selección porque está por empezar la Eurocopa? Eso sucedió hace 21 años. Y volverá a pasar por alguna razón que ahora no podemos prever. El dislate del almanaque se da también en otra institución como la Conmebol, dirigida por Nicolás Leoz (83 años, tres más que Julio Grondona). Y si no, basta con ver lo que sucedió con Boca en su segunda final de Libertadores con el Corinthians. Como los contratos/préstamos de
varios futbolistas se terminaban el 30 de junio, sus dirigentes tuvieron que hacer malabares para contar con el plantel completo en la revancha del 4 de julio en San Pablo. Y no nos olvidemos de la Copa Argentina. Al arrancar el torneo se estipuló que la fecha de la final sería el 25 de mayo. Luego, los cráneos que arman y desarman sin ton ni son se dieron cuenta de que no le daban las fechas y se pasó para el 9 de julio. Ahora, y sólo por ahora, Boca y Racing jugarán el 8 de agosto. Por supuesto, en los dos equipos faltarán futbolistas que colaboraron para que sus equipos llegaran a esta instancia. La desprolijidad a la máxima potencia. Y en el número que viene la seguimos con el sistema para la clasificación de la Libertadores 2013. JULIO 2012 UN CAÑO 27