ESPECIAL
Gran dificultad para la compra de refacciones: Muchas veces las máquinas que se compran usadas para posteriormente importarlas son equipos cuyos fabricantes no tienen distribuidores en nuestro país. Este factor provoca que cuando se necesite reemplazar alguna pieza sea sumamente complicado conseguirla. Muchas veces se terminan comprando las refacciones con distribuidores en el extranjero. Alejandro del Pozo añade: “Importar otras marcas de maquinaria que no se distribuyen en México, ocasiona que, aunque sean muy baratas allá, a la hora de traerlas no existen las refacciones acá, y no tienen soporte”. En otras ocasiones el equipo sí tiene distribuidor en México, pero el modelo en particular nunca salió a la venta en nuestro país, lo que ocasiona de igual forma que sea complicado conseguir sus refacciones.
AM
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Dificultad de reparación (mano de obra): Nuevamente si la maquinaria no tiene distribuidor en México o el modelo nunca se vendió en este país, la reparación de estos equipos se vuelve más complicada dado que, en la mayoría de las ocasiones estos no cuentan con los manuales de servicio y son difíciles de conseguir, aunado a que por no ser una máquina común se complica el conseguir un mecánico con experiencia en éstos, y en la mayoría de las ocasiones la reparación de la maquinaria requiere de una capacitación especial o de gran experiencia en campo. Problemas de documentación: Si no se cuenta con experiencia en la importación de equipos, la captura de los datos del pedimento de importación puede resultar erróneo y no darse cuenta en el momento, lo que acarrea muchos problemas si éstos no se corrigen a tiempo. Muchas veces las máquinas terminan en el corralón cuando los policías federales piden sus papeles al transportista y los números de serie no concuerdan con las placas colocadas por el fabricante. Sobre esto Alejandro del Pozo nos comenta: “En el caso de los pedimentos, ha sucedido que por un solo número erróneo en la factura o en la documentación ya no son válidos y tienen que hacer una serie de trámites para volver a llevarlo a la legalidad y es un proceso tardado y costoso”.
“En ocasiones, en los vehículos que requieren emplacarse en México como un camión de servicio, el proveedor puede que no entregue el pedimento o titulo original y al no contar con estos documentos no se puede emplacar”.
LA REVISTA DE MAQUINARIA 23
