arte
DECORACIÓN
Fantasía clásica, de Sonia Lacasa y Alexa Trabucco
La cava, de Olivia Zorraquín y Claudia Franco
Olivia Zorraquín y Claudia Franco diseñaron la Cava. Como arquitectas, buscaron despertar nuevas sensaciones visuales a través de este recoveco, que antiguamente era solo un pasillo, dotándolo de amplitud y distinción. El juego de espejos y la cubierta recrearon una bóveda de cañón, la que, a su vez, representaba metafóricamente a las barricas de roble. El enlace, entre el fino equipamiento y la aparente fragilidad de las mesadas de vidrio, convirtió a este lugar en uno de los más impactantes. El Mirador fue planeado para el descanso; allí la obra de los arquitectos Beatriz Heyn, Osvaldo Vega y Jorge Ortiz hizo lo suyo. El paisaje proyectado desde el balcón era único y la piscina desarrollada por las arquitectas Viviana Diez Pérez y Fany Bogarín centró la atención de todo el jardín. En Vision Without Boundaries, el ambiente exclusivo de Hyline Paraguay, preponderaba una puerta con más de seis metros de altura, que se podía abrir de par en par, creando una atmósfera sin límites. Las arquitectas Tona Ruggero, Desirée Dumot, Tamara Napout y Bibiana Escanciano dieron vida a esta estancia. Jennifer e Yvonne Isasi, y Lorena Caballero presentaron The Brooklyn Hotel. La simulación del lobby del establecimiento y la ideal del ascensor antes de entrar a la “clandestinidad” del
194 I LUJO 2017 I LEVEL
Casa sostenible, de Mauro Remonato, Gabriela Mezquita, Hugo Riveros y Alberto Gross Brown
bar fue desarrollada con mucha precisión. El techo, la mesa de juegos y el mobiliario inspirado en el año 1920, estelarizaron el sector de estilo industrial. Por su parte, la Casa Laif, diseñada y edificada por la constructora Bauen, contó con una rampa de 18 metros que conducía a la planta alta de esta vivienda de tres niveles: sala, comedor y cocina integrados, tres dormitorios, un baño, biblioteca, vestidor y una amplia terraza.
MENCIÓN ESPECIAL A LA VIVIENDA SOSTENIBLE
CasaCor Paraguay incluyó un prototipo de Vivienda sostenible, cuyos muros se erigieron con residuos generados a partir de las labores emprendidas en el predio. Para ello, el Consejo Paraguayo de Construcción Sostenible (Cpycs) retiró los remanentes, que más tarde recibieron un tratamiento para su transformación en ladrillos con fines de reutilización. La visión arquitectónica de Mauro Remonato, Gabriela Mezquita, Hugo Riveros y Alberto Gross Brown se vio reflejada en este proyecto, en el que trabajaron más de 20 empresas, entre ellas, Italínea, porque el proceso de fabricación de sus muebles apela a materiales seguros que no dañan el medioambiente.