Separación entre Administración pública y Gobierno en la comunicación pública La difusión de una información exhaustiva acerca de la acción política representa, por tanto, el primer paso para la realización de una democracia participativa en la que los gobiernos rinden cuentas de su gestión y los ciudadanos contribuyen en la solución de los problemas de manera fundamentada. Martín Serrano33 define a la comunicación pública como la “que proporciona una clase de información que se refiere a intereses compartidos por el conjunto de la colectividad y que está destinada, en todo o en parte, a la reproducción social”. Este tipo de comunicación, por tanto, es parte integrante de la función de servicio público llevada a cabo y gestionada por la Administración pública. Sin embargo, se ha comprobado que los gabinetes de prensa institucionales, más que informar, realizan una labor de marketing político, difundiendo una información sesgada que justifica y legitima las decisiones del grupo de gobierno. Para evitar este fenómeno tan extendido, Moreno Sardá et al. 34 proponen cinco principios básicos para construir una información pública de calidad: Humanizar la información, incluyendo a los ciudadanos y los representantes políticos, del gobierno y de la oposición, como sujetos activos de las noticias Difundir una información completa y transparente Insertar la información dentro del contexto histórico de la institución Basar la información sobre datos contrastables Redactar la información con criterios periodísticos, explicando los conceptos para que la población pueda comprenderlos [ 102 ] Actores en un escenario vacío