Revista Asia Sur - Edición Nº 83

Page 83

La risa es el hábitat natural de Gonzalo Torres. Por ocho años formó parte de Pataclaun, grupo en que interpretara al cura neurótico y ‘fosforito’ Gonzalete, tanto en televisión como en teatro. Después dejó la nariz roja para zambullirse en Lima, una ciudad odiada por muchos, pero que a él le apasiona. Ahora ha vuelto a las tablas para reivindicar al hombre retrosexual y cavernario. La compañía internacional Theater Mogul lo eligió para que sea El Cavernícola peruano, un unipersonal que desde 1991 se ha montado en 34 países del mundo.

Este monstruo que ha creado la humanidad, que se llama ciudad, me atrae y me fascina

¿Qué tienes de cavernícola? Dejo las cosas en el suelo. Aunque hoy ya no existen hombres-hombres ni mujeres-mujeres. Los hombres pueden tener cosas femeninas y las mujeres cosas masculinas. Mi mujer no cocina nada, en cambio a mí me gusta cocinar. Preparo pescado al horno, risotto o un parrillón. Hago postres. Cada vez son menos definidos los roles exactamente masculinos. Pero hay cosas que no cambian. Si se ha perdido, el hombre no puede parar a pedir direcciones. Si lo hace, ha fallado. La mujer sí puede. A diferencia de otros unipersonales, El Cavernícola es un guión de afuera, no es algo que tú hayas creado… Claro. La obra se estrenó en 1991. Hay varios cavernícolas en todo el mundo: México, Estados Unidos, Corea del Sur, Sudáfrica, Argentina y España. A mí me ha tocado el honor de ser el cavernícola peruano. Lo interesante de la obra es que hay cosas que son universales en hombres y mujeres, porque funcionan hasta en Corea del Sur. Como la manera de comprar de ambos sexos. El hombre es más práctico: va a comprar la misma camisa que tenía antes y no mira más. Le toma cinco minutos. En cambio, la mujer se puede tomar el día entero mirando y conversando con una amiga. Si fueras mujer, ¿qué ventajas tendrías que no tienes ahora? Las mujeres tienen mucho más espectro de compra en el tema de ropa y moda. El hombre es bastante más limitado. También debe ser maravilloso tener un hijo. Pero hasta en eso la naturaleza es sabia: la mujer soporta estoicamente el dolor del parto, se enfrenta al dolor; el hombre le huye. Para hacer un unipersonal, ¿qué cualidades debes tener? Un actor debe tener bastante coraje, los ‘huevos’ bien puestos. Estás solo en el escenario. Es tu responsabilidad, todas las miradas están en ti. Tienes que apoyarte en tu talento y en tus sentidos de seguridad confianza. Es una lucha contra tu energía, contra tu cuerpo, contra tu voz. Salir al escenario es como salir al ring, tienes que ir a matar.

¿Tu paso por Pataclaun ha servido de base?

¿Cómo lidias con el transporte?

Es la base de todo el desarrollo de mi carrera. Me ha dado autoestima y seguridad.

Como con una pareja. Con el tráfico uno se ha casado y tiene que aprender a lidiar pacientemente con ello. Antes hacía hígado todos los días y hoy me he dado cuenta de que no vale la pena.

¿Qué tenía Gonzalete de ti? Tenía esa hiperactividad, ese estresarse rápido. Tiene mucho más del Gonzalo Torres joven que el de ahora. Casi todos los actores que han formado parte de Pataclaun hacen unipersonales. ¿Pataclaun los llevó a eso o era un camino que en algún momento iban a tomar? Creo que era el proceso natural, sobre todo para un actor que ha crecido en el tema del humor. Todo se va decantando hasta el estreno del unipersonal.

¿Eres ‘fosforito’? Antes. Ahora me he equilibrado mucho más en determinados aspectos. ¿Qué te ha ayudado a equilibrarte? La madurez, la familia, un matrimonio de casi catorce años. Uno va aprendiendo en el camino la tolerancia, la paciencia, la comunicación y a poner en la balanza las cosas que cree primordiales. Eso te va enseñando y va lijando las aristas que antes eran más puntiagudas.

¿Qué has encontrado en A la vuelta de la esquina?

¿Te gusta ir a conciertos?

Una sorpresa y un reencuentro con mi ciudad: con lo bueno, lo malo y lo feo, y con lo que podríamos llegar a ser.

Me encanta. Voy a todo: desde Metallica hasta Kylie Minogue, Green Day, Black Eyed Peas. Tengo una colección de más de mil discos.

¿Te gusta Lima? Me encanta Lima. Soy un hombre de ciudad. Me gusta la bulla. Este monstruo que ha creado la humanidad, que se llama ciudad, me atrae y me fascina. Me atrae el hecho de que poco a poco esta ciudad, que fue refundada por los españoles, reclame su herencia andina. La reconquista de los cerros, las huacas que se resisten a morir dentro de la ciudad, el carácter andino de las fiestas patronales dentro de ella.

¿Los Jonas Brothers? Hay que ser selectivos, tampoco hay billetera que aguante. ¿Qué te hace llorar? Soy un llorón. El melodrama me hace llorar. ¿Cuándo fue la última vez que has llorado? El domingo, en la obra. Hay un momento bonito y conmovedor en el que siempre lloro.

83 / as


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.