REGIONES
Omar Sabat, Alcalde de Valdivia:
QUEREMOS DISEÑAR
UNA CIUDAD A ESCALA HUMANA El alcalde Omar Sabat también estuvo apoyando las campañas por Palestina en Valdivia. Nacido y criado en la zona, trabaja por crear una ciudad más sustentable en la localidad elegida “Capital Americana de la Cultura” para el 2016. Consciente del gran patrimonio cultural, arquitectónico y natural de Valdivia, Omar Sabat Guzmán nos cuenta desde su oficina los proyectos en que están. “Estamos diseñando una ciudad a escala humana, más sustentable para las personas. Somos la cuarta ciudad con mejor calidad de vida en Chile, por eso seguimos trabajando en mejorar los barrios, hacer ciclovías, ampliar el terminal de buses”, explica y nos recuerda que la ciudad fue elegida Capital Americana de la Cultura para 2016. Tiene 38 años, es casado con Marcela Cartagena Docmac, tiene 2 hijos y es cocinero árabe aficionado. Su cercanía con la causa se ha incrementado con dos visitas a la zona. “En Valdivia hubo un tremendo apoyo. He participado y respaldado varias de las actividades culturales. También hemos levantado comunicados, apoyos transversales dentro del Concejo Municipal de apoyo a la causa palestina. La comunidad árabe en Chile y Valdivia siempre ha sido enérgica con los gobiernos de turno para hacer un reconocimiento del Estado palestino”, señala. Para él, es obligación como colectividad continuar denunciando los atropellos a los derechos humanos en Palestina. “Fue importante el ingreso a la ONU para poder denunciar y poner en evidencia a un Estado que ha estado ahogando al pueblo palestino y asesinando gente inocente. Ahora esperamos que el mundo abra los ojos y que deje de tapar con una mano lo que está ocurriendo allá”, comenta y anuncia que entre sus planes está crear una plaza en honor a Yasser Arafat.
ESTILO PARTICULAR El padre de Omar, Jorge Sabat, fue médico, regidor, alcalde, diputado y muy conocido en la zona porque ofrecía sus servicios como doctor en forma gratuita, lo que le valió el apodo de “doc-
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tor de los pobres”. A pesar del legado socialista y radical de su papá, Omar militó en la UDI y se descolgó para poder llevar la última candidatura a alcalde en forma independiente, con un estilo marcado de trabajo en terreno. “Tuve un conflicto con el partido porque no se me dio la oportunidad de ser candidato y tomé una decisión, porque tenía el apoyo ciudadano. Cuando uno hace la pega, estás en terreno, eso se ve reflejado en las urnas”. En parte, este carisma es un legado de su lado palestino. “Todos los paisanos tenemos algo que es distintivo: el cariño y el amor que tenemos por hacer las cosas bien. Como colectividad, nos hemos preocupado en ser mejores personas y eso se refleja en cómo uno es como ser humano. Los paisanos tenemos una cercanía muy especial con la gente, algo de piel, que nos identifica como palestinos. Además de la hospitalidad, son atributos que vienen en el ADN”, reforzó el alcalde. Cristina Correa Siade