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• DICIEMBRE 2014 • AÑO 3 • • NUMERO 24 • • PRECIO $ 30.00 M.N • • WWW.451efe.mx •

PERIODISMO NARRATIVO DE HIDALGO

Querido dos mil catorce, dos puntos ALMA SANTILLÁN * AGUSTÍN RAMOS: Arte y política * MELINA GONZÁLEZ GUZMÁN: Epidemia de pobreza * CRISTÓBAL ROJAS MILLÁN: Nostalgia por las posadas decembrinas de antes * TANIA PERALTA ZAMORA: Pan de feria *TIMO VIEJO: Mail sin destino * ABRAHAM CARRASCO: Una mirada al corazón de la Sierra Otomí-Tepehua * LUIS CORRALES VIVAR: La Heroica de Beethoven en Pachuca * MARIAN P. ZAMORA: Manantial de serendipias * GERARDO BORBOLLA GONZÁLEZ: Diciembre, el mes de ¿celebrar? * AURORA OLIVA: #20NovMx * 1


Pan de feria POR:Tania Peralta Zamora

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as mañanas frías empezaron a sentirse días antes, el pasto amanecía teñido de blanco por las heladas, los niños parecían robots al ir a la escuela, la gente se hacía bolita y ponía sus manos dentro de guantes y cerca de la boca para darles calor, algunos (quienes tenían con quien) se abrazaban. Las tiendas comerciales bombardeaban con la llegada de las épocas decembrinas, desde antes de Día de Muertos ya se veían árboles, luces, esferas, renos, al Santa con su reluciente traje rojo y sus barbas blancas como leche. Parece ser que no dejan que uno disfrute un temporada cuando ya viene corriendo la otra por detrás. Todas las mañanas del año, sin importar la fecha, época, clima, él se levanta incluso cuando la noche aún se asoma por su ventana rota y sin cortina, quizá el soplido helado del aire le da un empujón para hacerlo. La luz de la Luna es su linterna para esas horas, todo está en silencio, sólo se escucha el ruido de los carros y camiones que pasan por la avenida, uno que otro perro ladrando a lo lejos; y es que a esa hora ni las gallinas han puesto los huevos, ni los gallos quieren cantar. Se levanta, siempre motivado, aunque con el paso del tiempo se le ve un

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poco cansado, su postura ya no es tan derecha cómo solía ser, sus manos son grandes, fuertes, sus ojos con mirada tierna y noble. Se cambia de prisa con unos pantalones y un suéter viejos, pero que aún cumplen su función, aunque ya han pasado por varios remiendos; si le va bien, se bebe una taza con intento de café; sale de su casa pidiéndole a la Virgen que tiene en su sala, que lo acompañe. Toma la combi que va al centro, observa a la gente que sube, que baja; los observa, les sonríe; algunos ya hasta lo conocen; ha visto como unos han crecido, y otros tantos, han envejecido con él. Llega a su destino, se baja. Da unos pasos y como ya es costumbre, se compra su torta de tamal, el verde es su favorito, pide su atole de masa, piña o guayaba; se sienta en la banqueta a comer de prisa, qué más da que esté hirviendo, él disfruta su momento; el tamal recién sacado de su hoja. El bolillo aún caliente, crujiente, lo toma a dos manos, abre la boca, le clava el diente, se escucha como truena el bolillo. Aún sale vapor del tamal, quedan migas en sus labios y otras más caen a su suéter viejo; se limpia con la manga y le da un sorbo a su atole, que parece que aún burbujea de lo caliente que está; en

un abrir y cerrar de ojos, las manos están vacías y del vaso parece que desapareció por arte de magia el contenido. Se levanta, se sacude la tierra que le pudo quedar en las pompas; un poco de salsa verde de su desayuno quedó en la comisura de sus labios. A veces parece que la monotonía se apodera de su vida, cómo de la de quizás muchos más, pero eso no le impide siempre estar de buen humor, de sonreír con sus pocos dientes. Mañana a mañana es la misma rutina. Hoy tomaría café en la mañana, un poco más cargado que el de días anteriores, con un pedazo de pan de feria que le había regalado la vecina; el frío estuvo más fuerte de lo normal, de ese que te llega hasta los huesos, que cuando estás en la cama no te quieres ni mover pues ya has calentado tu lugar. Te enroscas y te tapas hasta los ojos, la nariz está más fría que la de Rodolfo el reno. En la mesita dejó el trozo de pan y ahí se quedaría. Hubo tanto frío que al final llegó el final; las estrellas cobijaron sus sueños, la Luna los iluminó, las hormigas se encargaron de llevarse un poco de pan, el viento sopló tan fuerte aquella vez que parecía era el último suspiro que daría.


Pablo Neruda

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• DICIEMBRE 2014 • AÑO 3 • • NUMERO 24 • • PRECIO $ 30.00 M.N • • WWW.451efe.mx •

PERIODISMO NARRATIVO DE HIDALGO

Carta del

Querido dos mil catorce, dos puntos ALMA SANTILLÁN * AGUSTÍN RAMOS: Arte y política * MELINA GONZÁLEZ GUZMÁN: Epidemia de pobreza * CRISTÓBAL ROJAS MILLÁN: Nostalgia por las posadas decembrinas de antes * TANIA PERALTA ZAMORA: Pan de feria *TIMO VIEJO: Mail sin destino * ABRAHAM CARRASCO: Una mirada al corazón de la Sierra Otomí-Tepehua * LUIS CORRALES VIVAR: La Heroica de Beethoven en Pachuca * MARIAN P. ZAMORA: Manantial de serendipias * GERARDO BORBOLLA GONZÁLEZ: Diciembre, el mes de ¿celebrar? * AURORA OLIVA: #20NovMx * 1

Directorio Director JAVIER PERALTA ZAMORA Director Editorial MIGUEL ÁNGEL HERRERA HERNÁNDEZ Edición TANIA PERALTA ZAMORA ARTE EDITORIAL LDG. VIANEY TOLENTINO SÁNCHEZ Colaboradores permanentes: AGUSTÍN RAMOS, LUIS CORRALES VIVAR, CRISTÓBAL ROJAS MILLÁN, JULIA ELENA CASTILLO, JORGE VALERIO ÁVILA GÓMEZ, ARTURO TREJO VILLAFUERTE, FEDERICO ARANA, MELINA GONZÁLEZ, ABIGAIL HERNÁNDEZ Ventas, publicidad y suscripciones: 451efe@gmail.com 7711569625 y 7711371878

* 451EFE, publicación mensual* Diciembre de 2014* Año 3 Número 24* Editor responsable: Javier Peralta Zamora* Número de certificado de reserva: 04-2013-111313471300-102, expedido por el Instituto Nacional del Derecho de Autor* Certificados de licitud de título y contenido en trámite* Publicado y Distribuido por Consorcio SABINO de Comunicación y Educación, S.A. de C.V. *Domicilio de la publicación: Arcos del Padre Tembleque 130 Fraccionamiento Los Arcos, Pachuca, Hidalgo 42083 *Teléfono 7711569625 y 7711371878* Impreso por Lito Impresos Bernal S.A., Cerrada Bulevar Everardo Márquez s/n Km 2.5 carretera Pachuca Ciudad Sahagún, Pachuca, Hidalgo, CP 42090* Precio $30.00 * Dirección de Internet: http//www.451efe.mx. Prohibida su reproducción parcial o total.

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¡Dos años! Llegamos a la edición número 24, y por supuesto que es asunto digno de ser celebrado, porque estamos ante usted, lector, lectora; ante nuestros colaboradores, ante la plena y abierta posibilidad de jurar que nadamás por este hecho, la vida ha sido lo que esperábamos del 2014. Mejor manera no hay de concluir un año como el que está a punto de ceder su paso al 2015. Y por eso ahí le va el resumen de lo que ponemos a su disposición en este ejemplar de aniversario: Alma Santillán, nuestra cronista de cabecera, hoy le dice sus cosas al 2014, en una carta íntima, plena de sentimiento como deben ser todas las misivas que se hacen por estas fechas, en un estilo que nos confirma, una vez más, que estamos ante una de las mejores exponentes del periodismo narrativo hidalguense. Timo Viejo, como gusta que le llamen y se llama, nos deja una primera colaboración que, estamos seguros, se convertirá en presencia permanente dentro de estas páginas. ¡Bienvenido Timo! Melina González Guzmán regresa para gozo de muchos de nuestros lectores, que habían escrito para preguntarnos qué había pasado con quien prácticamente no se había ausentado una sola ocasión desde la fundación de esta revista. Aquí está, puntual, a la hora buena, con un texto presente de la tragedia que vive el país: “Epidemia de pobreza”. Una nueva sección a cargo de Mariana P. Zamora, “Manantial de serendipias”, o lo que es igual, las palabras que faltan para expresar lo que sentimos. El maestro Agustín Ramos, parte fundamental del equipo que mes a mes elabora 451EFE, se hace presente con un espléndido texto, “Arte y política”, que nos hace preguntarnos el porqué los políticos no razonan, no piensan a veces con el ánimo de la claridad. También nos acompañan, y gracias por ello, el arquitecto Luis Corrales, Aurora Oliva, nuestra editora Tania Peralta, Gerardo Borbolla y Cristóbal Rojas. Mención especial merece el trabajo fotográfico de Abraham Carrasco y su estudio sobre la sierra Otomí-Tepehua. Y por supuesto las secciones fijas a cargo de Jorge Carrasco, Valerio Ávila, Abigail Hernández y Sandra Pérez. Quédese, no este mes, sino todo el año que ya se asoma a la vuelta de la esquina. Y se lo pedimos porque sin usted, lector, lectora, todo el gusto de celebrar dos años de poco serviría. Así que hagamos ese compromiso de vernos desde enero a diciembre del 2015 y festejar, luego entonces, el tercer año de su revista, nuestra revista. En tanto, y con gusto enorme le participamos, que con este número ¡CUMPLIMOS DOS AÑOS!


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C O R D O I S T R O A E C NT U Q IL U MSP S O O D D án

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Alma

Nostalgia, sentirás que las personas tienen mucha nostalgia y le darán tu nombre; te dedicarán, por lo menos, las dos últimas semanas del mes y estarán pensativas, dubitativas, incluso podrías hacerlas llorar. Porque tú no sabes cuántas veces te habrán pedido ser el mejor de sus años, recibir de ti sólo alegrías para recordarte con gusto y luego despedirse, sin pensar en que su destino depende de todos menos de ti que, sin que lo tomes a pecho, nada más eres un número.

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Por ejemplo, yo te vi venir con tanta determinación y alegría que hasta me contagiaste; como ludópata que intuye que la siguiente jugada será la jugada, no me despegué de la mesa y te aposté todas mis ganancias. No creo que lo recuerdes, porque yo no te conocía ni tú a mí, pero cruzamos miradas y sonreímos como quienes están a punto de cometer la mejor y más divertida de las tropelías. Pierde cuidado, no te reclamaré. Todavía.

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Con que ya te vas. Y no te librarás de reclamos, ni de miradas tristes de quienes dejaste con la cabeza llena de ilusiones y optimismos que animaste hace doce meses, y mucho menos de hipocresías de cientos de miles que dirán que fuiste lo mejor de su vida pero ya tienen listo el mismo discurso para tu sucesor, y hasta con más fuegos artificiales. Pero, total, dicen que la esperanza muere al último. Contigo viene la nostalgia, por todos lados, lista para entrar por los cinco sentidos que tenemos los seres humanos (y los inhumanos también). Te habrás dado cuenta de que las compras para adornar tu muerte comenzaron hace ya varios días, semanas quizás; fuiste testigo del desempolvadero de discos de villancicos que han inundado el ambiente desde octubre, de árboles verdes, blancos y hasta morados que en todo su sintético esplendor han sido colocados en los supermercados y las mercerías grandes del centro. Seguirás notando que cada día más los colores y las luces iluminarán fachadas, ventanas, autos, restaurantes, guardarropas, porque ya no hay límites para mostrar cuán felices pueden vivirse tus últimos momentos. Para ti no es algo nuevo, las despedidas han sucedido desde que llegaste; aunque a ti nadie te salude sino un amanecer y te despida un anochecer, sólo uno. Esos pequeños ratos te harán captar más voces de las que siquiera imaginaste, porque estarán hablándote todas al mismo tiempo, unas reprochando, otras esperando que aún las sorprendas y otras, las menos, agradeciéndote por lo que representaste. Nostalgia, sentirás que las personas tienen mucha nostalgia y le darán tu nombre; te dedicarán, por lo menos, las dos últimas semanas del mes y estarán pensativas, dubitativas, incluso podrías hacerlas llorar. Porque tú no sabes cuántas veces te habrán pedido ser el mejor de sus años, recibir de ti sólo alegrías para recordarte con gusto y luego despe-

dirse, sin pensar en que su destino depende de todos menos de ti que, sin que lo tomes a pecho, nada más eres un número. En serio, un número, uno favorito y con buen sonido tal vez, pero sólo así: dos mil catorce. ¡En la madre!, es una cantidad muy grande, y más de uno todavía espera que seas tan bueno como nunca le prometiste. Lo sé, es injusto para ti, porque serás odiado en las líneas de tiempo personales, climáticas, económicas, políticas y sociales alrededor del mundo (no debe haber estado de la chingada sólo en esta latitud). Por ejemplo, yo te vi venir con tanta determinación y alegría que hasta me contagiaste; como ludópata que intuye que la siguiente jugada será la jugada, no me despegué de la mesa y te aposté todas mis ganancias. No creo que lo recuerdes, porque yo no te conocía ni tú a mí, pero cruzamos miradas y sonreímos como quienes están a punto de cometer la mejor y más divertida de las tropelías. Pierde cuidado, no te reclamaré. Todavía. El tiempo pasa inexorablemente y tú eres una más de sus víctimas; pero qué más podemos hacer al respecto sino agachar la cabeza resignadamente, esperar que pase la sensación de tristeza y lejanía y tomar aliento mientras los ánimos regresan también y nos preparamos para recibir con un grito de júbilo y un estallido de emoción al nuevo y fulgurante dos mil quince. Yujú. Pero no pongas esa cara; ven, vamos a caminar por los centros comerciales, llenos de adornos decembrinos, luces, colores, esferas que iluminan los anaqueles repletos de juguetes, listos para hipnotizar a cuanto niño se acerque. Un consejo te doy: no le preguntes a ninguno de esos enanos qué juguete quiere para Navidad o día de Reyes porque te frustrarás de ver lo poco que podrías regalarle en comparación con lo que él o ella quieran. Siempre lo quieren todo (y luego ya no), lo sabes. ¿Ves a esas personas que están


allá?, sí, junto al nacimiento que está vacío porque Santa Clós monopolizó las fotografías del recuerdo. Te apuesto lo que quieras (siempre y cuando alcance con lo que me dejaste –touché-) a que ellos no saben cómo estirar sus últimos billetes del aguinaldo y que empezaron a derrochar desde ese mentado buen fin. Y es que ahora es cuando recuerdan que deben (obligatorio, por supuesto) comprar regalos para toda la familia, guardar para la tenencia del coche, y dejar un poquito por si el alcoholímetro los atrapa cuando empiecen las posadas. No sabes lo afortunado que eres, porque tú ya te vas, pero yo tendré que volver a pasar por el numerito ese del seis de enero, comprar la rosca de Reyes, varios litros de leche y tabletas de chocolate para acompañar la reserva de tragos que habrá quedado del brindis de fin de año… o sea por ti. Acuérdate de tu primer (y único) día de Reyes, hay que volver a estar al pendiente de que el tío Pepe no se trague al niño dios para ahorrarse los tamales del dos de febrero, para que por lo menos esta vez sí ponga la casa. Querido y ya añorado 2014, cuántas cosas bellas trajiste, y cuántas más también te llevaste, si no creas que se me olvidan. Pudimos haber sido muy felices juntos; tú mejor que nadie sabes cuánto deseaba conservarte como el mejor. Sí, es un reclamo, pero, venga, sabes que es con el corazón. Sé que no dependía de ti, ni de una divinidad, mucho menos del karma porque, de ser así, por supuesto que habríamos llegado hasta el cielo. Mala suerte, supongo. Pero con todo y las lágrimas que ahora ves caer y no comprendes, debemos concentrarnos en algo tú y yo: ¿quién va a comprar las uvas?, ¿y la sidra para el brindis?, y más que todo: ¿por qué no te convencí de aprovechar el julio regalado para gastar menos en lo que beberé(mos) del quince en adelante? Porque sé que, como a mí, te ganará la nostalgia y querrás acompañar con va-

rios tragos esa sensación extraña de saber que te irás y nadie te pedirá que te quedes; deberás lidiar con la terrible idea que te vean como otra estampa del álbum al que voltearán la página ya sin brillo y que no tengan ni la sola intención de ponerle un separador bonito para recordarte cada noche. Te entiendo más de lo que piensas. Menos mal que aún estarás a mi lado el veinticuatro, porque algo me han de encargar para la cena y por supuesto que no voy a cocinar, tal vez sólo comprar el ponche, un guiso sencillo, o algo del súper porque no sabes lo bien que ya cocinan ahí, o bueno, por lo menos mejor que tú y yo. De acuerdo, si llevamos algo, le haremos arreglos porque la abuela sospechará que hicimos trampa y me regañará por no haberle pedido su recetario para conservar el sabor de la casa. Lo que sí es nuevo para ti es el desmadre de pensar en los propósitos del próximo año. Disculpa, no es que me urja que te vayas, ni es mi intención hacerte sentir triste, pero en serio no tienes idea de lo difícil que es; cada año, no hay persona que no pregunte si ya tienes tu lista “porque el tiempo se va volando”, o el clásico chistoso que te mira con curiosidad y lanza un: “¿y cuántos de esos propósitos pudiste cumplir?”. Por eso yo no hago lista, la hice un par de veces, hace muchos años, pero antes de terminar de escribirla ya me había frustrado. Pero si te lo menciono es porque a mucha gente sí le atormenta, y debes estar preparado para esos reproches, porque claro que te culparán a ti de no haber tenido tiempo, dinero o ganas. Faltaba más. El cuento que viste escribirse desde tu primer día de vida, se repetirá, tenlo por seguro: que si hacer ejercicio, que si aprovechar el tiempo con quienes le aman, que si cambiar de coche, de casa, de estilo de vida. Promesas, pues; simples y llanas promesas. De quedarte doce meses más, te resultaría aburrido

Querido y ya añorado 2014, cuántas cosas bellas trajiste, y cuántas más también te llevaste, si no creas que se me olvidan. Pudimos haber sido muy felices juntos; tú mejor que nadie sabes cuánto deseaba conservarte como el mejor. Sí, es un reclamo, pero, venga, sabes que es con el corazón. Sé que no dependía de ti, ni de una divinidad, mucho menos del karma porque, de ser así, por supuesto que habríamos llegado hasta el cielo. Mala suerte, supongo.

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darte cuenta de lo predecible que es la gente: las mismas palabras, las mismas acciones y por lo tanto, los mismos resultados. Quizá no sea gran consuelo para ti, lo entiendo, pero no te perderás de nada. Llevo treinta veces más que tú en este lugar y, créeme, no cambia. Todo lo que estás viviendo ahora te desconcierta, lo noto en tu silencio, y es posible que tu reacción sea normal, finalmente nadie te advirtió que este mundo está de cabeza y que eso de que la Navidad es una época de reconciliación y reflexión y paz mundial es, efectivamente y siendo decente contigo, una mentira. O al menos lo es para el grueso de la población, porque tampoco vamos a generalizar, supongo que sí hay quienes se la pasan a toda madre en su núcleo familiar y no son dominados por la histeria de las compras y los preparativos o la neurosis resultante de convivir más de la cuenta con esos extraños que habitan en su misma casa. ¿Adónde van los años cuando mueren? No te rías, es una pregunta seria. No se pueden ir al limbo, ni al cielo o al infierno porque ninguno existe pero… ¿se esfuman y ya? Debes pensar lo mismo de los humanos, ¿verdad? Pero fíjate que ellos (nosotros, da igual) dejarán un montón de huesos como prueba de que ocuparon un espacio; y tú, pues tu nombre quedará inscrito en la historia. De acuerdo, tú ganas. Y ya que hablamos de historia, ¿nos recordarás de alguna manera

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cuando el inventor de los años te pregunte cómo la pasaste en la Tierra?, ¿alguien te ha platicado que haya una especie de auditoría luego de que pasas la estafeta al que viene?, ¿te acuerdas de la cara de cansancio, alegría o tristeza de dos mil trece?, ¿alguien te advirtió que vendrías a ser un mero espectador y que, por lo tanto, no debías meter tu cuchara como ahora yo lo estoy haciendo contigo? Debo ser honesta: cuando te llamé para hablar, sólo tenía una frase en mente. No te la diré porque a estas alturas ya me caíste bien… es que, ¿sabes?, pocos me han escuchado con esa atención y paciencia que veo en ti. Será una lástima que no nos volvamos a ver. Ya que andamos de confesiones, yo sí pensé que serías mi año favorito en todo el mundo, me gusta mucho el cuatro con el que cierra tu nombre, es la más sana de mis fijaciones. No te diré lo que haré durante tus últimos días, quiero que sea una sorpresa para los dos, pero ten por seguro que escucharás mi voz… eso sí: no garantizo no desafinar cuando se me pasen los mezcales (que es siempre). Sabes que odio las despedidas, y por lo tanto no te llevarás la mía adondequiera que vayan los años al morir. Por ahora, sigue moviendo esos pies y vámonos, que las calles se han vaciado y el viento helado me está congelando la piel, y bien sabes que tampoco me gusta tener frío.

¿Adónde van los años cuando mueren? No te rías, es una pregunta seria. No se pueden ir al limbo, ni al cielo o al infierno porque ninguno existe pero… ¿se esfuman y ya? Debes pensar lo mismo de los humanos, ¿verdad? Pero fíjate que ellos (nosotros, da igual) dejarán un montón de huesos como prueba de que ocuparon un espacio; y tú, pues tu nombre quedará inscrito en la historia. De acuerdo, tú ganas.


Bar Mirador

Nostalgia por las posadas decembrinas de antes

Recuerdos de cuando todos éramos felices Es… como si algún malvado duende dublinense, pelón y de grandes orejas, se hubiera posesionado del país Es… como si la Caja de Pandora se hubiera destapado en México POR:CRISTÓBAL ROJAS MILLÁN

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al vez la situación de inseguridad prevaleciente; tal vez los salarios miserables, producto de un nefasto neoliberalismo (que obliga a la gente a vivir al día, dejando para mejor ocasión los ratos de esparcimiento); tal vez por ello y por otras causas, ahora los festejos del Día de las Madre, de las Fiestas Patrias, del Día de Muertos, y las fiestas decembrinas no son como en décadas pasadas. Frescos están los recuerdos de los festejos navideños de mi lejana infancia. Mi madre, mi hermana y quien esto escribe vivíamos en la colonia Roma de la Ciudad de México. Allá, en la calle de Villalongín número 24. Era un edificio de tres niveles, con diez departamentos en cada nivel y con un enorme patio. En ese edificio vivíamos 30 familias, en aquel México todavía alegre. Era el sexenio de Adolfo López Mateos.

Era ese México que nos robaron los neoliberales desde 1982. De la Madrid, Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto le han dado en toda la madre a nuestro país con sus reformas, todas ellas, a favor de los empresarios. Eran los años de la maravillosa década de los 60. Debo decir que me ha tocado vivir cinco décadas, y de todas ellas la de los 60s, es mi preferida. En esa década pasó de todo: hizo su aparición la píldora anticonceptiva; tomaron fuerza los movimientos de liberación femenina; de rebelión juvenil; la época de los Beatles, de los Rollings Stones, The Doors, Bob Dylan… pero también de los asesinatos de los hermanos Kennedy, uno siendo presidente y el otro como candidato a la presidencia de Estados Unidos; el asesinato de Martin Luther King; los años de la presunta llegada del hombre a la luna por parte de

los gringos, y también de la masacre del 2 de octubre de 1968. En esos años maravillosos, antes de que México perdiera la inocencia, los salarios sí tenían poder adquisitivo y, en consecuencia, nuestros festejos eran más completos, diferentes. Retomemos: En aquel edificio de Villalongín 24, donde vivíamos 30 familias todos nos conocíamos. Muy diferente a lo que ahora ocurre, que en muchas ocasiones el vecino del catorce no sabe ni cómo se llama el vecino del trece, ni a qué se dedica. En aquella época, la hermandad, la solidaridad entre vecinos era costumbre. La vida era más sencilla: No había esa sensación, ahora persistente, de desconfianza mutua… de tener que cuidarse de los demás. De leche y otros menjurjes Era una época muy diferente, en

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que, por ejemplo, la leche la llevaban a la puerta de las casas. Y había para escoger: leche en frasco de marcas comerciales, o bien la leche que directamente era llevada de los establos a los hogares, por un hombre de gran bigote, sombrero de paja y overol azul. Eran los años en que el litro de leche costaba un peso con 20 centavos, cuando el salario mínimo estaba en 25 pesos. Es decir, con un salario mínimo se podían comprar 20 litros de leche; hoy, que el salario mínimo está en poco más de 60 pesos, el litro de leche cuesta alrededor de 12 pesos el litro, apenas alcanza en este México neoliberal, para quienes ganan el salario mínimo, para unos cinco litros (QuÉ poca madre de todos esos políticos neoliberales que han llevado a nuestro país a estos salarios, a esta violencia, a esta situación). Vaya otro recuerdo: En aquel entonces el ama de casa se cuidaba que la leche… fuera leche, que no la hubieran “bautizado”, es decir, que el lechero no le hubiera echado agua. En el México actual, el de la economía distorsionada, al agua la venden cara, ahora hasta la embotellan y la venden en el supermercado, en la farmacia y en tiendas de la esquina. Tal vez ahora había que cuidar que al agua… no le echen leche. A propósito del mismo producto, en aquellos años un locutor anunciaba en la radio al restaurante Súper Leche de San Juan de Letrán (venido abajo en el terremoto de 1985), y aseguraba que ahí se servía leche “tan fresca, pero tan fresca, que hace 30 minutos… era pasto”. Eran años en que la sonrisa en los rostros era más frecuente en la gente que encontrábamos en las calles. Retomemos nuestro tema: las posadas decembrinas de hace 50 años. Cuando llegaban estas fechas.

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Las 30 familias de Villalongín 24 se organizaban para “repartir” las posadas del 16 al 23 de diciembre. Las ocho posadas eran divididas entre la gente de esos departamentos que en ese diciembre iban a estar en la ciudad de México, es decir, los que no vacacionarían en la provincia mexicana. En promedio cada posada era repartida entre tres departamentos. Quienes se encargarían de organizar los bocadillos, las piñatas, el ponche, la bebida, la música, las velitas, las luces de bengala, etcétera. Así pues para los niños diciembre era un mes fantástico. Prácticamente todos los días eran de fiesta. De piñatas, de música, de baile. Paréntesis musical Por cierto, en esos años, había algunas canciones que definitivamente se escuchaban en casi en todas las fiestas, en todas las reuniones. Una de ellas era la cumbia “La pollera Colora”, que en la voz de Linda Vera –promocionada como “la nueva voz tropical”- sonaba espectacular. Era una pieza bailable y también disfrutable al oído: Ahaaaaa… Al sonar los tambores esa negra se amaña y al sonar de la caña va brindando sus amores. Es la negra Soledad, la que goza mi cumbia. Esa negra sabe mucho qué caramba, con su pollera colora/ Por eso le digo mi negrita linda ven pa´ca con su pollera colora/ Ahaaa, cuando le canto a Soledad me siento yo muy contento, porque con su movimiento inspiración ella me da… Otra pieza musical inolvidable que en aquellos años escuchábamos con frecuencia era: “Yo no olvido al año viejo”, de letra corta, pero pegajosa: Yo no olvido al año viejo porque me ha dejado cosas muy buenas/… me dejó una chiva, una burra negra, una yegua

blanca y una buena suegra/… Ay me dejó, me dejó, cosa buena, cosa muy bonita… Obsérvese que eran los años inocentes. Todavía no llegaba “La muchos maridos” (Lupita D´Alessio, a quien en mi barrio Garibaldi, le decían cariñosamente “Putita D´Allesio) a decirle a alguno de sus viejos que ya no sentía nada al hacerlo con él. Tampoco hacía su aparición Francisca la Del Barrio (alías Paquita) con sus canciones de mentadas de madre, de cinismo (“Tres veces te engañé”) y su grito infame de: “Me estás oyendo inútil”. Ni hablar, eran otras épocas. Había respeto entre géneros, cuando aún los hombres cedían sus asientos en el transporte público a las mujeres (ellas han perdido tales cortesías porque las chicas de ahora dicen tantas groserías, como antes sólo lo hacíamos los hombres) y las canciones no tenían el ahora acostumbrado doble sentido hiriente. Aunque, esperen un momento. Por ahí andaba Mike Laure con su “Rajita de Canela”, que hay que reconocer daba lugar a una doble interpretación: “A Marina le gustaba le gustaba la canela, ella siempre me tenía su rajita de canela, ella siempre me decía yo no te la puedo dar porque te puedes quemar/ Yo quiero que me des la rajita de canela. Yo quiero que me des… Esas eran el tipo de canciones que se escuchaban en las posadas de aquellos tiernos años y que eran bailadas con mucha alegría por la gente. Aquellas posadas se hacían como ordenan los cánones. Recuérdese que las posadas navideñas son una celebración tradicional de México y algunos otros países latinoamericanos, recordando la búsqueda de posada por parte de José y María en Belén.


Paréntesis obligado En México esta tradición nació de la fusión entre las costumbres indígenas con las de los misioneros cristianos, que buscaron ir reemplazando gradualmente las creencias y ritos de la zona con elementos propios del catolicismo. Según los relatos tradicionales, el patriarca José, acompañado de su esposa María, caminó desde la ciudad de Nazaret a Belem para cumplir con sus obligaciones fiscales. Nueve días les tomó arribar a su destino. Al llegar, la Virgen estaba a punto de dar a luz a su hijo Jesús. Al ser rechazados del mesón y de no pocos hogares, tuvieron que refugiarse en un establo que personas bondadosas les habían ofrecido. Este pasaje (conocido ahora como Las Posadas) se conmemora en varios países del mundo católico durante los nueve días anteriores a la Nochebuena. Es importante señalar que en México, en diciembre se celebraba el nacimiento del dios Huizilopochtli, y se aprovechó esta tradición y fechas para imponer el cristianismo. Existe constancia de que en 1587, el religioso agustino fray Diego de San Soria, prior del convento de San Agustín Acolman, en el actual estado de México, obtuvo una bula del entonces Papa Sixto V para celebrar anualmente, en esa sede y otras del Virreinato, misas de aguinaldo que recordaran aquel lamentable suceso desde el día 16 y hasta el 24 de diciembre. Como todo festejo, en un principio esta fiesta se desarrolló en los atrios de los conjuntos religiosos, después se extendió hacia la vía pública: “Las calles se llenaban entonces de mucha gente que con gran bullicio se formaba en procesiones. Había profusión de luces, tanto desde las ventanas de las casas como con las velas que llevaban cada uno de los participantes. Todos

cantaban y bailaban, pero en el momento preciso se arrodillaban y rezaban”. De esa manera, lo religioso y lo profano se fusionaron en una original mezcla de devoción y diversión que hizo (desde aquel tiempo) de las posadas mexicanas algo único en el mundo. “Aaaquí no es Mesooón…” Según la tradición, José y María, iban de casa en casa pidiendo les dieran alojamiento, y en la mayoría de ellas les contestaban de manera majadera: “Aaaquí no es mesóooon siiigaaan adelaaaante”. Sin embargo, cuando consiguen alojamiento, las posadas decembrinas se convierten en fiesta y se rompen las piñatas, una construcción artesanal hecha en barro y papel china, que tenía la forma de una estrella de siete picos, que representa los siete pecados capitales en la religión católica. Se debía romper con un palo, que representa la fortaleza de Dios, que al romperse caían dulces (llamados colaciones) pintados de blanco, rosa o azul pálido y algunas veces rellenos de cacahuate o cáscara de naranja confitada y frutas tales como mandarinas, tejocotes, cacahuates y limas. Estas son recompensas y dones por vencer al pecado. En Villalongín 24, por lo regular se partían tres piñatas diarias, a saber: Una para los pequeños de hasta diez años. Con fruta, dulces y juguetes de plástico. Una para los jóvenes de hasta 20 años, que además de fruta traían algunos “vales” para lociones, espuma para rasurar, paquetes de hojas de rasurar, etcétera (compradas de antemano y expuestos en una pequeña mesa) La tercera piñata era para los adultos, en la que además de fruta venían tres vales para botellas de Ron Potosí,

brandy Presidente (el tequila, todavía no era una bebida tan popular como ahora). Hay que señalar que quienes ganaban estos vales donaban las botellas a la posada. Con lo cual, en cada posada se consumían alrededor de 10 botellas, más las que luego de terminadas surgían de “las coperachas”. Después venía el baile que, por cierto, era “calabaceado”, es decir, todos contra todos… Era la única ocasión en que los hombres podían bailar con “esposas ajenas”, con el permiso de sus parejas. Ya a estas alturas de la madrugada, a los niños ya nos habían mandado a dormir (una costumbre más que conveniente para los adultos, que no querían que fuéramos testigos de sus desfiguros). Actualmente, decíamos, tal vez por la crisis económica que se volvió eterna en México, ya no todas las familias conservan las costumbres del pasado, cosa que se ha agudizado a partir de los 80s. Hoy, las posadas se han convertido en bailes de salón (con música de banda, de raperos) donde ya no se recuerda la razón del festejo. Ojalá algún personaje con prestigio (el 99 por ciento de los políticos ya lo perdieron, políticos no por favor) se echara a la espalda la tarea de revivir la tradición de las posadas clásicas como lo hacen aún en algunas vecindades o conjuntos habitacionales donde los vecinos se organizan colaboran, y cada quien se encarga de algún aspecto de los preparativos, tal vez ya no con el poder adquisitivo de hace cinco décadas, cuando había hasta para incluir en las piñatas, vales para lociones o botellas de alcohol, pero sí con el ánimo de reencontrarse con la gente, con el vecino cercano, de conocer más de su historia, de ayudarse los unos a los otros… ¡Vaya, creo que las fechas hicieron que al final me pusiera un poco cursi!

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Epidemia de pobreza POR:Melina González Guzmán

Por el segundo aniversario, para Javier uno y Javier dos, que cavan el chiflón en la mina obstruida que es Hidalgo, permitiendo paso al aire.

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ay una familia tensa por la llegada de la señal digital en la televisión. Para poder verla, tan necesaria como amena es, tendrán que adquirir un decodificador e incluso una antena especial y sepa dios cuánto cueste esto. Ellos, que no pueden comprar su pantalla plana, ni el decodificador, ni siquiera los alambres que improvisen la antena, serán una familia “desinformada”, alejada de la gran final de los reallities, de las series repetidas hasta el cansancio con sus risas bobas completando las escenas de sus protagonistas bobos, estarán abstraídos también de las telenovelas y su vacía educación sentimental. Pobre

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familia que ya no verá las mismas películas programadas cada mes. Serán segregados por no entender las modas y simplezas que los demás imiten. En una escuela primaria, una niña colorea el cielo de verde. Al verlo, sus compañeros sueltan la carcajada. Ella muestra una avergonzada sonrisa convertida en raigones negros. Pasarán algunos años antes de que su madre al fin descubra que su hija no distingue el suéter rojo del azul. Todavía tantos más para que atienda sin apuro el problema dental porque las amistades que se acarician por el teléfono la han tenido muy ocupada. Ni los colores, mucho menos las dolencias dentales habían sido tan importantes.

La pobreza es más que hambre, también es ausencia de juicio. Estamos arriesgados al contagio de la pequeñez. La miseria calza cualquier zapato, aprieta cualquier talón. Los errores morales hacen el mundo, incluso el mundo físico, gradualmente más malo, hasta procurarle lo triste de su actual forma.


De un amigo que ésta mujer sigue en el feis, amigo que su perfil sugirió como esos que ella puede conocer, y que es amigo de otro contacto igual de desconocido, sólo sabe lo que toma en las fiestas y los memes que de vez en cuando comparte. Chatear con él implica descifrar diálogos sin una sola palabra porque están llenos de emoticones, aún así le da like cuando él sube la foto donde estrecha por el cogote al Pit bull que acaba de comprar. Lo quiere para realzar su imagen de malo aunque siempre se pasee en bermudas y chanclas de baño por el barrio. La chiquitita camiseta de algodón y las cadenas colgando de su cuello, más brillosas y toscas que la del perro, le hacen creer que proyecta una interesante notoriedad. Tres semanas después, el inurbano y malentendido Pit bull hace honor a su prestigio y lesiona en algún camellón al Yorkshire de una diputada. Ni el aire malandrín, ni la violenta cadena le sirvieron para controlarlo. La diputada, manda a su chofer a intercambiar teléfonos. Como todos los altos burócratas, ésta diputada puede pagar un chofer que la acarree mientras cumple sus importantes asuntos en camino. El asiento trasero está saturado de revistas que marcan la tendencia de cremas faciales correctivas y artículos triviales. Sus favoritos, los test. Y más aquellos que con la mayoría de respuestas C, la confirmarán como maestra en seducción. El chofer la lleva y trae recorriendo toda la ciudad, de malls a la foto en inauguraciones, de reuniones a comilonas, siempre buscando a la gente que engrose su imagen. Al chofer se le van las quincenas en el gasto corriente y los lujitos que con ellas pueda darse, los vencidos pagos de la renta, tarjetas y colegiaturas de los hijos están esperanzadas para la tanda que organiza un vecino que es controlador de viajes en el sitio de taxis. Ya mero sale el diez, su número. Y como las tandas nunca son puntuales, desde un principio calculó que más o menos veinte días después caería el dinerito y confía en que por lo menos pueda repartirlo entre el pago mínimo que solicitan los bancos y dar dos colegiaturas de las cuatro que debe, porque el resto alcanza para la nueva versión de celular que ya se anuncia está por salir a la venta. En el sitio, uno de los taxistas mata el tiempo de base descargando videos. El tiempo libre le parece eterno y castigado

cuando despega los ojos del aparatito que se absorbe en su palma. Le gusta retuitear los videos más vistos, el último superó cinco mil visitas en una hora. Era la exhibición de un gatito sumergido varias veces dentro de una cubeta espumosa de champú para autos. Resurgió ronroneando con los ojos a medio abrir y los bigotes vencidos. El minino se ve sometido hasta agonizar atrapado por un par de gringos ebrios. En Alabama, un policía detiene por exceso de velocidad a una conductora. La mujer afroamericana está paralizada de miedo. El policía enfurece cada segundo que lo hace esperar y a patadas comienza a deformar la puerta. Pierde la cabeza ante la indiferencia que cree ver en la detenida, ella se niega a bajar del auto dejando desamparados a sus tres hijos, siente que sería a ellos a quienes entregara. Cuando otros patrulleros llegan a desprenderlo del parabrisas donde todavía escupe insultos e informan al comandante, éste no se conmueve al escuchar la crónica por teléfono. Quizá ni la escucha, mira su jardín desde la ventana meneando la cabeza porque “ese” jardinero no sabe usar la motobomba para limpiar la alberca. Tendrá que largarse sin la paga. No se les puede pedir un favor. Ese jardinero michoacano, se encomendó a la virgen de Juquila para que le permitiera llegar al otro lado a cambio de tatuarse su imagen en la nuca. No ha podido cumplir. Un año de maltratos y penurias se borraron en otra promesa. Ahora compromete a su familia, que dice, irá hasta Juquila, Oaxaca, a ofrecer flores si le empieza a ir bien y que por fin pueda mandarles dinero. Como si fuera un crédito, confía que su nombre se olvidará en el buró de promesas. En Madrid, hay una pareja que recibe huéspedes extranjeros. Tienen su piso en Paseo de la Castellana, con vista a la plaza San Juan de la Cruz. La habitación que alquilan deja suficientes euros. El agua, gas y luz se pagan a parte. Las comidas se hacen fuera. El alquiler incluye las masticadas del Mastín en los zapatos y el dejo de su baba por toda la ropa. La ducha se usa cinco minutos cronometrados al día. Es una pareja en paro que ha sacado provecho a su piso. Quien los hizo ricos es un huésped que llegó de acá, de México, donde dijo que era poeta de las redes sociales. El gobierno

le permite conseguir beca tras beca y cubre su estancia por adelantado. Con un pago así de fácil, los jolines dobletean el costo y hasta le permitieron entrar a la cocina para el desayuno. Seis meses gozó el poeta mexicano de estos lujos. Volvió a su rancho bañado de cultura y con la agenda harta de contactos con los que podrá intercambiar pensamientos y fotos. Volvió con el acento y el andar falseados, y con obvios tatuajes de banderas del País Vasco. Cambió su denominación de origen. El eterno becado ya no mira a los ojos. En la madre patria están vigentes los saqueos y la exportación de chulos. Lo poco que quedó del poeta es imaginario. La petulante botarga que bajó del avión con entubados pantalones color mostaza, muy a la moda aunque parezca barquillo, llegó con el sobrepeso por alimentarse de tantas nuevas letras y con consigna de consumirlas hasta preservarlas en lo más dentro de su tripa. Necesita ser un eco para echarse a andar, así se da valor. No le queda más que pagar el viaje causando polémicas. Si lo filtraran en las manifestaciones sería el provocador encapuchado. Se mantiene de becas y premios venidos de la insidia. Llenando un país de horrendos chulos. Hay una dolencia en el ambiente. Es la pobreza. Una peste. Lo que hace al pobre no es la falta de recursos, el pobre es el individuo que recibe socorro a causa de esta falta de recursos. Cada ambiente general, cada clase social, posee necesidades típicas; los modos de satisfacerlas revelan la pobreza que hay en ellas. La pobreza es más que hambre, también es ausencia de juicio. Estamos arriesgados al contagio de la pequeñez. La miseria calza cualquier zapato, aprieta cualquier talón. Los errores morales hacen el mundo, incluso el mundo físico, gradualmente más malo, hasta procurarle lo triste de su actual forma. El mundo se llena de niños colocados en la primera fila esperando que el pequeño telón se abra. En la primera juventud, igual que el destino, irán descubriendo ante la espera alegre e impaciente las cosas que sucederán en el escenario. Es una dicha que nada sepan de antemano. Los títeres se asoman. A los ojos del que sabe realmente lo que ocurrirá, los niños son culpables ingenuos, condenados no a la muerte sino a la vida. Tienen la suerte de no conocer aún el contenido de su existencia. 13


política La extinción de la política y el arte verdaderos, mide los grados de extinción de la humanidad POR:Agustín Ramos

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a pura sintaxis de este enunciado da pie a la discusión. ¿Qué fue primero en el género humano, la política o el arte, el huevo cosmogónico o la gallina virginal? Si de preferencias se tratara, mi texto se debería titular “Política y arte”, pues escribo esta versión especial para celebrar el segundo año de 451 Efe sobre la base de una pauta de participación para conmemorar el aniversario número 38 del Partido Revolucionario de los Trabajadores y, luego, para dictar una conferencia en el Instituto de Administración Pública de Hidalgo. Para más señas, cuando abro un periódico primero voy a las páginas que informan (o desinforman) sobre el martirio de los palestinos en la Franja de Gaza, el asedio del imperialismo

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ruso a Ucrania o las facturas que el neoliberalismo le cobra a las soberanías nacionales. Y ya después, si sobra tiempo, le echo un ojo a las secciones encargadas de promover la cultura oficial y el libro más reciente del Crack o de cualquier otro invento comercial de las editoriales. Y es que aunque nunca he dejado de interesarme en ambos campos, concedo más atención a los hechos políticos que a los artísticos. Así, los centenarios de Paz, Huerta y hasta de José Revueltas me importan menos que el fusilamiento de civiles en Tlatlaya, el movimiento estudiantil surgido en el IPN y empatado con los sucesos de Ayotzinapa (que ponen al descubierto la guerra sucia como política de Estado tendiente a exterminar a las normales rurales).

Sin embargo decidí titular este texto como “Arte y Política” por una evidencia universal para la que bastará, creo, el siguiente ejemplo local: en Hidalgo es de más trascendencia el nombre de Anastacio de Ochoa y Acuña que el de cualquier miembro, vivo o muerto, del grupo político Huichapan.


Las posturas de Carlos Montemayor y Héctor Aguilar Camín como novelistas ante las guerrillas del México de los setenta, me interesan más por su peso político en el imaginario colectivo que por su relevancia estética como producto de dos intelectuales ideológicamente antagónicos y, del mismo modo, me intereso más que por las noticias culturales en sí por la manipulación mercadotécnica subyacente en el noticiero de Zabludovsky (sí, el mismo de siempre, medio siglo después) cuando entrevista a Laura Esquivel y concluye que el nuevo libro de ésta es “la primera novela del siglo veintiuno”, o cuando descalifica al nuevo Nobel de literatura porque las primeras páginas de un libro de éste le parecieron de difícil lectura. Esto quizá se deba a mi convicción, discutible y corregible como toda convicción, de que la esfera política rige y dicta el destino presente de las sociedades modernas y contemporáneas. ¿Destino presente? ¿No se excluyen entre sí éstos términos? Sí, si consideráramos al destino como una meta final predeterminable. No, si asumimos que nuestro único destino es este presente, un momento decisivo intensificado por la gravitación del pasado y por las probabilidades futuras. Sin embargo decidí titular este texto como “Arte y Política” por una evidencia universal para la que bastará, creo, el siguiente ejemplo local: en Hidalgo es de más trascendencia el nombre de Anastacio de Ochoa y Acuña que el de cualquier miembro, vivo o muerto, del grupo político Huichapan. Semejanzas Aunque la política y el arte se asemejan, se diferencian y se relacionan profundamente, aquí sólo revisaré algunas coincidencias. Ambas son prácticas humanas culturales, es decir no naturales [importa aclarar esto porque toda ideología dominante tiende a “naturalizar” las construcciones políticas y culturales que la sostienen; dicho de otro modo, pretenden hacer

pasar como natural lo que no lo es]. Ni la habilidad intelectual en detrimento de la habilidad física o viceversa ni ciertas fortalezas o debilidades étnicas o de género son naturales, tampoco lo son las formas de agrupación (la familia nuclear, por ejemplo) ni el orden mundial imperante o el culto a la personalidad en una república de aparato y opereta. Nada de esto es natural ni eterno, aunque su perduración y la propaganda hagan que lo parezca. Arte y política coinciden en el deseo de convertir en real lo irreal, sea potenciando determinado anhelo individual en una obra de arte, sea enarbolando la voluntad colectivizada de una idea mediante el quehacer político. Existe incluso el arte de la política (ajeno a la capacidad artesanal de los ilusionistas), como también existe la fuerza política del arte para desautomatizar actos y conductas individuales o sociales o para desenajenar a ambos mediante emociones capaces de generar desde un suspiro hasta una catarsis. Política y arte, asimismo, representan acciones cuyos efectos son colectivos. Jacques Ranciére considera que la estética, en tanto organización, ordenamiento e invención, incluye tanto al arte como a la política, pues ambas esferas aspiran a crear, organizar y dar orden a un objeto material o colectivo. Empero, la principal característica de ambas prácticas la constituye el ser imprescindibles. Por más que en ciertos lapsos de la historia, a veces demasiado amplios, como el actual, arte y política parezcan prescindibles o sustituibles. En nuestra civilización de apariencias (sintetizable en la frase hamletiana “ser, parecer, ¿cuál es la diferencia?”), bajo una cultura hegemónica donde según Jean Baudrillard todo es simulacro; con una globalidad donde, al decir de Zigmunt Bauman, las construcciones humanas más sublimes pierden solidez y se vuelven líquidas; en esta era, digo, casi cualquier producto mercantil se

vende como arte y el cleptómano, el gesticulador, el sociópata, el genocida potencial o confirmado aparece, al tenor de intereses financieros transnacionales, como el personaje idóneo para presidir una determinada nación. Así, en los países sarcásticamente autodenominados democráticos, se postula para (o se impone en) el puesto más alto al peor político. En México, dado el nivel de participación social, farsa y fraudes electorales mediante, se han turnado en la presidencia especímenes como Peña, Calderón, Fox, Zedillo, Salinas etcétera. Sin embargo lo mismo que se dice de una nación como la nuestra, de cualquier gremio y hasta de las sociedades de padres de familia en las escuelas, puede decirse del mundo [Barack Obama, afroamericano descendiente de inmigrantes, comprueba la inoperancia de la pseudopolítica planetaria, pues presidiendo la nación más poderosa del mundo nada ha podido hacer contra la discriminación y el odio hacia los migrantes]. Entonces, cuando digo que el arte y la política son imprescindibles, me refiero a que las apariencias y los simulacros no bastan para sustituirlos, y que, en la etapa actual del modo de producción capitalista, así como la guerra triunfa sobre la conciliación, tanto o más que las finanzas o la economía productiva, así el artificio publicitario triunfa sobre el arte más genuino. Y así como el descaro ingenuamente descriptivo y pragmático de Maquiavelo en El príncipe pasa como genialidad, así la literatura contemporánea deja de constituir el diálogo definido por Jean Paul Sartre en Situations II, justo en el momento en que Walter Benjamin contemplaba, dados los avances tecnológicos de nuestra época, la oportunidad de que las sociedades, todas, participaran creativamente en y de la obra de arte. Hoy más que nunca son vitales la política y el arte verdaderos, precisamente porque su extinción mide los grados de extinción de la humanidad.

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AGRADECIÓ EL PRESIDENTE ENRIQUE PEÑA LA LABOR DE LOS HIDALGUENSES Y SUS AUTORIDADES, EN LA ATENCIÓN INTEGRAL DE LAS MUJERES

El Ejecutivo federal también reconoció el empeño y suma de voluntades para contribuir en mejorar las condiciones y entornos de las familias mexicanas.

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n el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres y las Niñas, el presidente Enrique Peña Nieto, acompañado del gobernador, José Francisco Olvera Ruiz, inauguró el Centro de Justicia para Mujeres del Estado de Hidalgo, que se ubica en la capital hidalguense. Ante miles de mujeres y hombres provenientes de las diferentes regiones de la entidad, el presidente Enrique Peña informó que este Centro se logró concretar, gracias a la adecuada coordinación de esfuerzos. El Ejecutivo federal, dio a conocer que con el de Hidalgo, suman ya 16 Centros de Atención para las Mujeres y el objetivo de su gobierno es que en todas las entidades federativas exista un espacio de este tipo para brindar atención psicológica, en salud y asistencia legal para quienes lo requieran. Se pronunció por formar un frente común para luchar contra todas las conductas que derivan en violencia contra la mujer y así proyectar una sociedad moderna, que les permita mayor desarrollo y una vida digna. Expuso que en el Plan Nacional de Desarrollo se establecen políticas públicas encaminadas a erradicar la violencia e impulsar la equidad de género para alcanzar, con ello, las mismas oportunidades para todas. El mandatario mexicano resaltó la importancia de trabajar conjuntamente, sociedad y gobierno, en la consolidación de un clima de armonía social, que se refleje en el bienestar de las familias de las que son pilar las mujeres de México. De ahí que subrayara la importancia de la reforma política electoral, la cual exige a los diferentes partidos políticos postular a mujeres en el 50 por ciento de sus aspiran-

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tes a un cargo de elección popular, lo que las coloca en importantes escenarios que benefician al sector. El presidente Peña, al finalizar su mensaje, enumeró las acciones que su administración impulsa y lleva a cabo en el territorio estatal, para beneficio de las familias que habitan las diferentes regiones de la entidad; mencionó, ente otras: Planta de tratamiento de aguas residuales de Atotonilco El Grande; sistemas de agua potable Hules 2 y El Platanar; el Banco de Sangre de la capital hidalguense; terminación y equipamiento de los hospitales de Tulancingo, Tula, Metztitlán y el de Especialidades de Pachuca; así como el encauce del Río de las Avenidas en su tramo La Paz y Bulevar Las Torres. En presencia de integrantes de su gabinete, como fue el caso de Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación; Rosario Robles Berlanga, titular de Desarrollo Social; Jesús Murillo Karam, procurador General de la República; así como de Claudia Ruiz Massiu, de Turismo, y Mercedes Juan, de Salud, entre otros; el mandatario mexicano reconoció el esfuerzo de su equipo de trabajo, por encaminar las acciones necesarias para impulsar la equidad de género y garantizar con ello, su libre desarrollo social y profesional. En su intervención, Francisco Olvera dio a conocer la manera en la que operará a partir de este día, el Centro de Atención para Mujeres del Estado de Hidalgo, así como las áreas que lo integran. En este sentido, enfatizó que este logro es gracias a la visión y compromiso con las mujeres del presidente Enrique Peña, y enumeró algunos de los servicios que otorgará; detalló: Acceso integral a la procuración e impartición de justicia, ya que cuenta con sala de oralidad en el nuevo sistema penal;

servicios especializados en atención médica y psicológica; asesoría jurídica; capacitación para el trabajo; servicios de guardería y de educación para sus hijas e hijos. Es un espacio, continuó, donde serán atendidas con respeto, sensibilidad y profesionalismo; su construcción y equipamiento se culminó gracias al aporte de los programas de la Secretaría de Gobernación, que encabeza Miguel Osorio. De la misma forma, el mandatario hidalguense recordó que derivado de su política de equidad de género y erradicación de la violencia contra las mujeres, entre otras acciones, en todas las áreas de la administración se han creado unidades de género, cuya función es la concientización social, así como la promoción de sus derechos. El gobernador Olvera resaltó que esta puesta en marcha es un acto de justicia social y reconocimiento a las mujeres hidalguenses. "Aún falta mucho camino, sin embargo contamos con la valentía, la fuerza y el liderazgo de las mujeres de esta tierra". Durante su mensaje, el secretario Osorio expresó que México sólo puede avanzar si avanzan sus mujeres en condiciones de igualdad, sin ser víctimas de violencia; “sólo así crecerán y harán crecer a las comunidades de las que forman parte, y atentar contra ellas, es hacerlo en contra de nuestro país”, indicó. El funcionario federal señaló que cada vez que una mujer sea violentada, pierde la sociedad, es así que, desde el Gobierno de la República, se busca consolidar una sociedad de derechos y en donde ellas vivan sin miedo y con mayores oportunidades de desarrollo. Detalló que se trata de un cambio cultural profundo, donde la violencia en contra de este sector de la sociedad deje


de permitir casos aislados y ser "algo normal", para que nunca más se presente en el futuro. Osorio Chong resaltó que desde el gobierno de la República, se combate la violencia hacia las mujeres de manera integral, ya que es instrucción y objetico del presidente de México, consolidar una sociedad donde las mujeres vivan sin miedo y con más oportunidades de desarrollo. Resaltó que se impulsan acciones de prevención con los jóvenes para evitar la violencia desde el noviazgo y se han creado más centros para las mujeres como el inaugurado en Pachuca, para garantizar su acceso a la justicia y superen de la mejor manera los daños físicos o emocionales que hayan vivido. Destacó que en el período 2013-2014, se duplicaron los recursos destinados a estos espacios con respecto a 2010-2012, lo que habla del compromiso que tiene el presidente Peña con las mujeres de México y, en este caso, las hidalguenses. Por su parte, la titular del Instituto Nacional de las Mujeres, Lorena Cruz Martínez, se pronunció por continuar

con la atención integral de las causas de la mujer, a fin de que siga siendo una prioridad de todas las instituciones, de la sociedad civil y de los sectores público y privado. “El gobierno federal no tolerará la violencia hacia las mujeres y las niñas, y una muestra de ello, son todas las instituciones que se han creado para su defensa y protección en todo el territorio nacional”, declaró categórica. Las mujeres, finalizó, han sido las mejores constructoras de la libertad, la democracia y la justicia, de ahí que en gratitud, la sociedad y las instancias públicas deben de trabajar de manera cercana para garantizar la igualdad de oportunidades para todas. Fue Elvira Hernández Domínguez, habitante indígena de la región Huasteca, quien agradeció al presidente Enrique Peña por las acciones que impulsa para enfrentar la violencia contra las mujeres; asimismo, conminó a todos los sectores sociales a participar y sumarse en esta ardua labor en beneficio de las más necesitadas. 17


OTORGAN PREMIO AL AYUNTAMIENTO DE PACHUCA, POR FORTALECIMIENTO DE LAS FINANZAS LOCALES La Fenamm hace entrega del Premio Nacional al Buen Gobierno Municipal Este premio reconoce a los gobiernos municipal por una gestión pública de excelencia. Presidenta de la Fenamm reconoce el trabajo del ayuntamiento de Pachuca. El alcalde capitalino agradece la confianza de los ciudadanos.

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n el marco de la Conferencia Anual de municipios 2014, que se llevó a cabo en la ciudad de Guadalajara Jalisco, el ayuntamiento de Pachuca recibió el Premio Nacional al Buen Gobierno Municipal a través de la Federación Nacional de Municipios de México, el gobierno del estado de Jalisco, la Procuraduría Federal del Consumidor y el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras). En la categoría de Fortalecimiento de las Finanzas Locales, el gobierno de la capital del estado de Hidalgo, recibió esta distinción por considerar que se han implementado soluciones innovadoras en la materia, que constituyen un ejemplo digno de ser replicado en los municipios del país. En su oportunidad Bárbara Botello Santibáñez, alcaldesa de León, Guanajuato y presidenta de la Fenamm, expresó que este premio es una iniciativa impulsada por la Federación Nacional de Municipios desde hace tres años con la finalidad de reconocer a los gobiernos municipales que realizan una gestión pública de excelencia y que ofrecen soluciones innovadoras a los desafíos que actualmente se enfrentan. Sobre el premio recibido por parte del ayuntamiento de Pachuca, Bárbara Botello dio a conocer que el fortalecimiento de las finanzas es fundamental en el desarrollo y mejor calidad de vida de los ciudadanos, además, dijo, demuestra la confianza que los ciuda-

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danos tienen hacia este gobierno municipal “Es muy importante reconocer el gran trabajo que está realizando el Presidente Municipal de Pachuca, ha implementado una innovadora manera de recaudar el pago del predial, la cual ha sido aceptada con éxito y habla de un gobierno responsable en sus finanzas, cosa que tiene que ser replicado en los municipios del país”. Al respecto el alcalde capitalino Eleazar García Sánchez expuso que el reconocimiento no es solo para la administración municipal, sino también para los pachuqueños que se han sumado para trabajar de la mano a través de diversas acciones y se pueda tener una mejor ciudad “Se han aplicado políticas públicas en el fortalecimiento de las finanzas, se han ejercido diversos proyectos y alternativas para lograr una mejor recaudación y esto va ligado a la confianza ciudadana”

Cuando las finanzas son sanas dijo, se pueden generar proyectos, obras, programas sociales “Y hoy tenemos la posibilidad de ser en ese sentido uno de los mejores ayuntamientos de país”. Cabe recordar que en el mes de agosto de este año, el ayuntamiento de Pachuca recibió un reconocimiento por finanzas sanas de parte de la organización Fitch Ratings, destacando como fundamental la transparencia en el manejo de los recursos económicos. Por su parte Liliana Verde Neri, tesorera municipal, dio a conocer que para este 2014 se han recaudado 79 millones de Pesos derivado del pago del predial, de manera específica en la reciente edición de El Buen Fin más de 1500 cuentas se pusieron al corriente y se tuvo un ingreso de 2 millones de pesos. Agregó que en lo que va de la reciente administración el porcentaje de contribuyentes cumplidos es del 65%.


Una mirada al corazón de la Sierra Otomí-Tepehua

Fotografías de Abraham Carrasco

abcgr7@gmail.com Instagram: abori www.igersmexico.com 19


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Valorar las capacidades innatas de la población mexicana. Mostrar la sabiduría indígena en la organización comunitaria bajo la luz reflejada en un lente fotográfico, es una oportunidad para sembrar diversidad en el pensamiento de las personas del Estado de Hidalgo. Esto es lo que Psicología y Derechos Humanos, PSYDEH A.C., expone en la presente obra fotografica. Éstas son necesarias para incentivar y desarrollar un sustento integral y equitativo de las comunidades índigenas de nuestra entidad, Hidalgo. La exposición intinerante gira en torno de la vida comunitaria de la población indígena de los cuatro municipios de la región Otomí-Tepehua, los cuales son: Acaxochitlán, Tenango de Doria, San Bartolo Tutótepec y Huehuetla. La fotografía ha sido el mejor medio para mostrar y entender estas regiones por medio de una mirada realista: intercultural. Es por esto que buscamos nuevos medios que muestren el trabajo de PSYDEH A.C. tomado de la mano del Consejo Regional de Mujeres Indígenas, como una fuerza de organización que está volcada a buscar e incentivar el progreso sostenible en los desafíos del desarrollo humano que enfrenta el pueblo de México. Psicólogo: Jorge Echeverría (Director)

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Mail sin destino POR:Timo Viejo

P. González. Nuevo Correo. Fecha: 1 Enero de 2015 Asunto: Otro año Uno, mientras siga en esta casa, debe escribir cada inicio de año; es una costumbre que nos heredó M. No se escribe en papel, porque si así fuera las hojas y la tinta no nos alcanzarían. Escribimos en la tierra del jardín. Nos hincamos y con la punta de nuestro índice comenzamos a dejar nuestras ideas en el lodo. Lo que escribe uno borra las frases del otro. No ha cambiado nada desde hace años. Antes de mí pasó B. Sigue con ese mismo corte ridículo, el pobre se niega a crecer. Él escribió un nombre, se levantó y lo tachó con la suela de su zapato. Está enamorado. Supongo que al escribir el nombre de su amada cree que la madre tierra se manifestará y cambiará su curso para poder reunirlos. ¡Qué más da! Así son sus creencias. Es turno de J, pero así como ha sucedido estos tres últimos años, no quiere intentarlo. “Es muy pronto para que escriba algo, pasa tú” me dice. Lo miro fijamente y me encojo de hombros. Camino hacia la tierra pero E y A aprovechan el turno. Ellos se casaron en Abril del año pasado. Escriben algo rápido y empiezan a jugar con la tierra. La avientan hacia sus dientes y después se besan. Cuando terminan se toman de la mano y ríen a carcajadas tirados en el suelo. Ahora disfrutan del amor sin ese terrible peso de la timidez. “Vayan a un cuarto. Respeten a una persona de mi edad” les grita la vieja L. Ellos se levantan y se dirigen al interior de la casa. Busco con la mirada a J pero no está. Creo que es mi turno. Miro fijamente el lodazal y los dedos ahí marcados. Me agacho y pienso en qué podrías escribir. Quisiera ponerme en tu lugar. Quisiera ser lo que siempre quise que fueras, un tú en las tradiciones de mi familia. ¿Qué escribirías? Quizá me voltearías a ver con esa sonrisa que transmite seguridad y garabatearías sobre todo lo que pude lograr este año, o mejor aún, lo que pienso hacer en este. Lo sé, nunca dejaste de apoyarme. Siempre íbamos de un lado a otro. Te fastidiaba tanto con mis problemas que hasta pensé que un día huirías de mí. Pero no lo hiciste. “Todo estará bien”, me susurrabas al oído y después sonreías. Pero vaya, me estoy desviando. Debo escribir algo sobre ti, por ejemplo, tu paciencia. No, la verdad es que no debo. No lo haré. Mejor, resumiré todo lo que eras en una sola palabra, en un acto, en algo que, a pesar de no estar en el mundo, sea tuyo. Escribiré una consigna. Decías que serías el publicista de los oprimidos; aún me causa gracia, tanta, que debo aguantarme las risotadas. Sin embargo, ahora que lo pienso, debes ser un tú dentro de mi mundo, de mi familia, un tú dentro de mí. Hasta ahora caigo en cuenta que yo ocupo tu lugar en este planeta, aunque sea por un instante. Así, de forma efímera: yo soy tú. Entonces por qué no escribir alguno de tus eslóganes que no venden nada, o ese famoso eslogan que anuncia deudas bancarias: “Soñar en diciembre no cuesta nada, es gratis. Despertar en enero es costoso ¡Pague sus deudas!” Esa era tu parte seca, ruda, hastiada de todo. ¡Ya sé! Ya tengo que decir. Remojo la punta de mi dedo con la lengua y firmo un slogan existencialista que quizá le haga promoción a ese filósofo que siempre quisiste ser, ese filósofo que quizá, ahora que no estás, todavía no nazca: “Vivir es siempre el mismo ir y venir de esperanzas. Nada más”. Eso es, no más. Vivir es eso, pienso, esperar a que un día vuelvas. Vivir es acortar el tiempo en el que yo vuelva a caminar a tu lado. Dedicado para todos aquellos que se fueron o desaparecieron este año. Para mí es un placer escribir una felicitación sobre un proyecto en crecimiento como lo es 451 EFE. Dos años se dicen y se rememoran fácilmente, pero no hay que olvidar que son dos años de crecimiento y aprendizaje. Espero sigan más ¡Felicidades!

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N

o hay una palabra en español para explicar el deseo de desaparecer, o la tensión inquietante de una tormenta que se avecina; la chispa del contacto visual con alguien que te puede dejar cegado por días, o la realización de que cada transeúnte vive una vida completa y vívida como la tuya; no hay palabra para el sentimiento de melancolía que se nutre en tus huesos cuando la primera hoja de otoño cae. Esta sección tiene la misión de llenar todos estos agujeros del lenguaje y darle a cada uno un nombre. Altschmerz - El cansancio con los mismos viejos problemas que siempre has tenido. Los mismos defectos aburridos y ansiedades que te han estado carcomiendo por años, lo que te deja caducado sin sabor e inerte, sin nada interesante que pensar, nada más que hacer, solo escupir hacia fuera y pasear en el patio trasero, listo para desenterrar un poco de dolor nuevo que habías ocultado hace ya mucho tiempo. Exulansis- La tendencia a renunciar a tratar de hablar de una experiencia porque la gente es incapaz de relacionarse con ella, ya sea a causa de la envidia, lástima o simplemente es un tema totalmente insólito, lo que permite desviarte del camino a un lado totalmente adusto, casi mítico, hasta que la misma memoria se siente fuera de lugar, sin descanso vagando en la niebla, ya ni siquiera en busca de un lugar para aterrizar. Anchorage- El deseo de aferrarse al tiempo aun cuando esté está pasando, como tratar de mantener el control sobre una roca en el medio de un río, sintiendo el peso de la corriente contra tu pecho mientras oyes las voces de los fantasmas flotando en el agua, llamando por encima del rugido del agua diciendo: "Simplemente déjate ir - está bien - déjate ir. " Astrophe- Una conversación hipotética que juega compulsivamente en tu cabeza. Un análisis nítido, un diálogo catártico, un regreso devastador que sirve como una especie de jaula con un brote psicológico, donde puedes conectarte más profundamente con las personas en una pequeña bola de la vida cotidiana inexistente, que a la vez es un juego frustrante, cauteloso con cambio

Manantial de serendipias POR: Mariana Peralta Zamora

de velocidades, sacrificio y adioses intencionales. Rubatosis- La conciencia inquietante de tus propios latidos, cuyo tenue músculo palpitante se siente menos como un metrónomo y más como una cancioncilla nerviosa que tu propio corazón está golpeándose contra tu cuerpo, de esos que la gente compulsivamente tararea o canta mientras camina en la oscuridad, como si quisiera recordarle casualmente el mundo exterior diciendo entre cada latido, estoy aquí, estoy aquí, estoy aquí. Scabulous- El estar orgulloso de una cicatriz en tu cuerpo, un autógrafo especialmente hecho para ti por un mundo agradecido por tu constante deseo de jugar con él, aun cuando hubo días donde no tenías ganas de salir a jugar. Lacheísmo- El deseo de ser golpeado por el desastre, solo para sobrevivir a un accidente de avión, para perderlo todo en un incendio, de casi ahogarse en una cascada; en donde en algún punto del ápice de tu vida se puede doblar y forjarse de repente en algo endurecido, flexible y fuerte; no sólo una viga prefabricada sino algo rígido que apenas cubre la brecha entre un extremo de su vida y la otra. Donde puedes voltear y ver la división del todo. Nodus Tollens- La constatación de que la trama de tu vida no tiene sentido para ti que aun cuando pensabas que estabas siguiendo el camino de la historia, te encuentras inmerso en pasajes que no entiendes , que ni siquiera parecen pertenecer en el mismo género, que te obliga a volver a leer los capítulos que habías saltado originalmente, solo para llegar a las partes interesantes y después de eso enterarse de que desde un principio, en todo este tiempo, se suponía que tu tenías que elegir su propia aventura .

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Carátula

La Heroica de Beethoven en Pachuca POR: ARQ. LUIS CORRALES VIVAR CRAVIOTO

P

or el año de 1972 en Pachuca, era gobernador el Lic. Manuel Sánchez Vite y estaba estrenando el palacio de Gobierno de la Plaza Juárez que había construido él mismo, y que se había inaugurado más o menos un año antes. En ese momento estaba recién fundada una orquesta muy novedosa en México, una orquesta sinfónica, se trata de la Orquesta Sinfónica del Estado de México que a la sazón dirigía el maestro Enrique Bátiz, extraordinario director y pianista. Se programó una visita de esta orquesta a Pachuca y como se carecía de un lugar nuevo, interesante, digno de recibir una orquesta sinfónica, las autoridades decidieron recibirla en el propio palacio de Gobierno. En el palacio mencionado había en el último piso, o sea el cuarto, un gran salón de festejos que así funcionó en toda la extensión de este piso, excepto en las cocinas durante varios años. Allí se acondicionó con sillas el lugar para la orquesta, y también se acondicionó el lugar para el público. Como el piso de este salón era completamente plano estaban al mismo nivel orquesta y público. Fue un concierto vespertino, casi nocturno, y a punto de iniciar había dos jóvenes: Luis y Manuel que iban a acu-

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dir con mucho gusto al concierto por tratarse, en primer lugar, del maestro Enrique Bátiz; en segundo por la nueva orquesta que tenía el país, la Sinfónica del Estado de México, que funcionaba con un gran presupuesto apoyada por su gobernador estatal que era el profesor Carlos Hank González. Este hombre, de ideas muy avanzadas, brillante, emprendedor, tuvo la idea de generar la orquesta sinfónica del estado de México y le había dado una gran preponderancia. Aparte el programa era muy interesante porque iban a tocar nada menos que la tercera sinfonía de Beethoven llamada “Heroica.” Se dio la cita en el momento y en el lugar, afortunadamente el salón ofrecía bastante sonoridad, no tanto por su plafón o por la forma de su espacio, sino por el piso que era de duela y que abajo tenía una cámara hueca lo que hacía muy sonoro el salón y así el concierto se desarrollaba con todo éxito. Manuel y Luis que eran amigos, habían acudido prácticamente sin invitación, como decimos, de gorrones, porque tenían muchos deseos de escuchar esta orquesta. Luis le dijo a Manuel: ¿ya sabes que van a tocar la tercera sinfonía de Beethoven verdad?, Manuel contestó: si claro “la Heroica”

entre otras piezas, es el plato fuerte del concierto, a ver cómo la interpreta el maestro Enrique Bátiz. No es fácil, es una sinfonía complicada por los golpes de orquesta que tiene. -Si claro, y está presente dijo Luis, toda la plana mayor del gobierno, el profesor Sánchez Vite, gobernador; el profesor Serna Leal, Secretario de Finanzas. Está presente también el profesor Rafael Cravioto Muñoz y el Lic. Gabriel Romero, Secretario General de Gobierno, todos ellos importantes funcionarios y bueno, la invitación tuvo respuesta porque el salón está lleno. Efectivamente, una vez que estuvo lleno el salón y presentes las autoridades y la orquesta colocada en su lugar, dio principio el concierto bajo la batuta del joven director Bátiz. Cuando había empezado a tocar la sinfonía número tres de Beethoven, el gobernador Sánchez Vite llamó en forma discreta con una señal al profesor Rafael Cravioto Muñoz, distinguido catedrático, periodista, escritor y persona de muchas letras y le dijo: “Rafael prepárate porque al terminar la sinfonía ésta vas a hacer uso de la palabra”. El profesor Cravioto regresó a su asiento cerca de donde estábamos y alcanzamos a oír que le dijo a uno de al


lado, “voy a tener que retirarme tantito acá a la orilla porque me acaba de decir el gobernador que voy a hablar y yo no había preparado nada”. Luis y Manuel habían sido alumnos del profesor Cravioto allá en el Instituto, más bien en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, donde realizaron su preparatoria y el profesor había sido su maestro de varias materias, entre ellas Psicología y Ética. Estuvieron muy pendientes de su profesor porque lo habían escuchado hablar, vieron como tomaba unos apuntitos y anotaba algunas cosas. Estaba muy nervioso el profesor Cravioto. Cuando terminaron los cuatro movimientos de la tercera sinfonía de Beethoven, el público otorgó una gran ovación porque había sido muy bien ejecutada. El señor Emiliano Luna Gallo, que era el maestro de ceremonias, dijo que tomaría la palabra el profesor Rafael Cravioto Muñoz para agradecer a la orquesta su participación en el concierto; el profesor Cravioto, ya para entonces, había escrito rápidamente algunos apuntes, llegó al micrófono y empezó a hablar con esa facilidad oratoria que le era muy común. Empezó diciendo que felicitaba a la orquesta por la ejecución de tan brillante obra, que era histórica, de una obra que había sido creada por el genio de Beethoven y que le había dedicado al gran Napoleón Bonaparte, dos grandes reunidos en ésta sinfonía, pero también mencionó que cuando Beethoven se dio cuenta que Napoleón Bonaparte había abandonado las ideas republicanas, las ideas de la Revolución Francesa, que fue el motivo por el cual le había dedicado la sinfonía y que se había convertido en un emperador, que se había vuelto un autócrata, se molestó mucho y decidió simple y sencillamente quitarle la dedicatoria de “La Heroica”

al Corso, pero además su desquite fue musical porque le añadió a esta sinfonía un último movimiento al que llamó “La Marcha Fúnebre.” Recuerda muy bien Luis que comentó con Manuel las palabras del profesor respecto a La Marcha Fúnebre de la tercera Sinfonía, dijo el profesor Cravioto: “Beethoven quiso humillar a Napoleón añadiendo una marcha fúnebre para el final de la sinfonía, pero es una obra tan bella ésta, que en vez de marcha fúnebre parece un desfile de ángeles subiendo al cielo”. Bueno, por supuesto que esto impresionó pues no sólo al público sino a los propios músicos, que en el caso de un concierto son los que saben todo respecto a tal sinfonía o a tal pieza musical, y cuando hubo terminado Cravioto, después de comentar la sonoridad de la tercera sinfonía que en la parte del principio que es muy muy fuerte, acompasada y marcial. Después de comentar como si fuera un experto en música otros conceptos, le vino una gran ovación, pero los que más le aplaudieron o más bien los que más aprobaron con golpecitos de su instrumento o de su arco -en el caso de los violinistas, chelista y todos los de las cuerdas- fueron los músicos de la orquesta quienes no esperaban nunca que en Pachuca, de momento, un político fuera a pronunciar tan bello discurso. Luis le comentó a Manuel: qué extraordinario discurso dijo nuestro profesor Cravioto, y contestó Manuel: claro, don Manuel Sánchez Vite, mi tocayo, sabe muy bien porque le encargó al Profe Cravioto esto. Ha sido una noche rotunda, dijo Manuel. Si claro, dijo Luis, musical e histórica. El recuerdo de esta noche para estos dos jóvenes, quedó grabado en forma permanente. Esto sucedió en el Pachuca de 1972, hace 42 años.

En el palacio mencionado había en el último piso, o sea el cuarto, un gran salón de festejos que así funcionó en toda la extensión de este piso, excepto en las cocinas durante varios años. Allí se acondicionó con sillas el lugar para la orquesta, y también se acondicionó el lugar para el público. Como el piso de este salón era completamente plano estaban al mismo nivel orquesta y público.

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Diciembre, E

scribir este número me produce sentimientos encontrados. Por un lado es una edición conmemorativa y celebratoria por los dos años de existencia de esta revista que me ha brindado el espacio y por lo tanto la oportunidad de publicar mis textos. Quiero agradecer a todos aquellos que hacen posible la realización y distribución de esta publicación, comprometida con el ejercicio periodístico y con la responsabilidad de ofrecer material de calidad, dando un merecido espacio a plumas educadas y consagradas como a jóvenes que buscamos plataformas donde poder dar a conocer nuestras ideas proyectadas en nuestros productos finales que son los textos que aquí se leen. Dos años celebra 451 EFE, enhorabuena. Llevo poco menos de un año de colaborar con esta revista y como espero que la vida activa de 451 EFE sea larga y productiva, también espero que me participación en la misma sea igual de duradera. Una vez más felicidades y kudos! Hablaba de sentimientos encontrados al inicio de este texto, la contraparte de la alegría que me produce el aniversario de esta revista es justamente el tema que lleva alarmando, molestando e indignando a sociedad mexicana desde el 26 de septiembre. Sí, este es un texto más sobre los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, Guerrero. No tengo pretensiones de juez, mucho menos de especialista en el tema, no, simplemente quiero hablar desde mi posición de joven mexicano, como uno más de la sociedad civil, uno más que se enrabia de indignación, se muestra incapaz de contener las lágrimas ante tal situación. Una situación tan denigrante, tan primitiva, tan retrógrada, tan dictatorial, tan malvada y tan inhumana. Las fiestas de estas fechas (según la tradición cristiana y bajo la cual vive más del 90% del país) originalmente de reflexión y agradecimiento se han convertido en eventos de júbilo, diversión, desenfreno, derroche monetario, excesos,

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el mes de ¿celebrar?

POR: GERARDO BORBOLLA GONZÁLEZ etc. Sea lo uno o lo otro, la idea generalizada que se tiene del mes de diciembre es de vacaciones y diversión; pero hay que recordar que es muy probable que estas posadas, que la Navidad y Año Nuevo de 43 familias en el estado de Guerrero no estén llenas de alegría, y todo porque les falta un hijo, un primo, un hermano, un nieto, un futuro maestro. Y digo “muy probable” porque solamente un “milagro” haría regresar a esos jóvenes a la vida pública. No por esto creo –porque nada puedo asegurar yo- que estén muertos. Es evidente la incompetencia de las autoridades, su falta de compromiso, de calidad moral, de servicio a la comunidad, su carencia de sensibilidad y su aparente pérdida de humanidad. Un gobierno estatal (Guerrero) putrefacto y traspasado por la delincuencia y corrupción en todos sus niveles; un secretario de gobernación, al que el gobierno y los medios tratan de proteger, venido a menos desde el inicio del conflicto en el Instituto Politécnico Nacional, incapaz de lidiar con los problemas que la importancia y jerarquía de su cargo le exige; un procurador de la República aparentemente cansado, tratando de ingenuos a familiares de los jóvenes, a medios nacionales e internacionales, a todos. Y qué más podemos decir de la evidente debacle de Enrique Peña Nieto a quien su mexican moment se le cae a escandalosos pedazos, provocando indignación en la gente y generando una imagen pésima y triste del país a nivel internacional. Una imagen terrible de lo frágil que se encuentra México, de lo urgido que se encuentra por una reestructura desde lo más profundo de sus instituciones, ávido de funcionarios competentes y necesitado de procesos limpios y confiables. Veo las noticias de Peña Nieto en China, Luis Videgaray en un encuentro

de economistas de la revista Time en Washington y me pregunto ¿Cómo es posible que se atrevan a ir y hablar de la oportunidad de inversión que el país representa? ¿De verdad son tan descarados y cínicos como para evitar y poner de lado la cruda realidad del país y poner al frente sus intereses comerciales y económicos? Sí lo son. Es comprensible que a esas personas, habitantes de excéntricas y millonarias mansiones (de pésimo gusto por cierto) se les olvide la cantidad de sangre que corre día con día en el país, los aumentos presupuestarios incomprensibles que aprueban los legisladores, los funcionarios (de todos los niveles) que operan en la impunidad, los delincuentes que corrompen y destruyen el tejido social, los millones de mexicanos que viven en la pobreza y en el hambre, las carencias de las zonas más alejadas del país. Una vez más lo digo, hablo como un joven de 24 años que estudió Ciencias de la Comunicación y con un deseo de desarrollar una carrera en el periodismo, hablo como un joven más de los tantos que han salido a manifestarse y exigir justicia por aquellos 43 desaparecidos. La gente no es estúpida, ya basta de que las televisoras y el gobierno crea eso, entiéndanlo! La gente está cansada, está harta e indignada, la gente está llegando a su punto de aguante y cuando algo llega este punto siempre hay un quiebre. Ese quiebre puede tener muchos desenlaces pero sea lo que sea que pase debe ser para bien de este lastimado y pobre país. Les recuerdo, mi voz y este espacio que me permite hacerla, notar es insignificante en comparación con cualquiera de las voces de los 43 desparecidos. Y yo, como todo México, quiero volver a oír esas voces.


Los viajes ilustran Butaca Recomendaciones Vinos 29


Vinos

ARGENTINA

°°Si la comida es el cuerpo de la buena vida, el vino es su alma. Clifton Fadiman, (autor, editor, participa en la radio y televisión estadunidense). POR:JORGE VALERIO ÁVILA GÓMEZ Chef y Sommelier (Jefe de cocina EL CAPITÁN)

E

l Tango, su expresión musical internacionalmente conocida, así como una de las selecciones de futbol soccer más poderosas en el mundo, sin dejar de mencionar a un gran músico, cantautor y compositor, Gustavo Cerati. Argentina es mundialmente conocida y uno de los motivos más importantes es el aporte que tiene en el mundo de la vitivinicultura. La historia de la vitivinicultura Argentina se remonta a la época de la colonización, a mediados del siglo XVI, no existen datos exactos sobre la fecha de implantación de los primeros viñedos en Mendoza y San Juan, pero algunos historiadores opinan que se realizaron primero en esta última provincia, entre los años 1569 y 1589. La expansión de las cosechas de viñedos se relaciona estrechamente con la difusión del cristianismo, sobre todo por que el clero necesitaba indudablemente del vino para celebrar la misa. Nunca se imaginó que habían puesto la piedra fundamental de una importante industria, y que con el tiempo transformaría esta región con óptimas condiciones climáticas y de suelo, la vitivinicultura manifestó un amplio y acelerado desarrollo, principalmente en las provincias andinas. Argentina ha sido tradicionalmente un país productor y consumidor de vinos. Posee más de 200 mil hectáreas cultivadas con viñedos, y representa

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aproximadamente un 2,70% de la superficie mundial de este cultivo. Entre 1982 y 1992 se produjo una importante reducción de la superficie destinada a viñedos, esta reducción fue resultado de la eliminación de viñedos abandonados y/o plantados con variedades de baja calidad. A partir de 1992, se replanta parte de los viñedos que fueron erradicados con variedades de alta calidad enológica. Argentina ocupa a nivel mundial el 8° lugar en el ranking de elaboración de vinos con 11.778 miles de hectólitros. Mientras que en cuanto al consumo per capita anual, nuestro país se ubica a nivel mundial en el puesto número once, con 25 litros anuales Entre las uvas tintas, la cepa más cultivada y el característica del país es el malbec, en 2012 ocupó el primer lugar en volumen exportado de varietales con el 43 % del total del país, el 17 de abril en Argentina se festeja el Día Internacional del malbec, en honor a que ese día pero de 1853 se presentó el proyecto para crear en Mendoza la Quinta Normal y la escuela de agricultura de la mano de Michel Aimé Pouget, quien trajo la cepa desde Francia. Desde hace tres años se recuerda este día no sólo como el símbolo de la transformación de la vitivinicultura argentina, sino como el punto de partida para el desarrollo de esta cepa. De las uvas blancas, la insignia es el Torrontés, cepa que se cultiva en el

país en tres variedades: Mendocino, Sanjuanino y Riojano, este último el más importante pues es la única uva criolla originada en América, de alto valor enológico y relevancia comercial que ha logrado un notable reconocimiento en el mercado, constituyendo la segunda exportación de vinos blancos de Argentina. Argentina junto a Australia, EEUU, Chile, Sudáfrica y Nueva Zelanda, compone el Nuevo Mundo Vitivinícola y la importancia de este grupo en el comercio mundial se ha incrementado en la última década. En los últimos tiempos, y a pesar de la difícil situación económica del país, el sector vinícola argentino en su totalidad, desde la base agrícola hasta el consumidor final, viene experimentando un desarrollo tan explosivo como positivo en todos los aspectos. Es uno de los países más importantes en el conteniente americano, en México ha tenido una excelente aceptación y ha logrado ser del gusto de mucha gente, vinos jóvenes y vinos con mucho potencial de guarda, Argentina nos brinda grandes sorpresas con sus vinos e indudablemente vale la pena degustarlos, su malbec es una claro ejemplo de su máxima expresión. °° Amor al vino y pasión a la comida… Dudas y sugerencias: mail: va.vinoycomida@hotmail.com


ARGENTINA

RECOMENDACIÓN DE VINOS DE L

NOMBRE: IKAL VARIEDAD DE UVA: Malbec PAÍS: Argentina PRECIO APROXIMADO: $ 261 IDEAL PARA ACOMPAÑAR: Churrasco a las brasas

E CALIDA T EN

D

NOMBRE: Luigi Bosca Gala 2 VARIEDAD DE UVA: Cabernet Sauvignon PAÍS: Argentina PRECIO APROXIMADO: $ 615 IDEAL PARA ACOMPAÑAR: Quesos maduros

NOMBRE: Santiago Graffigna VARIEDAD DE UVA: Cabernet Sauvignon, Malbec y Shiraz PAÍS: Argentina PRECIO APROXIMADO: $ 705 IDEAL PARA ACOMPAÑAR: Bife al chimichurri

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NOMBRE: Cobos VARIEDAD DE UVA: Malbec PAÍS: Argentina PRECIO APROXIMADO: $ 2,700 IDEAL PARA ACOMPAÑAR: Carnes rojas con buena cantidad de grasa a la parrilla

NOMBRE: Quara Reserva VARIEDAD DE UVA: Cabernet Sauvignon PAÍS: Argentina PRECIO APROXIMADO: $ 375 IDEAL PARA ACOMPAÑAR: Pasta con carne

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Butaca

Acapulco fílmico POR: EL SUFRIDO ESPECTADOR

P

arece que fue ayer cuando Acapulco era considerado un paraíso fílmico, no solamente por realizadores nacionales, sino por cineastas extranjeros que aprovechaban sus bellezas naturales y a sus guapas mujeres en traje de baño. Hoy la historia es distinta. El primero en tratar de aprovechar el paradisíaco escenario fue Emilio el Indio Fernández en Acapulco 1951, con Elsa Aguirre interpretando a Diana Lozano, una ambiciosa mujer que iba al puerto en busca de un esposo millonario y terminaba en brazos de Ricardo (Armando Calvo), que para su sorpresa ¡si era millonario! No en balde está considerada como la más fallida cinta del Indio. Luego sirvió de telón de fondo para la simpática comedia El inocente de Rogelio A. Gonzáles (1955) en donde Cutberto Gaudázar, el Cruci para los cuates, un humilde mecánico interpretado por Pedro Infante, termina en una luna de miel forzada con Mané (Silvia Pinal), con la que ha pasado la noche inocentemente. La trama se repitió 13 años después en Romeo contra Julieta de Julián Soler con los populares cantantes Angélica

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María y Alberto Vázquez en los papeles principales. Y sus habitantes como Gloria (María Antonieta Pons) se convirtieron en estrellas internacionales en Acapulqueña de Ramón Pereda (1958). Hasta Elvis Presley disfrutó de las playas y el sol acapulqueño en 1963 en Fun in Acapulco de Richard Thorpe, interpretando a Mike Windgren, un marinero desempleado que acaba de salvavidas y cantante, bien acompañado por Ursula Andress (Margaret Dauphin), quien acababa de quitarnos el aliento como Chica Bond en El satánico Doctor No. Por cierto esta cinta estuvo prohibida en México, por supuestas declaraciones racistas del rey del rock. En plena psicodelia el bar El tequila se convirtió en el Acapulco a Go Go de Arturo Martínez (1966), a la que seguiría La muerte en bikini, y cuyo único atractivo resultaba ver bailar en traje de baño a las apetecibles Ana Martín (Rita), Sonia Furió (Celia) y Elizabeth Campbell (Marion). También sirvió de escenario a las andanzas románticas del don juanesco Mauricio Garcés en comedias como El matrimonio es como el demonio (1967) de René Cardona Junior.


Recomendaciones PANTALLA GRANDE La noche de un día difícil. Se cumplen 50 años de la primera película de los Beatles, una comedia de Richard Lester considerada por algunos entre las 100 mejores de todos los tiempos. En realidad era una excusa para presentar al cuarteto de Liverpool y sus éxitos, eso si remasterizados. Sin embargo, será del agrado de los nostálgicos del blanco y negro. PANTALLA CHICA

Pero uno de los mejores retratos del lugar es Paraíso de Luis Alcoriza (1969), que basándose en hechos reales, muestra la historia de un grupo de pescadores Román (Jorge Rivero) y Lauro (Andrés García) alejados de la imagen de “paraíso tropical para los turistas”. También sirvió de escenario para una mínima intriga policial en Acapulco 12-22 de Aldo Monti (1971), en donde la guapa turista Lucía (Verónica Castro) era robada y golpeada mientras que Alejandro (Alfredo Leal) y Héctor (Jorge Rivero) se daban a la tarea de buscar al responsable por todo el puerto. Vacaciones inolvidables Vacaciones en Acapulco de Fernando Cortés (1960) narraba las andanzas de los estudiantes Pepe (Fernando Luján) y Lencho (Alfonso Mejía) que viajan en un autobús que lleva todo tipo de personajes. Luis Alcoriza filmó en 1980 Semana Santa en Acapulco que trataba

infructuosamente de repetir el éxito de Mecánica Nacional con David Reynoso como el patriarca de una familia que sufría el vía crucis de todo turista con escasos recursos. O ya de plano Tres lancheros muy picudos de Adolfo Martínez Solares en la que Alfonso Zayas, César Bono y Tun Tun, deben huir de unos gangsters acapulqueños a los que han birlado su dinero. Sitio favorito de Tin-tán, filmó varios filmes en ese lugar como El cofre del pirata (1958) de Fernando Cortés mientras que Cantinflas lo visitó en Sube y baja (1958) de Miguel M. Delgado. A últimas fechas ha servido de escenario a apreciables cintas como Drama mex (2006) de Gerardo Naranjo o el documental Vuelve a la vida (2009) de Carlos Hagerman sobre el Pelo Largo, un legendario pescador acapulqueño. Acapulco también ha servido para series de televisión como Acapulco HEST y Gossip Acapulco.

Esposas desesperadas. En su octava y última temporada, las amigas de la calle Wisteria quedarán más unidas que nunca por un crimen, pero a la vez sufrirán una doble tragedia. La verdadera muerte de Katherine Joosten fue utilizada de manera morbosa. Pero lo cierto es que la receta lucía agotada y que Teri Hatcher, Marcia Cross, Eva Longoria y Felicity Fuman dieron todo lo que se esperaba y catapultaron sus carreras de manera importante. LIBRO Miguel Ruiz Moncada y el Cine. María Gloria Reyna Ochoa Ruiz. Conaculta. Fonca. 174 páginas. La autora, que es la nieta, hace un exhaustivo análisis de este pionero del cine nacional que se inició como fotógrafo de filmes como Reconstrucción Nacional, actor en cintas como La calandria, guionista de Humanidad y director de La carrera del gran premio. Sin embargo es mayormente recordado como guionista de El prisionero número 13 y La legendaria Mancha de sangre. Se incluyen hasta las cartas que enviaba a su mujer cuando andaba de gira, e incluso un DVD, con fragmentos de algunas de las películas mencionadas.

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Los viajes ilustran

E

l verano llegó, y con él el furor de las vacaciones y las escapadas al sol. Nosotros ya teníamos un año como papás, un oficio que, quienes lo conozcan, saben que no da treguas ni conoce de fines de semana, puentes, ni siquiera de un tiempo para una pequeña siesta. Es por eso que nosotros seguimos el mismo furor que el resto y comenzamos a organizar nuestra primer gran semana de vacaciones en familia. El lugar elegido fue el sitio ubicado justo en el corazón de Francia, el Valle del Loira, una zona bañada por las aguas del río que lleva ese mismo nombre. ¿La razón?, la cantidad de palacios y castillos construidos en esa zona a lo largo de la historia por la realeza y la nobleza francesa. Pero antes de llegar a nuestro destino final, después de casi 5 horas de camino en la autopista hicimos una parada en la histórica ciudad de Orléans, donde pasaríamos la noche. Después de haber comido a las afueras de la ciudad en una de las cadenas de comida rápida más famosas del país galo, nos encaminamos hacia el centro. Pasamos por los puentes que cruzan el río Loira, el cual atraviesa la ciudad, y desde lo lejos se comenzó a ver las cúpulas de una espléndida catedral, levantada justo en medio del poblado, y, claro está, ese era el lugar al que queríamos llegar. Después de un rato de habernos perdido entre sus calles para llegar al estacionamiento apropiado, por fin salimos justo a un costado de la iglesia. Fue en ese momento, estando frente a una construcción de dicha belleza y magnitud, que sentí la emoción del comienzo de mis vacaciones. De estilo gótico, como numerosas iglesias y catedrales en Francia que datan de la Edad Media, ésta esta dedicada a la Santa Cruz. Los historiadores han descubierto que la primer iglesia que se construyó en ese mismo lugar data del siglo VII, pero en el año 989, un incendio destruyó dicha iglesia, por lo cual se dio paso a una nueva construcción de estilo románico, pero en el año de 1278, una parte de ese nuevo edificio se vino abajo por lo cual se vieron obligados a construir nuevamente, dando paso al estilo gótico que se admira actualmente. Al pasar por sus puertas llena de ornamentos y entrar, pude ver que en el altar prin-

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ORLÉANS:

Una tarde bajo los pasos de una santa POR: ABIGAIL HERNÁNDEZ

cipal se alza la imagen de la Santa Patrona de Francia, Juana de Arco, una de las figuras femeninas más representativas de la historia de este país, que liberó no sólo Orléans sino más de la mitad del país del yugo inglés bajo el que se encontraba, dando como resultado la batalla que dio fin a la guerra de los “Cien Años” y culminó con la coronación del Rey Carlos VII en la Catedral de Reims, que era por tradición, el lugar donde se consagraban los monarcas galos. Mirando su imagen, me di cuenta en ese momento que no sólo estaba en una región rica en patrimonio arquitectural, sino también histórico, y religioso. Cada uno tiene esa personas a las que admira y que son ejemplo de su vida. Para mi, desde mi adolescencia, las virtudes y fortalezas de esta santa, fueron bastión en mi vida y estar allí, en el mismo lugar que ella pisó dándole vida a su misión y a su leyenda, me conmovió fuertemente. Fue sin imaginarlo, el comienzo de una vista al descubrimiento no sólo de magnificas construcciones, sino también de la ruta épica de esta mujer, que con tan sólo 17 años de vida, se levantó como un ícono de una de las naciones más importantes del mundo. Seguimos caminando por toda la iglesia, llena de luz gracias a su grandes vitrales que le daban una claridad y una nitidez a cada uno de los detalles que en ella se encuentran. Por todos lados podía ver los signos de la “Flor de Lys”, el símbolo de la realeza francesa. Al salir de la catedral, caminamos para apreciar otros edificios simbólicos, como el palacio de la prefectura que se sitúa justo a un lado de la catedral, pues en su momento ese sitio fue parte también del complejo religioso. Caminando un poco más llegamos un hermoso edificio que data de la edad rena-

centista conocido como “Hôtel Groslot”, que no es un lugar para que los turistas puedan ir a descansar, sino que es el recinto del ayuntamiento de la ciudad. A su entrada se puede ver una estatua de Juana de Arco. La belleza singular de este edificio recae en el diseño geométrico logrado por los colores de sus ladrillos, como si fuera un papel tapiz de rombos rojos y negros, y sus techos cubiertos con tejas negras que resaltan los marcos blancos de puertas y ventanas. Nosotros seguimos caminando para conocer la ciudad, por un lado observamos el centro con sus calles empedradas y que aloja los principales edificios de la ciudad, pero alejándonos un poco más comenzamos a admirar esas casas de estilo medieval, con grandes travesaños de madera soportando el peso de las construcciones. Las calles de la zona central, más estrechas que las del resto de la ciudad, están llenas de coloridos negocios, restaurantes y bares listos para acoger a los visitantes. Caminando por ellas me daba la impresión de estar en un cuento al estilo “Hansel y Gretel”. Sentía que en cualquier momento saldría por alguna de las estrechas ventanas alguna persona con un balde lleno de agua sucia para arrojarla a las calles, como se ve en las películas, y es que hay que hacer notar que en aquellos entonces, la definiciones de salubridad e higiene no eran las mismas de hoy; muy al contrario, las condiciones precarias en las que se vivía fueron las causantes de que las enfermedades y las plagas como la peste negra, diezmaran a la población europea en tiempo récord y en cantidades alucinantes. Mientras continuábamos con el paseo, pude observar otra cosa que le da al lugar


Estatua de Santa Juana de Arco.

Casa de Juana de Arco.

Iglesia de San Pedro.

Catedral de Orléans.

Vista de las calles y casas del centro.

Vista de las casas del centro.

un ambiente peculiar, y es que contraste con su arquitectura antigua, por las calles, entre rieles designados, se pasean los modernos vagones del tranvía. Minutos después, nos encontramos a la entrada de una casa, que, si bien no tenía una fachada particular, lo que la hace especial es el hecho de que fue el lugar en donde Juana de Arco vivió mientras estuvo ahí. La casa, que perteneció al tesorero del duque de Orléans, de nombre Jacques Boucher, acogió a la joven durante los meses de abril y mayo del año 1429. El sitio ahora es un espacio en donde se habla sobre la odisea de la “Doncella de Orléans”, gracias a una proyección multimedia, los espectadores pueden conocer más a fondo la historia de la adolescente. Desde su infancia, explicando las visiones que tuvo en las que se le revelaba su destino, las pruebas diversas que tuvo que pasar para ser reconocida y creída por “El Delfín” y por su corte, cómo logró juntar y animar a un ejercito que se encontraba agotado, su victoria y su trágico final al ser capturada por los ingleses y quemada. La tarde estaba llegando a su final, y nosotros aún debíamos llegar a nuestro hotel que se encontraba a las afueras de la ciudad. Comenzamos nuestro regreso hacia el auto, pero aún teníamos el tiempo para una última visita. Así llegamos a la Iglesia de San Pedro, la iglesia más antigua de Orléans que aún se conserva en pie, pero que hoy ya no es lugar de culto, sino un espacio que acoge exposiciones culturales. Dentro, pudimos admirar una serie de documentos históricos, publicaciones y afiches, todos, sobre la santa, incluso pudimos ver la armadura utilizada por la actriz Milla Jovovich, para la película “Jeanne D’Arc”, del realizador francés Luc Besson, quien cedió dicha pieza a la ciudad para que fuera parte del patrimonio cultural de este rincón francés. Sí, Orléans, es una ciudad que vive como orgullosa portadora de su pasado y su riqueza, material e inmaterial, pero sobre todo, un lugar que gira alrededor de una joven francesa, sobre la cual se han generado muchas polémicas, leyendas y mitos, la misma joven que marcó mi adolescencia y de la cual en ese momento, seguía sus pasos, Orléans, que para nosotros fue en esa tarde, la puerta de entrada para conocer una de las regiones más privilegiadas y bellas de Francia.

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# 20NovMx POR: Aurora Oliva

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i crees que las manifestaciones no sirven de nada, es porque nunca has vivido una. Las marchas son un acto mágico y simbólico que nos recuerdan quiénes somos y lo que queremos, son un ejercicio para entender que aunque somos diversos, representamos a un sólo México; ¿que por qué lo sé? porque recientemente caminé hacia el Zócalo capitalino en compañía de cientos de miles de personas que unieron sus voces en un grito de justicia y libertad. Jueves 20 de noviembre del 2015, Ciudad de México. Eran las cinco de la tarde cuando mis compañeros y yo arribamos al testigo principal de todo acto trascendente en la historia de este país: al Ángel de la Independencia. Ésa era la hora acordada en las convocatorias; la marcha tenía otros dos puntos de salida que desembocarían en la plancha de concreto frente al Palacio Nacional: uno era Tlatelolco —donde se encontraba el Padre Solalinde—, y el otro era el Monumento a la Revolución; no podía ser de otra manera, estos lugares representan episodios de sangre, pero también de libertad. Para cuando llegamos ya había demasiada gente, muchos vestidos de negro. Inmediatamente comencé a contagiarme de un espíritu de lucha que enchinaba la piel: los cantos, las porras, las pancartas, los rostros ilustrados de los normalistas…¡todo! En los murmullos se presumía que en los otros puntos de partida también había mucha gente reunida en ese instante. Mientras esperábamos a que los espacios entre las personas desaparecieran, comenzaron a volar por la zona un par de helicópteros, curiosamente también vimos en el cielo un circulito de luces parpadeantes con

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movimientos rápidos que por momentos se quedaba suspendido en el aire; nos emocionamos al notar que era un drone: los vigilantes del futuro cercano. Alrededor de las seis, la gente comenzó a partir y debíamos decidir dónde incorporarnos; nos quedamos entre un grupo de feministas y otro de jóvenes estudiantes, así dimos inicio y caminamos. Había un “algo” entre todos nosotros, una sensación entre la euforia, la adrenalina y el temor como si algo fuera a salir mal, un ligero miedo de saber que las probabilidades de enfrentarnos ante un gobierno opresor y autoritario estaban muy presentes. Existe mucha gente escéptica sobre la autenticidad de las manifestaciones y el tipo de personas que van; algunos creen que se tratan sólo de “juventudes perdidas y revoltosas sin razón”, o de vagos y grupos de choque. Puede ser que inevitablemente sí existan algunos que su objetivo sea provocar la violencia, pero créanme que no representan ni el cinco por ciento de los asistentes. Me asombré mucho al ver todas las expresiones de multiculturalidad y pluralidad posibles; había gente de todas las edades y estratos sociales: niños, adultos mayores, familias completas, artistas, campesinos, profesionistas... Ritmos y notas que expresaban la inconformidad de un pueblo: música prehispánica, hip hop, rap, salsa, tribal, pop, rock…; gente cargando en carteles y mantas sus propias causas, sus propias demandas; algunos sólo deseaban encontrar a algún familiar o amigo desaparecido, porque si de algo te enteras es que no son 43, son miles. El trayecto por Paseo de la Reforma

había sido intervenido por ciudadanos que hoy califico como muy atinados y creativos, algunas de las estatuas tenían pasamontañas y paliacates mientras “sostenían” cartulinas con frases que se sumaban a la exigencia de justicia, otras hablaban de equidad de género y feminicidios; por cierto, un dato curioso es que ninguno de los 77 personajes venerados en esta avenida es mujer, incluso se han lanzado propuestas para incorporar las estatuas de las doñas: Josefa Ortiz de Domínguez, Leona Vicario, Mariana Rodríguez del Toro Lazarín, Carmen Serdán y Antonia Nava. Más adelante, cuando nos acercábamos a la Plaza de la Constitución, por las paredes se proyectaba de vez en vez, un hashtag de láser verde que decía: #NoMeCansaré y después se convertía en una paloma que emprendía el vuelo; además, se habían sustituido los nombres de algunas calles de la zona centro por otras como: ‘Normalista’, ‘Justicia’, ‘Estudiante’, ‘Represión’, ‘Desaparecidos’, entre otras. Seguíamos avanzando y a medida que lo hacíamos, veíamos vallas que protegían algunos edificios, para mi gusto fue innecesario pues no se reportaron daños a inmuebles y justamente las vallas eran una invitación para expresar mediante frases y dibujos el descontento social. Para ese momento decidimos incorporarnos al grupo de jóvenes cercano a nosotros pues estaban muy bien organizados, traían megáfonos e iban dando instrucciones con la finalidad de no caer en provocaciones y cuidarse entre sí; de hecho, para quienes nunca han marchado, deben saber que muchos grupos, instituciones y organizaciones van acordonados formando un rectángulo


para permanecer juntos y tener un mayor control en caso de que las cosas se alteren. La masa avanzaba lenta, incluso llegamos a creer que no podríamos llegar al corazón capitalino y cuando estuvimos a punto de hacerlo, después de dos horas de caminata, mediante el monitoreo en Twitter y de boca en boca, había alertas sobre lo primeros enfrentamientos entre granaderos y algunos “civiles” que estaban lanzando petardos, minutos

después escuchamos detonaciones y nos pidieron movernos a la derecha ya que más adelante se encontraba un grupo de ellos. Uno de los momentos más emotivos fue escuchar a todos gritar contundentemente: ¡No violencia!, ¡no violencia…! Así, con esa incertidumbre, cerca de las ocho treinta de la noche entramos al Zócalo, justo minutos antes se habían reportado casos de abuso de autoridad

contra gente desarmada e inocente, entre ellos una embarazada, un niño y gente de la tercera edad. Poco después nos enteramos que la entrada de la Policía Federal se había iniciado por la quema de lo que parecía un tótem gigante que representaba a Enrique Peña Nieto hecho de cartón y tela, le habían prendido fuego entre gritos de ¡Fuera Peña! y había formado un círculo parecido a una gran fogata rodeada de manifestantes que se encontraban eufóricos, pero también indefensos. La Plaza de la Constitución comenzaba a vaciarse y seguían escuchándose detonaciones; fue plausible la manera en cómo la mayoría mantuvo la calma y abandonaban pacíficamente el lugar por las calles aledañas, una vez más, en caravana. Pasadas las diez de la noche ya estaba casi todo vacío, muchos se iban a las estaciones de metro o a la avenida Insurgentes para regresar a sus casas, aún con miedo de ser interceptados por la policía, pues se sabe que a veces agarran gente al azar cuando las calles se encuentran más solitarias. Y ahí estábamos, escuchando y viendo todo lo que podíamos antes de partir y volver a la realidad mexicana donde actualmente enfrentamos una de las mayores crisis políticas y de violencia. Es cierto que al final te duelen los pies, que te sientes cansado y que recuerdas que arriesgaste tu vida por un momento; pero todo eso vale la pena cuando fuiste parte de esa fraternidad en donde cada uno de nosotros se convirtió en un testigo más, en un generador de conciencias con nuestras familias, amigos, conocidos y con las generaciones venideras que se contagian de ideales progresistas. Porque para eso nos manifestamos, para revolucionar el pensamiento y conocernos mejor como país y de esta manera escuchar al otro, al que tienes al lado; porque diferentes formas de pensar se unen en la búsqueda de la justicia social. Porque te enteras que no estás solo y que ellos tampoco lo están. La marcha del 20 de noviembre nos dejó claro que no somos indiferentes ante el dolor y a la impunidad, y que de manera histórica, un centenar de ciudades y decenas de países se sumaron en una ‘Acción global por Ayotzinapa’. @lllauroralll

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gritando: ¡Y que viva el Rock and Roll!

45 años CONEXIÓN MUSICAL

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POR: Sandra Pérez García

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iciembre es un mes que siempre nos hace reflexionar, pues no solo valoramos, sino que recordamos aquellas buenas o malas decisiones que tomamos durante este 2014, pero con cada ciclo concluido siempre tenemos un nuevo comienzo donde está la oportunidad de reivindicarnos y hacer las cosas otra vez. Este mes celebramos también el segundo año de vida de la revista y no solo nosotros estamos de aniversario, sino que en este número conmemoramos y aplaudimos los 45 años de trayectoria artística de "El Tri". Desde sus inicios en la década de los 60’s y con solo 16 años de edad, José Alejandro Lora Serna, mejor conocido como Alex Lora, se dedicó a componer canciones dentro del grupo “Three Souls In My Mind” y aunque al principio solo cantaban en inglés (pues Alex domina muy bien el idioma) con el tiempo hicieron letras en español, fue aquí cuando cambiaron el nombre a "El Tri de México". Los temas tratados en sus melodías son siempre asuntos que afectan al país como corrupción, migración, discriminación y movimientos revolucionarios, sin dejar de lado el amor y la melancolía; partiendo de esto los medios de comunicación lo nombran "El Cronista del Rock and Roll en México". El gran talento de todos los integrantes: Chela Lora, Rafael Salgado, Sergio Mancera, Eduardo Chico, Oscar Zarate, Ramón Pérez y Carlos Valerio han convertido a esta banda en una leyenda del rock, no solo en México, sino de toda Latinoamérica. Su disco "Simplemente" (1984) fue el primer álbum de rock mexicano en obtener un disco de oro por las 100,000 copias vendidas, aunque a lo largo de toda su carrera han vendido más de 3 millones; sus más de 20 materiales discográficos los cuales los han hecho ganar merecidos reconocimientos entre ellos: nominaciones al Grammy, discos de platino, oro e incluso de diamante, así como una Palma de Oro y un Ariel, premio al mejor tema musical por "Las Piedras Rodantes" canción que forma parte de

la banda sonora de la película "Un Año Perdido". Temas como: Triste Canción, Todo me sale mal, El metro Balderas y Pobre Soñador se han convertido ya en un himno, marcando varias generaciones haciendo que formen parte de la cultura musical mexicana. No cabe duda que el alma de El Tri es su líder Alex Lora, quien ha sido distinguido por su exitosa trayectoria como músico, cantante, compositor e incluso por su labor altruista. En el 2002 se decretó el 10 de noviembre como el "Día de Alex Lora", en ese mismo año recibió las llaves del condado de Miami, en 2005 se dio a conocer una estatua construida con miles de llaves donadas por sus fans, en Puebla de Los Ángeles su ciudad natal es nombrado como "Poblano Distinguido" y en Las Vegas se le honra con su estrella en el paseo de la fama, esta la dedica a sus seguidores y a su país. Incluso este pasado 18 de octubre y justo en el marco de la celebración de los 45 años de trayectoria de El Tri, se develó en el Museo de Cera de la Ciudad de México la figura del cantante a cual lleva un atuendo original del mismo Alex. Aunado a esto la banda lanzó un libro titulado: "Que Viva el Rock and Roll" junto con un CD+DVD que contiene un documental (narrado por los miembros de la banda) y una parte del majestuoso concierto de aniversario en la Arena Ciudad de México que duró mas de 5 horas, este material edición de colección tiene un precio muy accesible para que esté al alcance de todos, así lo aseguro la misma Chela Lora. La grandeza, talento y sencillez de El Tri de México nos hace siempre estar orgullosos de nuestras raíces pero sobre todo nos hace gritar: ¡Y que viva el Rock and Roll!. Estimado lector le agradecemos estar con nosotros en nuestros primeros 2 años de trabajo y esperamos nos siga acompañando mes con mes; su sección "CONEXIÓN MUSICAL" le desea felices fiestas y un excelente fin de año 2014.


Lleg贸 la navidad a nuestra capital

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