La sobreexplotación de los recursos naturales se ha convertido en un tema de preocupación a nivel mundial, y es entendible, pues somos miles de millones de personas con necesidades ilimitadas, habitando un planeta que no es capaz de regenerar sus recursos al mismo ritmo acelerado en que los estamos consumiendo. Usamos y tiramos, una y otra vez; es la cultura actual, es lo que se supone que debemos hacer en la era moderna. Se trata de un mecanismo de consumo establecido con un fin muy claro: dinamizar la economía a expensas de nuestros bolsillos y del medioambiente. Obsolescencia planificada le llaman algunos analistas y expertos. Los dominicanos, legítimos ciudadanos del mundo, no escapamos a esta cultura ni a esta realidad. En este sentido, en la presente edición conoceremos nuevas alternativas para aplicar la primera R de la propuesta de las 3R: REDUCIR. En la acostumbrada sección de ecoturismo, nuestro consultor experto Adolfo López nos invita a conocer las ballenas que año tras....