Poetas sin Fronteras Marzo 2022

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Poetas sin Fronteras

Marzo 2022 Año 9 ejemplar 106 1


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https://www.youtube.com/channel/UC_7gxJlGh6GrX_dniy7xAMA Ramón Hernández Olivares Director y Editor Imagen de portada: tomada de Internet 2


PUENTES Ana María Solenzi Plottier – Neuquén, Argentina La línea vertical atraviesa mi ser me recuerda que soy más que lo que ves. Dardo punzante La indiferencia Desamor tiene como veneno Hace llaga y se adentra Infecta el entendimiento Las ideas se debaten locas Y la paz se resquebraja. Entonces Llega la pena Victoriosa Sed despliega a sus anchas Cuesta encontrar un lugar para la risa Un espacio que alivie el corazón Se abren nuevas heridas Y lloran pegajosas su dolor. Aun así, mi luz No abandona la batalla Resplandece por momentos Tiende puentes En todas direcciones Para asirse de algo, de alguien Se brinda, se da Me ama para que me ame Fortifica los puentes 3


Y me muestra que es por ahí la salida Que hay que arriesgarse Que hay praderas detrás del desierto Que hay caricias después del olvido Y ojos que brillen al verme Si dejo de mendigar miradas. No sirve abrazar cristales rotos No sirve quedarse donde no te esperan No sirve explicar al que ya decidió. Caminaré los puentes los puentes que diseñen mis pasos, ensayaré sonrisas para cuando sea feliz; abriré mis manos para encontrar las de otros …aún hay horizontes donde llegar.

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TÍTULO: AMORES AUTORA:ÁNGELA PINALES VALDEZ (20/09/2021) PAÍS:REPÚBLICA DOMINICANA Amor, palabra simple. Sólo cuatro letras. Sentimiento fuerte, heteróclito, a cada persona, la envuelve diferente, con reacciones distintas como divergentes somos la gente. Hay amores extraños fracasados, imposibles, lejanos, sufridos. Otros son falsos, materialistas, mezquinos, egoístas, amargos, limitados, traicioneros. Amores letales, violentos. Amores que transforman, marcan, asfixian. Amores que duelen. Hieren, marchitan, golpean y matan. Sumergen en la oscuridad.

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Otros son amores extraños, rodeados por un halo de misterio. Pero existen esos amores puros, tranquilos, etéreos, sinceros, callados, auténticos, eternos. Son amores mágicos, hacen florecer desbordan luz, energía, alegría. Inspiran, transmutan en un mejor ser humano. ¡Hacen andar en las nubes! Están esos amores libres, fugaces… se mueven con el viento, enredados en las alas de algún colibrí. De flor en flor se deslizan sin yugo alguno ni cadenas que los ate. Hay un amor, solo uno, extraordinario, Insondable sublime, abnegado, fuente de vida. Muy parecido al amor divino. Es un amor inigualable. Un amor perenne.

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INCERTIDUMBRE Ángela Pinales Valdez República Dominicana Ella tiene el rostro envejecido por la angustia que en un puño, sin piedad encierra su corazón. La incertidumbre corroe sus entrañas desespera, vive la agonía del dolor que impone un tirano que quiebra la paz con sus propias manos. Ya no tiene patria, ya no tiene hogar, ni marido que en su pecho su cabeza pueda recostar. Llena de miedos, debe transitar por caminos extraños, buscar una salida para salvar su vida. El drama es peor porque no va sola carga a su lado con dos criaturas que hacen preguntas entender no pueden porque no aparece algo de comer. ¿Dónde está papá, por qué no lo vemos? ¿Por qué ahora dormimos en el duro suelo? ¿Por qué estamos entre tantos extraños? ¿Por qué nos asfixia este hedor? ¿Por qué lloras madre y te desesperas? ¿Por qué la vida se ha vuelto tan gris? doquiera vemos llanto y terror ¿Por qué la miseria nos abraza? ¿Por qué tu mirada se ve tan cansada? ¿Por qué el futuro, ahora es incierto? ¿Por qué caminamos hacia la nada? Ella responde con húmeda mirada mira a lo lejos, ensimismada ¡porque la fatal guerra nos cayó encima!

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Título: LA VIDA Y LA MUERTE (22/01/2022) Autora: Angela Pinales Valdez República Dominicana Ambas hermanas, la vida y la muerte, fueron creadas en tiempos otroras, por la misma fuente. La vida, la mayor de ellas cuando estaba sola era soberana de todo el planeta, libre y feliz reinaba nada la alteraba. Un día aciago, apareció la muerte para contender con su propia hermana, pues ella ambiciona lo que la otra tiene. ¡Fuerte y decidida nada la detiene! Y desde aquel tiempo están en contienda. Así que la muerte cual villana invitada de telenovelas, se pone su capa de la eternidad y sale a cazar, furtiva, para así arrebatar a la vida todo lo que tiene. 8


La vida como heroína lucha con todas sus fuerzas, le lanza rayos de su propia esencia para evitar ser despojada, de su bien preciado e inigualable. En algunas ocasiones victoriosa, se alza. ¡ La muerte es derrotada! Mas de repente la muerte intacta se yergue, se aleja de prisa, entre macabras risas le dicen a la vida con gran ironía: ¡ahí te lo dejo disfruta tu premio que después, yo vuelvo!

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RETAZOS DE POEMAS Ángela Pinales Valdez República Dominicana (Un poquito de algunos poemas del encuentro del sábado 26/02/22) Toma mi mano y miremos las estrellas. Juntos en un solo latir de sus corazones, caminan unidos los niños que anhelan la paz. Son los niños que se tropezaron con la vida. Los niños que querían crecer. Los creadores de sueños. Los tejedores de cuentos. Los mismos que a diario abrazan un árbol. Flores silvestres del campo. Aquellos niños dueños del tiempo. Ellos anhelan algún día descubrir aquél breve poema, que transforme su vida en poesía. La vida de los primeros suspiros. Son los niños que tomados de las manos, se deleitan, mirando las estrellas. Los que sueñan encontrar un mundo mejor, donde reine la paz y el amor.

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FATIDICO DESTINO BERTHA LARAF Veracruz, México La revolución mexicana le arrebató al padre de sus hijos, subía un murmullo de desaliento por sus entrañas, la sombra oscura de la viudez la invadió. Vino la confusión de su alma y pensamiento, todo su ser apostaba por la huida, la sorprendente riqueza en monedas le subyugó para escapar de aquel movimiento, con la vileza que avivaba su venganza contenida, sin corazón alguno dejó huérfanos a sus dos hijos, con esa orfandad que destiñe, que deslava, que hiere a capricho por el rumbo del destino de los padres, que deja heridas abiertas, que traspasan líneas, años, generaciones. Ni con un gran sol de oro, podría entibiar la soledad de aquellos dos niños abandonados a su suerte. Tiempos después pasados los años esa arrepentida madre padecía oleadas de sufrimiento que le persiguieron hasta llegar el inevitable final de su paupérrima vida.

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PREGUNTALE A LAS NUBES Elena Guzmán Ramón México Si existe el universo que nos una en uno solo si somos los únicos O si en otro plano estamos. Si será mejor el metaverso que ver el paraíso terrenal Su cielo azul, sus lagos sus mares, de las aves escuchar su trinar. Pregúntales a las nubes de los que se fueron, en donde están. De la vida, del amor, de los tuyos. Si son eternas nuestras almas. Si permanecerán, si se irán. Pregúntales a las nubes, Pregúntales, cuando se nubla, a donde se van. De la empatía humanidad Si los amores renacerán.

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EL AMOR, EL AMOR, EL AMOR Elena Guzmán Ramón México Palabra mágica y diáfana sucesiones de noche y de día corazones que al unísono en círculos concéntrico vibran. Te deleita, sueñas y te embelesa te despiertas cual tambores cual música armoniosa suena al nacer, al vivir, al morir. Amor, amor, amor sentir Toda la vida A veces emigra se va, lento, suave o de golpe se retira, se suelta, se aleja. El amor es así, el amor, el amor siempre retorna, en otras vidas. Existe, aunque no se ve se siente en aromas sensación. El amor, se va y se olvida más vuelve siempre, en varias formas simples y sencillas. Entonces, el amor se queda siempre.

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ABRAZA UN ÁRBOL Elena Guzmán Ramón México Siembra, cuida y abraza Un árbol, una vida que te devolverá más que buena vibra. Afortunadamente hay muchos árboles aún. En la esquina de tu hogar, en tu jardín o en el cercano parque. Tal vez no sepas que los árboles nos dan salud y armonía, es por eso que el mundo está lleno de ellos. Donde andes, hacia donde mires siempre están cerca. Así es la voluntad del creador. Cada rama forma una y griega, saludando con amor todos los días a quien se da cuenta. Abraza un árbol. Son seres vivos que buena energía nos brindan. ¡¡Ten tu propio árbol, a diario abrázalo!!

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ELLA SABÍA, LO SABÍA Por: Elena Guzmán Ramón México Sabía por experiencia de otras por los años vividos de las desoladoras imágenes, lo escuchado desde niña. Ella sabía y no prestó atención hasta que en propia carne lo experimentó, el abandono y el desamor. Ella sabía también luchar sola lo que desde pequeña aprendió con golpes y reprimendas. Ella sabía todo lo que enfrentaría Se redoblo en esfuerzos. Sacó fuerza de su misma ilusión, de ver a sus hijos crecer y hacerles Mujer y hombre de bien. Ella sabía que podría suceder Estaba preparada para vivir y con fortaleza a sus hijos educar. Su más grande amor ella sabía la fuerza que sus hijos le brindan para luchar por su mayor ilusión.

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Oda a la Mujer Evelyn Covarrubias Vera Los Andes - Chile Mujer delicada como una flor, fuente como un huracán, amas sin límite alguno, te dueles hasta desgarrar el corazón, pero, resurges como un ave fénix. Mujer tan dedicada, tan generosa, con experiencias en altos y bajos por la vida, iluminas con tu belleza. Mujer con virtudes y defectos, eres perfecta.

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Mis Mujeres Maternas Evelyn Covarrubias Vera Los Andes – Chile Amelia mi bisabuela; mujer de campo y cordillera, de época con vestidos largos y anchos, así te subías a un caballo para ir por provisiones a la ciudad, valiente para tu época. Mujer hermosa, de ojos azules que conquisto y amó. Noemi mi abuela; tan sencilla, sumisa y humilde, pero a la vez fuerte de carácter, virtuosa. Te hiciste cargo de mi al ser una niña con mi hermana. Te vi hacer mil cosas a la vez, nunca fallaste, jamás te diste por vencida. Te admiro un bello legado me dejaste. Noemi Nelly madre querida; eres maravillosa, luchaste por nosotras tus niñitas. Hasta el día de hoy acepto tus regaños y consejos. Realmente te admiro, porque sí fuiste maltratada alguna vez, fuiste capaz de denunciar. Gracias por enseñarme a valorarme como mujer y que jamás nadie me haga daño. Yo Evelyn; me considero fuerte, esas fuerzas nacen desde mis entrañas para luchar en la vida y por lo míos. Y tengo la confianza en Dios y de su protección divina. No tengo hijas, pero a mis tres hijos les enseño a querer, a amar, a respetar a la Mujer.

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Título: Mía Autor: James Coonor Ciudad: Monterrey NL Mex. Intento escribir en la soledad tu nombre. Intento escribir a deshoras que te amo. Llamarte y decirte a oscuras todo esto darte un beso, ese el de otros tiempos, decirte que soy cicatriz indeleble en ese amor y otro amor que ya no existe Un beso ya lavado en los minutos un amor ya olvidado en los segundos tal vez estás en mis sentidos y me tienes en tus manos y soy pañuelo que te enjuga para secar tus lágrimas que lloro. ¿En qué lugar o dónde te encontrarás a qué hora me dirás te amo? Esto es con prisa porque la eternidad se nos acaba...día tras día!! Título: Amé Autor: James Coonor Ciudad: Monterrey NL Mex. Me llevo tus besos esos suaves que dimos en ilusión de intentar algo hermoso que nació de vernos así como un flashazo de gustarnos ¿Pero dime amor si te gusto? Quizá la noche me recuerde el eco silencioso de tu alma, el grito imperdonable del olvido 18


y la llama que consume nuestras ansias porque no, no pudimos construir un amor con los sentidos. Me quedo como sombra, que transita bajo el viento, la aurora que murmulla tu recuerdo, y el beso de un amor... en el olvido

Título: Autorretrato Autor: James Coonor Ciudad: Monterrey NL Mex. De tu calma...el canto que susurra, como la palabra que desborda el agua… los sentires más profundos… los silencios que no callan y la vida a sorbos, derramando el alma… Ciudad donde habitas como un duende que deambula, en tu ciudad recogiendo otoños con las manos de la noche y tu mirada, arropando a la luna que emite serenatas bajo el cielo, donde a solas, retoña tu denuedo… pócima secreta que versa en la distancia como el eco de un jilguero en la memoria que reposa con sus alas extendidas en el nido de blancas madrugadas Instante que susurra, como lo hace el viento cuando a solas los silencios se visten de luceros y tus ojos parecen los suspiros de ti poeta cuando versa, sin voz… como la lluvia…

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SUEÑO DE UNA MADRE José Luis Jiménez Ayala Veracruz, Ver. México. Aquellos dos jóvenes unieron sus vidas con amor e ideales llenos de aventuras Por ser tan jóvenes... No miraron más allá de su ilusión bella... actuaron sin temores... Sus padres no apoyaron a ninguno, en su unión, nunca se interesaron por el latir de su corazón... Así ellos la huida hicieron, se fueron lejos de todos, lejos su unión iniciaron... Con amor, hijos nacieron... Dura es la vida, sin nada, Él se inició en un oficio ganaba apenas lo mínimo... Con felicidad trabajaba… Los niños luego crecieron, con padres tan jóvenes sus momentos eran felices... Con juegos los motivaron... Ella en sus ratos de reflexión usaba toda su imaginación veía a través del futuro lejano cómo sería la vida de cada hijo... Para llevar el pan a su mesa y lograr que ellos estudien trabajaron con ahínco y fuerza 20


para que sus hijos lo logren... Es tan fácil decirlo, pero vivirlo... A un trabajo por años sometido, que a veces ya no se puede más... Se soporta, sí a los hijos amas... Así, Él en su lucha por llevar pan a casa y Ella con su gran ilusión de ver algún día con gran visión... Que sus hijos estudian y triunfan. Él fue el primero, en irse a los cielos Así, llega un día en la vida de Ella... Con el correr de muchos años siendo una anciana, ya cansada... Que orgullosa ve que sus sueños se convirtieron en realidades... Al ver qué todos sus amados hijos cada uno tienen sus profesiones... Sé que han sido así, muchas vidas y también sé que muchas madres llenas de amor y grandes ilusiones luchan por sueños de sus familias.

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Título: Pobreza. Autor. Isidoro Arturo Gómez Montenegro México El abismo de miseria llevado entre los dedos de la mano. Y en el pensamiento, aloja pesado, compromiso sobre mis, hombros. Apagar necesidades primarias, de los míos clavar mis gritos inaudibles en paredes del viento. Luego silencio, después de saciar la sed y hambre. Herencia urdida en telarañas de polvo. Las casas viejas habitadas, ahí no tienen, nombre los sueños. Ni las siestas tomadas después del condumio único del día. Los misterios silenciosos del destino. Y la ensimismada sombra de la tarde. ¿La pregunta bulle ahora y mañana que será de nosotros? En el negro sufrimiento en la borrada historia del amanecer. Los pensamientos, tenidos en una tarde cualquiera.

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Sin alma Por Jesús Rosales Cruz. Veracruz, México. Estoy sin mi alma y con mi cuerpo, En espera… Estoy con mi cuerpo pero sin alma. Ya no puedo sentirme vivo Estoy con mi cuerpo inherente, Mi alma etérea vuela. Sin cuerpo y sin alma; no existo. Vacío y sin alma, Excitado con mi cuerpo Mi alma se eleva Se eleva sin mi cuerpo, ¡Soy connatural! Amor, vida y cuerpo. Alma y vacío, Cuerpo y eros Amor, vida y cuerpo. Alma y libertad, Cuerpo y entrega Estoy sin mi alma y con vida Mi cuerpo, Mi cuerpo se transforma, Corpúsculo y vida eterna Cuerpo y alma acortan la vida Vida y alma siempre es vida Alma y pureza vida eterna. Vita aeterna Perfectam pacem Sin vida no hay cuerpo, Sin cuerpo no hay alma. Con cuerpo vida y alma. Vida y alma; vida eterna. El cuerpo, Polvo es y será. 23


Ya no puedo vivir si no es contigo. Por Jesús Rosales Cruz. Veracruz, México. Ya no puedo vivir si no es contigo En tus brazos llenos de calor Ya no puedo vivir si no es contigo Sin tus labios llenos de pasión. Ya no puedo vivir si no es contigo Porqué encuentro todo lo que deseo Deseos que son inconmensurables Ya no puedo vivir si no es contigo Me encierro en el laberinto de tu alma Y en el me encuentro lleno de calma Por eso ya no puedo vivir si no es contigo Contigo que me haces ser hombre y niño. Ya no puedo vivir si no es contigo Porqué eres el reflejo de mi alma Ya no puedo vivir si no es contigo Porqué eres el privilegio de amar Eres el fuego de mi corazón La Paz de mi interior Mi más grande pasión Te amo con todo mi amor No puedo vivir si no es contigo Porqué tu belleza es inigualable No puedo vivir si no es contigo Porqué eres mi Aya

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Quien abre las puertas del amor Quien abre los caminos de mi destino Por ello no puedo vivir si no es contigo Contigo mi verso y mi flor. El alma de mi corazón El espíritu de mi amor El cuerpo de mi esperanza Y el corazón de mi corazón No puedo vivir si no es contigo Porque danzamos juntos Y juntos hacemos el amor.

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Mi corazón es tuyo. Por Jesús Rosales Cruz. Veracruz, México. Te debo cuatro noches Una el paraíso terrenal, Otra a la orilla del mar, Una más en el espacio sideral Y en Debajo del palmar. Soy tu caballero medieval Y tú el arte de amar. Soy tu veneciano carnaval Y tú musa y jugar En mi noche estival. Eres mi tesoro, Tu corazón Que tanto adoro Es luz e ilusión Más brillante que el oro . Soy de tus besos el aloe, El Marte de tu cuerpo, De tu alma el Zoé Y cuál Júpiter te cerco En las noches para amar.

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Un año ya Puerto Rico Lourdes Lagardery Cual brioso corcel en el desierto, ha pasado un año velozmente, no puedo engañarme, todo es cierto... nos duele tanto el que estés ausente. Tu recuerdo acompaña nuestros días, que siempre fueron de felicidad, porque, aunque estuvieras triste sonreías a pesar de tu larga enfermedad. Un año ya… Y llegarán muchos, pero nunca te vamos a olvidar, pronto seguiremos tu camino, a estar juntos por la eternidad.

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Rosas para mí. Lucila Reyes González Ciudad de México. Con rosas me conquistaste yo 15 años y tú eras un poco mayor me trajiste hermosas flores y te llevaste mi amor. Hoy que ya te fuiste leo el viejo libro donde guardé la hermosa rosa que me diste, el día que a ti me entregué. Ella me habla y me dice: Que algún día te volveré a ver. Que no este triste, que nos volveremos a querer. Me canta una hermosa melodía, y todas las rosas comienzan a bailar, me siento dichosa, me alegra el día, algún día nos volveremos a encontrar.

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A la más hermosa Rosa. Lucila Reyes González Ciudad de México. Hoy es tu cumpleaños y ya no estás aquí. ¿sabes? siempre te recuerdo. cuando camino por el parque y llego a tu jardín. que está lleno de las rosas que tanto te gustan y que he sembrado para ti. Me llegan mil recuerdos a la mente, y al mirarlas y ver que, son tan bellas como tú, hacen que me asombre, pues tienen mil colores diferentes, todas ellas llevan tu nombre y el dulce aroma que tenías en la frente. Viene el viento y al mecerse a su compás todas ellas comienzan a hablar de tu vida, que luchaste con valor y de la esencia tu alma y tu amor. rememoro en esas canciones las dulces sensaciones que producía tu voz. Cierro los ojos e imagino, Que las flores comienzan a cantar, Llegas tú me tomas las manos, Y junto con todas ellas, 29


Comenzamos a bailar. Me llevas al cielo y las estrellas también comienzan a danzar poco a poco abro los ojos y de nuevo el día, ocupa su lugar; pero me deja la dulce sensación, de que un día las rosas y tu comenzaron a bailar.

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Soy Mujer. Lucila Reyes González Ciudad de México. Soy mujer el amor me fluye me sangra, me brota de las entrañas soy mujer con mis pasiones, con mis ardores, mis tormentas internas, y mis actitudes extrañas soy mujer y no por eso merezco menos, de lo que tú te apañas. Soy mujer no confundo: el amor con el sexo el jamón con el queso ni querer comer con vaciar las entrañas. Soy mujer conozco tus deslices, todos tus ardides y todas tus patrañas soy mujer y confieso, que alguna vez creí en ti, pero ahora ya no me engañas. Soy mujer el amor me fluye me sangra, me brota de las entrañas soy mujer con mis pasiones, con mis ardores, mis tormentas internas, y mis actitudes extrañas soy mujer y no por eso merezco menos, de lo que tú te apañas. Soy mujer no confundo: el amor con el sexo 31


el jamón con el queso ni querer comer con vaciar las entrañas. Soy mujer conozco tus deslices, todos tus ardides y todas tus patrañas soy mujer y confieso, que alguna vez creí en ti, pero ahora ya no me engañas.

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PAYASO María Luz Olivares Aldana Veracruz, México Hombre de graciosa estampa, pantalón con parches, camisa a rayas y zapatos grandes. Hombre que irradias contento, el rostro pintado con boca grande y llegas sonriendo. Quien te escucha el chiste versado puntilloso, gracioso; ríe contigo ignorando si cargas penas. A veces, como Arlequín que canta al amor, otras, Pierrot que llora de la amada su traición. Dime si tú eres también un payaso que esconde su aflicción. Tras la risa fingida ante el atardecer de tu sino ocultas la tristeza graciosamente… ante la cruel indiferencia de la vida. 33


SILENCIO María Luz Olivares Aldana Veracruz, México ¿Dónde estás? Silencio, solo silencio espirales de humo; si soy murmullo de agua en roca indiferente. ¡Dime! … ¿Por qué hoy no estás en mi presente? Busco en la cartera la foto que no encuentro solo está en la mente desvanecida por el tiempo. ¡Dime! … ¿Dónde estás? Silencio, solo silencio porque no te encuentro…

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INCERTIDUMBRE María Luz Olivares Aldana Veracruz, México La luz entró por la ventana, la silueta de mi sombra se mueve en la nada. Mis palabras, desvanecen en los labios y mi mente vaga por los aires. Te echo de menos, todos lo saben porque no puedo. Sencillamente con la oscura y cruel incertidumbre de no tenerte a mi lado. Y sigo adelante camino valles, navego mares. Apoyada en el deseo de que en algún momento te encuentre.

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Lo que tiene tu nombre Mariateresa Galaz Ciudad de México, México Oigo tu nombre, y para mí es música que navega por el aire es el rumor de las hojas danzando al ritmo del mundo. Digo tu nombre, y es oración pronunciada con creyente acento; es melodía de orquestas invisibles que tocan para imaginados oyentes. Pienso tu nombre, y rompe la imaginación en seres bondadosos y fantásticos que me sonríen a través de los cristales de la ventana de tus afectos.

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Muerte fecunda Mariateresa Galaz Ciudad de México, México Muerte que te apareces cuando nadie te espera muerte de mis recuerdos más queridos muerte de las voces que solía escuchar y de los ojos que antes me miraban Muerte de la fragancia de las flores y de los amaneceres sonrosados muerte que duermes bajo la tierra y como semilla, sueles germinar La melodía de tu nombre Mariateresa Galaz Ciudad de México, México Escucho una melodía Y no es causa que me asombre, si cuando digo tu nombre es una tonada mía. Música que me produce oír tu nombre tan solo, si del uno al otro polo una sonata conduce. De día y noche es sinfonía si cualquiera lo pronuncia: es tu nombre que se anuncia para mí dulce armonía.

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MELISSA, PARA VIVIR TU GRAN AMOR Por Pío Domingo Rosales Sena Veracruz, México Melissa, para vivir tu gran amor, primero es preciso consagrarse caballero y entregarse a ti bella dama por entero, no importa cómo sea. Para vivir tu gran amor, es menester ser hombre de una sola mujer; ¡Tú! Porque amar es entregarse por entero, es dar sin importar recibir. Hay que ser muy cortés y galante; dulce y conciliador sin cobardía; saber ganar dinero con poesía para vivir tu gran amor. Melissa, para vivir tu gran amor, por el camino de la vida hay que seguir con la esperanza de llegar a ser feliz… ¡Hay tantas cosas que se deben compartir! Para vivir tu gran amor, hay tantos momentos que se pueden convivir con la tibieza de tu amor entre mis manos. ¡Convencerse de que no existe amor sin fidelidad! ¡Yo necesito de tu amor para vivir! ¡Yo necesito tu calor cerca de mí! ¡Es necesario un cuidado permanente, no sólo con el cuerpo sino también con la mente! 38


Para vivir tu gran amor. Melissa, para vivir tu gran amor, no hay que traicionar tu corazón por vanidad, pues amarte es ser libre, esa libertad, inmensa, indivisible libertad que trae un sólo amor. Para vivir tu gran amor, no basta sólo con ser un buen sujeto; es preciso también ser un guerrero, para defenderte. Y entregarte sin reservas y sin de amor sin medida. Es preciso mirarte siempre como la persona amada la amiga, novia, esposa y amante ¡Toda una dama! Ser para ti, embeleso y erigirte un camino con carácter sereno, amistad, belleza y calor. Para vivir tu gran amor. Melissa, para vivir tu gran amor, ¡Oh compañera mía! ¿Qué ha de definir tu hermoso candor? Para vivir tu gran amor, hay que conocer la fina y pura definición del amor: ¡Tú! Eres la pasión, el sueño, el regocijo, un vals, un poema, una canción. Eres de los celestiales jardines del cielo la más bella y pura flor. ¡El Cristo de mi corazón! ¡Oh Melissa adorada, se debe tener entrega y devoción. Para vivir tu gran amor.

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¡Oh Melissa querida! para vivir tu gran amor, hay que ser tu pasado, tu presente y tu futuro. ¡Un amor de tiempo y distancia! Para vivir tu gran amor, hay que hacerte sonreír, además de serte fiel y ser un buen conocedor del arte culinario. Desde la música que toco, hasta los versos que escribo, mi musa se viste de ti, te pienso, y nada me agrada más que pensarte hasta cuando te tengo entre mis brazos, para vivir tu gran amor.

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ACUERDATE DE MÍ Por Pío Domingo Rosales Sena Veracruz, México Cualquier hora, cualquier día, en cualquier lugar, en una ciudad cualquiera… Melissa: Cuando tiendas tu vista por las cumbres sombrías de esa sierra que se observa más allá del río, acuérdate de mí. Que yo también cuando los ojos fijo en las altas cumbres, guardianes silenciosos de los montes fríos, me paro a meditar en muchas cosas y me acuerdo de ti. Cuando veas en la desierta playa un ave solitaria que cruza el espacio en aventurero vuelo, buscando un nido entre la mar y el cielo, acuérdate de mí. Que yo con mi tristeza y mi dolor a solas en la desierta playa, con el vaivén y susurro de las olas, lloro y canto, medito, y me acuerdo de ti. Cuando te creas en el mundo sola, sin un amigo con quien hablar; o solo tengas enemigos a tu alrededor, acuérdate de este amigo y de Dios ambos te brindan su amor. 41


Cuando la tentación del ángel Lucifer o el mal consejo de un ser insano te pusieran al borde del pantano, acuérdate de mí. Y piensa un poco lo que perderías, y piensa un poco lo que sufriría si te viera hundirte donde otros se hundieron, yo me moriría, me moriría por ti. Cuando vacile tu fe, pídele a Dios que te la dé de roca, como la roca sobre la cual construyo su iglesia en tiempos del imperio de la soberbia Roma. Pero si aun así sientes perderla y dudas, como dudó Pedro sobre la mar, acuérdate de mí. Que yo, aunque pecador y débil, Dios hizo tan grande la fe mía, que, si a ti fe te faltara, yo podría darte mucha, pero mucha fe.

Por siempre tuyo: Pío.

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A VALENTINE Por Pío Domingo Rosales Sena. Veracruz, México Mujer hermosa con cuerpo de dios, de mirar profundo, tú eres mi rosa. Del poeta, eres musa, alondra, amaranto, movimiento poético, luz y canto. Faros vivos, tus ojos, reflejan bríos; llenos de amor alejan de mí el hastío. La primavera, eso eres dulce amor mío, fresca y bella, cual matutino rocío. Quiero ser en tu vida, tu corazón, el minuto de amor, tu pasión e ilusión. Si buscas, tu nombre oculto hallaras, tu nombre tan divino me exaltará. Y tu imagen, vital es a mi existencia. Tu amor es vital, ¡Colma a mi conciencia! ¡Tú eres una divina sensación ángel, bondad, y entrega de corazón! Poetas cantan tu hermosura, odas, sonetos, cantatas o rimas de olas de amistad, ternura y/o locura, mojando de dicha con tu lindura al verte siempre feliz, sonreír con donosura.

(Para resolverlo hay que leer, la primera letra del primer verso, la segunda del segundo, la tercera del tercero, etc., hasta el final, y aparece el nombre en cuestión: Melissa Brenda Carrillo. Un Valentine es una postal enviada por los enamorados el día 14 de febrero, festividad de San Valentín.)

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HAGAMOS UN POEMA Por Pío Domingo Rosales Sena Veracruz, México Tú, cierras la puerta y yo, el ventanal, apaga la luz, quédate mujer en mi juventud, entrega tu ser tan lindo y azul. Déjate morir en mi devenir que ha de confundir mi poesía y tu amor. Hagamos un poema de este gran amor, en cuyos versos estemos solos tú y yo. Déjate llevar casi sin pensar por el descontrol de nuestra pasión. Y en la obscuridad de esta habitación podrás encontrar tu ternura y mi amor. Hagamos un poema de este gran amor, en cuyos versos 44


estemos solos tú y yo. Copiemos de Neruda, la pasión; de Díaz Mirón, el romanticismo; de García Lorca, la ternura y el calor; y de Darío, la ilusión de amor. Este bello poema es flor aromática llena de luz y color, reflejo de nuestro amor. Hagamos un poema de este gran amor, en cuyos versos estemos solos tú y yo.

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GRETEL Ramón de Jesús Hernández Olivares Veracruz, México Un lápiz que se arrastra en un papel sin sentido una idea triste que palpita y solloza tu partida. Aquellos ojos que miré en tú vida se tornan engranes sutiles de un latido constante para sonreír en el vacío de la noche fría. Tus sonidos entrañables que llenaron mis instantes, abruptamente exaltado por tú llanto ¡Corrí! para abrazarte y postrarte en mi pecho para que sintieras mi calor, mi ternura. Noches que aun estando frías tus pequeños sonidos guturales me inquietaba el alma, por no entender, si me llamabas o eran tus lamentos ahogados en tu alma. ¿Acaso sabias que me abandonarías? tus cosquillas en mis dedos tu mirada interrogante y aún en tus últimos instantes te aferraste a mi mano y lloraste, me viste un instante, después te fuiste me dejaste impávido en medio de aquel tráfico en que corríamos para salvarte. 46


Te fuiste “cosita mía “, en tu sepulcro, deposite una flor en tu pecho, y después de la oración y sepulcral silencio, en mi oído parecieron vibrar una vez más ese sonido gutural que estremecía el alma, le pido al universo y a la tierra misma te abrace tiernamente, como lo hacía yo. UN BESO Ramón de Jesús Hernández Olivares Veracruz, México Te pedí un beso, y me negaste su sabor, te pedí un beso y mis labios murieron en la espera. Te pedí un beso tus labios se sellaron y mi corazón estalló. Te pedí un beso para recordar la lluvia de la primavera, al otoño intenso, y nunca llegó. En la obscuridad de la noche te pedí un beso, y solo viene un aroma de ti, pronunció unas palabras que al volar me dejo 47


un suspiro entrecortado, que nunca llegó, estabas en el Olimpo. Te pedí un beso a través del cristal y solo la cortina movida por el viento murmura que debía partir lejos de ahí, buscaré tal vez robar un beso extraño. Hoy las mieles del amor me negaste ya sin amor prometo vivir, tal vez lágrimas rieguen mi jardín secreto y un ángel, se postre en mí besándome la frente, solo dirá debemos partir.

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COLORES Ramón de Jesús Hernández Olivares Veracruz, México He nacído rodeado de verdes follajes y visto estrellas del firmamento, he visto a mi madre postrarse en tu imagen pidiendo extasiada nacer bajo el estigma de tu sangre. La inmensidad del aguamarina del firmamento ha elevado en sus cometas oraciones, de un niño nacido de la tierra buscando respuestas en una piedra , de granates facetados. He visto la transparencia de las nubes perladas que llevan vida a las aves de colores, verdes, amarillas y exóticas de un jardín secreto donde bailan las hadas con sus alas doradas. He visto las piedras de los ríos que esconden voces de infantes, que traviesos juegan a tocar al sol en su espejo, y los peces violeta, que transmiten los mensajes sublimes de rostro enamorado y sonrojan su mejillas, lanzando besos plateados de cupido, que besan al espíritu del aire que revolotea sus risos dorados entrelazando sus acaramelados hilos traviesos. Al árbol de roble que yace en el campo le he pedido un hechizo de amor, y al tocar mi pecho brota cual perla carmesí. 49


El viento gris triste revolotea las hojas, verdes, amarillas y como profetizando en el tiempo que me vestiré de otoño. Y que brotarán de mis ojos perlas blancas y puras, por el amor impenetrable que abrirá ese día sus alas de cristal.

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Llegará un día Silvia Aquino López Xochimilco, ciudad de México. Llegará ese día cuando mi mente podrá designar en palabras serenas todo mi sentir, para aclarar las escenas atravesadas en el bien y en el mal durante años, tras años. Será ese día en que podré decir: “así no fue mi historia”. Lo que sucedió fue como yo lo digo, ¡punto! ¿Por qué lo necesito? Porque me cuesta expresar el pasado y el presente, porque la crítica fugaz de mi vida está oculta en las palabras. Pero llegará… un día llegará en que mi mente designará palabras serenas, momentos vividos en un tono celestial … 51


Las lágrimas de Selene Silvia Aquino López Xochimilco, ciudad de México. Hay momentos en esta pobre y triste vida como el de la navegación nocturna, cuando se cruzan, sin saberlo, montes ignorados en los que ni serpientes, ni coyotes, ni venados, pueden verse, olerse, ni escucharse. Lugares donde el hombre no se encuentra, donde ni siquiera obscuridad existe. Es una carretera ignota y sorpresiva que lleva a verla a ella, sola, resplandeciente, a aquélla hermosa señora corrompida entre magníficas luces de fuego enamoradas. La portentosa señora de los cielos es Selene, Señora de la noche, del amor y del dolor. Selene convirtió mi visión de otro planeta donde yo podía crear a capricho a mi hombre imaginario, sembrador de flores en la vida. Elaboré la atormentada imagen del filósofo-poeta, del creador de los objetos que permiten establecer impecables movimientos en las casas de la mente que se lanzan al funesto río. Soñé con ese pensador de gran altura, aquel hombre que idealizara mis deseos, que sostuviera a Selene entre sus manos y pudiera escribir iluminados cantos de serena luz ante tristezas de la muerte. Imaginé al que inquieto susurraba dulcemente poemas del inicio de este mundo, 52


elevándose hasta la altura de dones estrellados. Cómo eran tan hermosas esas portentosas manos, esa mente fascinante en la locura y la imaginación, que describía al mundo entero en sus palabras. Todo era placentero en la ilusión supuesta pero era fácil comprender cómo rodeaban en la mente esos polvos de brillantes y tenues coloridos que ocultaban la lucidez de los falsos amores. Sin piedad me engañaba la majestuosidad de Selene, pues ocultar sabía la mentira insertada en una ilusión perfecta. ¡Ay de mí! Mas tuve que enfrentarme a la Señora de la Luna, la Selene prodigiosa, así dije: “Intentas crear torpes ilusiones como tú misma torpemente creaste la eternidad de Endimión. Véte al diablo, señora de las mentiras, yo ya he pasado por todos los caminos, detrás de esos montes existen hombres no verídicos, hombres que no tienen compasión de la sonrisa sincera y se alejan como perros embravecidos en busca de ingenuas víctimas por morder. Mentes indeseables, seres de otros planetas, quizás malditos … No me llevarás a tales sentimientos desmentidos… nunca más. Todo lo dije con una voz potente mientras la bellísima Selene soltó sinceras lágrimas percibiendo todas sus mentiras y falsas ilusiones, reflejos de un amor no cumplido, una pasión adolorida por el pobre Endimión, pobre, pobre mortal.

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El carnaval del Arlequín De Joan Miró Silvia Aquino López Xochimilco, ciudad de México.

Joan Miró, te miro, a través de tu ventana. Miro en mi sueño tu escena surrealista. ¿Sueños y delirios de infancia? Hambre, mucha hambre. En tu carnaval de Arlequín mi sueño recuerda a tus amigos delineados en disfraz. Ese tu amigo, es un pescado bailarín sobre la mesa. Ese gatito y ese perrito que ni son gato ni perro, juegan con hilos de cuerda. Sueño también a tu azul cometa, mitad negro que sube más allá de la escalera. Escalera que llega a la luna, para mirar el día, para mirar la noche. Escalera que tal vez puede caer, apasionada en la oreja de van Gogh. El ojo triste sobre el cielo anhelante por cruzar la escalera. 54


Llega la mano que saluda a todos, mano que había subido a la torre Eiffel la que pide pan, la que pide vino. Veo al gallito que canta y las notas entran a la guitarra hay sonidos de carnaval para todos. Miro, Miró, pues, tu carnaval. Tu arlequín es tu disfraz con bigotes de Dalí. Eres también la guitarra que alimenta la libélula. Arlequín de cara roja Arlequín de cara azul, de intestino enjuto, Arlequín, Arlequín que sueña con un manjar.

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Cadáver exquisito 21 de febrero 2022 Ramón de J. Hernández olivares, Eduardo Ruvalcaba Valenzuela Isidoro Arturo Gómez Montenegro, Bertha Lara, Oswaldo Ar Re, Tomaré las notas del universo para crear un himno a tu amor. Y esas notas, corcheas semicorcheas, fusas, en el pentagrama de la Vía Láctea, se han de expandir murmullos y crepitar de leves astros, cintilar de estrellas, murmullos de ese himno a tu amor, perenne e inolvidable. Te amaré en cada tintineo de las lejanas campanas. Blancas flotan, como espuma de la mar, su cadencia al viento, el cruzar entre árboles y rosas, una música sonriente de paz crece al aumentar mi tiempo en tu compás. Con la edad recién despierta, dándole canto a los recorridos, vuelvo a sentir calma, te toco, estos dedos llaman a tu cadencia.

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