Martalamas

Page 12

en su mistificación del papel de la mujer en el pasado. Sin duda, hay mucho que criticarle a Iván Illich, pero también hay mucho que rescatar de su pensamiento. Varias de sus principales interrogantes siguen vigentes a la fecha y justamente el debate sobre la igualdad, muy en el sentido que él plantea, marca la distinción entre las feministas de la igualdad y las de la diferencia. ¿Por qué congelar su reflexión y borrarlo de las bibliografías sobre género?

4. El éxito norteamericano: el caso de Judith Butler Hemos visto que inicialmente, en los setenta, se habló del sistema sexo/género como el conjunto de arreglos mediante el cual la cruda materia del sexo y la procreación era moldeada por la intervención social y por la simbolización (Rubin, 1975). Después, en los ochenta, se definió al género como una pauta clara de expectativas y creencias sociales que troquela la organización de la vida colectiva y que produce la desigualdad respecto a la forma en que las personas valoran y responden a las acciones de los hombres y las mujeres. Esta pauta hace que mujeres y hombres sean los soportes de un sistema de reglamentaciones, prohibiciones y opresiones recíprocas, marcadas y sancionadas por

el orden simbólico. Al sostenimiento de tal orden simbólico

contribuyen por igual mujeres y hombres, reproduciéndose y reproduciéndolo, con papeles, tareas y prácticas que cambian según el lugar o el tiempo. En los noventa se asume que los seres humanos son el resultado de una producción histórica y cultural, pero la formulación de Judith Butler (1990) del género como performance se introduce en el debate y cobra una relevancia mundial. Filósofa de formación, Judith Butler es tal vez la figura intelectual más importante del feminismo norteamericano y su influencia teórica es inmensa. Butler ve al género como "el resultado de un 12


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.