LUCÍA BE ILUSTRADORA, CUENTISTA Y DISEÑADORA DE TOCADOS
La chica que se puso un tocado por montera
En la Inglaterra victoriana solían decir: “Estás tan chiflado como un sombrerero”. Algo parecido debió escuchar a sus espaldas Lucía Be, cuando colgó los hábitos del periodismo para convertirse en diseñadora de tocados. Ahora, esta intrépida valenciana demuestra que el territorio patrio también puede llegar a ser, con un poco de estilo y algo de sentido común, un “Ascot” del glamour Ibérico. Escribe: Diana López. Fotografía: Lucía Be
POCAPASTA. ¿Qué cúmulo de circunstancias tienen que producirse para que una periodista se líe a diseñar tocados? LUCÍA BE. ¡Muchas! Trabajé como redactora de moda en varias publicaciones. Ahí me di cuenta de que donde realmente quería estar era al otro lado de la noticia. No sabía exactamente por qué, pero no me conformaba con contarlo. Diseñé un tocado gigante para la boda de una amiga y a la gente le gustó. Un día fotografié a mi hermana con mis diseños, mandé un catálogo a mis amigas y empecé a recibir pedidos de gente que no conocía. Dije adiós a mi empresa y desde entonces soy mi propia jefa. PPT. Un sombrero añade carácter... pero también puede hacernos sombra. ¿Cómo evitarlo? L.B. Hay que conocerse, no sólo para ponerse un tocado, sino para vestir en general. Si una persona es bajita, mejor que no se ponga una pamela enorme, le achatará la figura. Hay mujeres que tienen “cara de sombrero” y les sientan bien todos los tocados, y otras a las que les favorecen más las cintas en la frente o los tocados plato… Un tocado es un complemento muy vistoso, es mejor no añadir mucho o llevar un vestido sencillo, para no parecer “overdressed”.
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