6 VIERNES 13 DE FEBRERO DE 2009
El Diario
“Las carreteras para la minería, con peajes o por concesión” Aprovechando esta discusión sobre el tema de las vías para las zonas mineras del Departamento, El Diario habló con el Presidente de la Asamblea, Francisco Junco Veloza, para averiguar sus criterios sobre la financiación de estas obras, los posibles beneficios, o, como lo dice, la dudosa ganancia que dejan los grandes proyectos mineros ya sean de carbón, de esmeraldas o de hidrocarburos; de ahí que proponga que para hacer estas vías no hay más remedio que mediante el cobro de peajes, la inversión de los mismos empresarios del sector o la combinación de los dos anteriores en un sistema de concesión de esas carreteras. El Diario: ¿para qué vías tendría plata el Departamento? Francisco Junco. La verdad es que el Gobierno Departamental cuenta con recursos muy limitados; tenemos una posibilidad de endeudamiento que podría llegar a unos 60 mil millones, que nos permitirían cumplir con el compromiso que hizo el Dr. Rozo Millán con el Departamento: hacer los anillos turísticos de Márquez, Tundama, Oriente y Sugamuxi, que son los que están pendientes porque los otros, de alguna manera, ya están muy avanza-
dos. Sin embargo, la plata no alcanzaría sino para dos, pues creo que cada anillo valdría 30 mil millones. E.D. Y entonces, ¿las carreteras para las zonas mineras? F. J. Efectivamente estas carreteras de alguna manera son un compromiso y una obligación del Gobierno Departamental; pero la satisfacción de ese compromiso se buscaría a través de otros mecanismos de financiación y no con recursos propios, porque no los tenemos. Entrarían a mirarse las concesiones viales, el aporte de los mismos mineros y del mismo sector empresarial boyacense para poder permitir la ejecución de estas obras. Aquí se habló, en la Asamblea, de crear peajes para construir vías. Son impopulares, pero desgraciadamente sería la única forma: concesión y peajes, con lo que pudiéramos tener unas vías verdaderamente funcionales para el sector minero de Boyacá. E. D. Bueno, pero ustedes los diputados, tienen la representación de las provincias; entonces ¿a las zonas mineras les van a salir con que si quieren carreteras que las paguen con peajes o que las hagan con sus propios aportes?
F. J. Mire, hay dos fenómenos muy grandes que debemos ponerlos a la luz pública: que es que definitivamente, a las grandes concesiones mineras y los grandes empresarios de productos como el carbón, les importa su rentabilidad pero se olvidan también del daño que generan; como lo que se está generando en Márquez, mi provincia, donde muchos municipios han estado en contra de que se hubieran dado esas concesiones mineras. Cuando tengamos las grandes explotaciones mineras de carbón en las partes altas de la región de Márquez, posiblemente se agotarán las fuentes de agua, tal como ha sucedido en regiones como Socotá o Paz de Río. Este es un asunto que la Asamblea tendrá que mirar para defender, antes que todo, el beneficio social más que el beneficio económico personal o empresarial. E. D. ¿Pero eso no es un desestímulo al sector empresarial? F. J. No desconocemos que debemos apoyar a la industria boyacense, sí; y al sector empresarial, sí; pero es que eso está en manos de tres o cinco grandes pulpos mineros que se llevan la riqueza, porque ni siquiera la reinvierten en Boyacá.
Fotografía: Hisrael Garzónroa
FRANCISCO JUNCO VELOZA, PRESIDENTE ASAMBLEA DE BOYACÁ
Boyacá es un Departamento que genera todos los productos: carbón, hierro, esmeralda, petróleo, gas; pero desgraciadamente estas riquezas salen del Departamento. Entonces, hasta dónde el Departamento y la misma Asamblea, pueden apoyar a un sector minero que efectivamente sí le puede producir algunos impuestos y algunas rentabilidades, pero afecta al medio ambiente y a muchas comunidades, como ya lo denuncia la Provincia de Márquez. ¿Hasta dónde el Departamento puede permitir una explotación minera indiscriminada, sin ningún control y donde las riquezas se están yendo sin beneficio; hasta dónde los grandes empresarios mineros boyacenses están aportando al desarrollo del Departamento? Apenas ver pasar toda la riqueza. E. D. Algo pesimista… F. J. Toda la riqueza de las esmeraldas, pero de éstas ¿qué le queda al Occidente?, cuando lo único que se ve en sus municipios es la miseria y la pobreza. En las regiones del Norte son muchos los millones que los empresarios del carbón se han ganado y se ven con el mejor carro último mo-