Los integrantes del personal universitario practican y defienden el diáologo racional y la controversia civilizada como métodos de convivencia para conseguir los fines de la Institución, y para tratar o solucionar los conflictos. El respeto mutuo y la civilidad rigen el comportamiento universitario. Convivencia. Artículo 11 del Estatuto General de la Universidad de Antioquia
Nº 609, UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA Medellín, mayo de 2012
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Cuchillos, veneno y pólvora Comité Técnico de Autoevaluación Institucional La Universidad de Antioquia no es la misma de las décadas sesenta, setenta u ochenta. Desde los noventa tomó la firme decisión de no ser más una carga imposible para la sociedad y hacerse todos los días más necesaria para el país. Quienes hemos hecho el examen minucioso de su calidad podemos demostrar que lo ha logrado con la concurrencia de todos, así sea entre polémicas y escepticismos.
Los cuchillos, el veneno y la pólvora se caracterizan por ser resultado de la iniciativa humana, su decisión intencionada, la investigación y una doble potencialidad como dispositivos técnicos: la experiencia indica que pueden usarse para beneficio del ser humano y para todo lo contrario. Algo semejante pasa en una organización cuando decide tomar conciencia de su calidad. Este término tiene la posibilidad de beneficiarnos, de hacernos daño o de volvernos indiferentes como recurso para evitarnos el juicio evaluador. Va en aumento la consideración académica acerca de los beneficios y riesgos que tiene para la docencia, la investigación, la prestación de servicios y la gestión en las universidades el diseño y puesta en marcha de pautas que comprometan a toda la comunidad con una política orientada hacia buscar los mejores resultados, a revisar constantemente su actuación y a comparar con otras organizaciones el modo de hacer las cosas1. Y, como sucede con los cuchillos, el veneno o la pólvora, hay quienes le atribuyen al examen de calidad el poder milagroso de habernos sacado del estado primitivo y quienes sostienen que es artífice de nuestra permanencia en la barbarie. Es el viejo recurso ideológico a la leyenda rosa y la leyenda negra. Concierto de necedades que eluden los análisis de las situaciones históricas concretas para recrear la conciencia en dogmatismos. Una tercera opción es omitir la crítica y resignarse a la contemplación. Sin embargo, para considerar el desempeño de la Universidad no es viable ninguna de las tres. A pesar de la apropiación obsesiva del término calidad y sus campañas por la empresa privada, de haberse convertido en trofeo anhelado por todas las modas administrativas (“teorías”, dicen algunos) y de presentarse con frecuencia como chequeo de indicadores de eficiencia y eficacia, la Universidad necesita valerse de su análisis y convertirla en costumbre cotidiana. Ya en Colombia tenemos madurez intelectual suficiente para asumir la calidad universitaria en términos de nuestra propia naturaleza. Sabemos que lo educativo en el nivel superior se diferencia explícitamente de las empresas que producen objetos, bienes y servicios. Y aunque coincidan en la necesidad de mejorar procesos y resultados, en las empresas se evalúan por eficiencia y eficacia en función del rendimiento económico, ajustado al plan de utilidades rentísticas previsto por sus cuadros directivos. En contraste, la calidad en la educación superior se puede identificar por el cumplimiento de sus misiones: docencia, investigación, extensión y gestión; en función de crear pensamiento, conocimientos, habilidades y destrezas en la comunidad educativa; de fomentar el desarrollo social y cultura de la región y del país. Por esta razón no puede anclarse en indicadores circunstanciales de eficiencia y eficacia, ni abandona su creatividad dejándose condicionar exclusivamente por la pertinencia. Las universidades
generan lo nuevo también en la impertinencia. ¿Qué sería de los estudios de historia antigua, media o moderna, los helenísticos, medievales o literarios, los filosóficos y los artísticos si por atender las circunstancias oportunas de la velocidad y las tecnologías de la información y la comunicación tuviéramos que cancelarlas por no estar en el orden del día de los planes de desarrollo locales, regionales o nacionales? Por estos días en que nuestra capacidad de asombro vuelve a ponerse al límite cuando en el interior de Ciudad Universitaria ocurren hechos nefastos de barbarie y cuando seguimos encontrando expresiones en los muros, según las cuales los violentos quieren el poder y no la paz, es necesario alzar la voz para que estudiantes, profesores, egresados, empleados y directivos tomemos nueva conciencia acerca de lo que está en juego cuando se quiere convertir el espacio universitario en campo de batalla. La Universidad de Antioquia no es la misma de las décadas sesenta, setenta u ochenta. Desde los noventa tomó la firme decisión de no ser más una carga imposible para la sociedad y hacerse todos los días más necesaria para el país. Quienes hemos hecho el examen minucioso de su calidad podemos demostrar que lo ha logrado con la concurrencia de todos, así sea entre polémicas y escepticismos. Los hechos son contundentes. La valentía y claridad de profesores, estudiantes y empleados, las decisiones de sus cuerpos directivos y de sus gremios con los vaivenes naturales en todo tipo de organización humana que debate intereses sociales, políticos y culturales diversos, han convertido a nuestra institución en una organización académica, intelectual y científica confiable para la educación superior. Ya no es un lastre. El riguroso proceso evaluativo sobre la Universidad demuestra a la sociedad lo mucho que vale y por qué puede confiar en la educación superior que promueve. Notas 1. Una buena muestra ofrecida por el MECI a un grupo de profesores que reflexionan acerca de una política de calidad para la U de A, es: 1) Proyecto ALFA. Aseguramiento de la calidad: políticas públicas y gestión universitaria. Nro. DCI-ALA/2008/42; módulo “GESTIÓN INTERNA DE LA CALIDAD EN LAS INSTITUCIONES DE EDUCACIÓN SUPERIOR” (Módulo GIC) Versión 1 (borrador), año 2011 Autor: JOSÉ RAFAEL TORO. 2) Calidad de la educación en Colombia: un análisis y algunas opciones para un programa de política. Febrero de 2008, Unidad de Gestión del Sector de Desarrollo Humano Oficina Regional de América Latina y el Caribe. 3) Memorias. Foro Internacional. Debate sobre la formación de competencias en la educación superior. Bogotá. Septiembre, octubre de 2010. 4) GIRALDO, Abad y Diaz P. S.F. Bases para una política de calidad de la educación superior en Colombia. 5) Calidad y acreditación. Informe, Informe Bricall, España. 6) HERNANDEZ S. Genaro. Calidad de la educación media superior en Mexico. Cuadernos de Educación y Desarrollo, Julio de 2009. 7) VEGA, A. Educación Superior de Calidad para el Siglo XXI. Educación, 2001, 25,1, 9-17. 8) ROCCARO, I.E. El paradigma de calidad reformada en el servicio público universitario. Revista Iberoamericana de Contabilidad de Gestión. 2003, 1,2, 43-73. 9) PROYECTO TUNING. 2007. Reflexiones y perspectivas de la educación superior en América Latina 2004-2007. Beneitone et al (Eds). 10) OROZCO,N. 2011. Incidencia de la política colombiana en la calidad, y su impacto, en la educación superior. Una opinión hacia la discusión de la propuesta del Presidente de la República. Documento no publicado. 11) OROZCO, L.E. La calidad de la Universidad. Más allá de toda ambigüedad. Documento no publicado. 12) MARUM-ESPINOSA, E. Calidad e innovación en la educación superior mexicana. Encuentros, desencuentros y nuevas interpelaciones. Documento no publicado. 13) TOBÓN, S. et al. Gestión de la Calidad y Educación Superior. En: Competencias, Calidad y Educación Superior. Magisterio: Bogotá. 2006. 53-89.)
LA UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA INFORMA: “En pleno acatamiento a la orden judicial impartida por el Juzgado Décimo Penal del Circuito de Medellín, se informa a la Comunidad Universitaria que el señor Gabriel Jaime Bocanumenth Puerta fue sancionado disciplinariamente con la inadmisión de la matrícula durante tres semestres a partir del semestre 2012-1, por el intento de arrebato de unos exámenes a un docente, el 13 de septiembre de 2010, mediante el uso de la coacción. El señor Gabriel Jaime Bocanumenth Puerta interpuso acción de tutela, la cual le correspondió al Juzgado Décimo Penal del Circuito de Medellín, quien tuteló en su favor los derechos fundamentales al debido proceso, a la igualdad, al buen nombre, a la honra y a la libertad de conciencia, tras considerar que la falta disciplinaria imputada en el proceso disciplinario adelantado en su contra, fue atípica entre otros fundamentos jurídicos, por lo que resolvió la admisión de la matrícula del citado estudiante para el próximo semestre con el objeto de que continúe su normal actividad académica en el programa de Educación y asentar lo resuelto en su hoja de vida. Igualmente se informa que la Universidad de Antioquia ha interpuesto el respectivo recurso de apelación, el cual se encuentra en trámite.”
DOCTORADO EN EDUCACIÓN
Convocatoria Novena Cohorte La Facultad de Educación de la Universidad de Antioquia convoca a inscripciones a los profesionales interesados en el Programa de Doctorado en Educación. Son cinco las líneas de formación, apoyadas por siete grupos de investigación de la dependencia: Educación en Ciencias Naturales * Educación en Matemáticas * Educación Superior, énfasis en Estética y Educación * Estudios Históricos en Pedagogía, Educación y Didáctica * Educación y Tecnologías de la Información y Comunicación. Cierre de inscripciones: mayo 30 de 2012 Informes: http://ayura.udea.edu.co/ e-mail: doctoradoeneducacion@ayura.udea.edu.co