La casa de Teniente Rey y Aguiar es testimonio único de las organizadas a la manera de la Granada nazarí y morisca, en su enlace con la tradición constructiva mudéjar española. Junto a la de los Riberos de Vasconcelos, representa el punto de partida del proceso de evolución que dio lugar a la formación de la casa cubana.
N o ta s 1 Véase: Francisco Prat Puig: El prebarroco en
Cuba. Una escuela criolla de arquitectura morisca. 2 Teresa Pérez Higuera: «Arquitectura mudéjar en
los antiguos reinos de Castilla y León», pp. 67-75. 3 Eduardo Martín Martín y Nicolás Torices
Abarca: Granada. Guía de arquitectura. An Architectural Guide, pp. 58-59. 4 El primer acercamiento documental a esta
9.19 a 9.21. Patio, planta y fachada de una casa matancera (Medio 93), de acceso acodado con respecto al patio, tomadas de: Alicia García Santana, Matanzas, la Atenas de Cuba. Fotografía de Julio Larramendi
vivienda fue realizado por la investigadora Rosalía Oliva, del Gabinete de Arqueología de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, quien puso en claro su relación con José Martínez de Oropesa, y a partir de este, con sus descendientes. 5 ANC. Protocolos de Cayetano Pontón, escritura
del 16 de febrero de 1678 ante Andrés Sánchez, f. 94. 6 Francisco Javier de Santa Cruz y Mallen, conde de
Jaruco: Historia de las familias cubanas, t. V. p. 378. 7 ANC. Protocolos de Bernardo del Junco,
escritura del 1.º de noviembre de 1701, f. 380. 8 ANC. Protocolos de Bernardo del Junco,
escritura del 9 de junio de 1703 ante Dionisio de Soto, f. 285v. 9 Registro de la Propiedad 5, finca 3269, l. 519,
t. 228, orden 3, citado por Rosalía Oliva: «Estudio histórico de la casa del Teniente Rey #25», inédito. Véase también ANC. Libro 3 de la Anotaduría de Hipotecas, f. 1. 10 Ibíd. 11 Véase: «Incidente al intestado de Dn José
Crucet para asegurar el haber de sus menores hijos». ANC. Escribanía de Galletti, legajo 541, núm. 11, f. 76-86. 12 Ibíd. 13 Ibíd. 14 Véase: ANC. Protocolos de Bernardo del Junco,
1750. 15 Cirilo Villaverde: Cecilia Valdés o La Loma del
Ángel, t. I, pp. 171-175.
101