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III. Bogotá est si laide
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LUZ AMOROCHO53: Seis años duré en París. Cuando se acababa el trabajo donde Nicole, yo conseguía trabajo con otros arquitectos. Pero eran cosas esporádicas. Yo no podía ejercer mi profesión, porque no estaba permitido, tenía que hacer bachillerato y una cantidad de cosas para poder firmar como arquitecta. ¿Entonces qué hacía?
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Cuando se acabó un trabajo, aproveché para viajar a Colombia porque mi mamá iba a venir. Ella vivía con mi hermano. Él era profesor de la Universidad de California54 y tenía el año sabático, y lo iba a pasar en Venezuela, pero en Venezuela se volvía trabajoso que mi mamá estuviera con ellos. Así que ella se vino a Colombia y se alojó en casa de mi otro hermano. Entonces yo aproveché, vine, y al mes ya estaba trabajando en la Universidad Nacional. Y me instalé en Colombia.
“Bogotá es tan fea”, le escribe a Nic en una de sus cartas luego de regresar de París en 1966, después de haber vivido allí durante seis años. Luz llegó a Bogotá a un barrio al que se le llamó la Colina de la Deshonra. Al parecer porque un vecino que subía le gritó a otro en una ventana que venía del cine de ver una película con ese título, y así se quedó. Cuando Luz volvió de París a tomar vacaciones en Bogotá, esa colina se estaba convirtiendo en una comuna de artistas, intelectuales y viajeros.
Por una carta escrita a lo largo de varios días, entiendo que aterrizó en Bogotá el 15 de mayo de 1966.
LUZ AMOROCHO: Muy querida Nic:55 una pequeña carta para decirte buenos días desde Bogotá. ¿Cómo estás? Yo llegué aquí el lunes, hace cinco días, pero solo hoy encuentro calma para decirte algo […] El viaje para comenzar:
De París a Nueva York, muy cansada porque además del autobús hasta Luxemburgo tuvimos una espera de más de catorce horas en Reikiavik, empeorada por una de mis jaquecas. […] Eso significó que llegué donde Leonor [Nueva York] a la 1 pero como ella estaba en el hospital por el turno de noche, fue mi vieja tía Sofi la que me esperó con las llaves del apartamento,
53 Entrevista inédita a Luz Amorocho, realizada por Ana María Pinzón en 2007. 54 UCLA, Universidad de California en Los Ángeles. 55 Carta de Luz a Nic, escrita desde Bogotá entre el 20 y el 28 de mayo de 1966. Carta desde Bogotá de Luz a Nicole, 20 de mayo de 1966.
Edificios de la Colina. Al fondo, las Torres del Parque en obra. Ca. 1970. Fotografía de Ignacio Gómez Pulido.
Segundo Acto 61
que a su vez no pude abrir; finalmente entré a las 2 de la mañana, con ayuda del conserje. Qué contenta me puse con semejante descanso tan merecido. Pasé los 8 días en Nueva York haciendo compras (no tuve tiempo en París); un trabajo idiota y fatigante. Pero al menos vi una muy bonita exposición de la obra del arquitecto Khan (no sé si su nombre se escribe así) en el Museo de Arte Moderno. […] Salí para Colombia el 6 de mayo. Después de una noche de vuelo, con escala en Miami para cambiar de avión y de compañía de aviación, llegué a Medellín [donde] pasé ocho días muy agradables. […] Como te puedes imaginar he visto a todos los amigos y he tenido un número considerable de empachos56 no muy recomendables para la salud, pero excelentes para el gusto y para el espíritu. […] En Bogotá fue Jacques Mosseri y una de las hermanas de Olga57 los que me dieron la bienvenida en el aeropuerto. […] Del contacto con todos los amigos, te podrás imaginar que ya vi un número considerable. Al otro día de mi llegada fui a la exposición de cerámica de Beatriz Daza58 y me encontré una cantidad de arquitectos —viejos amigos, entre otros— ese mismo día hablé de trabajo con dos o tres personas, entre ellas Willy Drews y Mejía59 que me ofrecieron posibilidades.
Darío Jaramillo, que había referido la amistad de Luz con “el Mono” Martínez, fue su vecino en la Colina de la Deshonra por más de cinco años.
DARÍO JARAMILLO: Fueron más de cinco años. Yo vivía en el primer piso, ella en el segundo, en un edificio que está en la calle 26, sobre una calle muy pendiente, a la que le decían la Colina de la Deshonra. En verdad era un vecindario absolutamente burgués, pero le decían así.
ALFREDO VÁSQUEZ60: La historia de este barrio viene de atrás, porque a esa calle en tiempos de la Colonia, la llamaban la Calle de las Boquitas Pintadas, era en el extrarradio y arriba estaban las putas.
El arquitecto de esos edificios era suizo y se llamaba Otto Fritz Gempler; así dice en las escrituras. Decían que los edificios estaban unidos, porque por los
56 Ver capítulo 3 del tercer acto, titulado “Siete empachos”. 57 Olga Cadena, también conocida como Olga Amaral (Bogotá, 1932). Artista visual. 58 Beatriz Daza (Pamplona, 1927-Cali, 1968). Ceramista, pintora y dibujante. Además de su trabajo artístico, destaca su labor docente en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad Nacional. 59 Eduardo Mejía (¿?). Miembro del Grupo Tumaco. 60 Alfredo Vásquez Luna (Bogotá, 1954). Arquitecto y dueño del restaurante Vásquez y Cebollas, sobre la antigua Colina de la Deshonra.
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patios hicieron unos huecos y se pasaban de un edificio al otro. En el patio mío, en un muro quedó la huella de donde era el hueco. Se pasaban por dentro, para ir a otra fiesta. Y Luz yo me acuerdo que andaba en un Volkswagen escarabajo y lo parqueaba afuera sobre el andén.
DARÍO JARAMILLO: Eran, aún son, unos edificios muy pequeños. No había administración, vivíamos tres personas y había una solidaridad enorme, sobre todo entre Luz y yo. Cada uno sabía que podía recurrir al otro siempre, pero no en permanencia, porque los dos éramos personas muy independientes. Además, hay una cosa que está en el trasfondo de todo esto y es que Luz fue lo que siempre le dio la gana ser, ella con ella, sin ninguna teoría detrás. Era todo aquello que una mujer independiente de hoy querría ser. Sola e independiente, con una vida que ella decidía, con las relaciones sentimentales que decidía tener, en el momento en que decidía tenerlas. Una mujer, en esa libertad, igual a cualquier hombre. Y sin necesidad de ningún segundo piso de teorías. Era, de verdad, una persona muy entrañable.
Encuentro en la biblioteca de Luz un ejemplar de "La voz interior" de Darío, publicada en 2006, con una dedicatoria que termina así: “Luz: siempre te recuerdo riéndote con mi risa, D.”.
DARÍO JARAMILLO: Hay muchas categorías en las relaciones. Yo puedo decir que fui vecino de Luz muchos años y que éramos excelentes vecinos. Luz fue una vecina encantadora, absolutamente servicial, muerta de la risa. Si yo la fuera a definir con una frase bien burguesa, como corresponde a ese ámbito de la vida, diría que es la mejor vecina que he tenido.
Además de Darío, Luz tenía por vecinos en esa época al famoso Enrique Grau, que disfrazaba a todo el mundo, y a otras dos personas que se hicieron muy amigos, Rafael “Rafa” Moure y Hernán Díaz61. Juntos conforman un trío inolvidable, tan célebre por su trabajo como por sus fiestas.
De esos primeros años en el Bosque Izquierdo, son una serie de fotos que le tomó Hernán en el parque de los perros. En la que está sentada dentro de una caseta es una foto que Luz dejó en su escritorio antes de morir.
61 Rafa Moure (Pamplona, 1939) y Hernán Díaz (Ibagué, 1931-Bogotá, 2009) fueron una pareja muy famosa bajo el nombre del segundo, fotógrafo importantísimo en Colombia. Biblioteca de Luz Amorocho. Camilo Rodríguez-IDPC, 2021.
Luz, Rafa y Hernán por una fotógrafa desconocida. Ca. 1969. Archivo Maldonado-Tió. Luz en el parque de los perros. Ca. 1969. Fotografía de Hernán Díaz. Archivo de Rafael Moure.


Barrio La Macarena, Bogotá. 1970. Fotografía de Ignacio Gómez Pulido.