El modelo de turismo que predomina en República Dominicana y que ha conducido a esa situación presenta las siguientes características: ✹ La actividad es controlada principalmente por operadores turísticos, quienes dejan los dólares fuera del país. ✹ Una imagen estereotipada de sol, mar y sexo. ✹ Escasa diversificación de la oferta turística, concentrada en las costas, sin aprovechar las demás riquezas naturales, culturales e históricas que tiene el país. ✹ Predominio de los hoteles de gran tamaño, aislados de las comunidades, que ofrecen servicio de todo incluido. ✹ Sobreexplotación de los recursos naturales, como el agua dulce y los arrecifes de coral, y mal manejo de los desechos. ✹ Playas privatizadas; es decir, que se limita el acceso del público a las playas. ✹ Escasa regulación y supervisión estatal de las actividades turísticas. ✹ Limitada promoción de las actividades culturales propias del país. Los daños ambientales han sido especialmente notorios. En la última década se han producido serios problemas en materia de abastecimiento de agua potable, en el mantenimiento de las playas, de los arrecifes de coral y de las áreas protegidas. Por las características de la actividad, el desarrollo del turismo ocurre en zonas ecológicamente frágiles, donde muchos hoteles fueron construidos violando las normas ambientales y teniendo un manejo inadecuado de desechos líquidos y sólidos.
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SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL