Extractos del libro Pensatorium de Nuria Ruiz de Viñaspre

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pensatorium



Nuria ruiz de Viñaspre

pensatorium

La Garúa


Diseño de la colección: www.otilui.com Primera edición: febrero de 2014 © poemas: Nuria ruiz de Viñaspre, 2014 © fotografía de cubierta: KieraN aNtill, 2014 © prólogo: luz pichel, 2014 © la Garúa, 2014 Mossèn Camil Rossell, 26 08921 Santa Coloma de Gramenet Barcelona www.lagarua.net Depósito Legal: ISBN: 978-84-941140-3-8 Reservados todos los derechos.


Índice

Prólogo, 11 los caballos del lenguaje,17 cámara obscura, 51 antífonas, 79



Un no-Pról Pra nU Luz PicheL (...ntita prv: querids lects: est no es un pról, est es una lect de una lect que leyó un libro para leerlo y luego le pidieron su lect para pasársela a otrs lect que ya habrán hecho su propia lect de la lect de nu. o no. Y en cualqu cas si están leynd est es prque les aptc comprtir su lect con la lect de est lect y yo les estoy por ell y por ell y por mí agrdcida, pero no s fiéis. Una lect no es más que una lect. Una lect no es mejr que otra lect. o sí y n imprta. Tods ls lects al final se desvaecen, com eguas, com cabalos sbarrancads por el monte abajo. una lect, lz…..) El lenguaje corporal del caballo es el lenguaje corporal del lenguaje corporal del caballo es el lenguaje corporal del lenguaje. En el primer poema de pensatorium hay un animal dando vueltas sobre sí mismo, o un jinete que tensa la cuerda tanto que obliga al caballo a girar y girar hasta la confusión de los dibujos y de los sentidos. En ese sin-sentido se sobrevive. En el lenguaje y sus opacidades se sobrevive, en el cuerpo, en el giro, en el gesto, en todo ese no ser de la palabra nos estamos. Hay una fuerza ahí que todo lo salva, un tren que contradice al círculo, una línea que avanza y otra que enreda. El enredo no ahoga, impulsa. Esto es una peonza, lío el hilo para soltarlo y convoco energía y movimiento. Pero también es flecha y arco, salida al frente. lo tenso, lo denso, lo intenso. Esto es un libro que pide plagio: que tira, estira, es tira. Parece enredarse para luego seguir con 11


fuerza limpia y noble de caballo. Esto es tira de piel, pedazo de cuerpo de lenguaje, lo que hay de voz, sonido, ritmo, juego, música (confusión desveladora y reveladora abriéndose en todos sus acordes) en el caballo del lenguaje que nos lleva a pelo, jinetitas. Que los textos se tejen con hilos. Pero aquí hay brida, pita, lino, cañamazo. ni seda ni entre algodones. Esto no encoge, ensancha; no se quiebra con hacer así, estamos leyendo un libro fuerte. Y también hay lana, lana en bruto, con todo el olor a sebo aún, lana anterior a la rueca. Este libro abriga, es vientre de animal, barriguita de vaca en el antiguo establo, cuando el frío. la brida de domar, la de la idea ahí, el título que promete pensar o hacer pensar sin reproducir lo que se espera de un libro de pensares, aquí hay género y hay género. Este pensatorium no es a la manera de, sino una manera de y a la manera de ella y a veces dice diciendo pero casi siempre prefiere decir contradiciendo y, sobre todo, ocultando e incluso negando. Poema entre la piel y la palabra, poema de por dedentro del cráneo, hueso. Desde los afueras también araña y en voz baja. En voz baja es como aquí se dice. antes de ser un tejido ya estaba, pero ahora es nuestro, mío, mío. Viene a decir ella que la palabra es muda. Viene a decir nuria (creo) que la palabra es muda. Sigo la corriente mimética, el calambre nuria y pienso que la suya no es palabra muda, sino palabra nuria, nuda, desnuda, núa; se expresa con el gesto y con las manos, es cuerpo, materia fónica, sónica, música. Como es cañamazo de varia trama, el lenguaje prende en todos los clavos del telar, de lado a lado y de lado a lado. Este libro es también una poética, un tratado. De lenguaje va (ya se ha dicho), del lenguaje viene, objeto 12


y sujeto al mismo tiempo pues se deja contar e impone su propio relato. Más allá de lo que pueda decir nrV del lenguaje, se encabrita su caballo en medio de la línea del discurso e impone su presencia de animal sonante, o sonador, o sonadero. Cascos y belfos en toda su bondad y su belleza. Se aparece, acude sin que lo llamen, puede morder, lamer, besar o pegar la patada sin previo aviso. Deja estar esa errata -dice-, déjala que cante ahí, que resople, que vida. o revela sus cruces silábicos y fonéticos a modo de cosa neobarroca que nunca neobarrocará si no es en el detalle, porque no quiere (creo, no sé), porque otros hilos, más finos o más dúctiles pero muy resistentes, deliberadamente se lo impiden. la lengua es estancia de óxido sin narcisos que son porque no son Casi todo en la poesía de nuria encanta por ausencia. leo en narcisos una flor que esconde la carita entre los matojos, no el espejo en que la flor exhibe su doblez. allí, bien en la sombra y sin ruido, para que no la encuentren, para que no la pisen, para que lo inútil no la manosee, descubrimos la hojita del amor, confundida con la zarza de la palabra, los he/lechos de la ternura y los líquenes del sexo y sus matices, sus definiciones y sus indefiniciones. andan a mirar de frente al tojo descarado del morirnos, del vivir. no solo por placer, sino porque hay cabeza, una cabeza de caballo, porque sabemos que saberse muriendo y después nada (caballito mínimo pues nada cabe en nada) ayuda a retrasar la muerte. aquí se ama la vida, más allá de 13


Cioran, más allá de lo que se diga con la palabra estándar, la que pretende decir. la otra, la que conoce las trampas del lenguaje, comunica a fuerza de hacerse juego y ocultarse. Hay aquí un bosque confuso de equivalencias donde casa, cuerpo, caballo, lenguaje, carne, amor, ternura giran y juegan a sustituirse. Creo que el hiperhónimo sería soñadero. Eso creo, no sé. a lo mejor me equivoco, a lo mejor no estoy diciendo nada. He aprendido a decir esto que acabo de decir leyendo pensatorium, soñadero que se vuelve soniadero en las claras del día, cuando nos dan las claras, la luz que se coló. a mí me parece que leyendo pensatorium conviene atender más a lo que hace el poema que a lo que dice. así que, ahora que yo doy por terminada esta lectura número yanisé, sugiero a ls otrs lectrs que vayáis por ahí, a ver si aparece lo que no está. Pues no solo no está lo que se dice, que ya es mucho no estar. Hay vida que no está, útero yermo, animal que se desvanece, hueco, vacío, baleiro. Y en el hilo de la ausencia, como en todo el tejido, contradicción. Y por eso. Que una cosa es lo que parece negación (de negar, de no, de nada, nunca, nadie) y otra muy distinta es la energía que se corta, la recoge el lector y es otro regalo, o el mismo de antes, o más aún. Eso hace con una el caballo de la poesía, contigo, llevarse al pre(te)ndido domador a ese lugar nunca antes pensado, cnvrtirte en cabal y que ni lo sepáis --querids lects con quienes he cmpartido esta lect mía que tanto gz y tnt lgría me dio-- a qué prado o bosque o precipicio hemos ido a parar tods de la man, y de la man de n.

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todo pensamiento empieza con un poema ALAin [en un intercambio con PAuL VALĂŠry]



los caballos del lenguaje

en un instante pasaremos por el umbral del mundo a una región… llamadla como queráis: negación del lenguaje, desierto, muerte o quizás, más simple: el silencio del amor V. nAbokoV



El lenguaje corporal del caballo es el lenguaje corporal del lenguaje corporal del caballo es el lenguaje corporal del lenguaje […] ambos son animales de presa que nacen desde el lenguaje corporal del lenguaje corporal del caballo […] Y cuya supervivencia depende de la habilidad de percibir incongruencias como esta.

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pensarte o no pensarte ponerte fe -sucesiĂłn de pĂĄginaso ponerte fin -diluvio de lo blanco y de lo inĂştil-

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me subo en caballos disolventes que son un lenguaje de amor entre piernas lo regazo encinta lo calibro pero allí la casa se fuga a caballo el caballo se fuga en niebla la niebla en lengua la lengua en vientre ay caballo desyemado ¿adónde te marchaste y me dejaste? pensatorium no me engaño sin el cuerpo de un jamelgo somos niebla desbrozada de palabras

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vivimos en un mundo caído nosotros, los caídos

no existe un lenguaje para los finales el Ártico se derrite hay una voz muerta en tus labios una voz que va y viene como los amantes van y vienen cae una lluvia de ideas ácidas en los campos los campos en los despoblados campos un caballo allana los cipreses rotos hay una voz muerta en los campos es una voz prisión una voz fortaleza dos voces que se parten en la misma memoria

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encajonada con humildad de caballo entre los raĂ­les de tus brazos

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El tren avanza. la música que extermina me deja en réquiem. Me dejo caer. Me dejo. Me dejo. Dejo atrás mi mano y mi paisaje. Me dejo el peso. El paso. Y detrás del paso el pensadero que es mi casa. Officium breve este espejismo del soñante. Hay un bosque de pinos con mesas de ping-pong en cada nido. lo atravieso sin altura. Es un bosque atónito que taladra el cielo con revuelos de palabras y un teatro al aire libre de mi boca. Boca libre engatusada con tu liebre liberada. Mi casa es mi casa. leve cementerio de palabras. Coladero levantado hace cien años a la izquierda de una vía abandonada.

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el lenguaje es el resorte de la seducción pero el lenguaje no es suficiente cuántas veces el día está lleno de términos que son [trampantojos artilugios que tienen dos tres cuatro veinticinco [sentidos cuántas cuántas cuántas veces entramos en el juego así es imposible formular nada

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algunas noches vivo más cerca del lenguaje desde que ha decidido suicidarse condenada persigo palabras inencontrables filo lápiz navaja puntilla dijera -tijera en lengua pero detrás de esas noches la otra muerte me avanza a dentelladas una muerte que atesora y huele a pájaros una muerte gorrión una muerte águila algunas noches digo solo algunas noches he muerto haces dos días cerca del lenguaje

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pensar como piensan las lĂ­neas de la naturaleza

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en la fragilidad que había en un vagón de metro sonó el relinchar de un caballo era la prehistórica libertad sin espuela y sin brida como el grito de un barco que avanza sin timón ni [remos sin extremidades contigo la voz humana es salvaje y es equina secuestra lo ecuestre

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no diré A, dice el escolar con empecinamiento ¿pero por qué? porque después de eso, habrá que decir B […] ¿y si no se termina nunca, para qué comenzar? simone de beAuVoir

es materialmente imposible para el ser humano decir toda la verdad absolutamente toda la verdad y es imposible no porque no queramos sino porque no habría palabras suficientes por eso vamos buscando coartadas en la casa [del lenguaje como si fuéramos expertos caballos analíticos

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es de noche de camino a casa me desdefino en las esquinas el lenguaje de los salmos es tan transexual que los sujetos que sostienen la nocturnidad de [mi plaga son caparazones del yo por ti entonces pienso en la inmortalidad de lo muerto en el nihilismo de c贸mo dejar de ser yo por ti para ir del ya al nunca jam谩s que es el l铆mite entre la nada y la heladora nada pero llega la ciudad y su temblor de urbe eje inseguro que nos dej贸 tan extra-vertida-mente ennegrecidos

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cรกmara obscura

la madre y el bulto del lenguaje la gran, la grande y mรกs grande quebradura mArtA Agudo



en la cĂĄmara obscura el lenguaje era un vĂ­nculo social lleno de pleonasmos nos pasamos la vida redundando en un tiempo que ya es redundante

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porque no tengo esperanza de volver otra vez porque no tengo esperanza porque no tengo esperanza de volver T. S. Elliot

el ruido de los trenes el ruido de los trenes el ruido de los trenes otra vez el ruido de los trenes

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¿Cómo se cruza una porción de noche desde el centro de la asimetría? ¿Cómo cruzarla con el hemisferio oeste desencajado? ¿Sin palabra ni razón estructurada? Barandillas y tendales. Puentes. Pomos. Cuerdas. nada. ¿Cómo se cruza la noche con esa certeza de fractura elástica? ¿Cómo? Si la mueca nos dice que la vida era ese quiste en la garganta. ¿Pero cómo se encajan los quistes? ¿Cómo sustraer el bulto sin volverse loca como un rayo? Después el vacío. Esa fisura que abrieron los pájaros emigrados al hemisferio este.

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no se puede mirar fijamente ni al sol ni a la muerte cAnetti (El libro de los muertos)

c贸mo pretenden que no seamos seres disociados que no seamos viento atravesado si ya en la liturgia de Mitra el disco del sol se desdoblaba dando origen a nuestro primer viento

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polvo prendado de fantasmas, tal es el hombre: su imagen absoluta, de parecido real, se encarnaría en un Quijote visto por Esquilo. e. m. ciorAn

el caos no tiene contrario es vida en sí misma que se desliza en otro curso un orden fijo en la cáscara de este mundo que las moscas nacieron para ser comidas por arañas y los hombres para ser comidos por la pena ya nos lo dijo Voltaire pero aquí y ahora todo permuta

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quĂŠ rara intimidad volver a besar el quicio de tu desquiciada boca

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los suspiros son aire y van al aire las lágrimas son agua y van al mar g. A. bécquer

las palabras son propósitos que van a parar al mar me encantan tus venas -dijiste señalando con el índice la trayectoria de mi [yugularvena que se ataba a mi cuello y que de mi cuello saltó venajenadamente a tu página página a la que le saltaban de vena en vena pliegues perfectos que fueron a parar al mar

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la gana del sujeto de ser torrente empujarรก mi predicado

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antĂ­fonas

eterna voz que respondes



ahora puedo rezar sin creer en Dios

templanza de Bach Bach ha muerto viva Bach

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el sexo a ras de la lengua

cepillar las sábanas después de hacer el amor era un acto ceremonial allí estaba la huella de los desplazamientos cepillar las páginas de un libro es un acto ceremonial allí el desplazamiento de unos ojos

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estoy allí es la única manera de no estar aquí

la molécula del olvido es un mecanismo de autodefensa. Pero la autodefensa es un mecanismo de aislamiento. Pero el aislamiento es la madre de todos los mecanismos. Pero la molécula. Pero el mecanismo. Pero la autodefensa. Pero el olvido. Pero bla bla bla. al final la madre de todas las moléculas es lo mecánico que es todo.

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