AmeliaVega Por Narliwd Sanchez
Conocida mundialmente luego de coronarse Miss Universo en el año 2003, Amelia Vega nos deslumbró con su magia y se convirtió en la primer mujer dominicana en ganar tal majestuoso título. Hoy, su belleza camina paralela a su gran talento en el ámbito musical ante el estreno de su álbum titulado Agua Dulce. Su nombre e imagen se han convertido en icono del talento, de lucha, del carisma, la perseverancia, y la sencillez que refleja el corazón de esta hermosa mujer latina. Durante su más reciente visita a la gran manzana, esta talentosa beldad y ex Miss Universo dominicana le concedió a Mundo latino una entrevista exclusiva, donde nos relató incidencias de su vida personal y de su pasión y realización como cantante.
ML: Hola Amelia, gracias por cedernos este espacio. Mundo Latino te da la bienvenida y aplaude tus logros, eres una digna representante de la mujer latina. Estamos ansiosos de saber más de ti, que rico compartir contigo. Ahora si, cuéntanos: ¿por que decidiste cambiar el mundo del glamour y las pasarelas por la música?
pregunto ¿que empezó primero? Las pasarelas o la música? Al final me respondo creo que todo fue un conjunto, situaciones que se alimentaban una de la otra.
Amelia: Hola, un saludo enorme a todos, gracias a Mundo Latino y a todos los lectores de la revista por este espacio. Bueno, para responder tu pregunta, en realidad el canto siempre ha sido parte de mí. Comencé cantando en musicales en República Dominicana desde los 13 años; es una pasión que siempre ha vivido en mí. Las pasarelas me dieron el fogueo de no ponerme nerviosa ante el público, de expresarme con confianza y seguridad, de tener una disciplina. Pero todo eso lo hacia para alimentar mi verdadero sueño y mi pasión por la música.
Amelia: Mi tío es como mi padre. Tuve la oportunidad de vivir en casa de tía Nora y tío Juan Luis por varios años siendo una adolescente. Verlo en calidad de padre, consejero en todos los ámbitos de mi vida no solo musicalmente, me han llenado de seguridad y de sabiduría. Es un hombre que transmite tantas enseñanzas con su propia vida, musicalmente para mi obviamente fue un enfoque total. Viéndolo escribir en la casa en una esquina por ahí, componer en una servilleta, su dedicación; yo admiraba tanto su proceso creativo y tenerlo de cerca fue para mí un privilegio. Cuando le dije, “tío, voy a grabar un disco” me apoyo, estuvo allí desde el principio. Después de tener el primer corte para que lo pudiera escuchar, fue al estudio conmigo, me guío y hasta me recomendó grabar con algunos músicos específicos e instrumentos. Hoy en día me ha permitido abrir en varios conciertos dentro de sus giras musicales.
ML: ¿Te diste cuenta a temprana edad que eso era lo que realmente te nacía hacer? Amelia: Mira, si hablas con mi mamá ella te dirá: “Amelita era insoportable, se pasaba el día entero cantando y cantando; cuando llegaba la visita Amelita siempre tenía que hacer un show” (sonriendo). Desde que yo tengo uso de razón lo primero que hice fue cantar. En mi tiempo libre después del colegio, empiezo a modelar para pagarme las clases de canto y de baile. Honestamente me
ML: Juan Luis Guerra siendo un icono de la música latina y uno de Los grandes ganadores de Los Grammys ¿te orienta, te guía?
ML: ¿Que quieres proyectar con esta producción discográfica? Amelia: La verdad es que en el momento que dije voy a grabar mi disco lo hice muy
egoístamente. Tuve un momento de ansiedad donde me visualicé un día con 85 años con tres nietos corriendo a mi alrededor de una mecedora diciéndome, “abuelita tu cantabas pero nunca grabaste un disco, ¿porque?”. Cuando pensé que eso podía pasar reaccione y me dije “no, no, no, tengo que hacerlo, para mi, para saciar mi gusto musical y mis ganas de cantar.” ML: Siendo república dominicana un país bachatero, merenguero hasta la tambora, tu música se inclina a fusiones de ritmos más internacionales, ¿Por qué? Amelia: Yo crecí en una familia donde todos son músicos, desde mis cuatro abuelos hasta mis tíos. En la Republica Dominicana tenemos una amplia variedad de gustos musicales, especialmente dentro de mi entorno familiar. Mis primeros años fueron acompañados del eco musical de interpretes como Armando Manzanero, BB King, tengo un tío Rockero, la música tropical y por supuesto nuestra insignia patria el merengue y la bachata. Esta mezcla de ritmos y sonidos fusionados con mis interpretaciones propias dieron cabida a esa fusión un poco más internacional. A la vez, siento que mi música depende o se genera de acuerdo a mi estado de ánimo en ese momento. O sea, si quiero un viernes salir de pachanga quiero poner algo como “Todo lo que sube baja”, que esta en mi disco. Si quiero algo romántico: “sorpréndeme”, o melancólico: “Agua dulce”.