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Las mejores bebidas de la selva
LAS MEJORES BEBIDAS DE LA SELVA PERUANA
Referirse a las bebidas típicas de la selva peruana, es prácticamente llegar al clímax de la tentación por disfrutar del sabor de las frutas de la Amazonía peruana. Forman parte de la rica gastronomía de la selva peruana y son infaltables acompañando los ricos platos típicos de los selváticos como la patarashca o el popular tacacho con cecina, entre otros. El primero de estos refrescos es bastante común encontrarlo en los desayunos o loncheras de los niños, ya que es muy nutritivo.
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El chapo es una bebida bastante agradable hecha a base de plátano bellaco maduro hervido con canela y clavo, que es licuado o machacado ya sea con un tenedor o un batán, de esa manera se tiene una bebida bastante reponedora (la Avena Quaker de la selva) incluso a veces ni azúcar necesita por el mismo dulce del plátano que le brinda un sabor agradable.
El camu camu es una fruta natural amazónica, es pequeño de color rojo y de fuerte y ácido sabor. Este fruto ha sido conocido y consumido desde siempre por los pueblos indígenas de la cuenca amazónica, crece a orillas de los ríos ubicados entre los departamentos de Pucallpa e Iquitos. Además, el refresco de camu camu es ideal para la lonchera o acompañarlo con el almuerzo.
El refresco de cocona, es una bebida típica elaborado con una deliciosa fruta que crece en las zonas tropicales de la selva peruana. La cocona tiene una textura arcillosa y un ácido sabor, inclusive mayor que el limón, pero que al ser incluida en alguna preparación como en los refrescos, esta bebida nos ofrecerá un sabor inimaginable.
Este fruto de la amazonía, abundante en hierro y vitamina C, es la mejor alternativa contra los excesos del colesterol y la glucosa, especialmente para contrarrestar las secuelas de la diabetes.
Finalmente, el shibé es una bebida típica de la selva peruana preparado a base de fariña, que es un producto de consistencia granulada y de textura semidura obtenida de la yuca amarilla rallada y fermentada en agua (entre 5 y 8 días) y luego tostada en grandes pailas.
El chapo fue una bebida muy apreciada por los jesuitas y franciscanos. Esta bebida además de ser deliciosa, ayuda a combatir la anemia.



