Desde mi lugar trabajé con el proceso de selección, curamiento y acompañamiento de los oradores. Esto implicó acompañar y ayudar a los oradores a organizar las charlas. Algunos eran charlistas profesionales, lo que no quiere decir charlatanes –sonríe-, sino que tenían mucho escenario a cuestas, pero muchos otros no. Los científicos, por ejemplo, no. Y a ellos les da mucho cagazo enfrentarse a sus colegas, así que enfrentarse con 1300 personas que encima no eran colegas, peor. Por eso creo que el acompañamiento fue importante y habría que ahondar todavía un poco más, porque se puede tener el mejor contenido pero si no se cuenta con el formato para que llegue adecuadamente al público ese contenido se pierde. Por otro lado también me parece que tener una mirada externa ayuda a dar un enfoque más original o novedoso. De todas formas teniendo en cuenta que fue un evento inaugural, relativamente masivo diría que estuvo realmente muy bien y colmó las expectativas. En Estados Unidos para participar de estos eventos hay que pagar miles de dólares, ¿cómo se llego a organizar con una entrada gratuita en Argentina? No fue algo que tuviéramos que discutir. Era obvio que en nuestro medio un evento así debía ser gratuito porque ya tiene un cierto grado de elitismo el hecho de que no todo el mundo se entera, no todo el mundo puede tomarse un día libre de trabajo o estudio y no todos están en Buenos Aires. Entonces ya tiene un cierto grado de elitismo por todos estos factores. Si a eso le sumábamos una imposición económica se limitaba mucho más y esa no era nuestra idea.
Por eso de movida nuestro objetivo fue conseguir el dinero para hacerlo gratis. Costo porque sale mucha plata hacer un evento gratis para tanta cantidad de invitados pero salió bien y esperamos que se pueda seguir haciendo. ¿Cómo respondió el público a lo largo de la jornada del TED X Buenos Aires? Fue impresionante. Estaban realmente maravillados de que se hubiera hecho algo así, de la organización. La recepción de las exposiciones fue heterogénea, que fue lo más lindo. En una misma charla en particular había admiradores y detractores, gente que decía: “Esto fue una basura, no me dijo nada nuevo” y otros que decían que fue la mejor. Eso esta buenísimo porque habla de cierta diversidad en el público, que es a lo que apuntamos. Necesitamos mucho más de esto en todos los niveles, desde el nivel educativo básico hasta el nivel de ciudadanía. Las personas tienen que estar enteradas de qué esta pasando porque hay decisiones que les pasan por arriba y son muy cercanas. Inclusive los encargados de tomar decisiones, muchas veces, no tienen ni idea de lo que pasa. Por eso que creo que tendría que haber uno, dos, muchos TED X más, parafraseando un poquito al Che Guevara. ¿Hay planes para hacer un nuevo TED X en Argentina? Va a haber más TED X en todo el país, sin dudas. De hecho se hizo una muy chiquita en Mar del Plata, se van a hacer en Rosario, en Cuyo y seguro pronto va a haber más TED X Buenos Aires. ◼
Golombek, el cocinero de la ciencia
Es un biólogo argentino especializado en cronobiología, que trabaja como investigador independiente del CONICET. Se caracteriza por un activo papel en la divulgación científica a través de sus libros, así como también organizando talleres y otro tipo de actividades que buscan acercar la ciencia a la sociedad. Conocido por su participación en el programa de televisión Científicos, industria argentina como el cocinero científico y ganador del Ig Nobel por una investigación en la que descubrió que el viagra puede solucionar el jet lag.